Capítulo 12: I'd love to hold you close, tonight and always
-La próxima semana deben de traer el informe totalmente finalizado, si no es así les bajaré parte de la calificación- decía Tony en voz alta frente a la clase, acababa de sonar el timbre que daba termino a la jornada escolar de este día
Caminó hasta su asiento y se sentó mientras que los estudiantes salían del salón de clases como si estar un minuto más ahí dentro los fuese a matar. Dios, estaba muy agotado, ese día había sido pesado, y se le hizo más largo ya que James no fue a la escuela, eso era de por si extraño, su alfa no solía faltar casi nunca a clases, siempre estaba ahí, ya sea mirándole el trasero en lugar de prestar atención o conversando con Steve, pero estaba.
Podría llamarlo, eso era lo más sencillo, de hecho lo había pensado demasiadas veces, solo que no quería parecer pesado o cargante, como un novio controlador, porque no lo era, muchas gracias.
Hundió su rostro en sus manos. Por suerte era hora de ir a casa.
-¿Tony?- escuchó que le llamaban, y al levantar la vista notó que estaba Steve mirándole preocupado desde la puerta, eso de cierta forma le extrañó
-Hola, Steve ¿Sucede algo? Tu cara dice que sucede algo
-No, bueno...- comenzó a decir, moviéndose indeciso sobre sus propios pies hasta llegar donde estaba el otro- sí, quiero decir más o menos, verás, no sé cómo te lo tomes o como se lo tome él, el que yo te lo diga- sacudió la cabeza, cuando se percató de que estaba hablando incongruentemente, debería ser inmune ante esos hermosos ojos chocolate, lástima que no era así- en fin, yo... en unos días es el cumpleaños de Bucky, no sé si te dijo, y la verdad es que lo dudo, él nunca quiere celebrarlo ni nada, aun así tú eres su pareja ahora y creí que merecías saberlo
El omega abrió su boca sorprendido. ¿Por qué demonios Bucky no le había dicho eso? Entendía que no le gustara celebrarlo, y aunque no dejara de preguntarse porque era eso, sentía más curiosidad por saber el motivo de la ausencia de este. Sin embargo sentía que ese no era todo el asunto, porque, vamos, Steve no vendría aquí a hablarle de algo si no fuese de vida o muerte, o eso pensaba.
-Oh, vaya, es muy amable de tu parte decírmelo, Steve- hizo una pausa, comenzando a guardar sus cosas en el bolso, asintiendo distraído- ¿Tu sabes por qué ha faltado a clases hoy?
-¿Cómo?- preguntó el rubio confundido- Creí que anoche fue a verte
-¿Verme? La última vez que lo vi fue yéndose de mi departamento, ¿Por qué se iría y volvería al minuto después?
-Uhmm...
-Pues no, no le he visto y él no ha ido a verme- contestó extrañado- no despúes de la cena de ayer, espera o esto se esta volviendo extraño o no estoy captando bien lo que dices ¿Tú no sabes donde está? ¿Acaso no durmió en tu casa anoche? Es tu mejor amigo
-Esto... no, creí que se iba a quedar contigo... lo que sucede...- Steve jugueteo con sus manos, nervioso, no sabía si debía decirle a Tony, quizás su amigo debería hacerlo por sí mismo, y hubiese respetado eso si no estuviese tan preocupado y, mierda, Tony enserio necesitaba dejar de verle así, suspiró y mandó todo a la mierda
-Steve- insistió entrecerrando sus ojos, esos hermo...
-Su madre fue a verlo ayer- soltó abruptamente, mirando hacia otro lado
-¿Qué? ¿Hablas de su madre desaparecida en acción? ¿La zorra maldita que lo abandonó siendo apenas un niño inocente? ¿De esa "madre" hablas?
-Sí, esa misma, ayer apareció después de casi cuatro años en la puerta de mi casa para hablar con Bucky, no sé muy bien de lo que hablaron mientras estaban afuera unos minutos, luego Buck entró, tomo su chaqueta y dijo que iría a verte, me mandó un mensaje esta mañana diciendo que estaba en tu departamento
-¡Pues yo no lo he visto!- gritó comenzando a alterarse- ¿Por qué demonios te dijo eso? ¿Por qué a mi no me lo dijo? ¡¿Por qué demonios nació tan idiota como para irse a quien sabe dónde?! ¡¿Y por qué mierda no me dijo que su puto cumpleaños es en unos putos días para tenerle un puto regalo?!- preguntaba alzando la voz con cada palabra y pasándose las manos por sus cabellos castaños
-Hey Tony, cálmate- dijo adelantándose y colocando una mano sobre su mejilla sorprendiendo a este, aunque la retiro al instante al darse cuenta- lo siento, no quise, esto... puedes ir a buscarlo a tu apartamento por si se aparece por allí, y yo iré a ver ... ir a buscarlo por los lugares que suele frecuentar
Tony asintió, era una buena idea, tomando su bolso y sacando las llaves de su auto salió corriendo a los estacionamientos.
-¡Avísame si lo encuentras!- escuchó el gritó de Steve a la distancia, a lo que asintió
(...)
Tony corrió apresurado a su departamento luego de bajarse de su deportivo, viendo hacia todas partes si divisaba a cierto alfa idiota, hasta que sintió su olor, se apresuró hacia el ascensor, marcando el último piso, cuando este ya llegó al destino y las puertas se abrieron, se bajó apresurado, encontrándose al instante una silueta sentada, casi recostada en el piso, con la espalda y la nuca apoyadas en su puerta.
Distinguió el rostro de Bucky, sus ojos estaban cerrados, al parecer se había quedado dormido, y llevaba la misma ropa que el día anterior usó en la cena. Caminó hasta el rápidamente y se inclinó, tomando su rostro con sus manos.
-Buckaro, amor, despierta- habló con suavidad, quitando el cabello largo de su rostro cuando este parpadeó comenzando a abrir los ojos
Se quedó un minuto viéndolo fijamente con sus ojos azules, cuando reconoció el rostro y olor de su omega lo tomó de las caderas y lo sentó sobre su regazo sorprendiendo a este, pasó sus manos alrededor de su cintura con posesividad y besó la frente de Tony.
-¿Cómo estas kotenok? Te extrañe mucho
-Buckaro ¿Qué haces durmiendo en la puerta de mi departamento?- cuestionó separándose un poco para verle a los ojos, este guardó silencio un rato limitándose a acariciar sus caderas hasta que finalmente habló
-Es que no quería estar en mi casa, de hecho no quería estar en ningún lado, quería estar solo contigo
-Por favor dime que no estuviste toda la noche durmiendo en las escaleras como un vagabundo- pidió dejando hacer su frente sobre el hombro del otro, pasando sus brazos al rededor de su cuello
-No ¿Bromeas? No soy tan idiota para dormir en escaleras, son duras e incómodas, dormí en el techo, pero tampoco creas que es muy cómodo hace frío, y hay gatos, no como tu gatito, estos gatos son crueles, uno me arañó en ¡Auch! Gatito enserio tienes que dejar de golpearme, estoy empezando a pensar que te va el sadomasoquismo
-¡¿Tienes idea lo preocupado que estuve cuando Steve me dijo que no dormiste anoche en su casa, pensé que quizás estarías muerto en una esquina o flotando en el mar, o viendo la película de los Power Rangers?! ¡Tienes que dejar de preocuparme o a la próxima vez te juro que te-
Fue interrumpió cuando el otro le besó.
-Amo cuando te pones todo histérico, eres como un gatito arañando cuando le molestan, pero tu eres un buen gatito, los otros son crueles, y me gusta cuando arañas, en especial mi espalda, estando debajo de mi, en la cama...
-James- gruñó frunciendo el ceño- vamos a entrar- iba a levantarse pero el otro le volvió a jalar dejándolo sentado sobre sus piernas nuevamente
-¿Por qué no nos quedamos aquí?- se quejó abrazándolo y besando su cuello con cariño
-Porque adentro hay comida, ducha y una cama para dormir
-¿Tiene que ser usada para dormir?
-Sí James, estas muerto de sueño, andando
Una vez entraron al departamento, Tony fue a la cocina para prepararle algo de comer- como un sándwich ya que él no sabía cómo hacer otras cosas de cocina para ser sincero, no podría envenenar un sándwich pensaba- a la vez que el otro iba a darse una ducha al baño, por suerte tenía ropa que le quedaría bien al otro.
Dejó un vaso de leche en una bandeja y luego el plato con el sándwich, caminó hasta donde estaba su habitación, depositando todo en una mesita de noche. Se sentó en la cama esperando a que el otro saliera de la ducha para que comiera algo.
Bucky salió de la ducha con una toalla sobre los hombros, en cabello húmedo, goteando, y solo con unos pantalones de pijama que él le prestó y que le quedaban algo grandes, supuso que por ello a James le quedaban bien. Tony se mordió el labio al ver a su alfa tan sexy, este último notó la mirada de su omega y le sonrió traviesamente al ver un sonrojo aparecer en sus mejillas cuando fue descubierto observándole.
-Te hice un sándwich para que comieras...- comenzó a decir mientras el otro se acercaba con un paso depredador a él y le besó, empujándolo, obligándolo a recostarse en la cama bajo él, James le besó la mejilla para luego ir bajando por su cuello- James ah... Buckaro, necesitas comer algo, y dormir, no estás bien
-Estoy perfecto, y te comeré a ti, mi gatito- gruñó mordiendo su cuello, complacido cuando dejó una marca en este, le volteó dejándole boca abajo sobre la cama, ahora mordisqueando su oreja- te comeré completito- apretó una de sus nalgas con fuerza
-No es lo que ¡Ah! Me refiero- sintió como el otro pasaba ahora sus manos bajo su camiseta, yendo directamente a acariciar sus sensibles pezones- James... uhm, Dios ¿Por qué me haces esto? Espera, Buckaro si comes lo que te preparé y duermes unas horas te... ¡ah! prometo que podemos hacer luego lo tú que quieras
-Dime que eres mío- gruñó sobre su oreja, una de sus manos bajando por el abdomen de Tony hasta su pantalón mientras la otra seguía acariciando uno de sus pezones
-¡Sabes que lo soy!- gimió cuando sintió que tocaba su miembro sobre el pantalón, apretándolo
-Dilo- ordenó lamiendo su cuello- todo mío, solo mío
-Joder James, lo soy, tuyo, todo tuyo, por favor, solo quiero que comas algo y descanses, lo necesitas, hazlo por mi Buckaro- suplicó hundiendo su rostro en las sabanas
-Kotenok- habló esta vez con una voz completamente diferente, no sonaba nada al tono que usó hace unos segundos, ahora su voz era suave, nada demandante tampoco exigente y sus manos salieron de debajo de su camiseta y dejaron de tocar su entrepierna, yendo únicamente a su cadera, obligándolo a levantarse de la posición que él mismo impuso- Kotenok- repitió, y Tony le miró curioso, sentándose a su lado- Te amo- dijo con seguridad, juntando sus frentes- te amo tanto, no quiero que... te vayas
-Te dije que no lo haría, Buckaro- habló tomando su rostro entre sus manos- no lo haré porque yo también te amo, sabes que lo hago, lo que sea que te haga sentir inseguro ahora, como si deberías probar que me quedaré a tu lado o que te pertenezco, déjalo, solo necesitas confiar en mi palabra, porque nada cambiara lo que siento, estoy aquí, no me iré a ninguna parte- repitió las palabras que este le dijo ese día en la biblioteca, el mismo día del partido, el mismo día que se unieron
-Volvió- susurró con una mirada herida que al omega le rompió el corazón- ella volvió
-Lo sé, Steve me lo dijo, él estaba muy preocupado por ti, y hablando de eso deberías mandarle un mensaje diciéndole que estas bien
Bucky asintió, no quería que Steve llamara a la policía para reportar a una persona desaparecida y sabía que era capaz de hacerlo, se separó de su Antoshka y sacó su celular del bolsillo, no tardó mucho en mandar un mensaje, recibiendo como quince de respuestas de alivio e insultos por parte de su rubio amigo.
Al ver el sándwich ahí, su boca se hizo agua y lo alcanzó rápidamente, no sabía que tenía tanta hambre hasta que dio el primer bocado.
-Dios, es el peor sándwich que he probado- comentó con una sonrisa amplia, dando otro gran bocado
-¿Qué?- cuestionó Tony sintiendo su cara comenzando a enrojecer- ¡Eso no es cierto, no esta tan malo! ¡Si no te gusta deja de comerlo!
-Tengo tanta hambre que no me importa lo malo que esta, además tú lo hiciste- dijo pellizcándole la mejilla colorada- lo hiciste para mí, asique me lo comeré y después a ti
-Bueno no todos podemos hacer sándwiches tan buenos como los tuyos- refunfuñó con un pequeño puchero- no voy a prepararte nada más si sigues diciendo que está malo
-¿A nuestros también hijos los alimentaras con sándwiches tóxicos?
-¡Cállate, Barnes!- gritó golpeándole el hombro- además para eso te tengo a ti, tú serás quien se quede en casa cuidando a los niños mientras yo voy a trabajar
-¿Enserio?- cuestionó divertido dando otro mordisco a su sándwich, terminándoselo, junto al vaso de leche que estaba a su lado
-Sí, enserio y ahora que ya comiste es hora de dormir
-Claro, si- asintió tomando la muñeca de Tony, jalándolo a su pecho y pasando sus manos alrededor de su cintura, los recostó a ambos
-James...
-Shh, gatito querías que durmiera, y solo puedo dormir cuando tu estas entre mis brazos-Tony giró sus ojos- ella quiere que la acompañe a cenar mañana
Esa declaración le sorprendió.
-¿Tu madre quiere cenar contigo?
-Dijo que quería hablar- dijo con burla
-Bueno... quizás ella quiere arreglar las cosas- dijo el omega queriendo sonar esperanzador
-¿Arreglar las cosas? ¿Después de cuatro años de no saber absolutamente nada de ella? Gatito, cuando ella me dejó, yo no tenía nada, no tenía familia, no tenía dinero, no tenía esperanza, estaban a punto de echarme a la calle los arrendatarios del departamento en el que solía vivir, pero entonces conocí a Steve, defendiéndolo en una estúpida pelea callejera, nos hicimos inseparables ¿sabes? Su mamá me dio un techo donde vivir y no pasar frio, él es mi familia, es mi hermano, al igual que Sara, la madre de Steve, Sam es mi familia, y tu mi pequeño gatito también lo eres, pero ella, ella es solo una mujer que desde que nací quiso usarme y a mi padre, y eso me duele más que a que estuviese muerta porque significa que me dejó porque quiso, no porque no tuvo opción, no sé porque esta vez iba a ser diferente
-Sé que es repentino, y también sé que la gente no cambia de un día para otro, sin embargo ella tuvo tiempo para cambiar y madurar, y si no e así, de todas formas nunca tendrás que estar solo de nuevo Buckaro, porque ahora tienes a personas que sabes que te aman y se preocupan por ti- se separó un poco de su pecho para luego besarle la frente- te acompañaré a cenar si tú quieres
-Sí, sí quiero, por supuesto que quiero- susurró antes de apretar sus brazos alrededor de su cintura más fuerte y a continuación caer en brazos de Morfeo
(...)
-Anthony Edward Stark, favor de reportase a la oficina del director Fury, repito, Anthony Edward Stark favor de reportarse a la oficina del director Fury
Tony alzó una ceja ante ese llamado que sabía nunca era bueno, ya que normalmente Fury lo hacía para regañarlo cuando hacia alguna de sus bromas a profesores o alumnos. Aun así estaba bastante seguro, casi por completo que no había hecho nada esos últimos días, ¿O sí?
Cuando notó que su compañero Brucie le miraba alzando una de las cejas divertido, como si ya estuviese acostumbrado a esos llamados.
-No he hecho nada si es lo que vas a preguntarme
Fue su respuesta antes de levantarse de su mesa en el salón de profesores y saliendo de este, por suerte la oficina de director estaba a medio pasillo, no tenía que subir escaleras ni nada, lo que era algo estúpido porque no le costaba nada a Fury o a su buen asistente el profesor Coulson ir a buscarle personalmente.
Al llegar, como hacia siempre, no se molestó en tocar la puerta, y ya listo para el milésimo regaño de Nick por ello, entró. Se quedó de piedra al encontrarse a James, su James, su Buckaro, ahí sentado, parecía nervioso, eso era extraño.
Luego de que su alfa se quedara a dormir en su departamento la noche anterior, se habían despedido en la puerta del instituto, James se bajó del auto deportivo naranja de Tony y fue primero a la escuela para que nadie sospechara, y no se comentara algo por si los veían llegar juntos.
Claro, se quiso dar un pequeño golpe en la cabeza por no haberlo pensado antes, Nick Fury tenía ojos hasta en las axilas de los mamuts, y no iba tener alguno en una cuadra de distancia de la escuela, bien, de todas formas era escalofriante.
¿Acaso había algo que no supiera ya?
-Nick, señor Barnes- saludó entrando a la oficina ¿Era irónico que mostrara o fingiera respeto por su alumno y alfa por quien gritaba el nombre por las noches y no por su jefe?
-Está bien, Stark- dijo Fury en un tono irritado- puedes dejar de pretender que solo hablas con un alumno sabes que yo sé que no es así- hizo una pausa dando un sorbo a su taza de café, y a Tony se le antojó por un segundo tomar un trago- los he hecho venir aquí por la misma razón, hoy los he visto llegar juntos, bueno, intentando disimular que no lo hacían, por cierto son horribles actores, menos mal no se dedican a la actuación, déjenme decirles que no tendrían para comer, pero me estoy yendo por las ramas, creo que me estoy haciendo viejo
-Para que molestarme en negar algo que usted afirma, no hay que llevarle la contraria a los mayores- dijo divertido Tony, pero Fury le ignoró
-Como sea, se encuentran aquí porque necesitaba pedirles a ambos que por favor, sean más disimulados con respecto a 'ya saben qué' y Stark, como sé que trabajaras solo hasta fin de año en esta escuela como profesor y como también es el último año de Barnes aquí como alumno, voy a mantener fuera de los oídos del consejo de alumnos y apoderados sobre su "relación"- hizo una pequeña pausa, frotándose en un gesto que evidenciaba su agotamiento
Por un segundo a Tony se le hizo la idea de que no era esta la primera vez que Fury trataba con una situación similar. Espera ¿No lo era? No le extrañaría, ya que este estaba al tanto de todo lo que ocurría en su escuela, si, de absolutamente todo, quizás sabía sobre Barton y ese alumno de cabello teñido de blanco que se llamaba Pietro, o de su tierno amigo y compañero Bruce Banner y la alumna Romanoff, bien si a él no le pasaba desapercibido eso, pues menos a Nick Fury.
-Pero- siguió hablando- lo que si les pediré a ambos es que sean sumamente discretos, que nadie, nadie, ni siquiera una mosca note que se andan besuqueando por la biblioteca o que andan buscando serpientes en escursiones amorosas, tampoco que se tomen de la mano en público o que anden derrochando amor, o miradas subidas de tono o muy largas, de hecho preferiría que ni siquiera respiren el mismo aire que el otro
-Eso es un tanto excesivo ¿No crees, Fury?
-No, no creo Stark - respondió sonriendo de forma mal simulada y comprensiva- no cuando mi trabajo está en juego, y tu carrera, y buena reputación
-¿Cuánto tiempo?- inquirió el omega, rodando sus ojos con notable irritación
-Hasta que Barnes se gradúe
-Oh espere, un segundo- le detuvo Bucky que hasta ese momento se había mantenido callado, levantando inconscientemente la mano, como su pidiera permiso sin pedirlo para interrumpir la conversación- ¿Está hablando de la graduación para la que faltan como cinco meses?
-¿Qué comes que adivinas, señor Barnes?
James hizo una mueca con sus labios, lanzando una mirada a su Kotenok, él entendía eso de mantenerse fuera del ojo público ya que estaba en juego su carrera, pero vamos, hasta el momento no habían hecho algo para ponerse en evidencia ¿O sí? Quizás lo de la marca no fue algo muy discreto ya que su Tony llegaba todos los días con un olor a un alfa que esperaba la gente aún no reconociera como el suyo, aun, ya que cuando se graduara esperaba que todos lo tuvieran más que claro.
Sacudió un poco su cabeza, deshaciéndose de esos pensamientos de posesividad y repasó a Tony de pies a cabeza, demorándose más de lo debido en examinar su trasero, bien, si dudaba poder controlarse demasiado teniendo semejante obra de arte a su vista, pero ¿Qué alfa con vista y sentidos en un buen estado y en su sano juicio tendría tanta fuerza de voluntad de no lanzarse encima sobre ese omega tan precioso?
-Fury- habló Tony nuevamente, con su muy típico tono de burla- nos estas diciendo esto como si no tuviéramos una pisca de auto control ¿Qué somos? ¿Unos hormonados adolescentes buscando el primer rincón oscuro para toquetearnos? Por favor, somos más civilizados que eso
-¿Stark, te das cuenta de que estas diciendo todo esto mientras tu muy civilizado alfa te mira la retaguardia?
Tony abrió los ojos como platos volteándose abruptamente a donde Bucky pareció reaccionar y mirar en otra dirección sin embargo eso no salvó de recibir un pequeño golpe en la nuca de parte de su indignado omega.
-Yo...- Bucky carraspeó, frunciendo el ceño, lanzando a ambos una mirada de disculpa antes de ponerse de pie- Esta bien, si usted dice que mantenernos alejados en la escuela es lo recomendable, entonces eso haremos, puede confiar en nuestra palabra
(...)
-Dios, si-gimió Tony cuando fue levantado por sus piernas, enredándose estas en las caderas de James y sus brazos al rededor del cuello de este
Bien, bien, sí, James sabía que se dijo a sí mismo, a Fury y a Tony que se controlaría por el "bien común" pero vamos no podía evitar tentarse cada vez que tenía a su gatito presente, y en especial cuando el muy degenerado de Strange estaba por ahí repasando lo que era suyo con sus sucios y pervertidos ojos. ¿Acaso a este no le llegó el memo de que Anthony Edward Stark ya tenía una pareja, de que ya tenía un alfa?
Y no, eso no era todo, claro que no, sino que para colmo tenía que pasar sus brazos por las caderas de su gatito con sus depravadas manos y acercarse de más a él, porque no era necesario que le respirara sobre el oído cuando este estaba decidiéndose entre que donas llevarse para almorzar, quería golpearlo, a pesar de conseguirse detenciones en resto del año por golpear un maestro.
Y si él no le hubiese pedido a Natasha que fuese a preguntarle algo a Strange- cualquier cosa relacionada con química que era la materia que él enseñaba- estaba seguro de que este hubiese "accidentalmente" tocado uno de esos lindos glúteos de su omega, y él iba sacarse los ojos antes de ver algo así, teniendo su cuchara a mano para realizar la acción, por si las moscas.
Y hablando de esos lindos glúteos... Salió de sus pensamientos cuando sus manos se posaron sobre ellos y los apretó fuerte, escuchando un gemido en su oído que hizo que su erección endureciera aun más si era posible.
-Bebé, recuerda que Fury...- comenzó a decir Bucky intentando recobrar algo del aire que le faltaba
-A la mierda Fury- exclamó Tony pegando nuevamente sus labios, antes de volver a alejarlos, lo bueno es que él era la figura de autoridad y quien debía poner límites, pero las manos de su Buckaro en sus nalgas se sentían tan bien- sabes que es un exagerado, y un dramático todos están en clases y tenemos un cortito tiempo para...
-¡OH POR DIOS!- exclamó Bruce Banner saliendo rápidamente de ahí
Al abrir la puerta de su laboratorio esperaba encontrarse el lugar vació y ciertamente no ver a su compañero de trabajo y hermano de ciencias en una posición -y también acción- muy comprometedora con un alumno, con el alfa James Barnes.
Claro que sabía que estaban juntos, Tony se lo comentó, muchas veces, y él lo aceptaba, ya que él se encontraba en una situación parecida con Romanoff, aunque lo que no aceptaba o se esperaba era encontrárselos amorosos en su laboratorio.
James y Tony que se quedaron de piedra al escuchar la exclamación de Bruce, se miraron y el omega desenredó sus piernas de las caderas del alfa y se apoyó sobre sus pies.
-Creo que...- comenzó Bucky a hablar dubitativo, sin voltear a ver la puerta por donde salió Banner
-¿Deberíamos esperar a llegar a casa?
Bucky alzó una ceja.
-Bueno en realidad, iba decir que fuéramos a la biblioteca, que está más solitaria...
-James...- dijo Tony en un tono de regaño
-Está bien, lo siento, tienes toda la razón- suspiró algo resignado- esperemos a ir a casa, además aun mañana hay un puto examen y hoy en la noche es la cena con la muy "amorosa" de mi madre
Tony iba abrir la boca para decirle que se olvidaba que venía también su cumpleaños, o era probable que no lo olvidara y lo pasara por alto con tal descaro sin mencionarle algo a Tony, pero de todas formas a él si le importaba porque era el día en que nació su Buckaro, y ese día significaba mucho para él. Era un día que había que celebrar, aunque sea una celebración pequeña, de los amigos más cercanos, por el momento fingiría que le daba en el gusto.
Pensó que era mejor no decirle lo que planeaba, el hecho de que podría hacer una pequeña fiesta o reunión, porque si a Bucky no le gustaba ese día sabía que se iba negar, mejor si no le decía.
-Entonces Buckaro- dijo antes de besarlo- nos veremos hoy para estudiar y luego iremos a la cena que espero no salga mal ¿Está bien?
-Está perfecto- respondió antes de darle un pequeño beso- te amo Kotenok
-Yo también te amo Buckaro- dijo por último antes de salir del salón del laboratorio
James suspiró, si, enserio que debería controlarse a partir de ahora.
(...)
(...)
-Buck- le regañó Steve, con sus cejas fruncidas en reproche luego de que su mejor amigo le contara lo ocurrido en el laboratorio- le meterás en problemas si sigues acarreándolo a ese tipo de situaciones, toda la clase notó tu ausencia, o bueno, no toda, pero muchos, y no ni quiero pensar en los que notaron que Tony no estaba
-No puede culparme- gruñó alzándose de hombros- si fueses tú en mi lugar hubieses hecho lo mismo al ver como Strange le toqueteaba ¿Con que derecho hace eso?
-Con el derecho- comenzó a hablar Loki llegando a sentarse junto a ellos en las gradas, era el cambio de hora por lo que tenían quince minutos de receso antes de la próxima clase- de que ambos son profesores, ambos son mayores de edad, y no es ilegal en su situación como lo es en la tuya
-Loki, no ayudas- le regañó Thor dejándose caer en las gradas también, pasando un brazo por los hombros de su hermanastro y dando un mordisco a la manzana que tenía en su mano
Steve golpeó con su codo a Bucky con disimulo, indicándole que Natasha estaba caminando en la dirección de ellos con paso firme, Bucky se iba a levantar y correr a quien sabe dónde pero la pelirroja llegó antes de que pudiera siquiera ponerse de pie, y le dio un fuerte y sonoro golpe en la nuca que hizo que algunas cabezas de la cancha se giraran en su dirección para ver que sucedía.
-¡Traumaron a mi pobre Bruce, tú y tu omega!-exclamó Natasha mirándolo con ira- ¡¿Tenían que ir a manosearse al laboratorio, de los millones de lugares de esta escuela donde pueden hacerlo?!
Bucky se sobó la nuca, con una mueca de dolor.
-Lo siento, pero no es como si él fuese un alma inocente tampoco, ya está grande como para descubrir que existe algo llamado pasión, tú se la muestras varias veces al día, por no decir de que te has ido con él millones de veces al laboratorio, y se meten mano e incluso yo diría que hacen más, no sé porque ahora te enojas conmigo de que aproveché ese lugar aislado
-Estoy de acuerdo con el tonto este, Nat, lo siento por ti- esta vez lo dijo Sam que llegaba a ellos luego de escuchar un pedazo de conversación, sentándose al lado de la pelirroja- pero yo los he descubierto un par de veces a ti y a Banner, no es algo que se lo deseo a alguien de mente sana
-Exacto- exclamó Bucky apuntando con su dedo a Sam, dándole la razón- Tú también lo haces Natasha. No deberías golpearme por algo que tu también haces con Banner, también te molesta que Strange hable de muy cerca con él
-Baja la voz, idiota-le advirtió Loki cuando notó a un grupo de estudiantes pasar cerca de ahí- no querrán que se entere toda la escuela sobre esas cosas
-Sí, sí, tienes razón- Bucky asintió, moviendo su mano, y restando importancia al asunto, para luego levantarse de las gradas y comenzar a bajarlas- si me disculpan no tengo tiempo para estar perdiéndolo aquí con ustedes, quedé con mi tierno omega de estudiar en casa... en- miró si reloj- unos quince minutos
-Pero aún falta una clase, no deberías faltar a...- comenzó a decir Steve
-Nos vemos en la noche- interrumpió a su rubio amigo, ignorándolo- espero que lleguen tarde a casa- les guiñó un ojo a Sam y Steve- si saben a lo que me refiero- fue todo lo que dijo antes de irse corriendo con su mochila al hombro
-Chicos- habló Nat al resto de los que quedaron en las gradas cuando vio a James desaparecer- tenemos que ir a comprar las cosas que nos pidió Stark, ya saben, para la pequeña sorpresa de Barnes el Jueves
-Lo sé- asintió Steve- pero es mejor su van el Jueves luego de clases, yo lo distraeré llevándolo, al parque o donde sea, mientras ustedes planean eso y decoran la casa
-Amo las fiestas sorpresa- dijo Thor, felizmente, alzando sus brazos
-Solo sean precavidos, Bucky no puede saber nada- les advirtió el rubio, mirando fijamente a Thor, ya que este último no tenía mucha fama por guardar secretos
-Tranquilo, amigo Steve, soy una tumba
(...)
-Buckaro, tienes tarea- protestó Tony cuando su cuello estaba siendo víctima de una sesión de besos sobre la cama- y también tienes un examen gigante que dar mañana
No les había tomado mucho tiempo llegar a la casa de James, ya que quedaba cerca de la escuela, sin embargo se suponía debían llegar a estudiar, y Tony se lo repitió como unas quinientas veces, y cuando llevaban ya un par de horas de estudio el alfa no aguantó más- con el mucho autocontrol que poseía, nótese el sarcasmo- y tumbó al omega sobre la cama, así fue como terminaron en esa posición.
-Shhh- le silenció con un gruñido- mi gatito, tú eres mi única tarea, y ahora mismo estoy estudiando tu cuerpo, nunca se sabe las preguntas que se harán en un examen
-No... no es cierto, yo mandé dos páginas de tarea específicamente para mañana, y no te voy a preguntar sobre mi propio cuerpo- intentó por todos los medios sonar más estricto, y falló, en especial cuando sus manos fueron juntadas por las muñeca, y una mano más grande las sostenía sobre su cabeza para impedirle empujarlo cuando tuvo la intención de hacerlo
-Haga una excepción, profesor Kotenok, prometo que valdrá la pena esta vez- susurró besando el cuello de Tony, acariciando con su mano libre el cuerpo bajo el suyo
-Lamento romper tus ilusiones, pero no tendré ningún favoritismo
-¿Ni con su alfa?- pasó su mano bajó la camiseta de Tony, subiendo y subiendo, hasta llenar hacia sus pezones sensibles, pellizcando un poco con sus dedos, luego comenzó a bajar su rostro hasta atrapar uno de estos entre sus labios, lamiéndolo y succionándolo, para luego ir por el otro, disfrutando del sabor de su piel
-Ah ¡N...no! Buckaro, tienes que ganarte esa beca a Columbia. Por favor
Suspiró resignado, apoyando su frente contra el pecho de su Antoshka y deteniendo su tarea, sabiendo que este tenía razón, debía aprobar si o si, si quería ganarse la tonta beca. Aun que llevaban una hora y media estudiando, necesitaban un receso ¿no?
-Bien- dice, soltando sus manos, quitándose de encima de Tony
-¡Y no me mires así! ¡No necesitarías la beca si me dejaras a mi pagarte la universidad, o al menos darte un pequeño préstamo!
-No permitiré eso- le cortó con una mueca de desaprobación- sabes que es un total abuso dejarte hacer eso, y no me aprovecharé de ti, no quiero tu dinero, gatito, tú eres todo lo que necesito, te lo he dicho una y mil veces
Tony giró sus ojos y se levantó de la cama, buscando el cuaderno que cayó al suelo cuando su alfa se le había lanzado encima a devorárselo mientras le explicaba algo, dio un respingo cuando este le dio una nalgada al agacharse a recogerlo.
-¡Hey!- le miró con reproche- eso me dolió
-Oh bebé te dolerá el trasero muchísimo más cuando te arrepientas de dejarme con las ganas por segunda vez en el día-comentó burlón, notando con diversión las mejillas rojas de Tony, y su ceño fruncido
-¡Dios, chicos, control por favor!- se escuchó la exclamación de Sam desde la puerta, entrando junto con Natasha y Steve- no necesitaba esa información, muchas gracias por darme pesadillas- se quejó con un gesto dramático de náuseas
Bucky alzó las cejas, algo asombrado, a decir verdad ni les había escuchado llegar, y no le sorprendía que llegaran justo a interrumpir lo que de todas formas no iba a suceder ya que era como un don que tenían todos de interrumpirles, estaba pensando en comenzar a cerrar con llave cada que se quedara a solas con su omega.
Fue entonces que recordó que su madre vendría esta noche, estaba tan distraído que ni se acordó de ella.
-Ahora que me acuerdo yo tengo que ir a preparar la cena-informó levantándose de la cama donde estaba sentado anteriormente- porque como bien saben mi muy "amable" madre vendrá de visita hoy-dijo antes de besarle la mejilla a Tony y apretar con disimulo uno de sus glúteos riéndose cuando este le dio un codazo, como lo amaba
Sam le tendió uno de los controles de la Play Station a Tony para que se uniera a una partida entre Steve, Natasha y él. Alzándose de hombros el omega tomó el mando y se sentó a jugar, le hubiese ido ayudar a Bucky a cocinar, pero este se hubiese negado o burlado de lo muy poco que Tony sabía sobre cocina, preferiría ahorrarse esa parte.
Se mordió el labio, pensativo mientras la partida iniciaba, lo cierto era que a pesar de haber sido marcado por James, no tenía mucho conocimiento sobre que podría regalarle para su cumpleaños, sabía varios de sus gustos como sus series favoritas y películas, e incluso de la música que le gustaba y cual no. Sin embargo aun así necesitaba ideas para ello y sabía que los más prometedores para dárselas eran los amigos de este aquí presentes.
-Hey, estaba pensando que como el cumpleaños de James es en un par de días ya debería tener uno de los mejores regalos para darle, y lamentablemente no es así, porque el muy considerado de mi alfa no quiso decirme que era esta semana, asique... como son sus amigos y lo conocen tan bien, díganme ¿Que le puedo regalar?- preguntó al fin, hablando en un susurro por si este estaba cerca- Supongo que ustedes saben que darle- indicó mirando a Steve, que era el más cercano a él- ¿Tienen alguna idea?
-Usa lencería- bromeó Nat con una pequeña risita
-Hablo enserio- recriminó frunciendo el ceño
-Pensándolo bien, yo también hablo enserio- se alzó de hombros la chica, sentándose a su lado con esa mirada, que poseía miles de chispas de malicia, hasta satanás se estremecería al verla- Stark- puso una mano en su hombro, inclinándose hacia él- si yo fuese Bucky, me encantaría verte usar algo así ¡Steve!- llamó al rubio, ahora sentándose al lado de este, tomando su barbilla y obligándolo a mirar a Tony- ¿Te gustaría ver a Tony con algo así puesto?
Steve se sonrojó, zafándose del agarre de Nat rápidamente, evitando mirar a cualquiera de los presentes ¡Por favor! ¿Que si le gustaría?
Siendo honesto, no estaría mal.
-¡Steve!- le llamó la alfa, insistente
-No... no sé- tartamudeó rascando su nuca, bajando la mirada, no debería pensar así de la pareja de su mejor amigo, a veces odiaba a Natasha, enserio pensaba que la chica lo hacía apropósito - su... supongo que se vería lindo
-¿Lo ves?- dijo complacida mirando a Tony
-No, Natasha, no lo veo, y enserio me gustaría darle, no sé, algún regalo decente, no de ese tipo, algo que simbolice nuestra relación, algo profundo- informó con un pequeño sonrojo en sus mejillas, no era usual para él decir o hacer ese tipo de cosas, aun así, quería que significara mucho para James
Fijó su mirada en un punto fijo de la pantalla, no importándole cuando su personaje fue asesinado luego de iniciar una nueva partida, ojalá fuese bien la cena con esa mujer rara, y si ella hacía algo para herir de alguna forma a su alfa él la aniquilaría, porque nadie lastimaba a su Buckaro, él no lo merecía, él merecía ser feliz.
(...)
Bucky tragó saliva, nervioso, no era usual en él estar en ese estado, siempre era demasiado relajado, en extremo según varias personas. De una u otra forma cualquiera que estuviera en su situación se encontraría en el mismo estado de él, no ver a su madre por casi cuatro años y de la nada tenerla frente a ti, cenando, y también junto a Tony Stark, su hermoso omega.
Steve, Sam y Natasha, decidieron dejarle la casa sola para tener esa cena, y el primero les dijo que le llamaran si algo malo sucedía, si iba mal, si pasaba cualquier cosa en general, se notaba preocupado, y Tony se preguntó si fue por el estado en que estaba Bucky cuando ella- esa horrible mujer- lo abandonó.
Solo quería que su madre se largara, y mandarla al infierno cuando abrió la puerta y la vio parada allí con su vestido elegante, su cabello castaño parecido al suyo pero más claro tomado hacia atrás y un poco hacia arriba, sus ojos, fríos, al igual que sus manos y cuerpo al abrazarlo, como si se sintiese en la obligación de hacerlo, en un papel de buena madre que en realidad nunca le encajó demasiado, o nada mejor dicho. También quiso apartarla de un empujón cuando tomó la mano de Tony y besó su mejilla, como si no quisiera que ensuciaran a su gatito, como si no quisiera que alguien tan vil lo tocara, porque nadie estaba en el derecho de hacerlo, nadie le pone las manos encima, nadie que no sea él, a pesar de que haya sido para saludarlo formalmente.
James tomó algo de agua de un vaso de cristal para ayudarse a pasar saliva por su garanta, mirando a la mujer que era su madre, no confiaba en ella, sentía que en cualquier momento ella iba a abrazarle por la espalda con su frío cuerpo, sacar un cuchillo por sorpresa y clavárselo en la espalda, como hizo cuando era un niño, metafóricamente hablando claro.
Quería creer que la cosas iban a cambiar, enserio quería creer eso, tener una familia, perdón, segunda familia, porque la primera eran y siempre serían Tony, Steve, la mamá de este, Sarah, Sam y Natasha.
Al pasar de todos esos saludos, y el resto de saludo superficial, ella se sentó frente a ambos en la mesa, en un incómodo silencio, mientras Bucky servía la comida, ahora los tres sentados estaban en una extraña tensión, como si ninguno supiera como romper el silencio, el único sonido que se escuchaba era el de los cubiertos al sonar.
-Entonces hijo háblame de la escuela en la que estudias- indicó la madre de Bucky, Eloise, pasando una mano por su cabello, y tocando su codo un par de veces, expectante, aunque en realidad a Tony le sonó un poco a una petición forzada, obligada, en un tono artificial
Prefirió no ahondar mucho ese tema. Y se dedicó a mirarlo con una sonrisa de apoyo.
-Bueno... llevo estudiando allí unos tres años, junto a Stevie, es mi mejor amigo, ha estado ahí para mí en momentos que no tenía a nadie-Tony apretó su mano bajo la mesa, transmitiéndole paz y tranquilidad al escuchar el tono de resentimiento en la voz de su alfa- pero la escuela... la escuela es grandiosa, es espaciosa, tiene buena educación, la comida no demasiado pero eso pasa en todas las escuelas supongo, y los profesores son-
-Hablando de profesores- le interrumpió Eloise en un tono repentinamente emocionado, alisando su elegante vestido color plata y con una sonrisa de real interés- escuché que Tony aquí presente es un profesor, pero mi pregunta es ¿Qué hace aquí? Quiero decir, debe ser millonario si trabajó para Industrias Stark...
Bucky alzó una ceja, extrañado por la interrupción e interés de su madre en su pareja, frunciendo un poco el ceño volteó a verlo, esperando una respuesta de Tony.
-Me he tomado unas vacaciones muy largas, pero a la vez no, me gusta mantenerme distraído en el trabajo de ahora y planeo volver a tomar las riendas de industrias Stark en algún momento
-¡Oh!- gimió tan audiblemente la mujer, aliviada- eso es grandioso, de una y mil formas grandioso, me alegra saber que mi hijo se encontró a un tan buen partido como lo eres tu
O era imaginación de Tony o esa última frase la dijo con el mayor tono de emoción e ironía posible. Cuando percibió que la mujer comenzaba a preguntar más y más sobre industrias Stark a Tony ya le estaba colmando un poco la paciencia, en especial al notar que estaba dejando incluso a su propio hijo en segundo plano, de hecho juraba la mujer prestaba más atención a la comida que le fue servida que a Bucky, notó como su Buckaro apretaba algo los puños, hasta el punto en el que el omega vio caer una pequeña gotita de sangre.
Era suficiente.
-Mire señora Barnes- cortó el parloteo de la mujer con un tono exasperado, llevando nuevamente su mano a la de James bajo de la mesa para evitar que se siguiese haciendo daño con sus propias uñas- créame cuando le digo que en cualquier otra ocasión me hubiese encantado hablarle horas y horas sobre industrias Stark y acerca de mi vida y dinero, pero esta cena no es sobre mí, esta cena ha sido para que usted le explique a su hijo el porqué de su ausencia, porqué se fue, e intente cambiar y rectificar eso de alguna forma- Tony siempre había sido directo, y eso no iba cambiar ahora
James levantó la mirada y correspondió al apretón de manos que le daba. Agradecido.
La mujer sin embargo no pareció muy contenta con ello, teniendo en cuenta la sonrisa falsa de disculpa y la mano que llevo al hombro de su hijo para disculparse. Sus ojos querían trasmitir amor, y pareciera que enserio quería fingir transmitir eso, sin embargo no era así, Tony leía los mensajes entre líneas, leía a través de esa mujer, él tuvo una madre, vamos todo mundo reconocería la sonrisa y mirada de una madre cariñosa o arrepentida que en el fondo realmente te ama, y quiere estar ahí para ti, pero eso que veía no era una, era un horrible intento que solo hizo que en Tony naciera una desconfianza, y todas esas preguntas que le hizo su Buckaro hace un par de días volvieran ¿Por qué volver ahora? Porqué abandonarle tan fríamente, dejándole solo, sin un sustento, sin familia, sin nada y ahora aparecía y el único interés que mostraba era por su compañía, su único interés era el dinero...
El sonido de un teléfono sonando le sacó de sus pensamientos.
-Lo siento- se disculpó ella levantándose de su asiento y tomando su celular, ya todos habían terminado de comer- tengo que atender esto, vuelvo enseguida
-Serviré el postre por mientras-indicó Bucky retirando los platos
La mujer le asintió despectivamente pero su alfa no pareció notarlo ya que se había ido a la cocina.
Tony le siguió.
-Creo que está saliendo mejor de lo que pensé- dijo James sacando del refrigerador una tarta de frutas y un poco de torta de mil hojas con manjar y crema que trajo Sam esa misma tarde
Tony se apoyó en la encimera de la cocina, asintiendo distraídamente sin dejar de observar como sacaba unos platos pequeños del estante de la esquina.
-¿Todo bien, Kotenok?- preguntó al no recibir una respuesta de su parte- Estas inusualmente demasiado callado, es extraño en ti
-¿Confías en ella?- cuestionó de golpe jugueteando con sus manos, ganándose una mirada extrañada por parte de su alfa- ¿Confías que ella quiere estar ahí, arreglar las cosas y más importante aún... ser una madre?
Tomó la mano de James y la volteó, observando donde estaban unas pequeñas heridas que acababa de hacerse en la cena hace unos momentos, las llevo hasta sus labios y las besó con cuidado, no le gustaba ver a su alfa herido.
-Me gustaría creer que si- susurró antes de inclinarse y besarle la mejilla- ¿Puedes ir y preguntarle si prefiere de la torta de mil hojas o tarta de frutas?
Tony asintió y salió de la cocina. Caminó por el pasillo hasta que escuchó una voz en una de las habitaciones. Se acercó con cuidado y apoyo su oído pegándolo a la puerta entreabierta.
-Sí, sí- supuso que era la madre de Bucky que estaba hablando con alguien por teléfono y él probablemente se hubiese alejado si confiase en ella, pero no era así, o si es que no hubiese escucuchado lo que decía- prometo que tendré todo tu dinero para fin de mes, si... ahora mismo estoy en algo muy importante y determinara si lo conseguiré que créeme será así, me encargaré de ello, está bien, no habrá necesidad de amenazar con la policía, no, no, ya te lo dije, sin policías, adiós- escuchó como colgaba el teléfono
Luego de que Tony escuchara esa llamada fue como si le hubiesen dado un cubetazo con agua fría, y sintió un horrible y desgarrador dolor en su corazón. Esa horrible perra estaba usando a James, y lo estaba usando para llegar a su dinero de alguna forma, sintió la ira invadirlo de pies a cabeza. Y él no permitiría que ella hiciese daño a su alfa, no más del que ya le había hecho a partir de todos esos años, algunas personas nunca cambian, y ella seguía siendo una perra interesada.
-Asique eso era- La voz la sobresaltó ya que dio un leve salto, con la espalda rígida, la mujer se volteó, mirando los ojos inexpresivos de Tony- por eso fue que volviste con tu hijo, porque necesitabas dinero
Su voz a pesar de tener un tono neutral no podría detener la ira que fluía en sus venas, sus deseos de ahorcar a esa mujer.
-Es complicado
-No- dio un paso acercándose a ella, mirándola con los dientes apretados, no parecía arrepentida, solo levemente asombrada de verlo ahí- es mucho más simple de lo que parece, te quedaste sin el dinero que te dejó tu esposo al morir, gastando todo lo de la herencia y el seguro, que estoy seguro un poco de ella es para cuando James cumpla dieciocho que eso es en dos días, solo quieres una forma de sonsacárselo
Ella solo le miraba, le miraba aún más sorprendida que antes, como si un adivino le hubiese leído la palma de la mano y hubiera acertado en todas y cada una de las palabras dichas. Repasó con sus ojos azules de arriba abajo a Tony, como si fuese a reprochar algo, pero él la detuvo, interrumpiéndola.
-¿Cuánto es?
-¿Disculpa?- inquirió ordenando su cabello largo
-¿Cuánto...- hizo una pausa apretando los puños y soltando cada palabra con asco- es lo que necesitas para alejarte de James para siempre?¿Cuánto dinero quieres para no volver a acercarte a herirlo? No me importa para lo que sea, tampoco si se lo debes a alguien y mucho menos si lo usas para pagarte un viaje con todo pagado a imbecilandia, solo dime una cantidad
Sacó su billetera, haciendo un cheque.
-¿Cincuenta mil dólares estará bien para ti?
Ella se acercó con una sonrisa amplia, feliz y cínica, cómo una serpiente antes de lanzarse hacia su presa clavándole el veneno con sus colmillos.
-Agrégale un cero más- dijo colocando una mano en su hombro, y susurrando en el oído de Tony- y te prometo que James no volverá a saber de mí, en lo que le queda de vida
Asintió en silencio, terminando de hacer el cheque, lo arrancó de su chequera luego de poner el cero final, tendiéndoselo con una clara expresión de repulsión. Ella no lo merecía, Tony estaba seguro, pero enserio no quería que hiciera daño a su alfa nuevamente. Antes de que ella lo agarrara, otra mano se le adelantó.
-No- dijo la voz de James, sorprendiéndolos a ambos, entrecerró sus ojos, pasando su mirada de Tony a la mujer- no- repitió rompiendo el cheque en la cara de ella
-¿¡Pero que mierda haces!?- gritó la mujer recogiendo desesperadamente los pedazos
-¿¡Crees que te mereces medio millón de dólares que con tanto esfuerzo le ha costado conseguir a mi omega!?- le gritó furioso, y era la segunda vez que Tony podía ver real enojo, ira, en su mirada azulada, la primera vez fue cuando lo vio darle la paliza de su vida a Rumlow- ¡No vales absolutamente nada!- inhaló y exhaló tranquilizándose, para no golpearla
Tony dio un paso adelante, tomando la mano de Bucky, percibiendo como este se calmaba con su toque.
Tony repasó a la mujer con una mirada fría, penetrante, antes de susurrar.
-¿Sabes? Es una lástima que tú, jamás sabrás lo muy buena persona que es tú hijo, y tampoco sabrás que se parece en nada a una arpía como tú, quizás se parece más a su padre...
-¡No te atrevas a hablar de mi esposo!
-Lo hago en un sentido positivo- sonrió con burla, mirándola, sin despegarle la vista ni un segundo, inspeccionándola de arriba abajo como ella hizo con él hace un rato- él, que supongo, era muy bueno como James, apuesto a que él se casó contigo por pena así como tú te casaste con él por interés, me hubiese encantado conocerlo, estoy seguro que no lo merecías, no merecías un buen esposo, y ahora no te mereces este buen hijo que tienes, porque no te volverás a acercar a él, no lo permitiré, no le lastimarás más de lo que ya hiciste
-¿¡Cómo te atreves...
-Si vuelves a aparecer... - la interrumpió James alzando sus cejas hablando lo más claro posible- en la vida de cualquiera de nosotros no necesitaras dinero como incentivo para mantenerte alejada para siempre, porque yo, personalmente te golpearé hasta que lo desees y no me importa que seas mujer o mi madre, ahora lárgate porque si no lo haces, yo te voy a sacar de mi casa
La mujer pareció realmente afectada por la amenaza, el único sentimiento sincero en toda la cena que Tony le vio mostrar, y alzando su barbilla, caminó hasta la salida, siendo seguida de Bucky que cuando ya notó que estaba fuera de la casa, cerró la puerta de un portazo.
Bucky se quedó ahí un largo momento, mirando fijamente la puerta, apoyó su frente contra esta y cerró sus ojos, notando que su respiración no era tan pesada como debería, como si ya ella le hubiese hecho todo el daño y no pudiera hacer más.
Unos brazos le abrazaron por detrás y la frente de Tony se apoyó contra su fuerte espalda. Reconfortándolo.
-Lo siento
-Deberías- susurró, y luego de un rato en esa posición finalmente se volteó, clavando sus ojos en esos chocolates que tanto amaba- deberías sentirlo, porque no quiero que vuelvas a ofrecer tu dinero a esa perra, a nadie, a nadie que no se lo merezca, ni siquiera a alguien que se lo merezca porque o te quieren por quien eres o se van a la mierda, y ... no quiero que gastes nada en mí, ya te lo había dicho
-Yo... solo quería protegerte...
-Manteniéndola lejos- le interrumpió, inclinándose y besando su frente- lo sé y lo entiendo, no estoy molesto, pero me proteges estando abrazado conmigo, gatito, quedándote siempre conmigo ¿Lo harás?
-Sabes que sí- dijo hundiéndose en el pecho de Bucky, aspirando su aroma, y dándole fuerzas- Siempre.
(...)
-Entonces la cena no salió como lo esperabas- comentó Steve
El rubio alfa estaba caminando junto a Bucky por un parque, ya estaba atardeciendo, y aun se veían a niños jugando al escondite, y a algunos ancianos alimentar a las palomas. Para el resto del mundo era un día normal, pero para Steve, su mejor amigo cumplía años, bueno, un año más.
Le entristecía ver que este parecía un poco ido, no sabía si la visita de su madre le había desalentado o era por otra cosa. No habían hablado de eso, hasta ahora que Steve tocó el tema.
-No, pero me da igual, he estado años sin ella, no me interesa si se va para siempre, de hecho si no vuelve a aparecer sería un alivio- dijo Bucky, restando importancia al asunto
-¿Estas bien?
-Steve- habló con calma, mirándole con una mueca- estoy bien enserio, es solo que, este día, tu sabes que nunca me ha gustado mi cumpleaños, me recuerda mi padre, era con él con quien lo pasaba siempre
-Sí, me lo has contado muchas veces- asintió colocando una mano sobre su hombro
Siguieron caminando ahora por una calle, donde habían muchas tiendas y no era muy concurrida a esa hora.
Bucky se detuvo en seco, observando a través de la ventana, un objeto muy hermoso, jamás fue alguien materialista, sin embargo ese objeto le atraía, era ni más ni menos un anillo de compromiso, de oro, bordeado con unos bonitos diamantes pequeños y finalmente uno más grande que todos rodeado en oro, era masculino, algo grueso, y le encantaba, le encantaba porque se vería muy lindo en el dedo anular de Anthony Stark.
-Bucky- le llamó Steve a un lado de él, alzando una ceja al ver lo que su amigo observaba con tanto anhelo- tenemos que volver a casa
-Si solo... dame un segundo, vuelvo enseguida- dijo abriendo la puerta de la tienda
-No estás pensando en....
-No- dijo rápidamente- bueno... sí, pero aún no, no... yo... solo dame un segundo- y cerró la puerta dejando a Steve más que sorprendido, en especial cuando lo vio volver con una pequeña cajita de terciopelo roja y una pequeña sonrisa en su rostro
(...)
Tony golpeó la mano de Sam con un globo desinflado cuando este estiró el brazo para probar la crema de la torta de cumpleaños de merengue frambuesa que decía "Feliz Cumpleaños Bucky" y un corazón con unas estrellas de colores hechas de dulce alrededor de las letras.
No podía permitir que algo saliera mal ese día, ni el más mínimo detalle, estuvo toda la tarde inflando y colocándole una cinta a los globos de colores que en ese momento estaba colocando por toda la casa, luego fue a comprar la torta con un mensaje, se paseó por el centro comercial por horas buscando el regalo perfecto para James para finalmente comprar varios regalos, en los que tendría que decidirse por uno, porque Bucky le haría devolverlos alegando que eran muy costosos, sí, él conocía a su Buckaro, el único problema era que ahora tenía dos relojes, una televisión último modelo, dos reproductores de música, cuatro cajas con chocolates de distintos tipos, tres perfumes, y una licuadora porque Bucky una vez le dijo que le gustaba el jugo, después de unos segundos descartó la idea, nadie andaba por ahí regalando licuadoras en cumpleaños, y no negaría que casi le compra la tienda de jugos de la esquina ¿Hubiese sido raro? Siendo Tony Stark, fue más raro que no lo haya hecho.
Era su responsabilidad como la pareja de Buckaro hacer del día de su cumpleaños agradable, épico, y no algo aburrido y depresivo. No había hablado con él desde que se despidieron a la entrada de su casa cuando su madre- alias perra maldita- se fue, quería saber cómo estaba durante todo el día pero tuvo que fingir que no sabía que día era, y le dolía, porque estaba seguro que James estaba desanimado, por ello él quería subirle el ánimo con su cumpleaños, solo esperaba que funcionara cuando este llegase y todos gritaran "sorpresa", tenía suerte de que Steve se haya ofrecido a salir con James al parque para distraerlo por unas horas mientras ellos organizaban todo.
Alzó una ceja cuando vio a Banner besándose con Natasha en el sofá, lo bueno es que ellos vinieron a ayudarle, al igual que Thor, que solo atinaba a ver la televisión donde había un puto documental que hablaba sobre la importancia de los pingüinos, no era por ser malo con los pingüinos, enserio no tenía nada en contra de esas aves ¿Pero a quien mierda me importaban en un momento como este, cuando tenía un maldito ataque de nervios al ver a todos relajados cuando James iba llegar junto a Steve en cualquier momento?
Sam era el único que le ayudaba junto a Loki, y Carol, esa chica era muy amable y servicial gracias a Dios, incluso le recomendó que le regalara uno de los relojes, de color rojo vino, era muy ostentoso, pero estaba seguro de que le gustaría a James. Soltó una risita cuando vio como Loki golpeaba con un cojín a Thor gritándole lo inútil que era y escuchó a Carol decir "Ay, el amor de los jóvenes"
Cuando Thor dejó de hacer su "aporte" para la fiesta, y con ello se refería a cuando el documental de pingüinos terminó, se acercó disimuladamente a él o al menos lo más disimulado que podía ser alguien como Thor.
-Nos vemos en cero cinco en la habitación de Barnes
Y se fue, dejando a Tony con la interrogante de ¿Y era necesario decirlo con voz de espía ultra secreto que ocultaba secretos del gobierno y sobre la muerte de Michael Jackson?
Alzándose de hombros obedeció, y lo alcanzó cinco minutos después en el lugar acordado.
-¿Qué sucede, Thor?
-Escuché que tenías problemas con tu regalo- susurró con un tono de mafioso dándole la espalda sentado, con las luces bajas, entonces dio la vuelta sobre la silla rotatoria dramáticamente, con las manos juntas, un pedazo de papel enrollado que simulaba ser una pipa, y unos lentes de sol
-Lo cierto es que no- respondió Tony con simpleza alzándose de hombros- ya sé que darle a James
-Pues ya no tienes que temer- le interrumpió- pues yo tengo tu solución- se levantó poniéndose de pie, se quitó los lentes imitando la voz de un comercial, sacando de detrás de la televisión una bolsa de regalo, entregándosela
-¿Va explotar?
-Para ser honesto, no estoy seguro, Natasha me dijo que te lo entregara, dijo que era para animar al amigo Bucky el día de su cumpleaños
-¿Y cuándo te dijo que me lo dieras eso incluía la actitud de espía, mafioso y comercial de los noventa?
-No, eso fue todo idea mía, Nat dijo que fuera discreto, y yo también quería hacer algo dramático, Loki siempre me dice que soy muy mal actor, y me gustaría ser actor en unos meses luego de graduarme ¿Cómo lo hice?
-Pues.... no soy profesor de actuación, solo de física, sin embargo he visto peores actuaciones que la tuya en obras escolares- dijo tomando la bolsa
Thor sonrió emocionado y salió de la habitación, murmurando algo de que iba echárselo en cara a Loki, como si le hubiese hecho un cumplido.
Restándole importancia a eso abrió la bolsa de regalo, y sus mejillas enrojecieron mientras su ceño se fruncía cuando vio lo que había adentro de la bolsa, claro, como no se le ocurrió, no sabía cuál era la fascinación de Natasha con obligarlo a usar ese tipo de prendas para James, girando sus ojos lo escondió bajo la almohada que estaba de la cama de este, se la llevaría cuando acabase la fiesta.
Salió de la habitación, complacido cuando notó como todo ya estaba listo, los globos colgados, el pastel al centro de la mesa, los regalos sobre la mesita de centro, y un cartel gigante con el mismo mensaje del pastel "Feliz cumpleaños Bucky."
Su pánico regresó cuando escuchó como tocaban la puerta de la casa, y todos corrieron a esconderse silenciosamente mientras Sam apagaba la luz. Muchas preguntas rondaron por la cabeza de Tony como ¿Qué pasa si no quería una fiesta? ¿Y si en lugar de animarlo esto lo jodía aún más? ¿O solo quería estar en silencio con música triste por lo mal que salió la cena con su madre, por la decepción que se llevó?
La puerta fue abierta y todos salieron de su escondite gritando un "sorpresa" mientras se acercaban a felicitarlo, Bucky sonrió cortésmente a todos y cada uno de los saludos, recibiendo y agradeciendo también cada uno de los obsequios.
Tony fue el último en ir a saludarlo, recibiendo un profundo beso, y un gran abrazo, los ojos de su alfa aún estaban algo desmotivados pero no como hace unos segundos, como si al verlo ahí todo ello desapareciera, y eso lo complacía de cierta forma, nunca supo que podía hacer feliz a alguien con su sola presencia.
-Apuesto a que tú organizaste todo esto-susurró en el oído de Tony, aun abrazándole por la cintura
-De hecho, Steve, Sam y yo, y los demás ayudaron a ordenar todo, excepto quizás Thor, que estaba viendo documentales de pingüinos y actuando como mafioso comerciante y espía del gobierno
-No preguntaré porqué
-Mejor si no lo haces- dijo Tony con una sonrisa besándole la mejilla- hora de la fiesta
Pasadas unas horas, todos parecían estar pasando un buen rato en esa fiesta sorpresa, y para el alivio de Tony, Bucky también parecía estar pasándola bien, hablando con todos los invitados, jugaron a unos juegos de mesas como el jenga-donde Thor fue quien hizo caer la torre las tres veces-, y cartas uno- que fue cuando Sam le gritaba a Loki para que dejara de tirarle de esos más cuatro y Carol intentaba calmarlo alegando de que así se acababa la amistad-, mientras conversaban animadamente, y luego jugaron verdad o consecuencia, donde a Loki le hicieron confesar que odiaba de Thor –este contestó que sus ronquidos- luego a Natasha la hicieron llamar por teléfono a Strange y decirle que su pedido de cien pizas había llegado, todos parecían morir de risa en ese momento cuando escuchaban a este gritar histérico "¡Ni siquiera me gusta la aceituna!"
Y los juegos siguieron y siguieron, hasta que Bucky se disculpó un momento para ir a su habitación, indicándoles que siguieran jugando un momento sin él. Pero cuando ya pasado unos diez minutos no volvió Tony se preocupó y fue a verlo. Entrando en su habitación sin molestarse en tocar la puerta.
Tony se encontró a Bucky sentado en su cama, contemplando en silencio una tarjeta de cumpleaños, estaba algo doblada y también sucia. Si no fuera porque sus ojos demostraban añoranza diría que era una tarjeta ordinaria.
Caminó hasta él y se sentó a su lado, no sabía si James quería compañía, y hubiese tomado su silencio como una invitación a retirarse si este no hubiese agarrado su mano, entrelazado sus dedos y besarle los nudillos.
-Esta tarjeta me la dio mi padre en mi último cumpleaños que pasamos juntos- murmuró el alfa contra su mano- mi madre se había ido a unas vacaciones a Miami y él se quedó conmigo porque no quería dejarme solo en ese día y como disculpa de que mi madre no estaba él me hizo la tarjeta, era el mejor padre del mundo, nunca entendí porque estaba con una mujer como ella
-Lo extrañas- no era una pregunta
-Lo extraño demasiado, así como supongo que tú a los tuyos
-Sí, no voy a negártelo, lo sobrellevé de una forma que me hizo arrepentirme unos años después, pero- sacudió la cabeza- eso ya no importa
Tony rodeó el cuello de James y lo abrazó, sentándose en su regazo y besándole la mejilla. Hubo otro silencio, esta vez más cómodo, hasta que el omega volvió a hablar.
-Lamento lo que pasó con tu madre, y decirte que ella quería arreglar las cosas, no debí darte falsas esperanzas, la verdad nunca fui muy confiado, pero me hubiese gustado verte feliz y si ella no hubiese sido esa horrible persona que es...
-No, no, eso sí que no Kotenok, no te atrevas a culparte, tu no tenías idea de lo que ella planeaba, no te sientas mal por darme algo de fe. Además yo soy feliz, soy feliz contigo, con Steve con Sam, lo soy- dijo con sinceridad tomando su rostro entre sus manos
-Aun así, ahora siento como si hubiese arruinado tu cumpleaños con esta fiesta, ni siquiera sabía si querías esta fiesta, solo quería hacerlo mejor pero parece que hice todo lo opuesto
-Todos mis cumpleaños han sido malos, gatito, de hecho normalmente me emborrachaba para olvidar este día y observaba largas horas esta tarjeta-confesó, hizo una pausa para acariciar la mano de Tony que descansaba sobre su hombro en señal de apoyo- este es el mejor cumpleaños que he tenido hasta ahora, porque te tengo a ti, tu eres todo mi regalo
Se echó hacia tras en la cama y se llevó a Tony consigo, sin embargo un sonido le hizo fruncir el ceño, se levantó y movió su almohada notando una bolsa de papel de regalo roja.
-¿Qué es eso?- indicó con su índice la bolsa y se acercó curioso, sacándola de ahí
A Tony casi se le cae el alma cuando lo vio tomarla.
-¡No, James, dame!- intentó agarrarla, pero fue inútil ya que el otro se alejó, levantándose de la cama, abriéndola y para su vergüenza viendo el contenido de esta
Bucky abrió los ojos como platos al ver lo que había adentro, eso era... ¿Ropa interior de encaje? Alzó una ceja divertido, disimulando una pequeña risita, antes de levantar la mirada, encontrándose con un Tony totalmente abochornado, y con sus mejillas rojas de vergüenza, parecía querer que la tierra se lo tragase en ese mismo, y estaba sin atreverse a verle a la cara.
-Gatito...
-¡No fue idea mía!- se adelantó a responder rápidamente, interrumpiendo que lo que sea que fuese que el otro iba decirle y cubriendo su rostro con sus manos- Natasha se la dio a Thor y él me la dio a mí, dijo que era para animarte en el día de tu cumpleaños pero, yo... yo no lo iba... no iba a dártela... iba a llevármela ¿¡Por qué demonios tuviste que ver lo que tenía!?
Bucky le ignoró, para a continuación meter su mano dentro de la bolsa de regalo y sacar lo que tenía, inspeccionando el contenido; unas medias que supuso debían llegar hasta los muslos, y unas bragas no muy grandes, todo de color rojo y con encaje. Luego repasó el cuerpo de su hermoso omega, tomándose unos minutos para imaginarse ese cuerpo tan masculino y perfecto envuelto en ese encaje, su trasero, joder, pensó, sería como el puto paraíso.
-¿Y qué esperas?
-¿Qué?- preguntó algo aturdido, quitando las manos de su rostro
-¿No te las pondrás para mí?- cuestionó como si fuera obvio
-¡¿Estas estúpido o te diste un golpe en la cabeza?! ¡No!
-¿Por favor?
-¡No!
-Kotenok, se supone que es para animarme- dijo curvando sus cejas en una expresión de tristeza mal simulada, cubriéndose dramáticamente el pecho con una mano- Estoy tan triste que... lo único que me animaría sería ver a mi gatito con esto puesto-cubrió su rostro con su mano derecha, tendiéndole las prendas para que las tomara
-¡No me voy a poner eso solo porque estas fingiendo estar triste! ¡Eres un pésimo actor! ¡Hasta Thor es mejor que tú!-exclamó indignado- Además, cariño- se cruzó de brazos, alzando su barbilla con soberbia- tus amigos están afuera, no vamos a hacer nada mientras estén ellos ahí, y tenemos que volver a la fiesta a cantarle al cumpleañero, que, cabe la coincidencia eres tu
-Voy a tener millones de cumpleaños más en los que pueden cantarme, pero a ti....
-¡Esta bien!- gritó quitándole las prendas y la bolsa de regalo, metiéndolas en esta última- me las pondré James, pero no ahora, quizás cuando nos casemos en unos años- eso último lo susurró- será otro día y lo haré solo si vuelves allá y eres feliz con todos nuestros amigos
-Pero soy más feliz aquí contigo
-Bien, entonces seamos felices todos con nuestros amigos, andando
Le tomó de la mano, antes de arrojar la bolsa a la cama de este, para luego guiarlo a la salida de la habitación, a la sala, donde estaban todos los demás.
Bucky observó, ahora más animado a todos los presentes en la sala, agradeció que Tony haya invitado a Peggy para esa pequeña fiesta de cumpleaños, ya que a Steve se lo veía más motivado y feliz hablando con la omega castaña, lucía más relajado, lo cual le hacía sentir una gran cantidad de alivio porque estaba cansado de ver a su amigo triste por su culpa, quería que fuese feliz de una buena vez.
Luego sus ojos de dirigieron a donde estaba Nat, sentada cerca del profesor Banner y tomando la mano de este último compartiendo de vez en cuando uno que otro beso, sin la necesidad de pretender apenas conocerse porque estaban entre amigos y en confianza. Por otro lado en la pequeña fiesta- reunión también se encontraba Thor, que tenía su brazo alrededor de la cintura de Loki, estaban sentados frente a Nat, Bruce, Carol y Sam, hablando entre ellos, la chica pelirroja al verlos le guiñó un ojo a Bucky, y este le respondió alzando un pulgar, agradeciéndole inmensa y silenciosamente el regalo que había hecho, sin duda el mejor del mundo que haría usar a su pareja luego.
Tony alzó una ceja y le dio un codazo, entendiendo el porqué de ese mensaje silencioso de James a Nat. Le hubiese gustado invitar también a Pepper y Rhodes, pero ese día ellos tuvieron que volver a Nueva York por problemas de la empresa a cubrirlo, como sea, esperaba que todo estuviera bien por allá, porque donde él estaba, no podía ser más perfecto. Parecían una familia gigantesca, parecían una manada, y eso era algo tan bueno, tan puro, que le llenaba. Quería dejarle en claro a James que no necesitaba y jamás necesitó a la inútil de su "madre" porque él tenía personas que lo querían y se preocupaban por él, personas que lo amaban a pesar de todo, personas que estarían con él hasta el final de sus días.
Fin.
N/A: Que palabra mas fría "Fin" no sé, me parece muy fría,
Y... hemos llegado al final de esta historia (lamento enormemente la tardanza) nunca pensé que me alargaría, quería solo cinco caps y terminé con doce, quiero darles las gracias a todos y cada uno de sus leídos, sus votos, y de sus comentarios, son una gran inspiración para mi y no lo digo por decirlo, enserio es una motivación cuando te dicen "oye me encanta tu historia" llena mi corazón, inspiracional, en fin, puede que me demore con el epílogo ya que no tengo nada de este escrito aun, pero las ideas están, eso es lo que menos me falta, sin embargo, escrito nada.
¿Alguien se dio cuenta que canción usé para inspirarme en esta historia?
Dios, siento un vacío al terminarla, enserio me encantó escribirla, pero no, no será la última, lo siento, pero me tendrán que volver a ver, cuando me digne a escribir otra, tengo proyectos en mente, vaya que sí.
Ahora sin más que decir, vayan a ver Thor, es de lo mejor, enserio, la amé, y si ya la vieron veanla de nuevo, es demasiado bella para verla una vez, pues es todo, me despido, mil besos, mil besitos.
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