Había estado esperando que pasarán estos dos días y por fin hoy acabaría mi tortura, hoy era el día en el que se ponen de acuerdo amabas familias, para cerrar el contrato.
Ayer mande a JiMin con los señores Park para que ellos lo llevarán al restaurante en donde habian quedado con nuestros padres.
Estoy conduciendo rumbo a aquel dichoso restaurante francés, me tomó más amamos unos minutos en llegar al dichoso lugar; estacione mi auto y salí para dirigirme a recepción. Es un restaurante muy elegante y fino así que se ocupa tener reservado algún lugar.

-Buenos días, a que reservación?. -el sujeto miraba su lista sin prestarme atención en lo absoluto.

-Jeon.

-Sigame. -salió de su lugar y al entrar al restaurante me mostro aquella mesa en donde dibisaba a mis padres, JiMin y los padres falsos de el.

Aquel chico que me indicó los lugares se retiró. Avance asta llegar a ellos.

-Buenos días. Disculpen la tardanza. -hice una pequeña reverencia y me senté al lado de jiMin.

Ellos ya habían ordenado minutos antes de que yo llegará, pues me dio la impresión por que el mesero se encontraba trayendo los platos de comida y poniendolos en nuestros respectivos lugares.
Desayunamos entre pláticas y más pláticas, la estábamos pasando muy bien todo era realmente bueno para ambas familias y eso me agradó. Después de unos minutos terminamos de desayunar y el mesero bino por los platos vacíos.

-Este es el documento. -mi padre saco varias carpetas y las puso sobre la mesa. -tomen -no las entregó a cada uno. -JiMin y Jungkook las van firmar en este momento, ya que esto demuestra la unión de nuestras familias.

Nosotros por nuestra parte nos dedicamos a leer el contrato un momento para luego firmarlos.

-Listo todo está echo. -sonrió el señor Sejong Park. -ahora sólo falta llevar a cabo la boda.

-Hemos pensado que sea lo más pronto posible. -sugirió mi padre.

-Haci debe ser. -asintió Sejong.

-Si ya quiero ver a nuestros hijos casados. -sonrió yuwi la señora Park.

-Es verdad. -mi madre también la apoyo.

-Entonces no se diga más, la boda será en una semana. -esta vez volvió a hablar Sejong.

-Estoy de acuerdo. -apoyo mi padre.

Me quedé un poco atontado escuchando sus conversaciones pues no me esperaba que todo fuera pensado por ellos: haci que nuestra boda será en una semana y ya no hay nada que hacer, todo será echo por ellos. Sin decir nada solo me levante de mi asiento y salí para dirigirme al pequeño balcón que se encontraba a unos metros de nosotros.
Me incline un poco en los barandales y pose mis brazos en ello, suspire dejando que todo flullera dentro de mi. Obserbaba las calles mientras estas eran transitadas por automóviles de todo tipo...
Me quedé atrapado en mis pensamientos, pero algo me hizo reacciónar de golpe pues una mano había sido posada en mi nombro.

-Veo que piensas en muchas cosas. -su tierna y dulce voz me calmó. JiMin miro hacia donde me encontraba observando.

-¿Tu no? -seguía con la mirada a esa dirección.

-Si pero.... Creo que es mejor la triste realidad a reusarte a hacerlo. -se en cojio de hombros.

-Tienes razón. -ladee la cabeza para verlo.

-Espero que nos sigamos llevando bien como asta ahora, por que realmente no quiero caerte mal.

-Tranquilo eso no pasara.

-Me alegro Hyung.

Dicho esto regresamos a la mesa en donde los adultos se encuentraban platicando muy animadamente y no queríamos interrupirlos, haci que solo tome la mano de jiMin y salimos de ahí.

-Caminemos Hyung~. -pidió el menor.

-Esta bien.

Tome de su mano y lo lleva a caminar por unas cuadras más abajo mientras conversabamos de nosotros mismos. La mañana estaba fresca y el aire que corría era algo acogedor pues no estába ni tan frio, ni tan caliente, más bien era un clima perfecto bueno para caminar y dar un paseó.

-Hyung puedo preguntale ¿algo?.

-Claro.

-Cuantos años tiene?... -rei ante su pregunta.

-Tengo muchos años. -seguíamos avanzando.

-Pero exactamente cuantos años Hyung. -lado su cabeza para mirame y esperar una respuesta mía.

-Exactamente 24 años.

-Woww Hyung y no se le nota. -río.

-Eso fue una burla. -lo mire y arquee una de mis cejas.

-No Hyung. -siguió riendo.

-Aver cuantos años tienes tu?...

-Tengo..... Oh diecisiete. -sonrió muy tiernamente. Este chico debió aver nacido con una sonrisa ilegal.

-Aun eres un bebé. -pique suavemente sus mejillas.

-No Hyung no diga eso, ya estoy grande. -hizo un puchero.

-Sabes entonces..... ¿Besar?.

-¿Que es un beso?. -arrugó su naricita.

-Vez aun eres un bebé, no sabes nada aún. -reí.

-Malo Hyung. -me saco la lengua.

Seguimos caminando mientras el menor se distraia con cualquier cosa que veía en la calle, la tarde callo y decidimos volver a casa, otro día genial que había sucedió.
Al llegar a casa lo primero que hizo jiMin fue tirarce al sofá más grande.

-Estoy muerto Hyung.... -se quejó. -creo que ya me dormiré.

-Pero en tu habitación, aquí estas en la Sala. -me pareció muy tierno verlo tan exhausto.

-Es cierto, buenas noches Hyung. -como pudo se levantó del sofá y subió las escaleras y ahí lo perdí.

Yo también quería dormir pero aún había muchos papeles por entregar mañana, así que subi a mi despacho para trabajar un poco: trabajaba tranquilamente si no fuera por mi mente que se dejó invadir por jiMin, aquel niño de labios extremadamente carnosos y apetecibles, un cuerpo que joder me ponía a imaginar cosas que no debía de hacer, pero aquí estaba el gran Jeon Jungkook siendo débil a semejante Ángel que le pusieron en su camino.
El día de la boda esta cerca así que ese día será mío completamente mío.

El sueño comenzaba a acerme efecto..... Me quedé dormido pensando en aquel chico de la sonrisa ilegal.

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Nuevo capítulo, gracias por leer.

Nos vemos en el próximo capítulo.

Chaoo se les quiere. 💕💕⭐⭐⭐