Capítulo 32: Corre, ____.

Estoy saltando entre los árboles buscando algún rastro de que me lleve a Gaara, no sabía muy bien quien lo había secuestrado y eso se me complicaba, ya que no sé exactamente si estoy yendo por el camino correcto.

—Necesito ayuda...

Concentré chakra en la palma de mi mano formando así con mi Arena pequeños animalitos a los cuales envié a averiguar. Mientras mis animalitos buscaban información yo seguía por el mismo camino esperando a encontrar algo, solo espero llegar a tiempo y salvarlo.

Resiste, Gaara.

❇❇❇

Se había hecho de noche y aun no encontraba ninguna pista. Me estaba frustrando quien sabe lo que podrían estar haciendo esas personas con Gaara mientras me encuentro aquí, me rodeé con mi arena para descansar un rato ya que si seguía así sin descansar terminaría desmayándome.

Al día siguiente me desperté apresurada, tomé mis armas ninjas y seguí con el camino en donde me encontré con uno de mis pequeños animalitos el cual me dijo que cerca había tres ninjas junto a un perro, los cuales eran de Konoha y hablaban sobre el rescate de Gaara.

Siguiendo el camino que me dijo mi animalito me encontré con aquellas personas, la cuales me miraron sorprendidos. Iba a hablar, pero ellos se me adelantaron e incluso el perro se colocó a gruñirme.

—No tenemos tiempo para lidiar contigo. —habló el Hyuuga seriamente. —Tenemos una misión importante y...

—Lo sé. —le miré seriamente. —Yo también tengo algo importante que hacer, pero necesito de su ayuda...debo salvar a Gaara.

—Tú eres la chica que huyó. —habló su sensei mientras colocaba su mano en su mentón, pero de un momento a otro alzó su pulgar mirándome con una gran sonrisa. —Bien, irás con nosotros.

—Gai-sensei. —replicó la chica. —No sabemos si ella...

—Si crees que les haré daño estás equivocada. —al momento de decir eso ella se sorprendió. —No he venido aquí para eso, he venido aquí para pedir su ayuda para rescatar a Gaara.

—Bien. —fue lo único que dijo el Hyuuga.

—Pakkun llévanos al lugar.

—Sí.

Comenzamos a seguir al animal el cual iba explicando por donde se encontraba el lugar donde había percibido la esencia de Gaara.

Cuando llegamos al lugar nos encontramos con una gran roca la cual poseía un sello, Gaara se encontraba dentro por lo que debíamos de destruir aquel sello.

—Ellos ya están aquí.

Pakkun había dicho eso y me pregunté de a quien se refería. Entonces aparecieron aquellas personas que conocí en mis exámenes y no solo eso...también estaba ella...

—Tú...

El tener a la anciana que me causó mucho daño frente a mí me ponía furiosa, toqué mi hombro donde se encontraba mi marca y no solo eso...también todas las cicatrices que ella me causó con sus experimentos.

—¿Qué hace usted aquí? —pregunté presionando aun más mi hombro. —¡¿Qué demonios hace aquí?!

—Cálmate, ___. —decía Neji mientras posicionaba su mano en mi hombro. —Primero debemos salvar a Gaara.

Neji tenía razón, debía preocuparme primero por el bienestar de Gaara que de esa anciana.

—¿Quién es esta anciana? —preguntaba la compañera de Neji.

—Ella es la anciana consejera de la Aldea de la Arena, Chiyo-sama. —respondió Sakura con una sonrisa.

—No hay tiempo para presentaciones. —digo molesta mientras poso mi vista en la gran roca que nos impedía el paso para ir con Gaara. —Debemos salvar a Gaara.

Neji Hyuuga comenzaba a buscar con su vista dentro del lugar, mientras lo hacía nos iba contando todo lo que veía y Naruto lo sacudía queriendo saber información de Gaara, después de todo eso él dejó de ver a través del lugar.

—¿Qué ocurre? —pregunté al verlo tan seriamente.

—Es duro para mí explicarlo.

—Lo cual significa que debemos verlo por nosotros mismos, ¿no? —decía el cejudo.

Su Sensei nos había dicho que nos alejáramos un poco cosa que hicimos caso, él comenzó a alejarse para tomar distancia y entonces comenzó a correr hasta la gran roca dándole un puñetazo cosa que no realizó nada.

El Hyuuga volvió a buscar con su mirada por los alrededores encontrando así cuatro sellos que eran los que había que deshacer ya que el quinto se encontraba frente a nosotros, debíamos quitarlos todos al mismo tiempo para romper la barrera.

Gai-san le entregó un radio comunicador a Kakashi-san para avisarle cuando quitar el sello, él y su equipo se fueron por los cuatro sellos restante.

—Bueno es hora de que yo me marche. —habló Pakkun. —No tiene sentido que permanezca aquí solo para estorbar.

—Pakkun, buen trabajo. —decía Kakashi-san.

—Con esto me voy.

El perro desapareció, yo no apartaba mi vista de aquella gran roca y entonces sentí que algo se posaba en mi hombro derecho, era uno de mis animalitos quienes me daba aviso que los demás que había enviado habían sido destruidos por una especie de planta. Bueno eso ya no importaba ahora, ya que sabía exactamente donde se encontraba Gaara.

—A la vez que se quiten los sellos, Sakura destruirá la roca de la entrada. —hablaba Kakashi-san mientras se posicionaba sobra la roca tocando el sello y Sakura tomaba distancia para así romper la roca cuando le dieran la orden. —Esa es nuestra señal para entrar y recuperar a Gaara.

Tan solo resiste, Gaara.

Kakashi-san quitó el sello y le dio la señal a Sakura de romper la roca, ella comenzó a correr dándole así un gran puñetazo rompiendo la gran roca y entonces nos adentramos al lugar encontrándonos con la peor escena.

—Gaara...—murmuré mientras mis manos temblaban al ver que él se encontraba en el suelo, mientras un tipo rubio se encontraba sentado sobre él.

Al ver su capa supe que eran de Akatsuki.

—Ahora me pregunto quién será el Jinchuriki.

—¡Los mataré! —exclamó furioso Naruto.

—El primero en gritar y embestir contra nosotros... ¿es ese?

—Eso parece.

—¡Aléjate de él! —exclamé con furia al verlo tan cómodamente sentado sobre Gaara. Mi arena había reaccionado a mis gritos colocándose a mi lado. —Malditos...

—Oh, así que ella puede utilizar la arena como este tipo. —hablaba el rubio mientras se levantaba y posicionaba su pie sobre la cara de Gaara. —Será bastante molesto tener que enfrentarme de nuevo a alguien como él.

—¡¿Cómo puedes estar durmiendo en un momento como este, Gaara?! —exclamaba Naruto con furia. —¡Hey, Gaara! ¡Despierta!

—Ya es suficiente, Naruto. —le habló su sensei. —Ya deberías saberlo...

—¡Basta! —grité al ver que comenzaba a pisarlo sin piedad. —¡Déjalo!

—¿Quieres un cuerpo ya muerto? —preguntó con burla.

—No...—murmuré mientras presionaba mis puños. —Él no está...

Aquel tipo realizó un pájaro el cual tomó a Gaara con su boca y comenzó a elevarse. Deidara se llamaba según lo que escuché de su compañero, él comenzó a salir del lugar con Gaara y entonces comencé a seguirlo.

Ya voy, Gaara.

🌟Y bueno como siempre cambiaré algunas cosas <3 

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