Varios murmuraban cosas mientras miraban a Ouma, este quería ya salir de la escuela, realmente empezaba hacerse imposible estar ahí, Saihara lo miraba con preocupación mientras notaba que Miu empezaba acercarse. (Oh, no)

Iruma: Oye pequeño, ¿estás perdido? ¿No ves a tu mami?

Saihara: ¡Oye Iruma! ¿Qué demonios te pasa?

Iruma: Pareces la niñera de este ciego.

Ouma: ...

Saihara: Qué bueno que no puede ver que eres la mujer más horrible.

Akamatsu: ¿No crees que defiendes mucho alguien que no te puede ver?

Saihara: ¿Y? ¿Y? ¿A ti qué te importa?

Akamatsu: ¡Arruinarás tu vida si sigues con este ciego!

Saihara: Arruinaré mi vida si te sigo hablando.

Saihara tomó la mano de Ouma y se fue echo una furia, se notaba que Ouma tenía ganas de llorar.

Iruma: ¡Kyajaja! Te deja por alguien que ni puede ver, Kaede en serio tienes mala suerte.

Shirogane: Yo pienso que se pasaron, ¿qué pasaría si Saihara fuera quien estuviera ciego? ¿También lo tratarías así Kaede? No por tus celos vas hacerle sentir mal alguien como él, realmente deberías estar avergonzados.

Amami: Pienso lo mismo, no sabemos de él, creo que sería mejor conocerlo que criticarlo por estar así.

Momota: Yo sólo hice una broma, ese chico no aguanta nada.

Harukawa: Qué infantiles.

Akamatsu: Cállate, solamente se me hace raro que le importe más ese desconocido.

Yonaga: Angie cree que Saihara gusta del chico nuevo.

Iruma: Eso explicaría porqué jamás te hizo caso.

Akamatsu: Lo último que me faltaba...

Kaede se fue de donde estaban todos, Amami suspiró mientras se llevaba a Shirogane, Maki vio mal a Kaito y se fue, éste la persiguió mientras que Miu fue acosar a K1-B0.

Las clases terminaron y todos se fueron a su casa, Ouma estaba en la espalda de Saihara mientras lloraba, hasta que llegaron a la casa de Ouma, este se bajó y tomó la mano de Saihara.

Ouma: Creo que ya no es bueno que sigas viviendo conmigo, tus amigos no parece que les agrade.

Saihara: No me importan.

Ouma: ¡¿Qué te pasa?! ¡¿Por qué esto?! Sólo soy un desconocido.

Saihara: No, para mí uno, una vez te vi, con tus padres, estaban tan feliz, tan lleno de vida en ese parque, cuando te volví a ver, así... No quería quiero que... ¡La persona que amo esté triste!

Ouma: ¿Eh? No bromees... Nadie podría amar a un ciego como yo...

Saihara tomó las mejillas de Ouma para unir sus labios con los de él, Ouma se sorprendió pero correspondió, sintió algo que desde la muerte de sus padres y la pérdida de su vista no sentía, felicidad, a pesar de no ver la cara de Saihara su mejilla estaba cálida, con las lágrimas que salían, si tan sólo Ouma pudiera ver lo rojo que estaba Saihara. Terminaron separándose.

Saihara: Quiero que ese chico vuelva a sonreír como esa vez, quiero que esos ojos se vuelvan a iluminar, quiero que estés siempre feliz, sin pensar en tu condición.

Ouma: Dime que no es un sueño, que al despertar no estaré solo.

Saihara tomó la mano de Ouma y la puso en su pecho, Ouma podía sentir los latinos rápidos de Saihara.

Saihara: ¿Esto se oye como un sueño?

Ouma: Gracias, gracias...

Saihara abrazó a Ouma fuertemente, esta vez Ouma podía sentir cómo Saihara temblaba, la calidez de su cuerpo, su respiración... Podía sentir todo más claro, más verdadero de lo que nunca sintió un abrazo.