Dedicación especial a Cazador104 quien ganó en la dinámica de mi fanfic "La voz de un Ángel", espero que te guste.

PD: La imagen que me mandaste para la portada me encanto

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Mi nombre es Midoriya Izuku y tengo 15 años. Hoy comienza mi nueva vida en la prestigiosa Academia de Héroes UA. Todo gracias a All Might, quien me dijo que podía convertirme en un héroe, porque creyó en mi y me heredó su poder, de no ser por él mi sueño no seria realidad.

Estaba por terminar de vestir mi uniforme, solo faltaba mi corbata, la tome de mi escritorio y mi vista se dirigió hacia la fotografía que tenia en este. En ella podía verme al lado de mi mejor amigo: Todoroki Shouto.

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Todoroki-kun y yo nos conocimos a la edad de 7 años. Mi madre y yo habíamos ido a visitar a una amiga de ella quien vivía a unas cuantas cuadras de mi casa y quien acababa de tener un bebé. Mientras mi madre se encontraba enmaravillada con el bebé y hablaba con su amiga yo me encontraba en el pequeño parque que estaba frente de esa casa.

Estaba jugando en uno de los columpios cuando vi que una joven que parecía ser de preparatoria por su uniforme caminaba y volteaba en varias direcciones como si estuviera buscando algo. Yo me acerque algo tímido a ella.

- Disculpe Oneesan. ¿Le sucede algo?

- Eh? Hola pequeño. - Ella se inclinó hasta llegar a mi altura - Estoy buscando a mi hermano menor. Es más o menos de tu edad. Suele venir a menudo a este lugar, ¿lo has visto? - La joven me describía la apariencia de su hermano.

- No lo he visto, pero puedo ayudarla a buscarlo Oneesan.

- ¿De verdad? Muchas gracias pequeño...

- Izuku. Me llamo Midoriya Izuku.

- Yo soy Todoroki Fuyumi y el nombre de mi hermano es Shouto.

Estuvimos buscando por unos minutos hasta que logré encontrarlo arriba de un árbol. Sonreí por mi logro pero mi sonrisa se borró rápidamente al verle el rostro. Sus ojos estaban hinchados y tenia una mirada triste.

- ¿Estas bien, Todoroki-kun? - Dije logrando captar la atención de aquel niño.

- ¿Como sabes mi nombre? - Dijo viéndome sorprendido y yo me quede estático al verlo mejor. Tenia unos ojos bonitos, bicolor al igual que su cabello y una cicatriz en sobre su ojo izquierdo. Era como Oneesan lo describió pero al verlo en persona solo pude pensar una cosa: "Es muy lindo".

Le explique que su hermana lo buscaba. Al parecer no quería volver a casa. Después de unos minutos logré convencerlo de volver con ella. Todoroki-oneesan se veía aliviada de ver a su hermano.

- Me dio gusto conocerte Todoroki-kun y también a Todoroki-oneesan Me gustaría verlos de nuevo. - Exprese con una gran sonrisa.

Ella tomó una libreta y un bolígrafo de su mochila y anotó algo en un pedazo de papel que me entrego después. Era un número de celular.

- Midoriya-kun. Me gustaría que tú y Shouto hablaran de vez en cuando. Este es el número  de mi celular, cuando quieras hablar con él no dudes en llamarme. ¿Verdad Shouto? - Todoroki-kun asintió tímidamente ante lo dicho por su hermana.

Yo tomé la nota con una gran emoción. Me despedí de ellos y volví con mi madre con una enorme sonrisa por haber hecho un amigo.

Desde entonces nos hicimos los mejores amigos. Salíamos pocas veces con ayuda de su hermana debido al entrenamiento de su padre, a quien mantuvimos nuestra amistad en secreto, pero hablamos casi todos los días.

Desgraciadamente en el otoño de nuestros 10 años su padre nos descubrió y lo llevó lejos. Perdí toda comunicación con Todoroki-kun y con su hermana. Cuando partió un gran dolor y una gran tristeza me inundó, no entendía en ese entonces el porque.

Mi madre me ayudó a sobrellevar el hecho de que ya no tenia a mi amigo, desahogaba mis lágrimas con ella y le confesé lo mucho que me afectaba. Gracias a sus consejos y a sus palabras con el tiempo me di cuenta...

Me había enamorado de Todoroki-kun.

Mi madre lo aceptó y me apoyó. Me daba ánimos para no caer, siempre me decía "algún día volverán a encontrarse" y yo me aferré a esa esperanza.

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- Este es mi primer paso para convertirme en un héroe, Todoroki-kun. - Dije con mi vista aun en la fotografía para después tomar mi mochila y salir de mi habitación. Después de desayunar me despedí de mi madre y emprendí mi camino.

Al llegar a la enorme puerta del salón y abrirla pude ver que Kacchan se encontraba ahí. Me presente con dos chicos a quienes conocí el día del examen, Iida-kun y Uraraka-san.

De un momento a otro sentí una mirada sobre mi, busqué con la vista a la persona que me miraba y al encontrarla mis ojos, al igual que los suyos, no cabían en su sorpresa, mi corazón comenzó a latir tan fuerte que sentía que saldría de mi pecho.

"Algún día volverán a encontrarse"

Las palabras de mi madre sonaron en mi mente. Ella tenia razón, nos habíamos encontrado.

- T-tod...

- Si quieren jugar a los amigos, vayan a otro lado. - Me detuve al escuchar esa voz. Era de un hombre que se encontraba en una bolsa de dormir. Salió de ella y se presentó como Aiwasa Shota, nuestro maestro y tutor de clase.

Nos mando a vestir los uniformes deportivos diciendo que haríamos pruebas físicas con nuestros kosei.

En los vestidores algunos comenzaron a hablar entre ellos, la mayoría estábamos en silencio ya que aun no nos conocíamos. Yo en cambio, ya estaba vestido, solo me faltaba ponerme la chaqueta, pero me encontraba observando la figura de Todoroki-kun. Seguía sin creerlo todavía, finalmente volvía a verlo. Se estaba quitando la camisa del uniforme escolar y pude apreciar parte de su espalda y abdomen dado que estaba de perfil, no podía verlo por completo pero a leguas se notaba que estaba bien trabajado. Trague duro ante el pensamiento que paso por mi mente: "Que atractivo".

Sacudí de un lado a otro mi cabeza para quitar esos pensamientos. Para cuando volví de mi "trance" él ya estaba vestido y me miraba a los ojos con una expresión un poco mas seria de lo que recordaba, debe ser porque ya hemos crecido.

Intentó caminar hacia mi pero fuimos interrumpidos por Iida-kun, quien nos decía que ya debíamos estar en el área de entrenamiento con los demás. Al parecer no nos dimos cuenta cuando todos se habían ido de los vestidores. Yo algo nervioso me disculpe con Iida-kun y me retiré.

El día paso entre diversas pruebas físicas que fueron difíciles para mi, ya que no podía controlar el poder del One for All. Solo pude utilizarlo en la prueba del lanzamiento de pelota en donde me termine con un dedo roto. No negaré que el día fue emocionante y a la vez estresante.

Ya habían terminado las clases, estaba saliendo de la enfermería. Había ido a que Recovery Girl curara mi dedo y a descansar un poco. Ya todos se habían ido a sus casas después de este inesperado primer día de clases. Caminé al salón para recoger mi mochila e irme a mi casa. Al abrir la puerta del salón descubrí que no estaba solo, había una persona sentaba en su pupitre, Todoroki-kun.

Nuevamente nuestros ojos se encontraron y mi corazón volvió a latir descontroladamente.

- ¿Realmente eres tú, Todoroki-kun? - Fueron las palabras que pude decir apenas se fue el nudo que había en garganta.

- En verdad me sorprendiste hoy, Midoriya. - Mi piel no pudo evitar erizarse al escuchar su voz. Era tan diferente de lo que recordaba, era más gruesa y... atractiva.

Ya no había dudas. Realmente ese era Todoroki Shouto, mi mejor amigo y el chico del que estaba perdidamente enamorado. Corrí inconscientemente hacia él y lo abracé, siendo correspondido.

- ¿Donde estuviste todo este tiempo? ¿Cuando volviste? ¿Porque no me buscaste? - Bombardeé de preguntas a Todoroki-kun mientras intentaba inútilmente retener mis lágrimas. A estas alturas ya no sabia si lloraba de alegría o tristeza ya que tenia demasiados sentimientos encontrados en ese momento.

- Lo siento, por culpa del maldito viejo llegue ayer en la noche a casa. Y en cuanto al lugar donde estuve, no es algo que quiero recordar por ahora. - Todoroki-kun me abrazaba cada vez más fuerte.

Nos quedamos perdidos es ese abrazo por varios minutos. Ya me encontraba más tranquilo y ahora podía disfrutar de la alegría de volver a ver a Todoroki-kun.

Ya se estaba haciendo algo tarde y la escuela prácticamente se encontraba vacía. Ya no podíamos quedarnos mucho tiempo. Con pocas ganas nos separamos, tomamos nuestras mochilas y nos dirigimos a la salida de la escuela.

Comenzamos a hablar como solíamos hacerlo o al menos yo, ya que Todoroki-kun nunca ha sido precisamente del tipo de personas que conversan mucho. A cada paso que dábamos sabíamos que pronto tendríamos que ir cada uno a su casa pero era algo que aun no quería. Yo quería estar más tiempo con Todoroki-kun y él parecía compartir mi deseo.

Justo en el punto donde teníamos que separarnos nos quedamos quietos, ninguno de los dos quería dar el primer paso para separarse. Aunque me dolía la sola idea de irme no podía obligar a Todoroki-kun a estarse conmigo más tiempo, después de todo no quería causarle problemas con Endeavor.

- B-bueno Todoroki-kun será mejor que nos... E- espera ¿Q-que haces, Todoroki-kun? - Un gran sonrojo se apoderó de mi cara y me puse realmente nervioso. Todoroki-kun me tomó de la mano y comenzó a caminar hacia otra dirección.

- Aun no. Hay algo que debo hablar contigo. -  Dijo para después detenerse repentinamente y volvió a hablar sin verme. - Por favor. Es importante, Midoriya.

El tono de su voz al final sonó de alguna forma "suplicante" por lo que apreté ligeramente la mano con la que me tomaba y acepte aun sonrojado.

Después de caminar un poco llegamos hasta un pequeño parque y nos sentamos bajo un gran árbol que se encontraba en medio de este. Hasta ese momento nuestras manos se separaron.

Nos quedamos unos minutos en silencio, se sentía algo incomodo. Yo aun sentía la suavidad de la mano de Todoroki-kun sobre la mía. Sentía una alegría enorme en mi pecho al recordarlo.

- Midoriya. - Salí de mis pensamientos cuando me llamo y dirigí mi vista hacia él. - Perdóname. Por mi descuido el maldito viejo nos descubrió y me llevó lejos.

- Eh? ¿De que hablas, Todoroki-kun? - Dije en un tono preocupado, tomándolo del hombro - No puedes culparte por lo que pasó. Ambos sabíamos que no podríamos ocultarlo de Endeavor por siempre. Y nunca hubiéramos imaginado que llegaría al grado de llevarte lejos. Yo no te culpo de nada así que por favor, no te culpes a mi ti mismo.

- G-gracias, Midoriya. - Todoroki-kun tenia la misma expresión de tristeza como el día en que lo conocí. - No sabes cuanto de te extrañe.

- Y yo a ti. - Dicho eso nuestros ojos se encontraron. La presión en mi pecho crecía cada vez más. Mi corazón pedía a gritos que le confesara mis sentimientos a Todoroki-kun, pero tenia miedo. Miedo de ser rechazado. Ansiaba tanto volver a verlo que tenia miedo de que si me confesaba se iría nuevamente. No toleraría perderlo de nuevo. Y por ese miedo rompí el contacto de nuestras miradas. - ¿Que era eso importante que querías hablar conmigo, Todoroki-kun?

- Midoriya... yo... y-yo... - Todoroki-kun bajo su mirada y se veía asustado.

Tal vez lo que quería decirme era algo delicado. Tal vez lo que quería decirme era que... se iría de nuevo...

Un gran miedo me invadió.

- No vuelvas a irte. - Solté aferrándome de la manga de su chaqueta, bajé mi mirada ya que algunas lágrimas escapararon de mis ojos. - No vuelvas a irte, Todoroki-kun. No puedo soportar no verte de nuevo. N-no puedo...

- No me iré. Incluso si el maldito viejo me quiere alejar no me iré. P-pero... Midoriya, yo... - Temía que dijera algo que me rompiera y por impulso me aferré aun más fuerte a su ropa.

Ya no escuché la voz de Todoroki-kun, no sabia que hacer pero de pronto sentí su mano tomar mi mentón y me levanto el rostro. Al elevar mi vista pude ver el rostro de Todoroki-kun extremadamente cerca del mio, con los ojos entrecerrados, y al final juntando sus labios con los mios es un suave y dulce beso.

Mis ojos se abrieron como si fuesen a salirse. No podía creerlo. Todoroki-kun me estaba besando. Sus labios eran tan cálidos y suaves.

El beso duró unos cuantos segundos. Segundos en los que me sentía en el cielo. Segundos que fueron eternos para mi.

Al separarnos él bajo su mirada, no podía ver sus ojos pero podía ver el tono rojizo que adornaban sus mejillas.

- Estoy enamorado de ti, Midoriya. Me di cuenta que te quería el día que nos separaron, y me prometí que cuando te encontrara te confesaría mi amor. A-aunque eso significara que tú... llegaras a odia... - Esta vez fui yo quien levantó su mirada y juntó nuestros labios en un nuevo beso.

Todo esto parecía un sueño, uno del que no quería despertar jamás.

Al ser inmediatamente correspondido nuestro segundo beso, duró más tiempo que el primero. No queríamos terminarlo pero no pudimos evitar separarnos. Al hacerlo junté su frente a la mía y tomé sus mejillas con ambas manos, yo estaba con los ojos aun cerrados.

- Te quie... no. Te amo, Todoroki-kun. Jamás pienses que podría odiarte. No después de saber que tú también me amas.

- Gracias. - Decía entre pequeños sollozos mientras tomaba mis manos que aun sujetaban su rostro. - Tenia miedo de que me rechazaras. Gracias. Te amo, Midoriya.

Sellamos nuestras confesiones con un nuevo beso en el cual yo envolví mis brazos en su cuello y él envolvió los suyos en mi cintura, en ese beso donde mostrábamos que había verdad en nuestras palabras.

Y ese solo era un beso de los muchos que llegaríamos a darnos de ahora en adelante...

~FIN~

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Lo se, esta largo, pero espero que les haya gustado.

Cazador104 espero que te haya gustado. Y que haya quedado bien con la imagen.

Los amo. Plus Ultra!!!