27-Quebrado

Esa madrugada había llovido sobre el lugar, el cielo parecía haber querido derramar sus lágrimas sobre el cementerio. Las gotas aún caían poco a poco de las hojas de los árboles que parecían tener un verde menos brillante, tal vez por la ocasión, tal vez por el momento...en cualquier caso, el silencio reinaba en el lugar y se extendía hasta donde alcanzaba la vista.

Había pillado el avión que más pronto salía y le daba tiempo a pillar. Tim había dado su permiso e incluso fue él quien condujo hasta el aeropuerto y le pagó el billete. Ni siquiera le dijo al resto del reparto de lo sucedido, eso lo haría Tim para evitarle el mal trago. Tn apenas llevaba algo de ropa. Antes de entrar por la seguridad, el hombre le dio un cálido abrazo y le deseaba un buen viaje y que todo saliera bien.

Pero el tiempo, la vida...es caprichosa y en ocasiones una hija de puta. Y en este caso lo fue pues pocas horas antes de que el avión aterrizase en el aeropuerto, la vida de la madre de Tn se esfumó con un simple suspiro, un último aliento...

—Tn—fue lo único que pudo decir su padre al verlo antes de abrazarlo con lágrimas en los ojos—ella se fue, lo siento mucho hijo mío.

Los ojos del muchacho empezaron a derramar lágrimas, las fuerzas le abandonaban, sentía que iba a caer de no ser por el agarre del padre. Mark también estaba allí, no se había despegado del lugar en todo el día. De hecho pidió un permiso especial al trabajo. Fue el segundo en abrazarlo

—Lo siento amigo, de verás...lo siento mucho—susurró mientras Tn lloraba como un niño pequeño en sus brazos.

—Gracias...por estar aquí...no sé...—la voz se le quebraba, nada salía de su boca.

—No es nada colega.

El entierro se produjo tras la lluvia, los familiares y amigos iban dando el último adiós a esa mujer. Fue mediante esos amigos que se enteró de que ella siempre la pasaba hablando de él, de lo orgullosa que estaba de tener un hijo tan estupendo. Eso terminó de romperlo por dentro, era como un jarrón vacío y reconstruido después de romperse. Los pedazos se podían pegar en su lugar, pero siempre quedaban esas marcas que indicaban que un día sufrió tal golpe que no se podía ocultar esas heridas. Normalmente eran casi invisibles, pero en aquella ocasión se apreciaba demasiado los cortes profundos e incurables. Aunque viviese eternamente, ese tiempo no sería capaz de curar ese dolor.

—Tn—dijo Mark—debo regresar a casa, mi madre aún está de rehabilitación.

—No te preocupes, gracias por estar a mi lado. Ve a casa y cuida de ella—la sonrisa forzada junto a esos ojos rojos demostraban un dolor que debía soportar.

—No es nada, cuenta conmigo. Si necesitas hablar, solamente llama—Tn le tendió la mano para despedirse, pero en lugar de estrecharla, Mark le abrazó, eso hacian los amigos—se fuerte compañero, sana tus heridas y demuestra al mundo de que pasta estás hecha.

Él asintió y Mark se fue.

Tn y su padre estuvieron contemplando la lápida durante un tiempo.

—Aquí yace una estrella, que siempre iluminará el camino de sus seres queridos aunque la oscuridad consuma el mundo en sus sombras. Tus familiares y amigos no te olvidarán nunca—ponía en la gris, fría y dura piedra.

Un ramo de flores, sus favoritas, adornaban la lapida. Pero ni la flor más bella podría hacer justicia a lo hermosa que era ella. Eso era al menos lo que decía su padre tratando de mantener el tipo segundos antes de derrumbarse.

—Tn, debo irme...debo arreglar unos asuntos...no vuelvas tarde a casa—dijo éste aún quebrado—por tu madre, debemos mantener la cabeza alta y continuar—le dio una pequeña palmada en el hombro antes de irse.

El chico asintió y luego, en silencio, él sólo en el lugar donde tarde o temprano todos se despiden de sus seres queridos se sentó sobre la hierba pues era un cementerio algo alejado, más barato pero más tiempo en coche. Muchos preferían uno cercano o tener sus cenizas en casa, la decisión dependía de la familia.

Tn había preparado un discurso, pero sus palabras se las llevaría el viento y la tinta se vio arrastrada por las lágrimas del chico al caer sobre el papel. Solamente pudo decir una cosa.

—La...la...—tragó saliva y finalmente pudo recitar la frase—final, no, el viaje...no concluye aquí...la muerte es solo otro sendero...que recorreremos todos, el velo gris de este mundo se levanta...y todo se convierte en plateado cristal. Es entonces cuando se ve...la blanca orilla y más allá...la extensa campiña verde...tendida ante un fugaz amanecer...—era una de las frases favoritas de Tn de Gandalf en el Señor de los Anillos. Y también era una de las favoritas de su madre pues ambos se veían las películas muchas veces. Uno de los pocos momentos que compartían juntos.

De hecho, durante el velatorio pusieron la música de esa escena.

https://youtu.be/kq_p87-qXeo

El tiempo pasó y cuando se quiso dar cuenta ya era algo tarde.

—Debo irme mamá, estés donde estés...te quiero, y siempre te querré—susurró antes de levantarse y marcharse del lugar.

Tras caminar unos pocos pasos, un fino viento cálido pareció acariciar su rostro. Era extraño porque la mañana era fría, y más después de la lluvia. Y se percató que a pesar de la muerte, ella seguía con él.

—Adiós mamá, cumpliré mi sueño—dijo firme antes de marcharse.

Cuando revisó el chat, tenía los mensajes de sus compañeros, todos le daban el pésame y le decían que contase con su apoyo. Él lo agradeció. 

Antes de regresar al rodaje, estuvo con su padre firmando papeles y organizando la casa durante unos pocos días, Tim no tuvo reparos en darle el permiso. La noticia se hizo eco y muchas personas de internet le dieron también el pésame.

Él escribió un tweet en todas sus redes agradeciendo el apoyo, y una foto de él y su madre donde estaban muy contentos y sonrientes.

En el camino de regreso, mientras el avión sobrevolaba la zona, saltó una canción que Tn siempre escuchaba y que en ese momento le llegó al alma.

https://youtu.be/bBd_gkhuNOQ

Lo notaba, al igual que la canción, la fama le había cambiado. Ahora su privacidad no existía, los problemas de amor con Jenna quien era más famosa que él, el cansancio debido a estar en forma para sus papeles, el sentir que debía satisfacer a sus seguidores y fans...todo.

En cierto punto él se sentía así...como el hombre que vendió el mundo.

Continuará...

Espero que les haya gustado.

Un saludo  :)

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