capítulo 5: frustracion

Len dejo de mirar el cielo estrellado y bajo la mirada cubriéndose la cara, de nuevo estaba comenzando a llorar.

¿Por qué? No puedo aceptar a Kaito como mi cuñado, Kaito no puede serlo no puede

De pronto sintió como alguien lo abrazaba por detrás, volteo y se topo con la cara de su hermana que le sonreía dulcemente para tratar de tranquilizarlo.

-¡vete, déjame!- le grito mientras la empujaba -pero Len- ¡pero nada suéltame! ¡no me toques!- Rin obedeció sin más y se sentó al lado de su hermano con un metro como distancia, por un momento se hiso el silencio, Len que permanecía mirando al frente volvió a bajar la mirada.

-¿Por qué?- salió de los labios del rubio- ¿Por qué que?- pregunto su hermana extrañada -no me vengas con eso- se levanta - ¡¿POR QUE HABIENDO TANTOS EN ESTE MUNDO...¡¿Por qué con Kaito?!- la ojiceleste bajo la mirada.

-¿ya te enteraste?- si, ya lo se, ¡dime ¿Por qué?! Tu sabias que lo quería, tu sabias bien lo que sentía por el y todo lo que sufrí, ¡¡¿POR QUÉ ME LO QUITASTE RIN?!! Si me hubieras dicho lo que sentías por el te lo habría dejado- no Len las cosas no fueron así, yo no estaba enamorada de Kaito hasta poco después de que tu te fuiste, Kaito estaba muy mal, se la pasaba llorando todo el tiempo- ¡claro! Y tu estabas ahí para consolarlo ¿no?- el sarcasmo de su hermano molesto a la rubia que se levanto para encararlo.

-¡escúchame Len! Las cosas no fueron así, Kaito te espero pero se cansó, tu te fuiste sabiendo muy bien que podrían quitártelo, no me hechos la culpa de lo que tu provocaste- ¿desde cuándo?- ¿Cómo?- ¿desde cuándo tu y Kaito son novios?- sus lágrimas que no habían parado de caer ya habían mojado una pequeña parte del pasto- desde hace cuatro años- respondió con calma- ¿cuatro años? Un año después de que me fui....no me espero nada- y como si las fuerzas se le terminaran cayo desplomado, Rin trato de atraparlo pero Len ya estaba inconsciente.

A como pudo Rin lo llevo a su casa y lo dejo en su cuarto, estaba tal y como el lo había dejado hace cinco años, lo dejo recostado y bajo las escaleras, llamaron a la puerta y ella fue a revisar.

-hola somos Meiko y ella es Miku, compañeras de Len ¿el se encontrara aquí?- sí, síganme yo las llevo- gracias- dijeron ambas y entraron dentro de la casa, Rin las dejo en la puerta de su cuarto y volvió a bajar las escaleras.

Mientras Len ya había recuperado la conciencia y se levanto extrañado, poco después recordó el lugar donde se encontraba, abrieron a la puerta y sus compañeras aparecieron.

-Len- gritaron ambas y lo abrazaron- nos tenías preocupadas- dijo la peli turquesa- pensamos que te paso algo malo- agrego Meiko- lo siento chicas, no quise preocuparlas, de seguro Luka estará molesta- no, bueno- respondió la mayor de la habitación- tuvo que devolverle la mitad de las entradas y además esta igual de asustada- lo siento- ¿paso algo con..?- no lo menciones por favor- le pidió Len a Miku, ahora lo que menos quería era recordar a Kaito.

-me vio la cara- respondió con la mirada baja- todos estos años que lo espere y el...- ya no pienses en eso Len- le dijo Meiko- ven volvamos a casa- si no les molesta me gustaría quedarme aquí- ¿seguro? Es casa de tu hermana- es de los dos, estaré bien, pueden irse- bueno pero nos llamas si te ocurre cualquier cosa- respondió Miku.

Mientras en la sala, Rin se bebía un te para los nervios, muchas emociones por el día de hoy, tocaron a la puerta de nuevo y se levanto para abrirla, se trataba de Kaito que entro dentro de la casa.

-Rin ¿está aquí Len?- pregunto con un tono de preocupación- ¿buscas a Len?- le cuestión desanimada- sí, ¿está aquí?- si, pero no puedes verlo, no ahora, le dije algo acerca de lo que teníamos y no lo tomo muy bien, no creo que sea buena idea que lo veas ahora- ni yo, pero tendremos que arreglar esto- lo se, pero por ahora te lo pido vete- pero- Kaito si aun me quieres vete por favor- el ojimar analizo las palabras de su novia y contesto rendido- esta bien- la besa- pero después lo hablamos- se retiró.

No puedo irme sin ver como sigue Len

Subió la vista al árbol, desde ahí se podía ver el cuarto de Len, pensó que no seria mala idea verlo desde ahí, subió al árbol se recostó sobre una rama, las amigas de Len salieron poco después de que el subió al árbol, en la habitación solo quedaba el.

Con calma el pequeño rubio fue recorriendo su antigua habitación, tomo una fotografía enmarcada donde los cuatro estaban juntos y sonriendo, a el se le notaba un ligero rubor por tener a Kaito tan cerca. Sonrió para después recordar.

-entonces debe estar aquí- saco una caja ante la mirada curiosa de Kaito que no sabía que era lo que buscaba hasta ahora su ¨cuñado¨ uno a uno fue sacando los objetos de la caja hasta que dio con un marco de foto, en el se veía una fotografía donde Len le besaba la mejilla a Kaito, por su parte el mayor salía con una cara de desconcierto por la acción de Len

Esa foto pensó Kaito Rin la tomo un día en que los cuatro salimos a jugar al parque y a divertirnos, todos nos habíamos tomado fotos, pero recuerdo que Rin estaba muy insistente con que Len y yo nos tomáramos una foto, los escuche cuchillear un poco y después Len acepto, se paro a mi lado pero algo lejos, Rin y Teto le insistieron en acercárseme mas pero al parecer sus piernas no le respondieron, yo fui el que se acercó y lo abrazo.

Rin conto hasta tres para tomar la foto pero en cuanto dijo 2 Len se solto de mi abrazo y me jalo un poco de la camisa para darme un beso, me desconcertó un poco pero no le dije nada, en cuanto la foto fue tomada Len me soltó de golpe y se cubrió la cara completamente rojo, le pregunte porque lo hiso y el dijo que solo era por la foto, le dije podía hacer eso cuando quisiera pero nunca mas volvió a hacerlo, poco después me entere que el plan de los gemelos era que Len me besara en los labios pero al final había sido incapaz de besarme.

Los pensamientos de Kaito se esfumaron cuando Len cayo de rodillas sobre el suelo llorando sobre los cristales rotos, en un arrebato lanzo la fotografía con fuerza.

Suficiente no puedo ver a ninguno de los dos llorando así

Y entro por la ventana -Len no llores por favor- el se volteo y miro a Kaito, se levantó y con toda su fuera arrojo a Kaito contra la pared - ¡LARGATE!- le ordeno- NO QUIERO VERTE- pero Len yo- ya no me digas nada lárgate, lárgate- trato de írsele en cima pero Kaito lo tomo por las muñecas evitándoselo, el rubio forcejeo con el mayor pero después de un tiempo se rindió y descanso su cabeza sobre el hombro de Kaito.

-¿Por qué lo hiciste? Yo te quería, te amaba ¿Por qué?- ¿Qué está pasando aquí?- cuestiono Rin mientras entraba- ah eres tu Kaito ya sabía que estabas aquí- Len se soltó y retrocedió un poco, Rin tomo lugar al lado de su novio.

-Len creo que tendremos que hablar- ¡no quiero!- le grito a Kaito- ya me canse de tus mentiras- no fueron mentiras, Len escucha- ¡NO!- SUFICIENTE- grito Rin- LEN SI AUN LE TIENES ALGO DE AMOR A KAITO CALLATE Y ESCUCHA- el ojiazul suspiro resignado, asintiendo para que comenzaran a contarle, kaito rodeo con un abrazo a Rin y comenzó a contarle todo a Len, pero esa acción le hiso hervir la sangre a Len.

-eso es toda la verdad- concluyo- Len lo sentimos- dijo la rubia, Len permanecía con la mirada baja, presionando la parte baja de su camisa con fuerza para retener sus lágrimas, no quería que ellos lo vieran llorando, jamás lloraría frente a las personas que le hicieron daño, jamás dejaría que supieran que han podido con el.

-sentirlo no resolverá nada, ahora veo, porque tus cartas dejaron de llegar, pensé que estabas ocupado y vaya que lo estuviste- sonrió con sarcasmo- sabes siempre supe que una zorra me quitaría tu cariño, pero no pensé que fueras tu querida hermanita- Len no le hables así- es lo que se merece, escucha Rin yo confiaba en ti pero me has decepcionado, siempre pensé que eras bueno y resulta que ¡eres una cualquiera como todas!-

Rin comenzó a llorar ante las palabras hirientes de su gemelo, a lo que Kaito no se quedo callado, soltó a Rin y se puso frente a Len de manera intimidante.

-¡¡CALLATE!! Rin no es nada de eso, el único culpable aquí eres tu- ¿yo?- sí, pude aceptar el hecho de que te fueras, pero ¿Por qué no me contestaste las cartas? Con una ¡con una que me hubieras contestado te habría esperado el resto de mi vida Len!- yo...- no digas nada, lo hecho, hecho esta, pero no voy a permitir que le faltes el respeto a alguien tan dulce como Rin-

El rubio se quedó boquiabierto el jamás lo había defendido así, nunca, ni una sola vez, en ese caso tal vez de verdad debía de quererla, eso le molesto aun mas, sus celos se le subieron a la cabeza, pero las ganas de llorar ya no las resistía.

-¡BIEN!- se dirigió a la puerta- ¡LOS ODIO A LOS DOS!- y la azoto de un puertas, bajo e hiso lo mismo con la puerta de entrada.

Ambos novios bajaron a la sala y Rin se desplomo sobre el sillón- ¡que día! Cuantas emociones por hoy- y que lo digas- Kaito tomo lugar al lado de su novia y la rodeo para abrazarla pero Rin no se lo permitió.

-¿Qué ocurre?- Kaito debemos hablar....yo me le he pasado muy bien contigo eres el mejor novio que he tenido, jamás pensé tener algo así con alguien- yo también Rin- pero....creo que lo mejor seria....yo siempre supe que lo nuestro era temporal- ¿temporal? Pero si ya llevamos cuatro años juntos- lo se, no me refería eso si no que...yo siempre supe que cuando Len volviera lo nuestro terminaría y tu hidrias con el- Rin- creo que lo mejor seria terminar Kaito- ¿quieres terminarme?- Rin asiente- NO- grito Kaito para abrazar a la rubia con fuerza como si tuviera miedo de perderla.

- no Rin no quiero, yo te dije que estaba contigo porque te quería no como un reemplazo, el que Len haya regresado no significa que te dejare, te amo Rin no lo dudes, no de mi por favor- Kaito- lo abrazo de la misma manera- lo siento- no te preocupes por eso, además las cosas con Len no mejoraran, pero- la mira- nada me separara de ti Rin- la besa

Mientras Len se había detenido a mitad del camino, se cubrió la cara y lloraba sin consuelo, le dolieron las palabras de Kaito pero sobre todo lloraba de celos, Rin tenia a la persona que el quería, cansado de llorar se limpio las lagrimas y fue a la parada del autobús, aun seguía llorando, pero no hiso nada por detenerlas, jamás le gusto que lo vieran llorando pero ahora todo le daba igual.

Subió al autobús y se dirigió a la casa con las chicas, no podía dejar de llorar, debes en cuando atraía la mirada de curiosos que volteaban a mirarlo como si así supieran porque lloraba. A su mente vino la imagen de Kaito de niño extendiéndole la mano mientras le sonreía, pero Len sacudió la cabeza.

No no es posible yo conocí a Kaito hasta secundaria

Len llego a su hogar, todo estaba apagado, subió con desgano las escaleras y se metió en la cama, se cubrió completo con la manta y bocabajo contra la almohada comenzó a llorar una vez mas.

Miku y Meiko habían escuchado los sollozos del menor y fueron a su habitación, titubearon antes de abrir la manija, pero al final lo hicieron, no entraron por completo al cuarto.

-Len veo que ya llegaste- le dijo Meiko- si, ya no estuve agusto ahí- dijo con la vos quebrada- ¿paso algo con Kaito?- le pregunto Miku, al escuchar su nombre como si fuera un interruptor sintió su corazón quebrado y lloro de nuevo con fuerza como si estuviera solo.

-¡Len!- Meiko quiso ir a abrazarlo, pero Miku se lo impidió, ambos salieron de la habitación dejando que Len llorara agusto solo en su cuarto- ¿Por qué no me dejaste consolarlo?- sabes bien que a Len no le gusta que lo vean llorar es mejor que se desahogue solo, mañana mas tranquilo le haremos saber que lo apoyamos- Meiko asintió resignada, estarían ahí para el, tal y como lo hicieron en los buenos momentos

Pero aun le quedaba mas por sufrir a Len

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continuara♦♦♦

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