una cita de amigos

Por más que intento no dejo de pensar en la escena de esa tarde, el chico que diario le declara su amor, corria para abrazar a otro sujeto, el echo de ser compañeros de cuatro le daban aun más dudas de la posible relación entre ambos.

Observaba en silencio como esos dos parecían tener una buena relación de amigos, pero algo seguía molestando lo, esos juegos, esas miradas cómplices, esas sonrisas.

Estaba molesto con ese tal Phichit por robarle la atención que siempre tubo él.

Su hermana parecía absorta en otro mundo, sus clases, sus nuevas amigas, sus trabajos, las constantes compras que hacía para seguir actualizada, ella estaba en su mundo y el se sentía dejado de lado.

De cierto modo se sentía triste.

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Viernes por la tarde, ya se habían acabado las clases y muchos tenían reuniones importantes a las cuales asistir.

Fiestas, citas, no era nada raro ver o escuchar los planes de los alumnos al salir por los pasillos de la universidad.

En especial si Emile gritaba con gran entuciasmo sobre su salida con Phichit quien solo le seguía el paso, dichos planes fueron escuchados por cierto chico que solo miraba con gran desprecio hacía la pareja.

Llegaron al centro comercial  mirando más tiendas de las que el moreno hubiese querido, pero todo fuera por su nuevo amigo.

- deverias hablar claro con Georgi - le dijo mirando los estantes.

- le he dicho que lo veo como amigo, pero creo que no se da por vencido.

- ¿se te ha declarado?

- no, y espero que no lo haga, no quiero que esto acabe, nos llevamos bien y me agrada pero no lo veo como algo más.

- entonces dile que no te interesa, le das más esperanzas cuando aceptas salir con él a ver sus obras, o cuando aceptas ir a comer con él.

- por eso siempre intento no ir solo.

- y terminas arrastrando me a mi.

- Yuuri siempre está ocupado y Mila no logra entender las obras y se aburre fácilmente.

- si pero ya me a tocado que el chico me vea cómo rival y yo ya tengo a mi chico.

- aún no es tuyo.

- pero no me voy a dar por vencido, nesecito no equivocarme está vez.

- yo no te puedo ayudar, no conozco sus gustos.

- me he equivocado en sus regalos de cumpleaños, no quiero fallar otra vez.

- insisto en que no que no se cómo ayudarte.

- Sala me a ayudado pero aún así arruino todo.

- no será que a ese chico no le gusta nada de lo que haces por él.

- no voy a darme por vencido, solo que he cometido errores.

- como cuáles, regalarle flores y peluches, no conozco a muchos chicos con esos gustos.

- le gustan los lirios, pero supongo que sí es raro que otro hombre te de flores delante de toda la escuela, le gusta Pikachu pero no le gusto que le diera uno gigante que no sabía dónde colocarlo, esos errores son los que acabaron por completo con mi declaración.

- y es que piensas declárate le otra vez....

- si - dijo con orgullo con una inmensa sonrisa

- eres un caso perdido.

- estoy enamorado.

- un caso perdido.

- tu no estás mejor con Segun.

- eso es otro tema.

- juro que un día voy a responder tu teléfono.

- jajaja, dejarías de ser mi compañero en ese instante.

- que cruel, pero insisto responde a sus llamados.

- porque no mejor te apresuras ya tenemos horas y ya me dió hambre.

- la verdad no sé que comprarle.

- algo de Pikachu pero que no sea gigante, tal vez.

- no lo sé.

- un llavero, cómodo, bonito y lo usará.

- mmmmm muy simple, quiero darle algo que refleje mis sentimientos.

- le colocas una tarjeta y le escribes todos tus sentimientos.

- ¿será buena idea?

- cómodo práctico, incluso la tarjeta la puede guardar en un cuaderno o en algún cajón.

- me lo dices por ser mi amigo o porque ya te quieres ir.

- en la tienda pasada había lindos llaveros y también me quiero ir.

- ¿no será muy simple?

- a despreciado tus regalos cuando son enormes, intenta algo diferente por esta vez, si no le gusta entonces tal vez deberías de cambiar de plan.

- bien! hagámoslo.

- ok.

- luego iremos a comer yo invito.

- genial.

Fueron a la tienda y escojieron el mejor llavero del lugar, luego fueron a comer a un local, sin saber que alguien los observaba.

- hola que coincidencia encontrarlos aquí - se acercó Georgi.

- hola - respondió Phichit un tanto incómodo pues había estado rechazando sus invitaciones en las últimas semanas.

- que coincidencia - respondió el checo con finjida sonrisa, sabía que el chico quería una salida con el moreno ese día y por eso había gritado emocionado que quería salir con él esa tarda, sabía que había escuchado y que probablemente los seguía, ese chico era muy evidente.

- ¿puedo acompañarlos?

- claro, estamos hablando sobre la próxima seción de fotos que me hará - lo reto un poco pues le gustaba verlo molesto.

- bueno el último trabajo fue un éxito, así que lo tomaré como modelo habitual - muchas chicas de su salon habían quedado cautivadas por ese hombre, así que sería bueno tenerlo como modelo.

- nunca me has pedido que sea tu modelo, me sentiré ofendido - trato de tomar su mano pero este rápido aparto la suya y solo se quedó con las ganas.

- a mí me tubo que rogar - se burló.

- se me agotaba el tiempo y no tenía ánimos de ir en salón en salón.

- debiste pedírmelo a mi - dijo dolido.

- tenía que ser un estudiante - trato de quitarle importancia y dejando de lado el tema se concentró en su comida.

- si, una lastima - comenzó a beber de su refresco mirando a otro lado.

- ya veo - algo triste los acompaño a comer sin más plática.

Al terminar se fue por otro lado ya que ellos vivían juntos, estaba triste.

Todo parecía empeñarse en separarlo de su chico piel canela.

Aunque él no quería aceptarlo.

Quería luchar y ser alguien importante en su vida, no está dispuesto a ser solo el pañuelo dónde su amigo lloraría sus desepciones, no.

El iba a ser quien curará sus heridas, lo llenaría de amor, puro e incondicional.

No iba a permitir que ningún chico guapo le arrebatará todo por lo que lucho todo ese tiempo.

Solo tenía un objetivo y era enamorar a Phichit y llenarlo del más dulce amor que jamás haya conocido.

No tenía un plan, no tenía ayuda porque Isabella estaba muy ocupada para ayúdale, estaba solo, en esa contienda y lucharia contra falsos principes que solo querían el tierno corazón de su amado.

Él lucharia contra todos esos falsos que solo sabían hablar y no actuar, que se acobardaban y no tenían honor.

Él lo amaría tanto como se merecía e incluso más, sería incondicional, un amante tierno y cariñoso, un esposo fiel, un padre ejemplar cuando tuvieran hijos.

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Quiero que voten si o no quieren a Phichit con Georgi...

Que voten por qué otra cosa quieren ver....

Quien quiere ver el mundo arder...

Para terminar muchas gracias por seguir está historia hasta aquí, los adoro, gracias por sus bellos mensajes.

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