Capítulo 21

Taehyung

Me muerdo el pulgar nervioso y me quedo mirando la puerta, no hay otro lugar donde pueda ver en estos momentos. Ya son las tres de la tarde y Yoongi no regresa, siento que me estoy muriendo. Me cubro bien con su sudadera, quiero estar con él, siempre viene y se recuesta conmigo, su camisa y sudadera no son suficientes.

— ¿quieres que vaya a buscarlo?

La voz de Hoseok me hace dar un pequeño salto, lo miro y se ve igual de preocupado. Incluso para él es extraño que Yoongi no haya regresado temprano, es una rutina de todos los días, incluso si sigo durmiendo él viene y entra a la cama conmigo.

— ¿crees que le pasó algo? – mi voz esta llena de preocupación.

— No creo, TaeTae – se sienta junto a mi – seguramente le pidieron que se quedara.

— ¿tanto tiempo? – siento mi respiración acelerarse ― ¿y por qué no me responde las llamadas? Yoongi siempre responde aunque este trabajando.

— ¿y si se quedó dormido en su departamento? Recuerda que siempre se va a su departamento y vuelve en las mañanas – dice serio.

— El nunca hace eso – me estoy desesperando – siempre viene y se recuesta conmigo y ambos dormimos mejor.

— Voy a buscarlo – se levanta – sus estarás más tranquilo.

— Iré contigo – me levanto y empiezo a caminar hacia él.

No puedo quedarme aquí sentado mientras mi alfa está ahí afuera herido, quizás hasta le pasó algo peor, si tan solo estuviéramos enlazados sobria donde está; así nunca dejaríamos de comunicarnos.

— No – me toma de los hombros y me detiene – tu te quedarás aquí, a Yoongi no le gustaría que fueras a ese bar.

— Pero...

— Yoongi no querría eso, entiende, Taehyung – insiste — si te llega a pasar algo jamás nos lo perdonariamos.

— Es mi Alfa, Hobi – digo desesperado – mi Alfa, quiero estar con él, déjame ir contigo a buscarlo. Siento que me vuelvo loco si sigo aquí.

Hoseok me mira un momento y suelta un largo suspiro. Se que está pensando en mi seguridad, pero no puedo quedarme aquí, quizás pueda ayudar; necesito tenerlo cerca, no puedo pasar tanto tiempo sin Yoongi.

— No tengo opción – se rasca la cabeza – vamos.

Ambos nos ponemos los zapatos y caminamos hacia la entrada ¿Dónde estará Yoongi? Y una vez más me maldigo por no estar enlazado con mi alfa.


Entramos al bar y esta casi vacío, excepto por unos Alfas y betas que están en la barra, todos ellos están riendo y bebiendo un poco; pero no veo por ningún lado a Yoongi. Con nerviosismo nos acercamos a ellos.

— Disculpen – llamo su atención ― ¿Min Yoongi esta aquí?

— ¿y tu quién eres? – un hombre corpulento me mira con recelo.

— Soy su Omega – dijo serio y rodeo mi vientre con mis brazos ― ¿está aquí?

Yoongi me había contado que su jefe era un completo idiota, estoy seguro que este hombre no se compadecera mi ni aunque estoy embarazado. Yoongi no quiere dejar este trabajo porque dice que ese dinero es para nuestro cachorro.

— El se fue antes – dice con una sonrisa torcida – tuvo que hacer algo.

¿Antes? No, este hombre miente, Yoongi me hubiera avisado, el vendría a mi si saliera antes; jamás me deja de lado. Doy dos pasos hacia atrás y mi espalda choca contra el pecho de Hoseok.

— Vámonos – me toma del brazo y salimos del lugar.

Cuando estamos afuera empiezo a caminar directamente hacia el departamento de Yoongi, seguramente ahí haya una pista de donde podría estar mi alfa; HoSeok me sigue de cerca, sé que me quiere decir algo, pero en estos momentos mi mente no está para recibir palabra alguna. Caminamos durante unos minutos hasta que Hoseok me detiene por el brazo y me obliga a mirarlo.

— ¿crees que este en su departamento? – su voz es muy seria.

— No lo sé – muerdo mi labio inferior – espero que si, no quiero pensar que le paso algo.

— Él esta bien – acaricia mi cabeza – eso es seguro, es un Alfa fuerte.

Espero que Hobi tenga toda la razón, Yoongi debe estar bien, de solo imaginar que no lo está; mis ojos se llenan de lágrimas.

Yoongi

Me despierto con un poco de dolor de cabeza, siento un peso encima de mi y estoy a nada de rodear con mis brazos a la persona que esta sobre mi, pero me detengo al momento que el aroma a lirios llega a mis fosas nasales. Abro los ojos de golpe y veo a Suran durmiendo sobre mi, desnuda.

—¿qué mierda? – digo en tono fuerte.

Ella se remueve un poco y ahora soy más consciente de que mi pene está dentro de ella. ¿Qué hice anoche?  Salgo de su interior, la empujo sin delicadeza sobre la cama y me levanto de esta.

— ¿qué te pasa? – se queja cuando el golpe la despierta.

— ¡¿Qué mierda haces aquí, Suran?! – grito enojado.

— ¿no es obvio? – se acomoda en la cama y sonríe – entraste en celo anoche y tuvimos mucho sexo.

— Eso no es verdad – la miro enojado – mi celo es en una semana.

— Pues no – se levanta y camina hacia mi – no después de una cerveza.

¿Cerveza? ¿De qué habla? De un momento a otro recuerdo lo que sucedió antes de que quedará inconciente, aquel tipo me dio una cerveza y al poco tiempo me empece a sentir mal.

— Lárgate – siseo – te dije que no te quería cerca.

— Yoongi, si todo sale exactamente como lo planee yo quedare embarazada — dice con alegría – y tu podrías que darte conmigo.

— No – doy un paso hacia atrás y la miro enojado – yo no quiero estar contigo, yo estoy con Taehyung, él es mi omega.

— ¡¿QUÉ TIENE ESE IDIOTA QUE NO TENGA YO?! – empieza a gritar como loca ― ¡SOY MÁS BONITA! ¡MI AROMA ES MIL VECES MEJOR!

— ¡NO LO ES! – me acerco a ella amenazante – no te compares con Taehyung, tu no eres ni su sombra.

Suran me toma del rostro y me besa, intento alejarla, pero me empieza a morder el labio inferior. Si la llegó a lastimar sería capaz de decirle a la policía que la golpee y abusen de ellas; no puedo permitir que me aparten de está forma de Taehyung.

— ¡Yoongi!

Empujo a Suran y veo a Taehyung en la puerta de la habitación. Sus ojos están llenos de lágrimas y rodea su vientre con sus brazos. Hoseok está atrás de él con los ojos muy abiertos.

— No es lo que tu crees – avanzo hacia él – ella...

— Te acostaste con ella – varias lágrimas caen y mira detrás de mi — en nuestra cama.

No, no, no, tuvimos sexo en la cama que comparto con él, le juré que nadie había estado ahí. Solo él, era él único con quien estaría ahí; pero ahora no es así.

—  Bebé, por favor escúchame – intento acercarme a él, pero retrocede – déjame explicarte todo.

— Yo lo haré – habla Sura – lo que pasa es que Yoongi paso su celo conmigo.

— No es verdad – digo desesperado – no es verdad Taehyung, yo...

Antes de que pueda dar un paso hacia él, Taehyung suelta un sollozo y sale de la habitación con Hoseok detrás de él. Voy trás de él, no me importa ir desnudo, en estos momentos debo explicarle todo lo que sucedió.

— cariño, ven– lo llamo – escúchame.

— ¡TE ACOSTASTE CON ELLA! – se da la vuelta y me mira dolido – en nuestra cama.

—Escúchame – suplico – anoche yo estaba en la barra por mi cambio de turno y mi compañero me dio una cerveza y yo...

—  ¿quieres que crea que te drogaron? – se limpia las lágrimas.

— Es que solo eso es lógico – digo desesperado – mi celo es en una semana.

— no es verdad, él quiere tener un bebé conmigo.

Escucho la voz de Suran atrás de mi, me giro a verla y tiene mi camisa puesta, está loca solo está buscando más formas de herir a Taehyung, lo peor es que él no quiere escucharme.

— Un bebé deseado – se mofa – no como el tuyo.

Taehyung rodea con más fuerza su vientre y gruñe en dirección a Suran.

— No te metas con mi cachorro – sus pupilas se dilatan.

— Suran – digo enojado – vete.

— Pero si aún estoy lista para...

¡toma tus cosas y lárgate Suran!

Suran baja la mirada y camina de regreso a mi habitación, me tarde en hacer eso, pero ya no la soportaba. Volteo y veo a Taehyung igual con la cabeza abajo, me acerco un poco a él.

— Bebé, por favor – suplico – créeme.

Taehyung levanta la mirada con sus ojos llenos de lágrimas y niega con la cabeza.

— Yoongi, me llevaré a Taehyung – Hoseok por fin habla – será lo mejor para él y para el cachorro.

— Hoseok – intento detenerlo — por favor, deja que le explique.

— Después, Yoongi – me da una pequeña sonrisa.

Toma el brazo de Taehyung y salen. Me acerco a la pared, empiezo a golpearla y grito de frustración. Mi Omega... y mi cachorro, no los quiero perder.

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