Una semana, había pasado una semana desde aquel incidente en el que me había involucrado, nada, Ian no había echo ni dicho nada, ni siquiera me miraba, bueno, eso estaba bien, ¿cierto? Era mejor que estuviese alejado, pero de cierto modo eso me frustraba, de vez en cuando lo veía caminar por los pasillo, con los audífonos puestos y sin detenerse a mirar a nadie, era tan malditamente guapo.

-Maldición- Murmuré viendo el rumbo que tomaban mis pensamientos - Es mejor así... Si, es mejor así.

-¿Que es mejor así?- la voz de Clarke, resonó cerca de mi oído, asiendo que diera un pequeño chillido del susto.

-Maldición Clarke, me asustaste- este se echo a reír, luego puso su codo sobre la mesa y apoyo su cara en la mano.

-¿Que paso enana?- preguntó divertido, rodé los ojos tras escuchar ese apodo.

-Creo que no deberías juntarte tanto con Josh- dije seria y copiando la acción de Clarke, al poner mi codo sobre la mesa y sostener mi cara con la palma de mi mano.

-¿Porque? Nos llevamos bien- lo fulmine con la mirada y el sonrió entendiendo así el porque de mi molestia- Esta bien, lo siento, ya no volveré a decirte así.

-Bien- dije luego de soltar un suspiro- ¿Donde están los demás?- pregunte frunciendo ligeramente el ceño.

-No lo se, tal vez aun siguen en la fila- mire hacia la fila de chicos que esperaban su almuerzo e hice un puchero, se estaban tardando, en ese momento mi mirada se cruzó con la de aquel chico pelinegro, de intensos ojos azules el cual me había estado evitando por una semana entera, ninguno de los dos desvío la mirada, sentí como me jalaban ligeramente el labio, el cual aún estaba curvado a modo de puchero, me incorpore rápido y mire perpleja a Clarke, que me miraba divertido, moví la cara para zafarme de su agarre y cuando este me soltó mordí su pulgar.

-Auh, Claire- alego este, pero no le di importancia, volví a mirar donde estaba Ian y este ya no me miraba, por alguna extraña razón, sentía como si me hubiesen pillado asiendo algo malo, voltee a ver a mi amigo el cual aun reclamaba por haberlo mordido.

-Es tu culpa, estúpido- dije molesta, él me miro confundido.

-¿Mi culpa? Pero si tu fuiste la que me mordió- alego mostrándome el dedo lastimado- Así que ¿que es mi culpa?.

-Aish, olvidalo- suspire frustrada, tal vez... Que va, ya no importaba nada.

Luego de habernos reunido todos a almorzar y tras oír la campana, fuimos cada quien a nuestras respectivas aulas, las clases pasaron de manera lenta, me aburría demasiado esperando cada campanada que daban a cada receso, cuando por fin tocaron la ultima campanada, pude irme a casa, tome rápidamente mis cosas, dispuesta a salir del aula.

-¿Claire, a donde vas?- Sabine tomo mi mano, me detuve en seco y me voltee a verla.

-Lo siento Sabine, tengo algo que hacer, vayanse sin mi- tras decir eso, me solté de su agarre y salí corriendo, no quería que se fuera sin antes hablar, ya estaba harta de esperar a que me hablara, harta de decir que era mejor que estuviera lejos, harta de no hacer nada.

Corrí por los pasillos esquivando a algunos alumnos, cuando llegue a su salón él ya no estaba, se había ido, pero yo no había corrido por nada, seguramente él estaría cerca, volví a correr chocando a uno que otro chico que se me cruzaba por el camino, cuando llegue a la salida busque con la mirada haber si así lo veía cerca, pero nada, no había rastro de él.

-Claire- la voz de mi amigo me sorprendió.

-Ahora no, Clarke- conteste sin voltear a verlo.

-Si buscas a Ian, se fue por el camino del parque- me voltee sorprendida, ¿como es que él sabia a quien estaba buscando?.

-¿Como es que...?

-No soy tonto, Claire- me interrumpió, no sabia que decirle- No se que se traen ustedes, pero tu deberías dejar de ser tan obvia- maldición, ¿era enserio? Esto era muy vergonzoso- Ahora ve a buscarlo.

-Gracias- dije antes de salir corriendo al parquesito, mientras corría me preguntaba si alguien mas se había dado cuenta de mi manera de actuar, tal vez si, era cierto que últimamente estaba actuando muy extraña, así que cabía la posibilidad que todos mis amigos se hayan dado cuenta.

El parquesito era un lugar no muy concurrido, había veces que con suerte pasaba un perro por aquel parque, así que, ¿porque Ian había decidido venir a este lugar? Al doblar en la esquina vi que el parque estaba vacío, ¿acaso Clarke me había mentido? Avance hasta llegar al resbalin, nada, pero logre escuchar voces, dirigí mi vista hasta una enorme palmera que estaba en medio del parquesito, detrás de esta pude ver algunas siluetas, me fui acercando a paso lento, hasta estar a una distancia considerable, pude ver a Ian junto a tres sujetos, no, eran cuatro, Ian mantenía sus manos echas puños, ¿porque siempre se encontraba en este tipo de situaciones?, me acerque a ellos sin importar que me vieran.

-¡Ian!- dije en voz alta, llamando la atención de todos- Ian, tenemos que hablar- cruce por el lado de dos de aquellos tipos y llegue hasta donde estaba Ian, él me miro con cierto asombro y miedo.

-¿Que haces aquí? Vete ahora Claire- dijo este apretando la mandíbula.

-No, ya te dije que tenemos que hablar- estaba molesta, con la situación, porque él me ignoraba, por lo de Clarke, por todo.

-Uuuy así que tienes novia, Ian- escuche decir a uno de esos tipos, Ian se tenso al instante.

-No- contesto, apretando mas los puños.

-Si- dije yo, ¿enserio no se daba cuenta que trataba de ayudarlo?.

-No- volvió a decir esta vez, mirándome a mi.

-Si- repetí, escuche las risas de aquellos sujetos, pero le reste importancia- Ya estoy cansada Ian, has estado evitándome todos estos días...

-Claire enserio, solo no te acerque a mi, ¿ok?- dijo serio, me reí molesta.

-Yo debería ser la que dijera eso, debería ser yo la que te dijera que no te acerques, que te mantuvieras alejado de mi, pero no lo hago y no lo haré.

-¿Porque?- pregunto aun molesto y algo confundido.

-Porque me preocupas Ian, se porque me dices estas cosas, pero no debes preocuparte por mi, sabes por que te lo digo y yo... Yo no te abandonare.

Me acerque mas a él, estire ambos brazos y amolde su cara entre mis manos, él se veía sorprendido, le sonrei de manera dulce, por un momento olvide donde estábamos, con quienes y porque estaba asiendo esto, solo eramos nosotros dos en aquel momento, mi corazón se acelero, por un impulso tire de él acortando la distancia y besando suavemente sus labios, él se paralizó, pero pronto me abrazo por la cintura, fue algo "mágico" sentí algo extraño en el estomago, algo que nunca había sentido antes, ¿me estaba enfermando? ¿apendicitis, tal vez? Las voces de los hombre nos devolvieron a la realidad, nos separamos y sentí como uno de ellos ponía su mano en mi hombro.

-Haber conejita, su tiempo acabo, ahora...-lo interrumpí, ¿pero quien se creía este tipo?.

-¿Conejita? ¿acaso me viste comiendo zanahorias?- pregunte molesta, mirando la mano que se encontraba en mi hombro- Sueltame, antes de que te quebré los dedos.

Risas, los sujetos se estaban riendo, Ian se veía asustado y yo estaba muy enojada, por su bien esperaba que me quitara las manos de encima.

-Eres muy graciosa, conejita- dijo este haciéndome enfadar todavía mas.

-Te lo advertí.

Sin esperar respuesta, tome su mano y la doble con todas mis fuerzas, tome uno de sus dedos y se lo doble sobre el dorso de su mano, el sonido del hueso al romperse y el grito que le siguió del hombre sorprendió a todos los presentes, el sujeto cayo al suelo gritando y tomándose la mano herida, sus compañeros no demoraron en lanzarse sobre mi, patee a uno de ellos en sus partes íntimas, otro de ellos se disponía a golpearme, levante primero la rodilla en forma circular y gire la cadera, luego extendí la pierna golpeando con el empeine su cabeza, el ultimo me empujo pero sin lograr votarme, me acomode y ejecute un pequeño salto en el cual levante la rodilla contraria a la pierna con la que iba a dar el golpe, al hacerlo le pegue justo en el cuello haciendo que cayera de bruces al suelo. Luego de que mi madre me contara por todo lo que habían pasado me había dado cuenta, por que mi padre había insistido tanto en que tomara clases de Taekwondo, me acerque a Ian el cual estaba demasiado sorprendido mirando la escena que estaba frente a sus ojos, tome su mano y lo jale llevandomelo de ahí, mientras caminábamos a paso rápido tome mi celular y le marque a mi padre.

-¿Que paso cariño?- dijo al contestar.

-Papá, hay cuatro sujetos peligrosos en el parque que esta cerca de mi secundaria, al pasar por ahí comenzaron a decirme cosas extrañas y uno de ellos trato de propasarse conmigo- papá no dejo que terminara de contar mi relato cien por ciento verídico, lo escuche dar ordenes para que enviaran a unas patrullas, cuando se quedo en silencio volví a hablar- Papá, yo... Los golpee y creo que le rompí el dedo a uno de ellos, bueno es que, él trato de manosearme y yo solamente...

-Esta bien cariño, hiciste bien, nosotros nos encargáremos del resto.

-Gracias, solo apresurense o se escaparan- dije antes de colgar, me detuve a dos cuadras del parquesito, voltee a ver a Ian y este me miraba molesto.

-Tú...

-De nada- dije antes de que dijera cualquier cosa, solté su mano y él suspiro.

-Estas loca- murmuro.

-¿Que?- dije confundida, ¿me estaba llamando loca después de salvarlo? ¿acaso quería morir?- ¿Loca?.

-Si, te lo dije, mantente alejada, pero tu te metiste en donde no te llamaron- dijo frustrado.

-¿Perdón? ¿enserio me estas llamando loca por ayudarte?- dije algo molesta.

-No es por eso, lo digo porque si uno de esos sujetos se llega a escapar de tu padre, aish- se tiro de los cabellos y al soltarse volvió a suspirar- Tu también estarás en peligro, cualquier persona que este relacionada conmigo es un blanco para ellos, mucho mas si creen que eres mi novia, no sabes en lo que te metiste.

-No me importa- dije sin vacilar.

-Pues debería- dijo mirándome a los ojos.

-Tu me viste ahí, puedo defenderme perfectamente bien.

-Lo se, ¿pero crees que ellos saldrán corriendo por eso? Ni siquiera yo se cuantos son, ni quien es el que los dirige- di un paso para acercarme a él, tome sus manos entre las mías y las apreté un segundo.

-Ian, digas lo que digas, no te desaras de mi, no te dejare solo, ahora vete a casa, iré a ver a mi padre- solté sus manos y antes de que me contestara lo interrumpí - Pero antes, dame tu celular.

-¿Que? ¿mi celular?- asentí, él metió la mano a uno de sus bolsillos y saco su celular, antes de que cambiara de opinión le arrebate el aparato de las manos, desbloquee su celular y marque mi numero en este, lo guarde con mi nombre y se lo entregue.

-Llámame si necesitas algo- luego de decir eso volví tras mis pasos, sin mirar atrás, corrí para ver si los policías ya habían llegado.

Claro que me había metido en algo que no debía, pero, ¿que querían que hiciera? No podía quedarme de brazos cruzados sin hacer nada, eso no iba con mi forma de ser, ni mi manera de pensar, y obvio no dejaría a ese chico que se veía tan sólo, no lo podía dejar, últimamente mi corazón se oprimía cada vez que lo veía y no solo eso, ahora también se aceleraba y me dolía el estomago, enserio debería ir al hospital, ¿y si era algo peligroso? ¿y si lo que sentía era a causa de alguna enfermedad? Esperaba que no lo fuera.

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N/A:

Hola cositas 😄 les esta gustando la historia? No olviden dejar sus votos y comentarios, es gratis...

El titulo es obra de mi hermana mayor, cuando le pregunte como podría ponerle, ella me dijo eso jajajaja así que bueno, así numa pues...

Les pido también que se pasen por mis otras obras 👌🏻 se las recomiendo 😂

Sin mas que decir me despido, sayonara 😘

♥HarunaNanami😋