•Hablemos tu y yo •

Era ya por la tarde y Izuku caminaba hacia su casa .

Todoroki le dijo por teléfono que tenia que ir directamente a su casa así que él se fue solo.

Se sentía raro sin tener a Todoroki a su lado pero solo era un día,  verdad? Tampoco tenía que ir y exagerar.

Todavía se preocupaba por Todoroki y su relación con su padre. No era buena eso seguro pero, seguía siendo su padre y espera a que cambie. A veces hay que dar lecciones a los padres, no siempre tienen la razón.

Suspiro, estaba cansado de tanto escuchar lo que decían en la academia en la que se metió. Pero, así tiene que ser. Quieres ser un profesional pues entonces tienes que aprender.

Pateaba una pequeña piedra del suelo por aburrimiento.

Ya pasaron unas cuantas semanas cuando Shōto entro a la academia Yūei. Le contaba algunas cosas y también de que estaba Kacchan en su clase y que gritaba mucho, pero un pelirrojo le tomo cariño y lo perseguía a casi todas partes.

Al recordar eso Izuku sonrio. Puede que ya encontró a alguien a quien amar.

Levanto la vista viendo como la gente caminaba tranquila con sus sonrisas. Y pensar que antes le daban algo de envidia ... aunque a veces seguía pensándolo pero recordaba a Shōto diciendo su nombre y eso lo tranquilizaba.

Suspiro nuevamente ya estando cerca de su casa.

Pero paro al oír una voz muy conocida para él.

-Deku...

-Kacchan...