3: ¿Y tu quién eres?

ADVERTENCIA: Este contenido es solo para entretener, se me ocurrió a mi y solo a mi, cualquier coincidencia con otra historia es mera coincidencia.

Se advierte de escenas o lenguaje no aptas para todo público. Se recomienda mantener la discreción.

A continuación habrá muchas referencias.

Y bueno ahora si ya, que empiece la función.

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Volviendo a lo anterior y volviendo adentrarse a la oficina mágica.


- ¿En serio? La misma ropa que ayer.

Arista: No, esta vez traigo un pescador negro, al igual que mi sudadera.

- Ustedes los mortales tienen una forma muy peculiar de vestirse.

Arista: Miren quien lo dice.

- Porque yo invente mi ropa, y también la suya así que esto no es discusión.

Arista: ¿Y bien? ¿Qué tengo que hacer?

- A no no no no no, NO. Aun no resolvemos todas tu dudas, ¿O si?

Arista: Nop.

- Bueno, hoy haremos eso -deja de bromear y mira el brazalete de su brazo derecho-. Muy bien, aun tenemos tiempo.

Arista: ¿Tiempo para qué?

-Ya lo verás.

Arista: ¿Ok...?

- Ayer te corrí sin a ver terminado con tus dudas, pero tranquila, ahora podemos discutir sobre todas las preguntas que aun tengas porque ya aceptaste mi solicitud de trabajo. Pero antes te quiero presentar a alguien que esta ansioso por verte.

Arista: ¿Quién?

-se acerca a la cara su brazalete para hablar como si tuviera un micrófono escondido- Ya puedes venir.

Arista: ¿A quién le hablaste?

- A la única deidad en la que confío. Más que en mi jefe. Y a la única que conseguí; pero no le digas porque estaré muerta si se entera.

Arista: (Solo espero que no sea como ella).

- No, él es más cerio.

Arista: ¿Eh?

En eso aparece otro portal de su lado izquierdo azul cielo y de él sale una persona del mismo tamaño enorme que la diosa.

- Espero que valga la pena que me hayas llamado en estos momentos *****.

(Imagen referencia, y sin espada)

Nombre: ?
Edad: ?
Lugar de origen: De quien sabe donde.
Altura: 30 m más alto que la peliazul.
¿Qué hace aquí?: Buena pregunta.

Era un hombre bien parecido, con cabello blanco como una hoja de papel amarrado en cola de caballo dejando suelto algunos mechones cortos sobre sus mejillas brillantes, con una vestimenta fruto de la combinación a la de un soldado más la de un mago, con el detalle que lo cubría una capa que le cubre el hombro izquierdo, botas que daban envidia a la vista para una mortal fanática de botas rudas y toscas que daban pisadas firmes y pesadas, una coloración de ropa oscura y sombría como los pantanos que quedaba perfecta con su cara de pocos amigos que intimidaba aun con esa mirada desafiante y esos ojos grises cristalinos.

- ¿Por qué rayos nos interrumpes en estos precisos momentos? -habla el peliblanco-.

- Necesitaba tu ayuda -responde su cuestionamiento con un tono bromista-, ¿Y dónde esta mi muñeco?

Arista: ¿Qué muñeco?

- Yo no soy tu muñeco.

En eso un chico aparece de repente por detrás del lado derecho de Arista asustándola y haciendo que ella lo golpeé en la cara con un buen puñetazo tirándolo rápidamente.

- (Que buen gancho) -pensaron los dioses-.

- ¡M*erda! -dice el chico dolido-. ¡Eso dolió!

Arista: ¡Por dios, ¿Por qué todos siguen haciéndome eso? -se dirige a la diosa y al chico tirado en el piso-.

Arista voltea a ver al chico que golpeo.

Era un chico muy tierno a la vista, con cabello totalmente negro y brillante como comercial de shampoo caro, una vestimenta igual de negra con matices y manchas grises y cafés que claramente hacían parecer que recién salía de una tormenta de arena, su postura aun en el suelo daba aires de caballero, un rostro noble y simpático tan pálido como la nieve pero dejando ver aun un color suave de piel beige, y unos ojos de color negro profundo pero que le daban una mirada modesta y noble. Pero por todos los dioses, sonará cliché y tal vez así sea, pero era obvio que los chicos perfectos de todas las historias de amor debieron basarse en él como "el hombre perfecto", o eso pensó ella.

(Imagen referencia)

Nombre: ?
Edad: ?
Altura: 1.90 metros

- Él se lo busco -habla el peliblanco con apatía hacia el chico-.

- Si hubiera estado atrás de ti, tal vez no hubiera pasado eso -habla la peliazul-. Aunque aún así terminaría siendo golpeado mi muñequito.

- Que no soy tu muñeco ***** -habla el pelinegro-.

Arista: (¿Qué fue ese sonido?) ¿Estas bien? -pregunta al joven y se inclina extendiéndole la mano-.

- Descuida, e recibido mejores -toma su mano que puede sostener con gran fuerza-. Aunque fue un buen golpe lo admito.

Ella sonríe con ingenuidad al notar que no lo lastimo mucho, y entrando en la discusión anterior de los dioses.

- Estábamos trabajando y tu llamada obviamente interrumpió todo -le responde el dios peliblanco a la diosa-.

- No seas exagerado, Tamara me dijo que ya habían terminado su jornada laboral, y que ya estaban por volver a la oficina.

-el peliblanco se fastidia mientras se talla los ojos- Voy a matar a ese ratón de granja barata.

- Que no fue Brance sordo -le reclama al dios-. Además, no te atrevas a meter a mi bebito en esto.

- Como desees -responde el dios con desdén-.

Arista ve como el chico de antes camina para quedar a lado del dios peliblanco y calmar el asunto entre ellos, quedando al lado izquierdo de ella y del lado derecho del peliblanco.

- Pero si, ya habíamos acabado con nuestro trabajo, algo que tu no haces. Y Carlos ya se iba a ir -habla el dios peliblanco-.

- Pues no era mi intención interrumpir su merecido descanso primeramente -responde la peliazul alardeando-.

- Bueno ya, a lo que vinimos -habla el pelinegro-, ¿Por qué nos llamaste?

- Exacto -mira a Arista- ¿Y tú quien eres? -habla el peliblanco-.

Arista: ¿Perdón?

- Ella es mi sucesora final, Arista. Arista, ellos son Zak -el dios peliblanco-, y a su sucesor número 4, Carlos -el segundo- Mi muñequito lindo.

Zak: Vuélvele a decir muñeco a mi sucesor y te desvanezco la boca.

- ¿Por qué? ¿Te dan celos de tu propio sucesor? -le saca la lengua al dios-.

El dios se irrita y desvía la mirada de la diosa con fastidio y la diosa le sigue haciendo rabietas.

Arista: Es un placer en conocerlos -duda y le extiende su mano para estrecharla a ambos-.

Él la mira con poco interés y no le estrecha la mano.

Zak: El placer es nuestro -le responde a la chica-. Am... ¿Cómo dijiste que se llamaba?

Ella aleja su mano confundida pero el chico a su lado si le estrecha la mano rápidamente antes de que la oculte.

Carlos: ~El placer es todo nuestro Arista~.

La chica se sorprende por el gesto del chico, y el chico suela su mano suavemente.

- Arista -responde la diosa-.

Zak: Arista, un gusto -se inclina ante ella haciendo una reverencia-.

Carlos: No te quisieron poner un nombre más normal -pregunta el chico-.

Arista: ¿Cómo el tuyo?

Carlos: Touche.

Zak: El problema es que ella es muy joven.

- Por favor. Hubo más jóvenes en otras generaciones.

Zak: No es cierto, y tu sabes porque. Además no me refiero a la edad, sino a su experiencia como mortal.

Arista: Oigan. ¿Me van a decir que hacen aquí ustedes?

Zak: -la fulmina con una mirada firme- En primera, no es bueno interrumpir de esa manera a tus superiores, Y en segunda... -él la mira detenidamente-.

Arista: -lo ve confundida- ¿Qué...?

Zak hace un movimiento con su mano derecha y la inmoviliza, la atrae a él levantándola del piso hasta llegar a su vista y quedando demasiado cerca entre si.

Arista: ¡Oiga, ¿Qué rayos esta haciendo?! -voltea a ver a la diosa-. ¡Diosa azul...!

- Deja que te vea Arista, no te va a pasar nada -entrelaza sus manos como en oración religiosa-.

Ella lo mira pasmada ante su mirada fría posada en ella, el dios la examina detenidamente de pies hasta la mirada de ella quien lo ve mientras este aun la observa, al terminar fija su mirada en la suya que muestra sorpresa y extrañeza.

Zak: No deberías tener ese color de ojos.

Arista: (¿Qué?)

Zak suelta a la chica y la deja caer, pero Carlos salta rápidamente y la logra atrapar aun en el aire antes de que pueda tocar el piso de una manera muy brusca.

Carlos: ¡Por dios Zak! Se mas cuidadoso con tus acciones, casi la matas -baja cuidadosamente a Arista mientras ella se aferro a él-.

Arista: ~Gracias...~ -dice aun conmocionada y debilitada por ese arrebato del dios-.

Carlos: Descuida -menciona dejándola en el piso de pie-.

- Y al menos se más amable con tus palabras Zak.

Zak: No soy como tu *****, a mi no me afectan sus emociones. Por otro lado, dejando tu débil cuerpo mortal, tus padres nunca tuvieron ese color de ojos azulado, casi blanco para variar. Lo cual hará que tengamos muchos problemas en el campo de batalla.

Arista: Los que llamas mis "padres" no lo son... -le contesta algo molesta por como la dejo caer-.

Zak: No me refería a los que tienes como padres ahora niña.

Ella queda sorprendida por la respuesta y se endereza algo a la defensiva hacia el dios.


Arista: ¿Y que tiene que ver el color de mis ojos con esta situación? -pregunta enojada-.

Zak: En tu caso, todo. Porque todas las variantes tienen los mismos ojos de un muerto, nublados, fríos y sin vida, además de contar que su reflejo al verlos ya fijamente muestran una pupila totalmente blanca. Y con tu mirada, me demuestras que tu vida es demasiado nublada para que seas consciente de todo a lo que te vas a enfrentar.

- Ya basta Zak -la diosa lo interrumpe firmemente-.

Zak: ¿Qué? Sabes que tengo razón *****. Ella aun es alguien ignorante para este trabajo -la mira-, y ya es hora de que alguien se lo diga.

Ella queda en shock por sus palabras frías y rectas ante ese comentario directamente.

- Yo le veo mucho potencial, sabes.

Zak: Al igual que a todos los que han sido tus sucesores.

- Es parte de mi trabajo Zak.

Zak: Ambos sabemos que no debe de ser así ***** -él mira a la mortal y luego procede a ver a la diosa-. Y por lo que veo también, aun no le has contado nada sobre la realidad a la que se va a enfrentar -le habla a la diosa peliazul-.

- Se me olvido decir esa parte -se encoge de hombros-.

Zak: Como siempre, y veo que aún no le has dado, ni dicho nada básico sobre esto.

- Eso era lo que estaba por hacer -saca la lengua-.

Zak: -suspira molesto y calma su actitud arrogante por la acción de la diosa- Eres incorregible *****.

Arista: (¿Otra vez ese sonido?).

Ella desvía la mirada de los dioses, nota que Carlos la ve detenidamente.

Arista: ¿Qué me vez? -responde molesta y algo herida-.

Carlos: Lamento que él sea así.

Arista: ¿Llevas tanto tiempo aquí que te acostumbraste a ese comportamiento?

Carlos: Un año no es el tiempo que me gustaría presumir para este punto.

Arista: ¿Y qué es lo que me miras entonces? ¿Mis ojos también son raros para ti?

Carlos: ¿De verdad quieres recibir una respuesta de alguien que tiene ojos negros?

Arista: ¿En serió son negros? -se le acerca para verlo mejor-.

Carlos: Lamentablemente si. Pero ahora ya estoy analizando a alguien que es igual a mi, pero tu los tienes casi grises -se le acerca de igual forma-.

Arista: Deja de decir eso, son azules nada más, pero muchos los ven grises... -se inclina con melancolía

Carlos: Pero debo de admitir que son hermosos, aun siendo así.

Arista: -ella sonríe discretamente y se dirige a el nuevamente con una cara serie-. ¿Y sabes que eso podría incomodar a las personas? Que las estés analizando de esa manera.

Carlos: Lo se, pero tu no ya no eres una persona para mi.

Arista: ¿Qué?¿Por qué? -pregunta extrañada-.

Carlos: Porque estas aquí.

Ella suelta una pequeña mueca de risa y se la cubre con su mano, ladea la cabeza volviendo la mirada a los dioses que seguían hablando y casi discutiendo, y el chico que también sonríe al ver que le saco una sonrisa.

Carlos: Me alegra que te haya echo reír.

Arista: No te creas tan importante por solo una mueca; eso cualquiera lo podría hacer.

Carlos: Muchas personas, pero yo ahora las tengo como meta -la ve de reojo-.

Arista: -lo ve de reojo y vuelve a los dioses- Es como dicen, tienes 30 segundos para dar una impresión a las personas que quieres conocer.

Carlos: A ti te tomo menos que eso para impresionarme.

Arista: ¿Y eso se consideraría bueno?

Carlos: Depende.

Arista: ¿De qué?

Carlos: De que tanto te puedo seguir haciendo reír -bromea con una sonrisa tierna y sincera-.

(Imagen referencia)

Ella se sorprende y sus ojos destellaron de un azul brillante, suelta una sonrisa con completa geniudad, y los dos vuelven con los dioses más tranquilos.

- Por eso te traje, para que me ayudes a explicarle, ya que tu eres experto en eso, y porque eres mi único amigo.

Ella toma su brazo abrazándolo pero un aura transparente evita que se tocen directamente, a lo que Arista lo nota con curiosidad.

Zak: Esta bien, esta bien. Tienes suerte de que te deba varias cosas, y con esto ya quedamos a mano de cada una de ellas -la retira de él-.

- Ok. Aunque me debes más -lo mira con ojos juguetones-.

Zak: -frunce en seño hacia ella- Sentémonos primero, ¿Ya puede crear objetos?

- De echo... la reclute ayer.

Zak: ¡¿QUÉ?! SE SUPONE QUE NO DEBE CONOCER A NINGÚN OTRO SER DE LUZ HASTA QUE ESTE EN SU CEREMONIA DE CONFIDENCIALIDAD, ES CONTRA LAS REGLAS, ¿EN QUÉ RAYOS ESTABAS PENSANDO? -pregunta el dios molesto-.

- En como le iba a pedir mi comida al amo bonito, creo...

Arista: -se acerca a Carlos y susurra- ~¿Siempre se han llevado así?~.

Carlos: ~Te acostumbraras~.

Arista: -vuelve a su lugar- Eso espero...

Zak: ¡Te voy a matar *****! -le habla de forma enojada a la diosa-.

-lo interrumpe- No puedes hacerlo, es contra las reglas -sarcasmo-.

Zak: -frunce el ceño, enojado e irritado-.

- Bueno ya cálmate Zak, apenas es nueva -se talla el oído, aplaude y aparecen unas sillas-. Ya mejor siéntense, mi sucesora aun tiene dudas.

Zak: Y con justa razón teniéndote a ti para explicar las cosas -resopla molesto-.

Arista: Eso ayudaría muchísimo -usa sarcasmo-.

- Muy bien. Dejémonos de habladurías y vamos a empezar con las preguntas.

Se sientan en un pequeño circulo los cuatro y empiezan a hablar.

Zak: Habla, ¿Qué tipo de preguntas tienes para nosotros?

Carlos: Trataremos de resolverlas rápida y correctamente.

Arista: Quiero que me expliquen esas reglas de las que hablan.

- UF... y apenas empezamos.

Carlos: Se supone que tu The Reporter of the Universe es quien te tiene que dar esas reglas cuando vaya a ser la ceremonia de confidencialidad, así que no podemos decir nada al respecto.

Arista: ¿Y por qué sería mío un The Reporter of the Universe?

- No es que seria tuyo, pero te explico. Cuando un The Reporter of the Universe ya es apto para su trabajo como cuidador de la línea del tiempo de un universo, debe tener dos sucesores, ósea nosotros, el dios de vida y dios de muerte; debido a eso, es que a nosotros se nos pone una prueba en la que debemos demostrar ser aptos para que ellos nos acepte para ser sus aprendices, ya que ellos nos tienen que elegir a nosotros dependiendo de las habilidades y cualidades que mostremos y que sean compatibles con las de ellos.

Zak: Aunque ciertamente, conseguir que uno de ellos te acepté como aprendiz es complejo en muchos aspectos. Muchos de nosotros que son puestos a prueba, no logran conseguir ni uno al final de las pruebas por la carga física que se tiene ante su presencia. Y con suerte nosotros logramos uno.

- Es una prueba muy importante para nosotros, tanto así que siempre se tiene esa idea de morir en esa prueba antes de no ser aceptado, ya que nuestro único propósito es del crear vida o darle fin. Y siempre los que no se quedan seleccionados, los llevan a formar parte de una oficina en las casas sagradas, o se convierten en soldados de los Light of the Times, o son sacrificados si es que no tienen suficiente capacidad de coexistir.

Zak: Y así se a dictado desde hace milenios.

Arista: (Demonios, eso es demasiado cruel...) -pensó-. Otra pregunta, si pueden usar portales, ¿Por qué ella callo como meteorito hacia mi casa?

La miran los dos chicos sorprendidos y confundidos.

Zak: ¿Qué hiciste que?

-avergonzada la diosa se encoge- Tenías que hablar...

Zak: Si no lo hubiera dicho su boca lo haría su mente tarde o temprano.

Arista: ¿Perdón? (¿Mi mente?)

Zak: Esperaba más de ti con todos estos siglos entre ellos.

- ¡OYE!

Arista: Esta bien, tranquilo, ella no es la única que conozco que hace ese tipo de cosas extrañas.

- ¿Ya lo vez? -menciono hacia el dios con aprobación-.

Zak: De ti ya no me sorprende nada -él voltea a verla irritado y exhala- Normalmente NOSOTROS NUNCA hacemos eso cuando estamos en los mundos mortales. Pero ocasionalmente debemos entrar en una forma en la que podamos acostumbrar a nuestro mundo de nuestra presencia para no afectar el ecosistema, si fuera el caso de que tengamos que presentarnos en nuestras formas celestiales.

- Además, a la que viste no fue a mi, fue a mi marioneta.

Arista: ¿Una marioneta?

- Si, son representaciones de mi que puedo llevar al mundo mortal solo cuando debo vigilar a todos mis seres directamente, ya que si yo voy a la tierra se armaría un caos por lo que menciono Zak.

Arista: ¿Por qué?

- Por lo mismo que te dije unos días atrás, que las variantes nos detectan cuando entramos a un mundo. Por lo cual solo podemos entrar a estos de una forma en la que no seamos detectables.

Zak: Convirtiéndonos en unos mortales o llevar marionetas, son las opciones que tenemos.

Arista: ¡¿Ósea que hay variantes en mi mundo?!

Carlos: Así es.

Zak: Y lo demás ya lo sabrás cuando estés más experimentada.

Arista: *Ehem*...Ok, ¿Y cómo es el proceso para que se alimenten?

- ¿Eso no ya lo habías preguntado?

Arista: Eso no te lo pregunte.

Carlos: Ellos como son seres que si pueden morir, deben estar constantemente alimentándose de seres que si con una pequeña cantidad de la energía que expulsan los The Reporters of the Universe para mantener su vida inmortal, o al menos para mantener un margen de unos 1000 años más como inmortales.

- Eso es cierto -mira al dios peliblanco-. Que bien has educado a Carlos.

Zak: Lo se, soy el mejor en esto, más que tu.

- Deja tu humillación para otro momento, esta es una situación seria.

Zak: Nosotros solo nos alimentamos de nuestro The Reporter of the Universe cuando están en su fecha de evolución o en una cierta fecha en la que están en una metamorfosis para canalizar mejor su poder y su mente; pero cuando queremos alimentarnos de comida orgánica no sentiremos nada porque solo es materia orgánica sin ningún nutrimento estelar.

- Pero si no recibimos esa energía en el periodo de tiempo que se nos dicta, perdemos inmortalidad.

Arista: ...Ya entiendo.

Zak: Muy bien, siguiente pregunta.

Arista: ¿Por qué ustedes poseen el pelo de colores?

- Es por lo anterior que hemos dicho, somos criaturas místicas y mágicas, ¿O acaso crees que nosotros, los dioses, deben ser iguales que los mortales? Eso sería una incoherencia considerando que no nos deben de ver como mortales, sino como sus superiores y criaturas más por arriba que ellos. Así que si, serán nuestra representación, pero no una que llegue a creerse superior que nosotros.

Zak, Arista y Carlos la ven sorprendidos por su respuesta.

Zak: (Ahora si suena como yo).

- Además, un ejemplo de nuestro poder sería cambiar ese color oscuro de cabello de Carlos a uno más claro.

Zak: (Y... ya volvió) -talla sus ojos frustrado-.

Carlos: No es negro. Solo es más oscuro que el de los demás -se talla su pelo culposo-.

Zak: Por otro lado, nosotros solo podemos cambiar lo que sea de nuestro mundo, así como aspectos generales de nuestros seres, como su piel, altura, color de cabello y demás; pero nosotros no podemos dejar de ser así aunque lo queramos, porque es así como nacimos, y es así como debemos imponer nuestra postura.

- Pero, mientras tengamos los mismos aspectos con los que nacimos, podemos cambiar de forma o nuestras ropas.

Zak: Y lo único que no pueden cambiar ustedes de su forma física, y si es que lo llegan a requerir, son sus ojos, ese es el único aspecto que ustedes no pueden cambiar, ya que como ya has de haber notado, los ojos son lo único que diferencia a las variantes de un ser mortal.

Arista: (Eso no justifica lo que paso hace un momento) -entrecierra los ojos ofendida al dios-. ¿Y nosotros podemos usar nuestros poderes en la vida real?

Zak: Si. Solo que cuando uses tus poderes, estos no deben de ser para ayudarte a ti, deben ser usados para ayudar a los demás, los puedes usar para muchas cosas, pero jamás para dañar a otro ser, no sin ser necesario.

Arista: Esta bien. ¿Y ustedes usan armas? Ya saben, para ese trabajo de campo del que hablan.

- Esa es una pregunta cuestionable, si no eres alguien peligroso para estar preguntando por armas.

Arista: No soy del tipo de hacer tiroteos por donde quiera.

Zak: Supongo que tienes razón en eso. E visto tu historial de vida y no padeces de nada parecido a la psicopatía o la locura.

Arista: ¿Lo viste? (¿A que se refiere con eso?) Si no hay nada aquí que te haya dado esa información de mi.

Zak: No necesito papeles o algo de eso para saber quien eres.

Carlos: ¿Y por qué la pregunta?

Arista: Es que en cualquier lado lo preguntan.

Carlos: ¿En serió? No lo sabía. De ser así, hubiera preguntado antes -queda pensativo-.

Zak: Se hará una excepción solo porque estas en buen estado mental, y porque no tienes tendencias psicópatas. Después de que se hace el contrato de confidencialidad, se te da la opción de querer usar armas para tu protección, ya que también pueden ser para otro uso de tu poderes.

- Pero para usarlos se debe tener de un objeto de valor muy personal para llevar a cabo la energía en este.

Arista: Pensé que era broma eso de los poderes -se asombra-.

Carlos: Es parte del contrato por decreto.

Arista: ¿Y ustedes tienen un arma?

- No una como tal, ya que nuestra magia y nuestro ser es nuestra única arma, y por lo tanto no somos de esos tipos de seres que buscan hacer daño con armas sino con nuestra propia mano, fuerza y astucia.

Zak: Aunque tu de inteligente no tienes nada.

- Cállate o te llevo directo a un agujero negro.

Arista: Bueno... ¿Qué es ese brazalete que ella tiene en el brazo derecho y ustedes en el brazo izquierdo?

- Es un comunicador, para nosotros solo es un adorno más que sirve para cualquier cosa que queramos hacer o como ayuda para ordenar nuestro mundo mientras estamos en otros.

Zak: Aunque normalmente esos tienen un uso diferente para ciertas cosas, no para esas cosas inútiles que ella dice hacer.

Arista: Eso quiere decir que todos ustedes tienen uno.

- No. Pero varía en muchos casos, para nosotros es un objeto para usar en el contrato de confidencialidad o para otra cosa importante, como para ver nuestro universo mientras no estamos cerca de él; pero para ustedes es como un medio por el cual manejar el poder que se les da mientras están en otro universo.

Arista: ¿Por qué dices cuando este en otro universo?

Zak: Si ya te dijo la historia del universo deberías entender que es para que no nos detecten, y tampoco te detecten a ti las variantes mientras estas en una misión.

- Es como un método de camuflaje.

Arista: Ya veo, ¿Y si ellas se esconden en universos inaccesibles para nosotros?

- Cualquier universo es accesible, incluso el más pequeño.

Zak: Pero eso solo sería en una situación poco común, porque solo existe un universo del que no nos podemos encargarnos, los demás son accesibles.

Arista: ¿Y cuál es esa situación poco común?

- Pues sería el universo en el que nacimos.

Arista: ¿Entonces no pueden estar cerca de donde nacieron, y solo pueden mirar en otros lados?

Zak: Exacto. Porque es una regla que nos dicta que esta prohibido que nosotros entremos en los universo que nacimos.

- Y también la de nuestro propio mundo, ya que aunque no podemos interferir, debemos de informar de las variantes en nuestro mundo a los líderes y ellos serán los que nos darán órdenes de interferir o dejar que otros sean los que se encarguen de eso.

Arista: Ósea que en las peleas de nuestro mundo, no debemos interferir.

Carlos: Interferiremos cuando las amenazas sean hacia los mortales ya directamente.

Arista: Entonces, ¿Quiénes se encargan de las variantes de nuestro mundo?

- Otros sucesores obviamente.

Arista: ¿Nosotros no podemos encargarnos de nuestro mundo?

- No, y por eso otros sucesores y dioses pueden hacerlo.

Ella aun queda confundida por esa respuesta pero decide guardarse la duda.

- Muy bien, prosigue.

Arista: Siguiendo con el tema de la reproducción suya- antes de terminar esa frase se le interrumpe-.

Zak: No inventes *****, por favor, apenas la reclutaste y ya le dijiste como nos reproducimos.

- Pues ella quería saber, ¿Y como me iba a negar en responderlo?

Zak: Contigo ya no se que más esperar -responde a la chica shockeado y se dirige a la chica-. Solo es saber las reglas de la evolución solitaria por el resto de tu vida, no todo el proceso.

Arista: ¿Y ustedes conocieron a sus padres o algo que los llevara a conocerlos?

- Solo por sus libros supimos quienes fueron.

Zak: Por ese único medio los pudimos conocer. Mis padres renacieron, mi madre es una campesina de una granja en el universo 203, y mi padre es un monje de iglesia en el universo 590, pero uno que si tiene mucha fe en dios. Lastimosamente para ese universo.

- Si, pobre del dios de ese universo al que veneran.

Zak: Lo se.

Arista: ¿Y a ti?

- Pues, mi padre renació como un ciudadano normal en el universo 452, y mi madre aún no, ya que de ella no e sabido nada al respecto desde su muerte.

Zak: Además de que no sabemos si enserió pudo renacer.

Arista: ¿Por qué lo dudan?

- No es una respuesta que aun te pueda dar. Y también es un tema bastante complejo.

Zak: Bueno, sigue con las preguntas.

Arista: Ok... ¿Ustedes son más grandes que dios o lucifer?.

- Oh si, quiero aclarar eso, nosotros somos el llamado "Dios'' y ''Lucifer'.

Arista: ¿Qué?

-Es más sencillo de lo que parece. Cuéntale -le hace una pequeña seña-.

Zak: -la ve y mueve la cabeza- De otros universos se eligen a 2 Watcher of Worlds, que somos nosotros, somos llevados a un universo diferente para crear y cuidar los mundos en ese universo así como a sus seres en ellos; además de que también ayudamos a los mortales en su evolución en cada siglo que les prosigue, aunque eso ya no se hace del todo.

Arista: Pero existen muchos dioses antiguos en nuestra historia, ¿Cómo es que solo dos de ustedes pueden ser ellos?

- Eso es porque simplemente no podíamos atender una petición por persona, así que hicimos clones de nosotros, pero les cambiamos el aspecto para que se hicieran cargo de lo que los humanos creían que podíamos hacer.

Arista: Entonces toda la historia de los hermanos los dioses y todo eso...

Carlos: Era mentira, lo se. Yo igual me sorprendí por eso.

Zak: Y es de saberse que los mortales se sacan de su mente loca cualquier cosa para hacer ese tipo de historias sin dar explicación alguna. Sin ofender Arista.

Arista: -lo mira con cinismo- (Como si no me hubieras ofendido antes) -piensa la chica molesta-. Yo también creía que eran historias muy locas. ¿Y entonces, todos lo de los hermanos y el incesto nunca fue real?

- Obvio que no.

Arista: ¿Y las pinturas que hay de ustedes o lo que sea?

- Solo dejamos que observarán los clones para su disque "desarrollo del arte", pero a fin de cuentas, fue solo parte de un accidente.

Arista: ¿Y sus hijos o semidioses?

Zak: Eso fue porque queríamos hacer un experimento de ver si podríamos crear seres igual de poderosos que nosotros en el mundo mortal, pero terminaron siendo una decepción y no llegaron a ser más que mortales normales con más capacidades que los demás.

Arista: ¿Y qué paso con ellos?

- Pues murieron, obviamente porque no soportaron su propio poder.

Arista: ¿Y entonces?¿Quién era dios y quien era lucifer?

- Yo soy Dios o la vida; y Zak es Lucifer o la muerte.

Zak: Solo porque perdí la apuesta, que ella gano ese título.

-suelta una risa- Idiota. Aunque antes íbamos a ser al revés.

Arista: ¿Por qué?

- ¿Recuerdas lo que pasaba en la biblia que decían de los dos primeros humanos, Adán y Eva?

Arista: Si.

- Pues en realidad Adán era la representación de dios, que en este caso sería Zak, y Eva tenía que ser la representación de alguien, en este caso yo que hubiera sido lucifer. Pero como intercambiamos papeles y de ahí habían salido las ideas, Adán y Eva murieron con todas esas creencias de que él hombre fue quien cometió el primer pecado, sino que fue Eva, porque demostraría que las mortales van a traer la destrucción al mundo.

Arista: Que sanguinario.

- Lo se. Y ese plan se me ocurrió apenas iba empezando a crear la tierra. Incluso si buscas en las demás especies todas las criaturas mortales hembras son unas sanguinarias porque no les interesan nadie más que ellas mismas y su poder sobre la reproducción.

Zak: Pero la teoría más acertada de los mortales sobre su evolución es la que menciona que fueron desde especies acuáticas o mamíferos hasta las terrestres.

- Y vaya que fue difícil darles los recursos de vida necesarios para su evolución.

Arista: Ok, creo que fue demasiado texto sobre eso.

- Concuerdo.

Arista: Me dijiste que lo del desarrollo de las especies lo hacían antes, ¿Pero porque ya no?

- Esto fue porque los mortales cada vez que se les daba ayuda y beneficios, hacían con estos una forma de matarse entre si, les dimos todo: formas de caza, formas de desarrollo industrial, etc; pero como siempre, buscaban una forma de destruirse con lo que les dábamos, así que se les dejo de brindar ayuda.

Arista: Eso tiene sentido, considerando la forma en la que nosotros buscamos poder sobre los demás.

- ¡Si, lo entiendes! Que genial es esta chica, ¿No lo crees Zak? -se pone feliz y ve al dios con malicia-. Además de que todo lo que yo les di es para todos, pero los mortales siempre se quieren hacer dueños de todo. No se de donde pudieron sacar eso.

Zak: (Como si no lo supieras) Llevas mortificándote por eso durante más de miles de millones de años.

Arista: Eso es cierto. Espera, ¿Más de miles de millones? ¿Eso que significa?

- Oh, es cierto, ellos no saben que su universo lleva más de tiempo del que creen.

Arista: ¿Incluyendo la tierra?

Carlos: Incluyendo la tierra.

- Además de sus "amigos de otros planetas", también ustedes que ya han pasado por mucho más tiempo, pero con otra avanzada tecnología en otros planetas. Y de vez en cuando van a visitar su planeta creador.

Zak: Que hasta eso, quien sabe como es que sigue estando vivo TARRON.

- Porque aun seguimos yendo con el.

Arista: ¿El planeta tierra tiene nombre?

- Si, y es un gran conversador, siempre cuando voy lo escucho a través de uno de mis títeres, hablo con él. Siempre tiene temas de conversación para hablar.

Arista: ¿Y cómo lo pueden oír?

- El habla con nosotros a través el aire, y sus movimientos de tierra y olas de mar, obvio.

Arista: ¿Y cuántos años tiene?

- *Pff* ni que fuera a decírtelo. Esa es información confidencial.

Zak: Y porqué ella no lo sabe.

- ¡OYE!

Arista: -suelta una mueca de risa- Volviendo al tema, ¿Y por qué no puedo escuchar, lo que supongo yo, es el nombre de ella? Yo solo puedo escuchar estática.

Zak: Porque no esta permitido que los mortales sepan el nombre real de ella. Y lo podrás escuchar cuando te conviertas en su sucesora ella y te otorgue el permiso para escuchar su nombre.

Carlos: Por eso puedes escuchar el nombre de Zak, ya que fui el último sucesor que él eligió y que descubrió su nombre.

Arista: Hm... entiendo, otra pregunta ¿Desde hace cuanto se conocen ustedes?

- Ya te lo dijimos, fuimos elegidos para ser tus dioses hace millones de años, y porque nuestros jefes son hermanos, así nos hicimos amigos.

Zak: ¿Nos hicimos amigos?

Arista: Me refería a los años.

-lo golpea con el aura- Que insensible de tu parte.

Zak: Siempre e sido así. Me sorprende que aun no te acostumbres.

-se cruza de brazos y se endereza en su silla- Ah Zak lo llevo conociendo desde hace milenios, creo, ya que juntos nos entrenamos en la Academia Celestial donde nos preparan para la prueba final; y a Carlos lo conozco porque él se convirtió en el sucesor de Zak el año pasado.

Zak: Todavía recuerdo ese día, que insensible de tu parte que hubieras sido así de agresivo.

Carlos: Te apareciste de la nada en mi casa, ¿Qué creías que iba a pasar?

- Que le aventaras un martillo a la cara es algo que me hubiera gustado ver, pero si te pasaste esa vez tu también Zak. Además de que Carlos aun no se convierte en un Watcher of Worlds "oficialmente", es un novato aún teniendo un año de experiencia.

Arista: ¿Y por qué?

Carlos: Quiere decir que aun no me e echo un sucesor definitivo.

Arista: Entonces aun estas a prueba.

- Si. Y ya cuando este preparado, o más bien, los dos estén apunto de graduarse para ser sucesores, van a demostrar lo que valen y el porque son los elegidos.

Arista: ¿Voy a graduarme de donde?

- De la academia para los sucesores de nosotros, donde al final del entrenamiento serán nuestros sucesores definitivos. Nosotros les llamamos "Escuela Rango 2".

Zak: Pero en realidad se le llama la Academia de Entrenamiento Ancestral.

Arista: Vaya. Y yo esperando que la escuela terminara cuando estaba en la universidad; y ahora, también voy a tener una aquí.

Carlos: Te acostumbraras. Y no estarás sola.

Arista: Bueno, al menos estas tu -dice conformada con eso-. ¿Y qué se supone que se hará en la ceremonia de confidencialidad?

- Se trata de hacer una unión entre maestro y sucesor hasta que el poder dentro de tu ser salga. Además, ya es muy tarde y ya debíamos de irnos hace varios minutos, y necesitamos testigos -mira a Zak-.

Arista: ¿Cómo que testigos?

- Cuando se hace la ceremonia de confidencialidad se debe tener por lo menos dos testigos que presencien el contrato cuando haya una traición, pero cuando ese testigo muere esta el otro como repuesto; y para eso están estos dos, son los únicos que conseguí que vinieran.

Zak: ¡¿QUÉ? ¿PARA ESTO ME LLAMASTE?!

- ¿De qué te quejas? Debes estar feliz de que te haya elegido a ti, sino hubiera elegido Carlos o a los demás antes que mencionarte a ti, y pues te hable a ti porque nadie más me contesto.

Zak: De los 7 que éramos, ¿Solo a mi me pudiste contactar a mi?

- Que te digo, todos están ocupados.

La diosa peliazul se levanta, chasquea los dedos y hace aparecer un portal con forma cuadrada y un color amarillo blanquecino. Y todos se levantan con dirección al portal.

- Bueno ya, es hora de irnos -desvanece las sillas-.

Zak: -exhala- Ya es hora de trabajar nuevamente.

- Cálmate amigo.

Zak: -la mira irritado- Hasta ahora no creí que volvería a entrar en ese sitio tan pronto, y más teniéndote a ti como acompañante.

- Y con nuestros sucesores -le da una palmaditas en la espalda-. Además, Ya debíamos haber regresado los dos hace tres días para esta cuestión.

Zak: ...Odio cuando tienes razón.

Arista: Supongo que ya es hora de ir a ese lugar donde ella mencionó, ¿O no...? -le pregunta a Carlos para confirmar su teoría-.

Carlos: Es correcto.

- Muy bien, antes de entrar quiero que sepas esto Aris, este nos es un viaje en el que caminas hacia adentro y entras en otra dimensión, no; esté es uno de esos túneles en el que tienes que caminar hacia la profundidad de ellos, todo el panorama se encuentra girando y es muy difícil de adaptar para ti, así que tu me vas a tener que seguir sin quitarme los ojos de encima, Carlos ya lo experimento así que no habrá problema si te llegas a marear, con él puedes confiarte en esto.

Arista: ¿Y de dónde se supone que me sostenga si me llego a marear?

- Toma esto -crea una cuerda que sale de su brazalete-, átala a tu mano y no te perderás; y por ninguna razón vayas a tocar las paredes, o si no, abrirás rutas que no desearás ver en tu vida, ¿Estamos?

Arista: Si. Esta bien -ata la cuerda a su brazo-.

Zak: -se acerca a Carlos y le habla- Vaya, hasta yo tenía más tranquilidad cuando te lleve allá.

Carlos: Porque a ti no te importa la seguridad.

Arista: ¿Y a dónde vamos?

- A nuestra casa, o lugar sagrado, o como la quieras llamar.

Carlos: Aun ni siquiera hemos pasado y ya siento la nostalgia en ustedes.

- No meta ese tema aquí jovencito -desvía ese tema-. Muy bien, entremos.

Los cuatro se adentraron hacia ese portal, que quien sabe hacia donde los llevaría y con que propósito.

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Muy bien amigos, esto es todo por el momento.

Se les quiere y espero que hayan disfrutado este capitulo, fue mas corto, si, pero lo vale.

Los quiero, cuiden se y sa-yo-nara :3

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