041
Una sonrisa se posicionó entre mis labios, para acercarme hacia él.
—¿Dónde diablos te habías metido? —indague pero el pelirrojo guardó silencio.
Aprecie su perfil detenidamente, su nariz era todo un poema pero eso era otro tema. Su mirada fija, mantenida más allá de la superficie que la ventana le permitía; por lo que no tarde en asomarme a ver aquello que lo tenía tan sumergido en su propio mundo.
Para mi sorpresa, el rostro de Jimin fue lo primero que acerté al observar. Luego me percaté de la presencia de otra persona conversando con él, una chica. A duras penas logre apreciar como su cabellera rubia y larga llegaba hasta su cadera; y en cuanto él se movió, aprecie su rostro.
—¿Unnie? —achique mis ojos en un verdadero intentó por ver con mayor claridad.
Sip, definitivamente era Umji unnie, pero... no sabía que ellos se conocían.
—Raro... —susurre vagamente. Pensativa, de pronto, un pequeño detalle se asoma por mi cabeza.
En los pocos meses que transcurrieron y el escaso tiempo en que pude conocerlos; he notado que Jungkook y Jimin no tienen un buen trato entre ellos. Es más, me atrevo a señalar, que habría una posible enemistad entre ellos.
—Jungkook. —volvi para verlo— Tú no te llevas bien con Jimin, ¿por qué? —por supuesto que ignoró mi pregunta para seguir observandoles con una expresión llena de amargura, diría que hasta de odio— Oppa parece ser un buen chico, él...
—Todos parecemos buenos chicos. —el timbre de su voz me pareció mucho más áspera— Eso no significa que nos conozcas realmente.
De pronto siento como mi estómago comienza, ligeramente, a sufrir punzadas que lo aprisionan espantosamente.
¿Por qué?
—Si, pero nadie puede ser tan malo.
No conozco la reapuesta, pero prefiero ignorarlo momentáneamente. De seguro solo comí algo en mal estado.
—No puedes saberlo.
—Quizas no, pero nadie es una mierda de por sí. —recompuse mi postura para llevar una de mis manos hacia mi vientre— Si existen personas así, por algo es. ¿No lo crees?
—Quizás porque las personas son mierda generalmente, te acostumbras y te vuelves en una también. Como todos los demás.
El timbre utilizado me sumerge en un sentimiento único, frío, y distante, mucho más que de costumbre. De igual modo que si me estuviera reclamando por algo que ciertamente desconozco.
—¿Qué quieres decir?
—¿Quién sabe? —al fin volteó para verme directamente a los ojos— quizás solo divago.
Justo ahora me siento desorbitada, totalmente reprendida, como si hubiese hecho algo realmente malo y mi novio estuviera delante de mi celandome o algo por el estilo...
Extrañamente, las palabras no logran salir de mi boca ni ser pronunciadas, pero tengo tantas cosas que decirle, demasiados insultos preparados naturalmente de por si pero... nada salía.
Sin desearlo, quede completamente estática con el inminente contacto de sus ojos. Y es que el par de ojos oscuros, profundos y meramente frívolos generan una angustia que no puedo expresar. La simple conexión visual me recorta el aire.
No puedo ni siquiera contradecir o moverme, me encuentro completamente a su merced en un juego mental, que ya no logró ni siquiera comprender.
El menor se adelantó unos cuantos pasos hacia mi, únicamente para terminar pasando de largo.
Una vez lejos de su presencia pude respirar correctamente. Pero eso no detuvo a mi corazón, el cual se agitó repentinamente; mi pecho bombeo, subiendo y bajando descontrolado.
—¿Qué es esto? —eleve mi mano esta vez a mi pecho, para volver la mirada por donde se marchó— Jungkook... ¿qué demonios me haces?
•••••••••
—Ese idiota... —me encontraba buscándole por todas las instalaciones del instituto.
Habíamos quedado con Jin de que ambos deberíamos a buscarlo. Claro que después de dicha reunión familiar, tal cual lo pensé, se perdió por completo en un estado de shock. Sin duda alguna, fue el castigo perfecto que buscamos a su falta de interés.
Obviamente, el llorón de hyung no soportó verlo caer de nuevo en dicho estado. Que irónico teniendo en cuenta que fue él quien queria proporcionarle el peor susto de su vida.
Con un resoplido volví a quejarme.
¿Por qué tengo que hacer esto?
—¡Oh! Min Yoongi~. —reconozco perfectamente ese timbre de voz.
—¿Qué haces aquí? —volteo a verla, y tal como pense, la de baja estatura sonrió tiernamente delante de mí.
—Estoy bien oppa, gracias por preguntar~.
—Yewon. —replique frunciendo el ceño.
—No te estoy siguiendo, si es lo que piensas. —solto una leve risilla traviesa, la cual, indiscutiblemente hizo palpitar mi corazón.
—Como sea. —voltee dispuesto a seguir en mi busqueda de Jungkook o al menos distinguir la presencia de Hoseok por algun lado. Aunque tal vez, solo quiera despejar mi mente de esta extraña sensación al estar en su compañía.
Pero claramente la menor no me lo dejaría pasar. No tardo en acomodarse detrás de mí, para proseguir a seguirme en silencio.
Acaso, ¿no te cansas Yewon? —una tonta y leve sonrisa me tomó por sorpresa, realmente... eres diferente.
•••••••••
—Rinnie. —voltee con una leve sonrisa para con ella.
—Yuju, —susurre— ¿terminaste con el proyecto de naturales?
—De hecho es en grupo de cuatro, planeaba hacerlo juntas. ¿Qué opinas? —indago con una sonrisa.
—Claro, tú, Sinb, yo y... —no tardo en completar.
—Taehyung. —y ante su nombre, la sonrisa en mis labios flaqueo, débilmente pude mantenerla.
Últimamente me cuesta hablar con sinceridad, aunque se que Yuna no es la culpable de nada, es más, creo que la adoro pero... cuando escucho el nombre Taehyung ser pronunciado y saliendo de entre sus labios, duele demasiado.
—Yerin, ¿estás bien? —cuando me di cuenta, la más alta se encontraba de pie a mi lado, tomandome del brazo con preocupación. Asentí rápidamente.
—Yuju, ¿cuándo nos juntaremos?
—Pues... —sus ojos se desviaron, tome la decisión de voltear a la izquierda, en la misma dirección que ella miraba; encontrándome con un chico delgado y pálido, detrás de este, la distingui.
—Unnie... —ambas nos miramos mutuamente, para comenzar a encaminarnos y acercarnos hasta ellos— ¡Umjie~! —la mayor volteó ante el llamado para sonreír.
—Wuju, Rinnie. —cerró ligeramente sus ojos encantada— Hola mis niñas preciosas.
—¿Unnie qué haces aquí? —pregunto Yuna para volver a ver al mayor, quien no despego su mirada de ella.
—Unnie, ¿es tu novio? —intervengo para romper la extraña atmósfera. Apreciando las mejillas de la rubia sonrojarse, y escuchando una leve risa por parte de la más alta a mi lado.
—A pasado tiempo Yuna. —volvi los ojos sobre el sujeto pálido que me ignoró olímpicamente.
—Oppa. —le devolvió la sonrisa— ¿Cómo has estado? —noté sorpresa en la mirada de Umji, quizás tanto o más que en la mía.
—¿Se conocen? —no tardo en preguntar.
—Hace unos tres años que no nos vemos... —recordo Yuna con una sonrisa.
—No sabía que habías regresado. —admitió con seriedad.
—¿Oh? ¿Hobi no te dijo nada? Eso es tan triste... —generó un leve puchero entre sus labios. Por lo cual nos dedicamos una rápida mirada en conjunto con unnie.
Sera que de alguna forma nos sentiamos fuera de lugar.
—¿Hyung? —en cuanto el tombre de Taehyung se hizo presente, mi pecho bombeo. Volvi para verlo correr rápidamente hacía nosotros— ¿Qué haces aquí?
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top