Capítulo 3
Narrador omnisciente.
En aquel escenario, cuatro chicos se encontraban tocando su mas reciente canción.
El sonido de las guitarra , el bajo , la batería y por sobre todo, la dulce voz de aquel chico que cantaba junto a micrófono con pasion.
La canción dió fin con un pequeño solo de guitarra del chico que tenía su cabello atado ligeramente.
— Bien, es todo por hoy — Volteó hacia ellos con una sonrisa — Fue un gran ensayo chicos.
— Si, mucho mejor que ayer — Continuó Kei mientras dejaba la guitarra— Parece que ya estas mejor Yo-ka.
— Digamos que si — Sonrió con tranquilidad y caminó hasta aquellos chicos— Debemos tener todo listo para el show dentro de unos días.
— Tengo que practicar mejor el gutural de la canción, no logro darlo como a mi me gusta — Se quejó Shoya.
— No deberías de preocuparte mucho por eso, esta bien así — Comentó Yo-ka tomando un trago de su botella de agua.
— Es verdad Shoya , no debes forzar de mas tu garganta — Continuó Kei— Podrías lastimarte.
— Tendré cuidado no se preocupen —Dejó el bajo en su lugar tomando un refrigerio de la neversa— Oigan ¿Que opinan sobre la nueva fotógrafa?
— ¿Noah–chan?— Preguntó Tatsuya tomando una soda de la nevera — Me gusta su cabello, y parece muy divertida.
— Hace un muy buen trabajo y es amable — Opinó kei tomando un cigarrillo de la cajetilla que tenía en su bolsillo.
Todos miraron a su vocalista esperando que el dijera algo , mas este parecía pensar en cosas muy distintas a la que hablaban ellos.
— ¿Eh? — Preguntó —¿Por que me miran así?
— Aish — Kei revoleó los ojos — Sigues tan distraído como siempre
— No se de que hablan — Se quejó molesto y shoya río mirándolo con cierto interés.
— De nuestra fotógrafa — Comentó con serenidad — ¿Que opinas de ella?
— Pues , esta bien — Se encogió de hombros.
— ¡Oh vamos! — Rió — Se supone que tu la conoces ¿no? Cuentanos de ella.
— Apenas si la he visto en una ocasión, no es que seamos amigos — Miró hacia otro lado.
— ¿Seguro?— Alzó una ceja— Yo vi que ella te prestaba especial atención a ti.
— Estas loco — Se sentó en una de las sillas cruzándose de piernas— Ella solo…fue amable, eso es todo.
Narras tú
— ¡Odio esto!— Deje caer la caja sobre mi cama—¡Jamas me gustaron las mudanzas!
Esto me estaba sacando mi paciencia,este cuerpo de humano es demasiado débil.
Además ¿que carajo es esto? Mi pelo en mi forma Yōkai es mucho mas opaco y más largo.
Ahora solo me llega hasta la espalda , sin contar que no extrañaba estos ojos cafés , me hacen ver muy aburrida, mi piel está mas normalizada, ya no es tan pálida como antes.
Quisiera morir otra vez
— Agh , esto es una mierda — Me crucé de brazos viendo que aún debía cargar mas de mis cajas a mi nuevo departamento.
Todo sería mucho mas rápido si estuviera en mi forma original.
Aunque … creo que no habrá problema si la uso unos segundos ¿Verdad?
— Nadie me ve de todas maneras — Sonreí de lado y tomé mi collar de rubí , colocándolo en mi pecho y ocupando unos minutos en la transformación.
( • • • )
— ¡Wii!— Chillé mientras daba saltos en mi cama, ya había movido todas mis cajas dentro e incluso había acomodado mis cosas.
¡Como extrañaba mi forma Yōkai!
Tan solo pasó un día y medio y ya extraña mi cuerpo
Es tan aburrido ser humano.
Es una molestia que nadie pueda verme siendo así, incluso cuando pisé aquella vez el mundo de los humanos, estaba en mi forma Humana.
Yo creo verme mucho mejor así , de otra manera me veo igual a todas las demás.
Agh, mientras mas rápido termine mi misión mas rápido.
Tocaron la puerta y del susto trepé al techo, me había distraído pensando.
— Quien sea, lo maldeciré — Bufé y volvieron a insistir en la puerta — ¡Ya voy!
Bajé al suelo con mala gana y me acerqué a la puerta viendo por el pequeño orificio de esta.
Había fuera un chico que jamás había visto en mi vida, pero tenía una apariencia muy extraña.
Me transformé a mi forma humana otra vez, aunque toma varios minutos , que fastidio.
— ¿Quien es? — Pregunté con mal humor mientras mi cabello se decoloraba y encogía de largo.
— Noah…— Su voz me hizo dar un profundo escalofrío y tragué en seco abriendo con algo de dificultad
Narrador
— De acuerdo , entonces vamos
Declaró y sin mas los cuatro chicos cerraron la puerta tras ellos y salieron al pasillo.
—¿Y de que trata esa canción Yo-ka ?— Preguntó alegre Tatsuya.
— Aún la estoy trabajando tanto mental como escritamente , pero creo tener una idea de lo que quiero — Sonrió y miró al guitarrista— Kei ¿Tu habías compuesto una nueva melodía verdad?
— Pues.. —Guió su vista hacia los demás — Shoya Tatsuya ¿Ustedes que han practicado?
— En realidad aún nada — Admitió— Estaba esperando ver tu melodía kei-chan
— Es verdad — Continuó Shoya — ¿No estabas componiendo una canción?
— Eh, no — Miró hacia otro lado— Solo practicaba, no es nada.
— ¿Hm? ¿Por que no nos muestras esa melodía kei–chan?
Sin dar respuesta , siguió su camino atrás de sus compañeros, pensando en aquella melodía que había compuesto
Los chicos salieron del edificio y caminaron con cuidado al estacionamiento.
— ¿Quien lleva a quien? — Preguntó Kei levantando una ceja.
— Yo me llevo a Tatsuya — Levantó su mano hacia arriba y tomó de la muñeca a aquel chico— Nunca me acuerdo su dirección.
— ¡Pero si has ido muchas veces a mi casa!— chilló inflando las mejillas.
— Entonces Kei viene conmigo — Asintió y cada uno fue a su respectivo auto.
Narras tu
— Me dió un buen susto — Bufé molesta mientras le servía algo de té — Jamás me dijo que podía tomar cualquier clase de cuerpo.
— Creí que lo sabías — Suspiro y levantó la vista serio — Bueno, dime ¿Has averiguado algo interesante?
Negué — Apenas si he "conocido" a esos cuatro chicos con los que trabajo , además, no me ha dado ningún dato sobre a quien busco.
— Oye ,pensé que habrías inspeccionado a mas personas que esos cuatro tontos — bebió su taza de té — Escucha, nisiquiera yo se quienes son, por eso te he encargado esta misión con tanta prisa
— Lo sé pero , hay millones de personas en Japón, deberé inspeccionar con mucha atención para encontrar algo que me de indicios —Gruñí— Debe darme algún dato, lo que sea.
— Por eso he venido — Sacó un collar de su camiseta y lo colocó sobre la mesa— He conseguido algo que quizás te de una pista
Miré sin comprender aquella joya y de ella una luz característica brotó , dejando ver unas imágenes pasar.
— Una escritura encontrada por Taka reveló esto
Levanté la vista , había algo escrito en aquella roca tan brillante
— "La luz volverá a brillar, cuando la maldad de otros seres en los corazones de los elementos sea erradicada por completo" — Leí en voz alta— ¿Erradicar la maldad?
— Parece complicado pero la verdad es que no lo es tanto — Guardó esa joya nuevamente dentro de su camiseta— Puede que se refiera a los seres que quieren extinguir a los elementos.
— Puede que así sea, de todos modos, mi misión en encontrar y proteger a los elementos — Pensé y miré el suelo con rabia — Tengo que apresurar el paso, los encontraré a como de lugar.
— Eso espero — Acarició mi mejilla con su mano derecha y me sonrió— Recuerda cariño, que confié esta misión tan importante a tus ojos Yōkai.
Suspiré y quité su mano de mi rostro.
Tengo que idear un plan y tiene que ser rápido.
— Lo se, no pienso fallar — Me paré de la mesa y lo observé seria — Confíe en mi, haré esto yo sola.
— Si así lo quieres, está bien — Se levantó y caminó a la puerta — Pero recuerda, Taka y Tsu te ayudaran si lo necesitas.
— No necesito a ese par de imbéciles — Negué firme y Sonreí — Estaré bien, solo necesito acostumbrarme a mi cuerpo otra vez…
Revoleé los ojos refiriéndome a este cuerpo de humana y el rió.
— Te ves bien así de todas maneras, así que no te preocupes por ello — Me acerqué donde el para abrirle la puerta — Una cosa mas , procura no usar tu forma Yōkai hasta las doce en punto, otros podrían sentir tu aura durante el día y atacarte.
— Lo haré — Asentí y abrí la puerta — Oye líder!— Se volteó mirándome con fastidio— Lindo cuerpo, te ves guapo — Bromeé
— Este no es mi cuerpo original, pero gracias — Besó mi mejilla y se acercó a mi oído — Tu también te ves muy bonita así
Me dió un gran escalofrío y puse ambas manos en su pecho haciéndolo retroceder a paso lento.
— Gracias , pero prefiero mi otra forma — Reí y el sonrió alegre — ¿Contactarás conmigo mas tarde?
— Mañana por la mañana volveré , si tienes algún dato nuevo, recuerda contactarme — Asentí y el se retiró caminando hasta el ascensor .
di un largo suspiro, ahora estaba mucho mas confundida respecto a mi misión aquí.
Había mucho que hacer y nisiquiera se como.
Que molestia, será como buscar una aguja en un pajar.
— ¡Shoya , Tatsuya no corran! — Me volteé hacia el pasillo, había escuchado la voz de Kei, de las escaleras aparecieron Shoya y Tatsuya corriendo.
Al verme Tatsuya sonrió y levantó su mano hacia arriba saludandome
— ¡Noah–chan! — Lo saludé con mi mano y este camino hasta mi junto con shoya
— Oh, hola chicos — Sonreí — ¿Que hacen aquí?
— Vinimos a casa de Tatsu y Kei por asuntos de la banda — Comentó Shoya.
— Yo y Kei–san vivimos en este edificio — Señaló las puertas frente a la mía — ¿Tu también vives aquí?
— De hecho, acabo de mudarme — Admití y Tatsuya y shoya recibieron un correctivo bastante fuerte de parte de Kei quien los miraba molesto.
— Ya les dije miles de veces que no corran en las escaleras — Regañó y luego me notó a mi — Buenos días, noah
— Auch, eso dolió Kei–chan — Lloriqueó Tatsuya sobandose el golpe.
— Que exagerado, aún no nos hemos lastimado — Continuó Shoya.
— Auch — Reí un poco al ver lo estricto que era Kei con ellos — Creo que se les perdió un vocalista.
Dije en tono de broma al ver que no estaba Yo–ka con ellos.
— Oye es cierto ¿Donde esta Yo–ka? — Preguntó Shoya mirando a Kei y este se encogió de Hombros.
— Venía conmigo, pero se quedó en la escalera del piso de abajo — Admitió— Bueno , tenemos cosas que hacer, así que iré a buscarlo.
Se dió la vuelta y volvió a bajar las escaleras, que tipo tan serio, aún no lo he visto sonreír ni una vez.
— ¿Siempre es así de duro? — Miré a ambos y los dos asintieron.
— Kei–san lidera todo diaura, es como una especie de padre para nosotros, pero últimamente está mas serio que antes — Tatsuya puso pose pensativa
— Supongo que los quiere a su manera — Sonreí un tanto nerviosa, es verdad que Kei me daba un poco de escalofríos.
— Eso creo — Se encogió de hombros— Quizás solo está estresado y necesita descanso.
Lastimosamente, Kei había bajado y Ellos estaban aquí, si tan solo no me vieran podría utilizar mis ojos de Yōkai para ver su alma y saber que sucede.
Shoya se acercó mas a mi pasando su brazo por mi hombros.
— Creo que ahora tendré mas motivos para venir a tu Casa Tatsu–chan — Bromeó y reí , no tenía intenciones de seguir el coqueteo de Shoya
— Ajá — Se quejó Tatsuya y me sonrió— Me alegra que ahora seamos vecinos Noah–chan, Kei no suele estar disponible para venir a jugar conmigo
— Bueno, cuando quieras podemos jugar videojuegos —Sonrei y este pareció tener un brillo mucho mas potente en sus ojos.
Tatsuya era el sinónimo mas claro de "Infantil" que podrías encontrar , me agradaba mucho.
— ¡Oye yo también quiero! — Reprochó shoya
— Podríamos jugar los tres — Ambos asintieron animados y Kei subió hasta nuestra ubicación trayendo a Yo–ka de la mano regañándolo .
— No es posible que seas tan despistado ¡Tenemos cosas que hacer! — Kei miró a Tatsuya y Shoya— Ustedes dos, apurense , debemos empezar.
— Ya vamos~! — Respondieron sin ganas y ambos volvieron la vista a mi— Kei nos matará si no vamos, nos vemos en otra ocasión — Se despidió Shoy corriendo en dirección a la que creo era la casa de Kei.
— ¡Tengo que irme , nos vemos después Noah–chan ! — Se fue corriendo mientras me saludaba con su mano y imité su gesto.
Que tipo tan peculiar de guitarrista tenían estos chicos.
( • • • )
— Bien , ya casi son las doce en punto
Observé el reloj mientras barría mi nuevo departamento , estaba esperando la hora que el líder me había dicho para poder dejar este horrible cuerpo de humana y usar mi cuerpo de Yōkai para salir en la búsqueda de algún rastro de los elementos.
Faltaban algunos minutos para las doce, dejé la escoba en su lugar y estiré mis brazos hacia arriba.
Todos en el edificio donde ahora vivía estaban probablemente durmiendo, había un silencio sepulcral por estas horas
Abri la ventana mirando hacia el cielo nocturno, la luna estaba brillando hermosamente, era un gran espectáculo natural.
Las agujas del reloj sonaron dando estruendo a las doce y tomé mi collar de rubí, era hora del cambio que tanto estuve esperando.
Mi cabello creció y se tiñó de negro opaco, mis ojos se tornaron rojo otra vez y al abrirlos , pude comprobar que habia vuelto a mi forma original.
— Es hora — Sonreí de lado y miré hacia afuera, no había nadie , mis ojos no sentían ningún aura a kilómetros.
Bajé de un salto hacia abajo, mi cuerpo se sentía mucho mas relajado y liviano al deshacerme del peso humano normal.
Mi vestido blanco se movía un poco con el viento al igual que mi cabello.
Comencé a caminar, mi cuerpo no sentía el frío, así que no me afectaba la brisa que congelaría a cualquiera.
— No veo rastros de otros Yōkais — Había varias almas en pena caminando por el mundo normal, pero no les di importancia.
Un extraño aura llamó la atención de mis ojos, para mi sorpresa, venía del mismísimo edificio.
Era un aura negra cubriendo un alma gris, había un espíritu atormentando a alguien allí dentro.
Quizás eso me de una pista.
Subí por la pared del edificio, podía caminar perfectamente por las paredes y techo como por el piso normal.
No era algo nuevo para mi.
Me acerqué a una de las ventanas, esta estaba entreabierta.
Me asomé para no ser descubierta, había alguien sentado en una cama que se sostenía la cabeza, ese aura negra estaba trepando por su espalda.
— No funciona ¡No sirve! — Decía para si mismo, el estrés lo estaba consumiendo.
Pobre chico , me pregunto que le sucede , abrí con cuidado un poco la ventana hasta poder apoyar mis brazos sobre el marco .
Tenía una guitarra acústica regada en el suelo, una de sus cuerdas estaba rota, parecía golpeada.
En el piso había muchas hojas, algunas hechas bollos y otras solo regadas
Miré hacia el chico , reconocí ese cabello y esa voz.
Era ¿Kei?
— ¡No puedo , maldita sea!— Chilló y apretó mas sus dedos contra su cabeza , desordenando su cabello con desesperación
Me dió un poco de pena ¿Que lo tenía así?
— ¿Que sucede? — Pregunté con la voz mas tranquila que pude poner con mi cabeza apoyada en mis brazos .
El se volteó con rapidez , mostrando que tenía los ojos algo rojos , se levantó sobresaltado al verme allí y se congeló.
— ¿Q-que eres ?— Preguntó con su labio inferior temblando y levanté mas la ventana con mi mano hasta poder pasar y sentarme en aquel marco de piernas cruzadas.
— Te hice una pregunta — Afirmé con gesto preocupado — ¿Por que estás así? Te ves muy mal.
El abrió mas sus ojos al verme en su ventana, supongo que era lo lógico.
No todos los días una chica aparece como si nada mirándote por la ventana de un cuarto piso.
— C–como es que…—Balbuceó retrocediendo unos pasos.
— Oye, se que es raro, pero no estoy aquí para hacerte ningún daño — Sonreí con amabilidad y el tragó en seco — Puedo ver tu alma atormentada, hay mucho estrés rodeándola.
Esa cosa estaba comiéndose su alma, no me agradan los espíritus malignos y menos los que hacen daño a la gente.
Kei simplemente me observaba sin decir nada, bajé de la ventana y puse mis manos en mi espalda dando pasos lentos hasta el
— Estas triste, puedo verlo, tienes una carga en tus hombros que te está sofocando — Ajusté mi vista mas hacia el , si quiero sacar esa cosa de su alma antes de que se la devore por completo, debe ser ahora.
— ¿Quien demonios eres tú? — Preguntó con una mirada sorprendida.
— ¿Yo? — Me autoseñalé— Soy solo un Yōkai, ahora quedate quieto ¿Si?
Este pareció ponerse peor con mi petición, retrocedió rapidamente hasta dar con la pared.
— ¡Vete de aquí! — Me ordenó tomando la escoba que estaba por allí .
Su alma ahora estaba siendo no solo atormentada, si no asustada por esa cosa.
Rei — Me recuerdas a mi madre — Señalé la escoba en su mano, el intento darme con ese palo y lo esquivé con facilidad — Oye ¿Por que me atacas?
Sin prestar atención a lo que yo decía, siguió intentando darme con aquella herramienta de limpieza.
Esto empezaba a sacarme la paciencia.
— Bien, ya basta de juegos — El palo pasó justo por encima de mi hombro y me moví con rapidez evitándolo y tomandolo con mi mano derecha, lo partí en dos con un simple apretón.
Kei me miraba estupefacto, que grosero.
Tomé sus brazos colocándolos a un lado acorralándolo contra la pared en un intento de que dejara de ser tan inquieto
— ¡Sueltame! — Gritó y tomé su boca con una de mis manos para que dejara de gritar.
— ¡Oye solo intento ayudarte! — Reí y levanté mi mano hasta su frente colocando mi mano en ella , Kei dejó de moverse con lentitud mientras parecía relajarse .
Los espíritus malignos simples le temen a los Yōkais, al mínimo contacto con el no dudará en desaparecer.
— Listo ¿Mejor? — Pregunté retrocediendo unos pasos, kei aún me miraba con sus ojos como platos.
Su alma ahora solo estaba gris, ese espíritu que lo atormentaba se había ido.
— ¿Q-que fue lo que me hiciste? — Preguntó , pude notar que ya estaba mucho mas tranquilo.
— Solo eliminé lo que te estaba enloqueciendo — Dije tranquila y me limité a dar una sonrisa leve—¿No te sientes mas tranquilo?
El miró a su alrededor y asintió con debilidad.
Se enderezó y se alejó de mi pegado a la pared
— ¿Que cosa eres?¿Como entraste aquí?¿Que quieres? — Preguntó dándome una mirada fija de desconfianza.
— Wow wow, demasiadas preguntas — Moví mis manos frente a mi y luego de unos segundos el se levantó donde yo estaba, con algo de duda , avanzó hasta mi y movió su mano frente a mi rostro para luego pellizcarse.
Dió un quejido de dolor y no pude evitar reír por su acción.
— ¿Acaso eres idiota? — pregunté sosteniendome el estómago.
— No estoy soñando…? — Se preguntó a si mismo y negué.
Hubo un silencio incómodo y derrepente movió su cabeza de lado a lado.
— ¿Quien eres tu? — Preguntó en tono tranquilo y me senté en el aire flotando con serenidad.
— Soy un Yōkai, mucho gusto — Sonreí y extendí mi mano hacia el en forma de saludo.
— ¿Yōkai? — Preguntó sin aceptar mi mano— Esas cosas no existen, son solo mitos japoneses.
— Oye no seas grosero — Me crucé de brazos— Estoy aquí parada frente a ti ¿Aun me crees falsa?
Pareció dudarlo unos momentos y volvió a retroceder, no había duda que estaba siendo precavido.
— ¿Y que quiere un ser maligno como tu conmigo?
Su mirada demostraba enojo y desconfianza.
No soy de las personas que se molestan con facilidad, pero esto si que me fastidiaba
— En primer lugar, no todos los Yōkais son malignos y en segundo lugar , ese estrés que estabas sintiendo, era un espíritu maligno que buscaba comerse tu alma — Sonreí como si estuviera hablando de cocinar una pizza.
Kei solo me observaba estupefacto, parecía aún no creer lo que estaba sucediendo.
Vi hacia a un lado, esta habitación estaba muy desordenada, levanté uno de los papeles del suelo, había una melodía escrita en el , pero estaba arruinada por varios garabatos que parecían querer tacharla
Kei caminaba de un lado a otro en la habitación hablando solo, pensaba demasiado las cosas, a decir verdad, yo solo recogía los papeles que no estaban arruinados leyéndolos sin darle importancia a lo que decía.
— Esto no puede ser real, tengo que estar soñando ¿Tomé alcohol? No, ¿Fumé algo extraño? No, yo no hago esas cosas, quizás esto es solo producto de mi imaginación y luego voy a despertar en casa de shoya con la cara pintada..
— ¿Terminaste de decir idioteces? — Pregunté cubriendo su boca con mi mano, sin duda, era hartante su forma tan seria de pensar y analizar las cosas, no es como si le hubiera dado una "gran explicación " no tengo permitido eso, pero diablos que estaba armando una puta biblia con solo dos palabras.
— Ahora escucha, debes calmarte — Le dije sin quitar mi mano de su boca — Si, soy un ser sobrenatural, no estas soñando, no estas drogado, ni nada ¿Podrías solo guardar silencio?
Se mantuvo quieto unos segundos mientras tenía su mirada clavada en mis ojos, parecía haberse perdido.
Luego de unos segundos asintió y quité mi mano de su boca siguiendo leyendo aquellos papeles mientras el se sentaba en la cama.
— ¿Esto es lo que te tenía triste? — Le extendí los papeles y el apartó mi mano bruscamente.
Su alma pasaba de gris, a ponerse color negra, su depresión y estrés estaba volviendo.
— No necesito eso , no sirve — Susurró mientras frotaba sus ojos.
Estaba cansada de su seriedad, me puse en cuclillas a su altura
— Veamos que sucede aquí
Tomé su barbilla con mi mano obligándolo a mirarme y fijé mi vista en sus ojos
Atravesando su alma, pude ver sus recuerdos antes de que yo llegara.
Narra Kei.
Es la primera vez que siento tanto miedo
¿Un yōkai? según la mitología japonesa son demonios
No creo que traiga nada bueno, pero, tengo que aceptar que estaba muy pero muy estresado, sentía mucho calor e incluso rompí una de las cuerdas de mi guitarra de práctica.
Segun la Yōkai , tenía un espíritu maligno encima, no se si eso sea creíble, estaba estresado , no creo que eso tenga nada de sobrenatural.
¿o si ?
Bueno, ella desvaneció ese estrés con un solo toque de su mano en mi frente.
Me sentí mas tranquilo y liviano , pero no creo que sea por eso.
Es imposible.
Ella no puede ser una Yōkai, pero debo admitir que su apariencia hace mas creíble esa teoría.
Su piel es mas pálida que la de cualquier ser humano, diría que es albina, pero eso no es posible, no tiene las características de una.
Su cabello es muy muy largo y negro, es muy bonito , quisiera saber si es real…
Que estoy diciendo, es obvio que es real.
Creo que no miente cuando dice que es un Yōkai, ¿Que ser humano flota y camina por las paredes?
Además, lo que mas me perturba de ella son esos extraños ojos color carmesí, tan grandes y tenebrosos, por lo que veo, no se trata de lentillas como las de Yo-ka.
No, esto es mucho mas peligroso.
¿Será que vino a matarme?
No lo creo, ¡pero que extraño es esto!
Ella se separó de mi y puso un gesto de preocupación sentándose en el suelo.
— Ya veo — Suspiró y alcé una ceja sin entender— Estabas triste por que no puedes componer tu música ¿verdad?
Me quedé estupefacto , un escalofrio recorrió mi espalda.
¿Como es que sabe eso? ¿Acaso los yōkais pueden ver recuerdos?
Ell se levantó y recogió las hojas una por una , caminó por toda la habitación leyendo las letras muy atentamente.
— Haber, eso es un acorde así que sería …— Parecía pensar en aquellas letras y comenzó a tararear la melodía que había compuesto.
Tenia un tono de voz muy alegre y bonito, hacía ritmo con sus manos chasqueando sus dedos.
— Kei–chan — Me sobresalté — ¿Podrías tocarla para mi?
Narras tú.
La melodía que había compuesto sin duda era muy hermosa , aunque demasiado triste a mi parecer.
Su corazón estaba tiñiendose de negro con lentitud por la tristeza que lo inundaba.
Si quería limpiar aquel corazón, debía alegrarlo de la mejor manera que conozco
¡Alegrándolo!
— No voy a hacer eso, esa melodía es basura
Su vista fue al suelo otra vez, no tenía intenciones de cambiar su ánimo.
— No es basura — Me levante del suelo y subí a su cama dando ligeros saltitos— es muy bonita ¿Por que no te gusta?
Pareció pensar su respuesta unos momentos y luego soltó un suspiro
— La música antes me hacía feliz, ahora solo me deprime — Di un último salto y pegué mis pies al techo quedando boca abajo — No le encuentro sentido a melodías inútiles sin letra ni significado
— Yo te ayudaré — Kei dió un pequeño salto cuando bajé mi rostro de golpe hasta estar boca abajo a unos centímetros de el — Me gusta ver feliz a la gente.
Kei me miraba estupefacto y aún con desconfianza , miré a mi alrededor, caminé por el techo y volví a leer las hojas.
Había otra guitarra sana, la atraje hasta mi usando los poderes de los yōkais y se la di a kei.
— ¿Que harás?
Preguntó alzando una ceja
— Ayudarte — Sonreí — ¿Confiaras en mi?
Kei dudó unos segundos y suspiró asintiendo de mala gana.
Comencé a tararear la melodía que Kei había tocado, pero a un ritmo un poco mas acelerado, Kei tuvo dificultades para adaptarse, pero siguió mi ritmo , la que antes era una melodía triste y deprimente, ahora era un feliz prototipo de canción.
Narra Kei
Ella aceleró la melodía que había compuesto, agregándole estrofas mucho mas alegres.
Me sentía extraño y mucho.
Ella cantaba con tanta alegría a pesar de la mitología que la hacía ver completamente distinta
Sentía un sentimiento de felicidad en mi pecho e incluso comencé a seguirla tarareando a su ritmo mi propia canción
No podía creerlo , podía sentirlo, la música volvía a hacerme feliz.
Rebotaba en mis oídos y mis manos se movían tocando notas en mi guitarra que formaban aquel hermoso instrumental
Incluso llegué a sonreír sin quererlo, su voz me alegraba completamente.
No recordaba cuando había sentido esa chispa de felicidad que me genera la música, ahora todos los sentimientos que había perdido volvían a mi.
( • • •)
— Fue divertido — Declaró soltando una pequeña risita sentada en la ventana.
— Nunca pensé que los Yōkais fueran tan distintos a como los describen en los libros — Dije sentado en mi cama
— Nunca debes creer todo lo que te dicen, los humanos son muy malvados en el fondo de su corazón , no todas las criaturas tienen motivos crueles ni son como las describen.— Parecía triste al decir eso, aunque esa sonrisa no se borraba de sus rojizos labios.
Ella miró hacia atrás , contemplando la bella luna que se veía a través de mi ventana.
Un ligero viento que entraba por esta agitó un poco su blanco vestido y su cabello tan opaco.
Aún no me creo que esto este pasando, siento que despertaré y nada de esto habrá pasado.
Estos extraños seres, no tienen motivos malvados.
Al menos no ella…
— Es hora de irme — Suspiró y me sonrió dispuesta a irse por la ventana— Fue un gusto, Kei–chan.
— ¡Espera!— Alzé la voz y fui hasta ella tomando su mano —… No te vayas
Ella me observó sorprendida por unos segundos para luego dedicarme una pequeña risita y sonreír.
— No puedo quedarme aquí — Soltó mirando el suelo— este no es mi mundo
Debo admitir que una leve sensación de tristeza invadió mi corazón que habia sido alegrado en aquellos momentos.
Miré su mano, estaba algo fría, la tomé entre las mias sin saber por que y levanté la vista hasta ella.
— Al menos…¿Podrías decirme tu nombre?
Pareció congelarse ante mi pregunta, no creí que los demonios sintieran miedo.
Ella rió tiernamente y acarició mi mejilla con su mano.
—Eso no es algo que pueda decirte ahora, Kei–chan — Susurró— Pero, algún día lo sabrás…
Retiró su mano de mi mejilla con lentitud y tragué en seco cuando salió por mi ventana y la cortina blanca del marco de la ventana flotó con brusquedad, producto de una brisa fría que había pasado por allí.
Para evitar el viento cubri mi rostro con mis antebrazos y al bajarlos cesando la brisa, ella había desaparecido.
Miré hacia todas las direcciones por la ventana, no había rastro alguno de ella.
Un ligero vapor salió de mis labios mezclando mi respiración con el frío de la noche, miré al cielo una vez mas .
Una serie se pensamientos se mezclaban en mi cabeza mientras tenía mi mano derecha donde había sentido el calor de ese extraño ser sobrenatural.
"Temperamental"
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