Un nuevo día se asomaba por el campamento mestizo y para la mala suerte de Thalia la hija de Hécate no había aparecido aún, llevaba buscando como loca a la chica a los alrededores del campamento con ayuda de las cazadoras y algunos campistas, pero tal parecía que la tierra se la había tragado.

—Thalia, hemos buscado desde que el sol salió y no hay rastro de Hailey —Jason miró con pena a su hermana—. Debes decirle a Artemisa, ella podría ayudarnos —Thalia quiso negarse, quiso negar al hecho de que había perdido a Hailey, que había fallado, pero no podía dejar que el tiempo siguiese corriendo, debían encontrar a la chica o algo malo pasaría.

—De acuerdo.

Thalia no logró ni dar un paso cuando se escucharon unos gritos, todos voltearon hacia el lugar del que provenían aquellos gritos y de entre los árboles del bosque salió un hijo de Hermes con alguien en brazos, Thalia reconoció el cabello de aquella persona y corrió hasta ellos con los demás detrás suyo.

—¿Dónde la has encontrado? —preguntó en cuanto estuvo frente al chico.

—Estaba cerca de los límites de la barrera, intenté despertarla, pero no ha reaccionado —aquello preocupo a la hija de Zeus y posó una mano en la frente de la chica al ver sus mejillas coloradas.

—Por Zeus está ardiendo en fiebre, debemos llevarla a la enfermería —el chico hijo de Hermes asintió y se apresuró con Thalia a su lado hacia la enfermería, Thalia pedía que aquello solo se tratara de una gripe y no de algo más.

Mientras la hija de Zeus y el hijo de Hermes iban a la enfermería los demás miraron el andar de estos.

—Es su segunda ida a la enfermería en lo que ha estado aquí y no creo que sea la última —Annabeth suspiró mientras Percy le abrazaba por los hombros.

—Siento que algo no está bien, como si Hailey cargara algo más que solo una profecía —esta vez habló Jason, el rubio era demasiado persuasivo cuando se trataba del dolor de otros, lo mismo había ocurrido cuando conoció a Nico había sentido la necesidad de protegerle y lo mismo ocurría con Hailey, quizá era por ello que Thalia mantenía una continua preocupación por la castaña.

—Todos tenemos un pasado, Jason.

Ninguno pudo contradecir a Piper siendo que ella tenía razón, todos tenían un pasado, todos tenían secretos y todos tenían algo que odiar u ocultar, la vida no era nada fácil para los hijos de los dioses, tal parecía que solo ser hijos de estos cargaban siempre un peso sobre sus hombros.

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Will Solace se encargaba de revisar a Hailey ante la atenta mirada de Thalia, el hijo de Hermes que había encontrado a la chica se había ido siendo que ya había terminado de ayudar en la búsqueda de Hailey y ya no veía caso de que él siguiera en la enfermería, Thalia le había agradecido antes de que este se marchase.

—Tiene fiebre gracias a que ha dormido en el bosque, sus defensas estaban bajas, pero la última vez que la vi no tenía defensas bajas, de hecho, se encontraba bastante bien —Will se alejó de la castaña y miró a Thalia—. ¿Tuvo alguna impresión fuerte? —Thalia se limitó a asentir—. Estas impresiones pueden ser la causa de que enfermara, la mente puede afectar más de lo que quisiéramos nuestra salud —Will suspiró mirando a la chica detrás suyo—. La cuidaremos bien hasta que despierte, no puedes quedarte aquí todo el tiempo Thalia.

—Lo sé —Thalia miró a Hailey, su cabello era un desastre en su rostro aún había rastros de tierra y se encontraba pálida con ojeras debajo de sus ojos cosa que le hizo recordar a Nico y que debía hablar con él a pesar de no ser tanto de su agrado—. Cualquier cambio no dudes en ir a buscarme —Will asintió y siguió con su trabajo en la enfermería, aquel lugar nunca tenía descanso gracias a los entrenamientos contantes de todos los campistas.

Thalia salió de la enfermería y caminó hasta la casa de los hijos de Hades que actualmente solo era habitada por Nico, esta era completamente negra con antorchas a ambos lados de la puerta de esta y un cráneo encima de esta, la decoración de la cabaña describía perfectamente la personalidad del dios de la muerte.

—Nico —Thalia tocó repetidas veces la puerta del chico hasta que este le abrió de mala manera y le vio con el ceño fruncido, por más que la chica fuera la hermana de Jason no era del todo de su agrado por el simple hecho de pertenecer a las cazadoras de artemisa.

—¿Qué?

—Necesitamos hablar —empujó al chico dentro de su cabaña y entró en ella sin esperar ser invitada.

—¡Ey! ¡Sal de mi cabaña! —Nico quiso sacar a la de pelo corto de su cabaña, pero fue inútil tras la mirada que la chica le dio, bufó molesto y se sentó en uno de los sillones que había ahí, Thalia suspiró intentando controlarse para no soltar alguna grosería.

—No puedes seguir comportándote como un crío, tienes diecinueve compórtate como tal —Nico quiso replicar, pero Thalia se lo evitó—. Hemos encontrado a Hailey —Nico ni siquiera se movió ante aquellas palabras, sabía que la chica había desaparecido desde su pelea gracias a Jason, pero realmente poco le importaba—. Escúchame bien Di Angelo, no sabes nada de Hailey, no sabes todo lo que ha pasado ni lo que ha tenido que luchar para llegar a este campamento. Vi lo que hizo ayer, vi el porqué de tu enojo, pero no puedes culpar a alguien que no es consciente de lo que hizo —Nico se sorprendió por lo que Thalia había dicho más no lo demostró, Hailey realmente no era consciente de que cambia de rostro con el de su hermana—. Ella no sabe que ha estado cambiando, que su rostro cambia por el de Bianca, ella no es consciente de ese poder —Thalia mantenía su seriedad—. No te rogaré ni te pediré un favor, solo te hago una recomendación, si Hailey quiere hablar contigo escúchala, ella debe decirte algo y es relacionado con Bianca —la sola mención de Bianca hizo al chico romper aquella seriedad que había tenido desde el inicio.

—¿Bianca? ¿Qué sabe ella de Bianca? —Nico se había levantado del sillón para acercarse a Thalia intentando obtener más información sobre su hermana, pero Thalia negó con la cabeza.

—No soy yo quien debe decírtelo —sin más la de ojos azules eléctricos salió de la cabaña del hijo de Hades dejando a un Nico más que confundido y frustrado, el hijo de Hades no logró controlarse y tomó todo aquello que estaba en su paso lanzándolo por todas partes provocando que la cabaña de Hades fuera un total desastre y aquello no terminó hasta que Nico se sintió completamente tranquilo. 

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Esto se está prendiendo, ya falta nada para que Nico sepa la verdad, pero nunca hay paz en mis historias *risa malvada* 

Voten y Comenten que les ha parecido la historia, os observo desde lejos...

Pelirroja W