Capítulo 12: Problemas.
-Entonces trate de decirle que estaba bien, pero ella se me apego al cuerpo y no me soltaba, fue tan vergonzoso- Mark me contaba como una chica se le había insinuado en la parada de autobús el fin de semana, ya me lo imaginaba todo sonrojado y tímido, tratando de decirle a la chica que lo soltara. Desde que habíamos hablado aquella vez que se acerco a mi, nos habíamos vuelto mas cercanos, conmigo hablaba mucho, en cambio con el resto era muy tímido.
-Y entonces, ¿que paso al final? ¿pudiste alejarla?- pregunte curiosa.
-Bueno, apareció un chico al que ella llamo ardiente, al cual fue a molestar luego, no se quien era ese chico, pero le doy las gracias por aparecer- suspiro y al volver a mirarme sonrió.
-Pues, bendito sea el chico ardiente- dije dejando escapar una pequeña risa, la campana sonó y nos tuvimos que levantar del pasto, fuimos hasta nuestro salón y al llegar nos sentamos en nuestros puestos.
-¿Como te va con tu nuevo amigo?- Lucy sonaba algo molesta, en parte era mi culpa porque ahora me juntaba mas con Mark y no tanto con mis otros amigos, pero que podía hacer, Mark era tímido y no le gustaba mucho estar rodeado de tantas personas.
-Bien, gracias, ¿como les ha ido sin mi?- pregunte con una sonrisa angelical, o el intento de una, mi amiga suspiro frustrada.
-Sabes que no es lo mismo si no estas, ¿porque no le dices a Mark que se junte con nosotros?- preguntó alzando una ceja.
-Lo he echo, pero él es muy tímido, creo que con suerte y habla conmigo.
-Nos esta robando a nuestra amiga- se cruzo de brazos e hizo un leve puchero, sonrei y le di un pequeño toque en la punta de la nariz con mi índice derecho.
-No lo esta asiendo, en el próximo receso iremos a nuestro lugar, ¿si?.
-¿Con Mark?.
-Le preguntare si quiere ir, si no va, pues iré sola- ella asintió, guardamos silencio ya que el maestro ingreso al salón.
La clase de filosofía no era lo mas interesante del mundo, por lo menos no para mi, al finalizar la clase, me acerque a Mark para ver si me acompañaba con los demás, pero me dijo que prefería quedarse leyendo manga, fui hasta el lugar donde nos juntábamos con mis amigos y ahí estaban todos, riendo seguramente por alguna broma de Alex.
-Pero miren a quien tenemos aquí - dijo Alex al verme- La desaparecida, la oveja perdida, la hija pródiga, la...
-Ya entendimos- lo corto Clarke.
-¿Y Mark?- preguntó Lucy.
-Se quedo leyendo- dije sentándome al lado de Sabine y Clark.
-¿Y como va lo de Ian?- la pregunta de Sabine, me molesto de cierto modo, Ian se la había pasado evitándome desde lo del parquesito, no se había acercado ni una sola vez a hablarme.
-¿Enserio hablaran de eso? Porque si es así, regresado donde Mark- dije tratando de no sonar molesta.
-Es cierto, no hablemos de eso- intervino Alex- ¿Porque no mejor nos cuentan, como va su relación?- Sabine se sonrojo y Barry solo sonrió.
-¿Porque no mejor nos hablas de la chica que te gusta?- le pregunto Lucy a su hermano.
-¿Porque no le preguntamos eso mejor a Clarke?- Alex trataba de desviar la atención de él, el mencionado miro a Alex con el ceño fruncido.
-Ok, creo que me he perdido muchas cosas este ultimo tiempo- murmure, mis amigos siguieron tirándose "indirectas" un buen rato, así pude enterarme que a Clarke le gustaba Camille Tonkin desde ya hace mucho y a Alex le gustaba Phoebe Lynch la prima de Camille, antes de que tocaran la campana nos fuimos a nuestro salones.
Las clases restantes pasaron muy rápido, hoy mamá me había llamado para pedirme que le fuese a dejar unos papeles al trabajo, ya que ella no podía salir aun porque estaba muy ocupada, le dije a los demás y me fui antes que ellos, iba de camino a la parada del autobús cuando cinco tipos obstruyeron mi camino, me detuve al reconocer a uno de ellos, era el tipo que se había escapado antes de que la policía llegara.
-Nos vemos de nuevo, conejita- levante una ceja y sonrei alzando solo la comisura izquierda de mis labios.
-Oh, es usted, ¿como esta su mano?- pregunte sonriendo, los jóvenes que pasaban por nuestro lado nos miraban antes de seguir con su camino, el hombre me mostró su mano lastimada, en la cual tenia un yeso.
-Maldita niña- dijo entre dientes, yo sonrei aun mas, las posturas de los chicos y sus miradas se ponían cada vez mas amenazadoras, ¿pensaban hacer algo con tanto público presente?.
-¿Y donde esta tu noviecito?- pregunto burlón al verme sola, ¿acaso olvidaba quien les había dado una paliza?.
-Con todo respeto, eso no le importa- alejense de Ian malditos zánganos.
-Bien, entonces tú vendrás conmigo- dijo molesto.
-Ni en sus sueños, no es mi tipo, es muy... anciano para mi- conteste tranquila, el hombre ya bastante molesto se comenzó a acercar a mi, empuñe las manos cuando él estaba a solo dos pasos.
-De-dejela- el chico que acababa de hablar empujo al sujeto, sin siquiera moverlo un poco.
-Tú- el tipo fruncio el ceño y tomo del cuello de la camisa del castaño.
-Mark, sueltalo imbécil- adiós modales, pero a mis amigos nadie los tocaba.
Como el hombre estaba concentrado mirando con odio al pequeño castañito, me puse tras de él y con todas mis fuerzas le di una patada en la entrepierna, soltó a Mark y cayo al suelo, antes de que los otros cuatro se acercaran tome la mano de Mark y salimos corriendo, cruzamos la calle sin detenernos por los autos que transitaban por esta, corrimos tomados de la mano, sabia que los tipos nos seguían por que escuchaba cuando gritaban, vamos, atrapenlos, Mark era mucho mas lento que yo para correr y eso era malo, si no nos apresurábamos ellos nos atraparían.
-Mark, corre mas rápido- le grite sin voltearme.
-Es.. Di-dificil, estoy can-cansado– yo también lo estaba, pero no iba a dejar que nos alcanzaran por eso.
-El departamento policial esta cerca, solo apurate- solo faltaba media cuadra para llegar al trabajo de papá, sentí como Mark se detenía por lo que me detuve también, al voltearme uno de los sujetos que nos seguían lo estaba afirmando del brazo, Mark se veía asustado, volví a mirar el departamento de policía y por las puertas de este, salieron dos policías, uno de ellos se me hizo conocido.
-¡Oficial Pieters!- el padre de Mason volteo hacia ambos lados y al verme, él y su compañero corrieron para ayudarnos.
-Maldición - se quejo el tipo, soltó de manera brusca a Mark y salio corriendo junto a los otros tres sujetos, el oficial Pieters se detuvo a nuestro lado y su compañero siguió a los tipos.
-Claire, ¿están bien?- pregunto preocupado, suspire aliviada y asentí- Tu padre esta adentro, deberías ir a hablar con él.
-Lo haré, gracias- dije caminando hacia el trabajo de papá, al entrar fui directo a su oficina, entre sin tocar y me puse frente al escritorio de mi padre- Papá.
-¿Claire?- al vernos fruncio el entrecejo, había olvidado que nuestras manos estaban unidas, no teníamos los dedos entrelazados como cuando había venido con Ian, pero la mirada de mi padre me ponía incómoda, pensé en soltar su mano, pero él estaba temblando, así que al final no lo hice- ¿Que pasa?.
-Unos tipos nos estaban siguiendo, el oficial Pieters y su compañero los están siguiendo ahora, pero creí que debía decírtelo, uno de ellos es el que escapo del parque el otro día- el rostro de papá se volvió preocupado.
-Maldi... Debimos haber atrapado a ese idiota antes, ¿están bien? ¿donde esta tu novio?.
-Estamos bien y él... él se tuvo que ir antes, así que no sabe lo que paso- papá suspiro frustrado.
-Espero que esta vez, si atrapen a esos hijos de pu... de sus madres- papá se puso a hacer algunas llamadas, me voltee a ver a Mark, él tenia los ojos cristalizados, se veía muy asustado, apreté un poco su mano y acaricie su cabello.
-Tranquilo, ya paso todo- él me miro y trato de hablar, pero sus labios temblaban.
-Por cierto, ¿quien es él?- pregunto papá colgando el teléfono.
-Es Mark Oliver, mi amigo- a mis padres les había hablado de él antes.
-Aaah, así que es él- papá miro detenidamente a Mark, tanto así que hasta a mi me puso nerviosa- Cariño, un oficial los llevara a casa, me encargare de todo, ¿si?.
-Esta bien, nos vemos en casa- me despedí, papá asintió y volvió a tomar el teléfono, al salir un oficial ya nos estaba esperando afuera, nos subimos a la patrulla y esperamos a llegar a casa.
[...]
Ayer Mark no había venido a clases, tal vez estaba demasiado asustado, pobre pequeño, solo esperaba que hoy si haya venido, al entrar al salón mire hacia su puesto y este estaba vacío, aun no era tarde, él todavía podía llegar, mis compañeros llegaban de dos o tres, pocos eran los que llegaban solos, vi llegar a mis amigos los cuales me saludaron al verme, la campana sonó y luego de unos minutos llego la maestra, ¿y si hoy tampoco venia? Antes de que la maestra cerrara la puerta una mano la detuvo.
-Lo siento- se disculpo el castañito, sonrei al verlo, pero mi sonrisa se borro a medida que él se iba acercando, ¿porque tenia un moretón en la mejilla? quería ir a preguntarle pero la clase ya había comenzado, trate de prestar atención pero me era casi imposible, ¿y si ayer lo habían encontrado esos matones? ¿y si ellos lo golpearon? ¿por eso no había venido? Estaba preocupada, Clarke me dio un codazo y me apunto el cuaderno, había rayado toda la hoja con círculos y lineas, suspire agotada, voltee la hoja y comencé a escribir de nuevo.
La clase paso sumamente lenta, cuando por fin toco la campana le dije a Clarke que tenía que hablar con Mark y que después iría, termine de guardar mis cosas, ya no quedaba casi ningun alumno en el salón, fui hasta donde estaba Mark y me senté a su lado, él al darse cuenta de mi presencia se volteo y al verme me sonrió, ¿como podía sonreír si tenia un enorme moretón en la cara?.
-¿Estas bien? ¿que te paso? ¿alguien te hizo daño?- pregunte preocupada y acariciando suavemente su mejilla dañada.
-Ah, estoy bien, pero ayer en casa me tropecé y me golpee con la puerta- dijo sonriendo y rascando su cabeza, suspire algo aliviada, sabia que era algo torpe, pero no creí que tanto.
-¿Y porque no viniste ayer?- pregunte curiosa.
-Tenia miedo- confesó avergonzado- No quería volver a encontrarme con esos tipos.
-Entiendo- lleve mi mano que aún acariciaba su mejilla hasta su cabello y lo despeine.
Luego de conversar por todo el receso este termino, así comenzó otra aburrida clase, a la cual esta vez si pude prestar atención, esta clase se me había echo mucho mas corta que la anterior, nuevamente me disculpe con mis amigos ya que me quedaría de nuevo con Mark, fuimos al patio y nos sentamos en una de las bancas, hablamos un rato, de cualquier cosa que se nos venia a la cabeza, en un momento tuve ganas de ir al baño así que le dije a Mark que me esperara, el baño estaba cerca así que no me demore mucho, al volver unos chicos reunidos cerca de la banca dónde estábamos sentados con el castañito llamaron mi atención, ¿Mark se había ido? Tal vez se había ido al salón ya que la campana sonaría pronto.
-Vamos marica, ¿no tienes nada que decir?- la voz del chico sonaba burlesca, yo no solía meterme en peleas ajenas a menos que no fuera una pelea justa, esta claramente no lo era, ya que tres chicos estaban intimidando a un chico mas bajo que ellos, me hirvió la sangre al instante al darme cuenta de quien se trataba- Se que has estado mirándonos, ¿acaso te gusta alguno de nosotros?.
-No... Yo.. Y-yo- el pobre chico estaba temblando, me acerque a ellos y me puse en frente de Mark mirando a los tres idiotas que lo estaban molestando.
-¿Tienen algún problema?- pregunte desafiante, ¿como alguien podía intimidar a semejante ternurita?.
-No es tu asunto, quitate de enfrente- lo mire mal, si se atrevía a dar un paso mas lo golpearía sin pensármelo dos veces, odiaba a los bravucones.
-Claire- la voz de Mark tembló al momento de decir mi nombre.
-Vamos, deja que el marica se defienda solo- escupió el estúpido ese.
-¿Marica?- pregunte conteniendo las ganas de partirle la cara.
-Eso dije.
-¿Y que te hace creer que lo es?.
-Nos ha estado mirando desde hace rato- dijo sonriendo.
-¿A ti? Habría que ser ciego para quedarse mirando a semejante cara de patata- el chico no era mal parecido, pero eso no quería decir que todo el mundo lo mirara por eso, habían chicos mucho mas guapos que él, como Ian por ejemplo.
-Te lo advierto, no te metas conmigo, quitate y deja que el marica se defienda sólo- dijo apretando la mandíbula, esta clase de idiotas me enfermaban.
-¿Tienes algún problema con los homosexuales? Acaso, ¿tu eres gay? Claro, es por eso que estas asiendo este espectáculo, te gusta mi amigo y haces esto para llamar su atención- el chico se puso rojo, tal vez de ira o de vergüenza, aunque la vena que sobresalía en su frente me decía que era lo primero, avanzo un paso y levanto su puño, ¿pensaba golpearme, con tantos testigos presente? Estaba loco, pero me daba igual, ahora la pregunta era, ¿que hago? ¿Lo dejó golpearme para que así lo echen de la secu? ¿o lo golpeo y lo humilló aún mas? pensándolo bien, no quería que un imbécil me golpeara, antes de actuar una espalda apareció en mi campo de visión, detuvo el golpe del grandulón y todos los que murmuraban sobre la "pelea" se quedaron en silencio.
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N/A:
Ya llego por quien lloraban, chiquitas... Jajjaa ok no XD
*HarunaNanami😘
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