____.

Nos encontrábamos en la entrada de en donde se produciría el primer examen.

—Ya deberíamos de entrar. —decía Kankuro con una sonrisa y entonces me rodeó con su brazo apegándome a él. —Estas emocionada, ¿no?

—Hay dos objetivos en este examen. —digo con una sonrisita recordando al de ojos raros y a la de cabello de chicle. —Los derrotaré.

—Kankuro. —le llamó Gaara bastante frío e hizo a Kankuro temblar. —Deja de jugar y andando.

—¿Por qué siempre me hecha la bronca a mí? —murmuraba.

—Es su forma de demostrar que te quiere. —le susurro divertida. —Eso creo.

—No me ayudas.

—Lo sé. —reí y me acerqué a Gaara. —Acabaremos con esos tipos, ¿no?

—Sí.

Mientras entrabamos podíamos oír unos gritos, nos acercamos por curiosidad y nos encontramos con aquellos chicos.

El equipo de Naruto y el de ojos raros.

—Parece una pelea bastante mala. —decía Temari.

—No se distraigan. —dijo fríamente Gaara mientras comenzaba a caminar. —Vayamos a nuestro lugar.

—¡¿Y ustedes piensan realizar los exámenes chuunin?! —preguntaba con una gran risa el tipo que se encontraba en la puerta. —¡Deberían retirarse!

—____.

—Ah, perdón. —me disculpo dejando de ver la escena y comienzo a caminar junto a ellos. Mientras íbamos caminando veía a los demás que participarían y algunos se veían aterradores. —Me pregunto cual será el primer examen.

—Aquí es. —decía Kankuro frente a una gran puerta. Él abrió y nos encontramos con varios tipos quienes nos miraban fijamente. —¿Por qué nos miran así?

—No se dejen intimidar. —decía Gaara entrando sin importarle nada. Yo le seguí detrás con un poco de miedo, los demás me miraban muy fijamente. —Quedémonos aquí.

Gaara se sentó en una banca y nosotros copiamos su acto.

—___ debe de tener miedo~

—¡No digas tonterías, Kankuro! —exclamé molesta. —Yo no tengo miedo.

—Dile eso a tus manos temblorosas. —decía con una risita. —Tranquila yo te protegeré.

—No necesito que me protejas. —digo tajante mientras me cruzaba de brazos. —Sé cuidarme sola.

Bueno no me importaría si Gaara me protegiera, pero eso sería algo imposible...

Ah, me acabo de deprimir.

—¿Sucede algo, ___? —preguntaba preocupada Temari. —¿En verdad te has asustado?

—¡No!

—Baja la voz, ___.

—P-Perdón, Gaara. —digo con un suspiro y entonces vi que por la puerta entraba el de ojos raros con su equipo, nuestros ojos se encontraron e inmediatamente él frunció el ceño. —Molesto...

Él y su equipo pasaron por nuestro lado.

—¿Por qué miras tanto a ese chico? —susurraba Temari, yo me tensé. —¿Te gusta?

—¿Q-Qué dices? —susurré. —No me puede gustar alguien como él.

—Pero se ve guapo.

—Baja la voz. —digo haciendo señales que se callara. —Lo único que siento hacía él, es odio.

—Del odio al amor...

—¡Eso no va con nosotros! —grité atrayendo la atención de los demás. Comencé a avergonzarme. —L-Lo siento...

Gaara de un momento a otro se levantó, parecía molesto.

—¿Dónde irás? —preguntaba Kankuro.

—Iré al baño. —decía tajante.

Sin más que decir se fue.

—Se le veía muy molesto. —decía Temari. —¿Crees que habrá escuchado?

—No lo creo. —digo con una mueca. —Además, ¿Qué importa si habrá escuchado? Yo no le intereso.

—Nunca se sabe que hay en la cabeza de mi hermanito. —me daba palmaditas en mi espalda. —Quizá estés tú.

—Imposible.

—¿De que tanto hablan?

—Cosas de chicas. —respondió Temari con una sonrisita. —¿Por qué no vas al baño, ___?

—No tengo ganas.

—En serio eres tonta.

—¡¿Ah?! ¡¿Disculpa?!

—Escandalosa.

La voz del chico de ojos raros me sorprendió, él pasó por nuestro lado y me había llamado escandalosa.

—¿___?

Me levanté enfadada de mi asiento, comencé a acercarme a él y entonces lo agarré del brazo.

—¡¿Quién te crees que eres ojos raros?!

—¡Deja de llamarme así! —exclamó con el ceño fruncido. —Mi nombre es Neji.

—No me importa. —le digo mostrándole la lengua.

—Eres una mocosa.

—¡¿Ah?! —le tomé del cuello de su traje. —¡Juro que te daré una paliza!

—Me gustaría ver eso. —decía con una sonrisa de superioridad mientras volvía a poner sus ojos de esa forma rara. Me estaba enfadando bastante. —Atácame.

—Bien.

Comencé a sacar arena, pero antes de que pudiera hacer algo alguien me había sostenido del brazo y cuando me di cuenta de quien era, comencé a sudar.

Gaara.

—¿Qué crees que haces?

—G-Gaara...—tragué en seco. Ay voy a morir sin poder confesar mis sentimientos. —Él me provocó y...

—Cállate...—me cubrí por inercia con mis brazos esperando a que me hiciera algo. —Andando.

—¿Eh?

Gaara solo comenzó a caminar y yo lo miré confundida.

Al parecer no moriré hoy.

Neji me miraba confundido y simplemente le di un pequeño golpe en su mejilla mostrándole la lengua.

La puerta principal fue abierta dejando ver a aquel rubio escandaloso y quien al verme corrió a abrazarme.

—¡___-chan!

Traté de separarme, pero él se mantenía ahí como una sanguijuela y entonces sentí una mirada, era Gaara quien me miraba muy molesto.

Alguien ayúdeme...

🌟Gaara se ha molestado, alguien por aquí morirá. >n<