──── 1. ¿ESTÁS BIEN, ASHER?
[ 24 de diciembre de 1940 ]

Asher Riddle se encontraba en la biblioteca buscando algún libro que leer, pero nada le parecía interesante. Los títulos no eran lo suficientemente llamativos. Algunos lo eran, pero en su interior, lo escrito ahí no era de su agrado.

Muchas veces solía ser al revés, pero en esos momentos no quería ir libro por libro. Realmente ni siquiera les prestaba atención. Su mente estaba distraída y estaba aburrido. Podía jurar que leyó los suficientes libros ese año.

Era el tercer año que pasaba las vacaciones de navidad en Hogwarts. No tenía a donde ir, no tenía un hogar, su madre había fallecido después de tenerlo a él y su padre nunca se hizo cargo de ellos.

La demás familia eran unos muggles insolentes con los cuales ambos no querían tener contacto, por lo que Asher aborrecía un poco a los muggles, porque se creían superiores, claro ejemplo cuando su familia por parte de padre los desprecio a él y a su hermano.

Así que, solo le quedaba observar y pasear el castillo, hasta fondo, como siempre lo hacia. Tres años ahí seguidos y no había terminado de recorrer todo el colegio y cree que nunca terminaría de hacerlo.
Asher no tenía muchos amigos a diferencia de su hermano, él era el solitario. Tom tenía una gran mente como para liderar el grupo formado por cabezotas como él y no quería formar parte de eso.

En realidad su relación de hermanos nunca fue realmente buena. Aunque odiara a los muggles, no les haría daño, prefería guardarse ese odio para él. Le gustaba hacerles la vida imposible con tener la mano levantada en clases y demostrar que era bastante inteligente. Eso era una completa tortura para los nacidos de muggles.

──Hola, Ash ──Tom llegó a su lado mientras miraba los libros, sin quiera verlo. Su voz era fría, como siempre ──. ¿Podemos hablar?

Asher lo miro con el ceño fruncido. Cada vez que su hermano se le acercaba era para pedirle favores, por lo que ni siquiera le preguntaba como estaba o iba su día. Podía tener dos años menos que su hermano, pero eso no decía que se iba a dejar mandar por él.

──Estaba bien, gracias. Hasta que llegaste tú ──comentó y lo miro con una sonrisa sarcástica que quito rápido, dando a entender que no estaba contento con su presencia ──. Y, la respuesta es no, pero eso no te importa y de todos modos hablaras por los codos.

──Que gracioso, hermano ──sonrió sin ganas y le mostró un libro al ojiazul, el cual no encontró ninguna gracia. Era un libro marrón viejo y pudo identificar qué se trataba de un libro de la sección prohibida.

──¿Qué? ¿Encontraste la manera de encontrar padres en ese libro? ──ladeó la cabeza con algo de diversión. Tom rodó los ojos ──. Cuando encuentres algo que sea importante me avisas.

──No idiota. Y es justo lo que encontré, algo que tal vez podría interesarnos a ambos ──comentó buscando la página del libro que había leído.

Asher lo miro sin ganas y comenzó a caminar lejos de él, siendo seguido por Tom, quien hablaba sin parar detrás de él, como mencionó antes. Tratando de convencerlo en que leyeran lo que encontró.

Sea lo que sea, sabía que tendría que limpiar sus platos sucios y Asher no tenía tiempo para preocuparse por alguien que lo ignoraba la mayoría de las veces frente a sus amigos.

──Los Horrocrux son... ──Tom comenzó a recitar lo que el libro decía. Asher se detuvo en seco y se dio la vuelta para mirar a su hermano con cierto asombro en sus ojos.

¿Algo para beneficiar a los dos o destruirlos a ambos?

──Oye, ¿Estás loco, Tom? ──interrumpió su hermano con las cejas fruncidas ──. Los Horrocrux son magia muy avanzada y oscura. No deberías leer eso.

──¿Sabes sobre ellos? ¿Cuanto los leíste? Dime más sobre ellos ──interrogó insistiendo emocionado y el castaño negó varias veces ──. Ash, por favor. ¡Vamos! Eres mi hermano.

──Para eso si soy tu hermano ¿no? Frente a tus amigos me tratas como un mestizo. Ve y pregúntale a uno de tus amigos, si es que los consideras como tales ──Tom abrió un poco su boca para decir algo, pero no pudo. No tenía respuesta para eso, en el fondo sabía que él menor tenia razón.

Tom lo miro mal y salio de la biblioteca furioso. Asher se sentó en la silla de unas de las mesas, sin importar si se enojaba o no con su hermano.

Por supuesto que había leído sobre ellos, pero lo aburrió en cuánto la lectura avanzo. No entendía por qué sería del interés de ambos. ¿Acaso tenia cara de asesino serial?

Asher sonrió cuando vio a su gato Cookie subir a la mesa y se dejó acariciar por su dueño. Era su única compañía. Dumbleodore se la compró cuando entró a primer año.
El castaño se quito el giratiempo que le habían dado ese mismo año para poder asistir a más clases de las que debería.

Gracias a Minerva Mcgonagall por sus excelentes calificaciones.

Suspiro cansado y comenzó a leer un libro el cual ni siquiera vio la portada. En cierto momento se le mostró interesante, por lo que solo veía de reojo a su gato comenzar a jugar con el giratiempo, dándole leves patadas.

──Cook por favor ──aparto su gata con cuidado del giratiempo. Un falso movimiento y podía repetir todo el día o quien sabe si algo más, pero prefería no saberlo.

El gato café se quedó quieto unos momentos y el castaño recuperó el hilo de su lectura, pero se concentro tanto que Cookie comenzó a jugar con él de nuevo. Se le hacía llamativa su forma.

El giratiempo comenzó a dar vueltas y Asher despego su vista del libro cuando escucho el sonido que hacia el giratiempo cuando estaba en uso. Logró atraparlo antes de que cayera al suelo y con el corazón latiendo fuerte, lo detuvo.

Sufrió de un pequeño infarto, por un momento.

Asher miro a su gato con las cejas alzadas, porque era imposible enojarse con su gato. Cookie lo miro sin entender nada y solo soltó maullido en respuesta.

Se coloco de nuevo el giratiempo, que le apretaba un poco el cuello. Alzó a su gata, cerró el libro y comenzó a caminar fuera de la biblioteca. Una vez afuera observo que el cielo estaba oscuro por completo.

Frunció sus cejas extrañado, debido a que estaba seguro que no tardo más de treinta minutos leyendo. Quién sabe, seguro y se concentro mucho. Estaba seguro que detuvo el giratiempo a tiempo.

Ese día en la cena, Tom lo ignoro por completo, algo que a Asher no le tomó importancia en lo absoluto, porque ya estaba acostumbrado a eso, aunque a veces le dolía que fuera así de cruel.

Más en la noche, cuando llego a su habitación, donde estaba solo, porque sus compañeros estaban de vacaciones en sus casas y por cierto, el único momento del año donde podía estar en paz.

Puso a su gato a su lado y dejó el giratiempo sobre la mesita noche, pero se topo con la sorpresa de que había una caja cuadrada pequeña sobre la mesa, que venía acompañada de una nota.

Feliz navidad, Asher.
-Tom.

Asher sonrió al ver el pequeño detalle que su hermano le dejó. Era bastante extraño ver venir eso de Tom, pero le agradaba. Él no tenía nada para darle. El castaño se coloco el collar que tenia sus iniciales. Era lo menos que podía hacer, aunque ¿de donde agarro el dinero para compararlo?

Vaya, vaya Asher. Te metiste en la boca del lobo...

[ ... ]

La mansión de los Riddle se ubicaba en una colina que dominaba la aldea. Estaba cegada con tablas algunas ventanas, al tejado le faltaban tejas y la hiedra se extendía a sus anchas por la fachada.

En otros tiempos había sido una casa muy bella y hermosa en donde habitaba una familia. Pero, ahora estaba más que destruía. Asher conocía bien esa casa, fue frente a la puerta cuando su familia lo desprecio y grito qué no se harían cargo de él ni de su hermano y tiraron toda su ropa alrededor del patio.

Asher se encontraba frente a la casa, de nuevo, era de noche y hacía frío, su cabello se hacía para todas direcciones y se abrazaba a sí mismo, su camisa de manga larga no lo cubría lo suficiente.

El castaño observo la gran casa, no sabía como había llegado ahí, pero por alguna razón quería entrar. No le gustaba el ambiente, por el mal rato que vivió, era como un imán que sentía, pero su consciencia no quería, pero tampoco quería morir de frío, así que dio unos pasos para poder entrar a la mansión.

Cuando estuvo dentro, el suelo rechino, dando a entender que la mansión estaba muy vieja. Un olor a húmedo se pasó por su nariz y el lugar se sentía frío, no era mucha diferencia estar ahí o afuera, por el gran agujero que tenía el techo.

Por alguna razón, el lugar se sentía triste. Todo estaba oscuro, solo podía observar algunos cuadros y decoración que en su momento fue fina y sofisticada, gracias a la luz de la luna que iluminaba un poco.

No entendía que hacía ahí, tenía algo de miedo porque no sabía como sus pies lo habían guiado hasta a ese lugar que estaba muy alejado de Hogwarts. Miraba todo a su alrededor, pero solo fue cuestión de segundos para darse cuenta que no era el único allí.

Se escucharon unos ruidos que provenían del suelo, la madera crujía, pero Asher estaba quieto. Sintió un escalofrío recorrer su espalda y su corazón se aceleró.

Esos crujidos se escucharon un poco más lejos y se escucho el rechinar de una puerta. Asher tomó valentía y con pasos apresurados, pero silenciosos camino para saber quien iba merodeando por la casa.

Unas huellas marcadas en el suelo le dieron la respuesta de que no estaba solo.

Con cautelo, subió las escaleras de la mansión, y unas voces se escuchaban cada vez más cerca, aunque no podía reconocer de quienes eran esas voces. Por un momento dudo en seguir subiendo, pero su curiosidad era mucho más grande que el miedo y subió hasta que vio una puerta casi completamente cerrada, y una pequeña luz que salía de la habitación.

Asher trataba de mantener la respiración y de no moverse para escuchar de que hablaban esas personas y si podía pedir ayuda. No iba a meterse en la boca del lobo.

Cierto, ya lo había hecho.

──¿Dónde esta Nagini? ──hablo una voz fría que lo hizo asustarse y tapar su boca antes de soltar un grito por el susto. Sonaba como Flich cuando estaba enfermo de la garganta.

──No... No lo sé, señor ──respondió una voz temblorosa ──. Creo que ha ido a explorar la casa...

¿Nagini?

──Señor, dígame, ¿quiere seguir hablando de Harry Potter?

──¡No! Tengo todo bajo control.

──Colagusano, siempre tan atento al niño que vivió, Harry Potter. Pero vamos, hablemos del otro niño que ha salido ileso a todo. El que más te importa, más que yo ──hablo un hombre con cierto asco en su voz al referirse al otro niño.

¿Harry Potter? ¿Quién demonios era Harry Potter?

──¿Hablas del niño que traerá consecuencias, además de Harry Potter? El niño con talento para los hechizos, más que cualquier adolescente de su edad ──preguntó Colagusano ──. ¿Por qué es tan importante?

──Pregúntale a tío. No quiere decir la razón por la que el Slytherin es importante.

Hubo un silencio, donde Asher creyó que la conversación se dio por finalizada.

──¡¿Pero, acaso importa?! Si tío no lo mata, entonces lo haré yo mismo. Ese niño es tan insolente al igual que Harry Potter, es como el titiritero de los Slytherins. ¡Todos lo siguen y le hacen caso! No me quiero imaginar cuando sea más grande, va a controlar a todos.

Asher frunció el ceño. ¿Quién era el otro niño importante? Por las descripciones, podía jurar que se trataba de su hermano Tom, pero algo en su interior parecía que hablaban de él.

Por todas esas veces que solían decirle que para su edad, era demasiado inteligente. Solo que, Tom era quien parecía el titiritero de los Slytherins. Sí, hablaban de su hermano Tom.

O eso pensó.

──¡No hables así del niño! Él es importante. Y por milésima vez yo no soy tu tío ──alzó la voz el hombre que tenía una voz rasposa y cansada, pero firme ──. No hay que matarlo. Él nos servirá y si sigues, serás tú el próximo cadáver.

──Esta bien... Lo entiendo. Solo que eres lo más cercano a lo que tengo a una familia ──el hombre bajo la cabeza y miraba sus pies avergonzado. Solo quería que él dejara de ocuparse tanto por el niño.

Asher trago grueso. Bueno, no todos los días un tío te decía que te iba a matar y eso le ponía los pelos de punta. Estaba tan concentrado en lo suyo que no se fijo en que alguien estaba a su lado.

──Escuchar conversaciones ajenas es de mala educación. ¿Acaso tus padres no te lo dijeron? ──un hombre con máscara capto su atención.

──¿Tú qu...

──Soy tú ──interrumpió ──, soy tu versión mejorada, Asher. Soy todo lo que siempre has querido ser. Quitame la máscara y veras que digo la verdad ──el castaño se quedó estático y con la mano temblorosa la acercó cerca de su cara.

──¿Qué esperas para traerme al niño? ¡Tráelo ya!Asher, ven aquí ──la voz garrasposa coreo su nombre, aún estando dentro de la habitación y Asher sintió su corazón latir rápido.

Miro al hombre de la máscara y con un solo movimiento logro quitar la máscara, antes de él pudiera intentar algo. Pero no vio ningún rastro de una cara y solo sintió la boca de una serpiente gigante que comió su cara y grito del dolor al sentir sus dientes.

Asher abrió sus ojos de golpe y limpio con el dorso de su mano el sudor que caía sobre su cara como si le hubieran tirado un balde de agua fría. Su respiración estaba agitada y el collar comenzó a arderle en su pecho y se quejo quitándolo con fuerza y lo dejo sobre la mesa de noche.

Se sentí débil y que en cualquier momento se podía desmayar, pero en cambio la puerta de su habitación se abrió abruptamente, dándole un segundo susto en menos de cinco minutos.

──Asher ¿Estás bien? ──preguntó un hombre de cabello negro y ojos azules que se acercó a su hijo, al igual que una mujer y una niña de unos once doce años.

Se quedó estático, y miró a los tres con miedo sin saber que hacer exactamente. Le tomó unos segundos para darse cuenta de que no estaba en Hogwarts como cuando se fue a dormir. Trato de recordar que había soñado para ponerlo en ese estado, pero no lo recordaba.

──Ash, responde, cariño ──la mujer se acercó a él y retrocedió un poco. Eso no fue impedimento para que la mujer tocará sus mejillas y sentir que sudaba frío.

Asher asintió varias veces algo aturdido y sin saber que pasaba con exactitud. La adolescente se acercó preocupada y con sus ojos azules lo miró preocupada, se parecía demasiado a él, que daba miedo.

Es un sueño, solo un sueño ¿verdad? ──pensó Asher mirando a las tres personas que estaban atentas a él como si fuera su familia.

Tal vez se deben estar preguntando la razón por la que Asher tuvo ese sueño, cuando en realidad tuvo que pasar en el Cáliz de Fuego, pero es para sellar la línea temporal que abrió con el giratiempo. El collar también lo quemó por eso. Luego lo verán más explicado.

También después se darán cuenta quién es el hombre que estaba con Voldy.

Nos vemos luego.

-Xoxo bea.