Destrucción.

Lamento empezar así, pero es la única forma de describir el contexto de aquella ciudad.

Destrucción.

Peligro.

Dolor.

Él comenzaba a arrepentirse de estar allí, de haber ido. Pero, no podía negar su ayuda a aquellos héroes que la pidieron a pesar de no ser cercanos a él. Si la pedían, si confiaban en él, no podía fallarles.

Ahora, el anti-heroe solo divisaba escombros por donde lo viera.

Comenzó a moverse con sigilo por los escombros, trantando de no hacer el mayor ruido posible. Lo que menos quería es que la tal amenza lo divisara allí y... no sabía que pasaría pero tampoco quería saberlo.

No sabía por donde empezar a cortar o divagar.

- Wade.

Bueno, pues empezaría por esa voz que lo llamaba.

Se acercaba más y más a esa voz que aun lo llamaba pero que no lograba descifrar a su dueño por más que la escuchara. Pero eso no impidió alcanzar.

Y verlo.

- ¡Peter! -llamó feliz, comenzando a acercarse a él.

Pero se detuvo al ver la expresión en su rostro: desconcierto, miedo, preocupación... ¿qué le sucedía?

- ¿estás bien, Peter? -preguntó con preocupación.

- no sé... qué me sucede... -murmuró el castaño mientras comenzaba a tambalearse hacia él.

Y sin más, tropezó, y estuvo apunto de caer al destruido suelo, pero logró aferrarse con desesperación al anti-heroe frente a él.

- Peter, ¿pero qué-?

- no me quiero... no me quiero, mi amor, no me quiero ir... -volvió a murmurar, y Wade jura haber sentido la voz de su amado quebrarse.

Peter seguía murmurando esas palabras que asustaban demasiado al gran DeadPool. Quiso calmaelo, pero el menor comenzó a hacer desesperados movimientos, perdiendo las pocas fuerzas que poseía en su cuerpo. Y cayó, junto con Wade, cayeron al suelo.

El anti-heroe podía ver como el menor respiraba con fuerzas y se aferraba a la vida.

- no te irás. -le susurró Wade mientras se levantaba un poco su máscara, solo para que sus labios se vieran y mostrar una suave sonrisa.

Suave y rota sonrisa.

Se acercó un poco a él, par apoder sentir sus labios, para transmitirle confianza, para poder calmarle, para que Peter supiera que él estaba allí para él.

- lo siento... -se quedó ese susurró del menor en sus labios.

Y vió como este se convertía en polvo.

- ¡no, Peter! -gritó, apretando sus hombros, pero estos desaparecían.- ¡por dios, NO!

- te... amo... -susurró con una suave sonrisa antes de que esta misma se transformara en polvo.

Y Deadpool terminó con polvo en sus brazos.

- no... no no no... -murmuró, negando con la cabeza, desesperado, sintiendo sus ojos desesperados por llorar.- ¡es solo una broma!

- Wade... -se giró y logró ver a ese señor de dinero con rasguños.- no es ninguna broma.

- devuelvanme a Peter... esto es... una ilusión, de ese doctor raro... por favor... detenganse y regresenme a Peter -pidió al borde del llanto.

- lo... lo siento, Wade. -habló con dificultad.

Con pesadez se levantó de su sitio y sintió que flaqueaban sus piernas por un instante.

No era verdad.

No, no a él.

¿por qué no fue Tony?

¿por qué no cualquier otro que ya hubiera vivido su vida?

Él... era tan solo un chico que comenzaba su vida con un gran poder y una gran responsabilidad... pero comenzaba...

¿por qué no fue él?

- Wade, necesitamos que nos ayudes en este momento de crisis. -pidió el señor Stark.

- ¿y recuperaremos a Peter? -preguntó con miedo.

- es... es incierto...

- solo necesito una posibilidad. -dijo mientras se levantaba y desenfundaba sus katanas.- ¿a quién le corto la cabeza? -dijo decidido.

- nuestro mayor enemigo es Thanos, quien posee las gemas del universo. Pero en este momento, quiero que te deshagas de alguien más.

- solo mencione su maldito nombre y-

- Wade Wilson.

- ¿qué-?

- por no venir antes, y por no salvarlo. -habló fríamente el millonario.- ¡te lo confié! ¡lo cuidarías!

- ¡ya-a lo sé!

- ¿¡entonces por qué no lo hiciste maldito hijo de BEEP-!

Porque... tenía razón...

Si no lo puedo cuidar solo era un hijo de BEEP y BEEP que debia irse a la BEEP-

.

.

.

- Waaade... apaga la alarma... -y con esa voz se levantó de golpe y con la respiración agitada.

"-¡wow viejo! ¡ha sido un sueño de looocos!"

"-Esa no es la palabra que ocuparía yo. Pesadilla encaja mejor"

"-Sueño de locos, pesadillas, maní, es lo mismo"

- callense... -murmuró a sus voces y se giró a su diestra.

Y logró verlo allí, acurrucado, con una leve sonrisa y sus ojos cerrados, y sus cabellos castaños desordenados y aferrandose a la almohada.

Y la alarma aun sonaba a su lado.

- Wade, apaga esa cosa. -volvió a pedir, irritado.

- Peter... -susurró mientras estiraba su mano a la dichosa alarma y la apagaba.- Peter. -volvió a llamar.

- ¿qué quie-?

Lo abrazó, con todas las fuerzas de su asqueroso cuerpo, lo abrazó. Lo quería sentir allí, junto a él. Y quería asegurarse que no se volvería polvo en ese momento. Por ello se separó solo un poco y unió sus labios, con desesperación y dulzura.

Tan solo un instante.

- ¿qué fue eso, Wilson? -preguntó el menor, mirandole con algo de diversión.

- ¿qué? ¿acaso no te puedo besar? -preguntó un poco ofendido.

- puedes, naturalmente. -contestó con una ladina sonrisa.- ¿qué tal dormiste?

- de la mierda. -respondió y eso lo hizo reír a Peter.- hablo en serio. Tuve un sueño de la más pura mierda.

- ¿qué soñaste?

- que te volvías polvo frente a mí y... ya sabes como la cosa... -respondió.

"-¡se hizo cocaína!"

"-¿no te puedes tomar en serio esto?"

- Wade. -colocó su mano en la mejilla contraria.- estoy aquí, y seguiré aquí. No tiene qué temer. -le sonrió.

- Peter. -llamó el mayor.- escucha, pase lo que pase, aunque Stark te lo pida, no vayas a ninguna guerra asquerosa ¿entendiste?

- ¿por qué...?

- confía en mis sueños, una vez soñé con un burrito satánico. Ese mismo día, me comí uno intoxicado.

Y el menor hizo una expresión de asco antes de reír.

- ¡no te rías! ¡me dio algo tan fuerte que tuve que rezar aunque sea ateo! Y si no me crees, una vez soñe que estaba con un niño bonito. Y mirame ahora. -le sonrió.- con el niño más bonito de todos.

Fue suficiente como para hacer sonrojar al castañito.

- ¿soy bonito?

- si no lo fueras, no te besaría ¿o sí? -sonrió antes de besarle fugazmente en los labios.

En las mejillas, el menton, la cien, la nariz, sus párpados, todo su rostro, haciendole reír.

- ya basta. -rió.

- ¿en verdad quieres que pare? -preguntó, deteniendo los besos y mirandolo seriamente.

- no, por favor, besame más. -pidió con un poco de vergüenza y una sonrisa.

- ¡lástima! -se levantó de golpe de la cama.- ¡tenemos un maravilloso día y no quiero que lo desperdiciemos!

- ¡pero Wade-!

- ¡nada de peros! -le dio la espalda mientras se sacaba los pantalones de dormir.

Eran la versión de Spiderman.

- yo tengo que trabajar y tú debes ir a estudiar, así que comienza a vestirte y vete de mi apartamento

- ¡ahhh! ¡no me quiero ir, Wade! ¡no me quiero ir!

Y el menor vio como su amado paraba en seco y su respirar se volvía pesado. Antes de que pudiera llamarle, Wade se giró y pudo ver sus orbes cristalizados.

"¡no denuevo! ¡ya lo había superado!"

- ¿Wade? -llamó preocupado mientras se levantaba.

Y fue atrapado por los brazos del mayor con fuerza. Y escuchó como sollozaba en su hombro. Con algo de temor, su mano acarició la espalda de aquel lleno de cicatrices.

- no-o quiero que-e te vayas... -murmuró el anti-heroe, aferrándose más al menor.- no quie-ero, no quiero... no quiero...

- no-o me iré, mi amor. -respondió, abrazandole.- no lo haré. Y tú tampoco. -dijo, separándose un poco del mayor, para poder ver sus lágrimas.- ya sé que te calmará: un día entero en casa, con Netflix y un fabuloso novio. -le sonrió.

- Pe-eter...

- y chimichangas, las de Barry. ¿y? ¿qué dices?

- ¿qu-ue qué digo? ¡que sí quiero! -chilló para luego abrazarle otra vez.- ¡pero tus estudios-!

- me arreglaré después -respondió mientras lo guiaba a la cama.- pero hoy solo seremos tú y yo.

"- ¿¡pero que hicimos para merecer a este muchacho!?"

"-me lo sigo preguntando"

Ambos se recostaron en la cama, mientras Peter se encargaba de repartir besos por el rostro con cicatrices mientras este reía y se secaba sus lágrimas.
No lo aguantó más y detuvo al menor, tomando su rostro entre sus manos y besarlo con dulzura.

- no quiero que este momento acabe... -susurró sobre los suaves labios del más bajo.- te quiero aquí por... siempre mi pequeña araña.

- entonces has que dure todo lo que quieras, porque no me iré.

Y rió ante su respuesta y lo volvió a besar.

"-¿es este el fin?"

"-sí, este es el fin"

-FIN-