Esto vendría siendo como si estuvieras a punto de conocer a tus suegros, estoy nervioso. Esperó que ven lo mucho que me gusta su hijo, y que daría todo por su felicidad.

—Hola mamá, papá y abuelo—Dejo tres ramos de Flores en cada lápida.

Klaus se pone muy sentimental al visitar las tumbas de sus careces queridos. Él se sentó en el verde césped, solo se queda ahí, observando sin decir nada.

Xander también tomo asiento junto a klaus, sus manos quedan a un centímetro de tocarse, el alfa quería moverla un poco más para que sus dedos toquen los blancos y delgados dedos del beta. Pero no lo hizo, se contuvo.

Para ser un cementerio este lugar es bonito. Al quedar en la cima podía ver para abajo, es un gran paisaje. Es una lastima que sea un cementerio, aquí quedaría una magnífica mansión.

—Hola, me disculpo por mi impertinencia de sentarme junto a su hijo—Hizo una reverencia con su cabeza—Un gusto conocerlos—Puso una rosa blanca en cada lápida.

En las lapidas están las fotos de las respectivas personas, la madre de klaus se parece más Tamara, si hubiera tenido el cabello rojizo como el de su madre seria una viva copia de ella, Klaus se parece más a su padre, hasta en el color de cabello eran iguales. Solo sus ojos violetas cambia, ya qué los del beta son Verdes como su madre.

—Ellos no se molestarán, de seguro ya han visto todo lo que está haciendo por mí.

Me gustaría saber su opinión, saber que piensa de todo esto, ¿si estoy haciéndolo bien? ¿Si es correcto mi comportamiento? ahora más que nunca quisiera saber su opinión.

Pero se que es imposible, solo espero que estén siempre orgullosos de Tamara y de mi. Los extraño mucho, cada vez que vengo a este lugar su muerte se siente como si hoy mismo fue. Es tan doloroso, triste.

—Les tengo dos noticias, una buena y una mala—Apreta sus dientes con fuerza.

—Los dejaré solo—Esta es una conversación personal—Ire a tomar asiento por allá—Apunto una banqueta que está cerca de la valla que te impide caer al precipicio.

—Quedarse—Si estoy solo me pondre a llorar, no quiero que me vean asi.

—¿Seguro?—Klaus solo asintio—Entonces me quedare.

El beta movio su mano izquierda un poco más, lo que había deseado Xander, se le cumplió. Sus dedos se rozan entre si. Causando una pequeña fricción que ambos sintieron a la perfección.

—La buena es que serán abuelos y mi abuelo bisabuelo—Sonrie—La mala es que me divorcie—Su voz ya no es tan rota, al igual su expresión ya no es tan dolorosa.

Xander mira la melancólica expresión de klaus. Le duele verlo así y el no poder hacer nada. Para él eso es frustrante.

Esperó que llegue el día cuando puedas hablar de esto sin sentirte triste, espero está ahí junto a ti para verte sonreír porque superaste todo esto.

—Pero estoy bien—Mira a un pensativo Alfa—Tengo personas muy buenas a mi al redor, en especial la persona sentado junto a mí—No era muy visible pero si prestas suma atención, podías ver un pequeño brilló en los ojos verdes.

El alfa levantó su rostro, esa mirada dorada está en los Verdes profundos, su corazón se emocionó. Quería darle un abrazo al beta, ahí mismo pero se contuvo.

—Cuidar de nosotros siempre, vendré otro día—Toca las lapidas—Los quiero y los extraño.

Xander fue el primero en levantarse, luego ayudó a Klaus. Los dos hacen una reverencia.

—¿Huh?—Escuche algo.

Xander dio media Vuelta solo para encontrarse con una belleza incomparable, vestida de blanco como su piel. Ojos hermosamente Verdes. Una sonrisa deslumbrante, su cabello rojizo revolotea por causa del viento.

—Gracias, te estamos agradecidos—Su voz es tan dulce—Tienes nuestra bendición, te confíamos a nuestro klaus—Sonrio elegantemente.

Froté mis ojos, estoy alucinando. ¿Qué rayos fue eso? Esa persona era idéntica a la madre de Klaus, que está grabada en esa lápida.

—¿Qué pasa?—De repente solo se detuvo.

—¿No vió nada?

—No, ¿Por qué? ¿Acaso vio un fantasma?—se burla.

—Tal vez solo lo imaginé, y no les tengo miedo a los fantasmas—Se defiende.

—Yo si, tampoco me gustan las películas de terror.

Sería agradable ver una, y que klaus se aferre de mí. Poder estar así de cerca sería el paraíso. Pero no puedo hacer eso porque solo sería mi egoísmo.

—¿Podemos apreciar la vista antes de bajar?—Me siento aliviado, liviano como una pluma.

Mis temores y miedos poco a poco siento que se están esfumando de mi cuerpo y mi alma, cada dia me siento más libre que el dia anterior.

—Si—Se sienta, su vista queda al frente de un cielo despejado. Desde ahí pueden ver un mar azul intenso, tan majestuoso—Estuve pensando que este lugar para ser un cementerio, es demasiado grandioso.

—Yo también pensé lo mismo la primera vez que vine aquí—Fue cuando murió mi abuelo.

Son las cuatro de la tarde, el viento sopla sin piedad, klaus cierra sus ojos. El cabello color lila se eleva por el aire. Se ven tan sorprenden.

Xander está hipnotizado viendo su radiante belleza, se volvía a enamorar de Klaus, una y otra vez.

—¿Es hermoso, verdad?

—La palabra hermoso se queda corta—Mira fijamente a Klaus—Su grandeza y belleza no tienen comparación.

De nada las mejillas de Klaus se tornan rojas, era como si en su interior pensará que esas palabras iba dirigidas especialmente para él, un momento después deshecho esos pensamientos que el creía absurdos.

—Volvamos—Abrió sus ojos—Me gustaría estar un rato más pero también quiero ir a ver el mar antes que anochezca.

—Entonces andando—Se puso de pie—Cuando vengamos la próxima vez, podemos irnos hasta el anochecer—Ofrece su mano.

Él enfrente de mi y de esa vista grandiosa, mi mirada solo estaba en él. No podía ver el cielo o los colores del atardecer, porque lo único que a mi me interesaba ver es a esa figura imponente que me de vuelve la mirada que transmite calidez.

—Me parece bien—Tomo la mano de Xander—Volveremos en octubre, falta poco para el aniversario de muerte de mis padres—El beta no quería soltar la mano de Xander pero lo iba hacer, no tenía una excusa para seguir agarrados de las manos.

Acto que fue detenido por el alfa, este la sostiene sin intención de soltarla. Por esta vez iba hacer un poco codicioso.

—Bajaremos hacia bajo, puede resbalar. Lo soltare cuando estemos en tierra firme—Mentir no era lo suyo, ya que sus orejas están rojas.

Así me lleve una eternidad, yo voy a sanar, pegar, repar, el corazón de Klaus. No lo hago para esperar algo cambió, no, lo hago porque quiero que la persona que más me gusta y me importa sea feliz sin importar que no sea conmigo.

Klaus mira fijamente el rostro de Xander. Un pequeño brilló volvió aparecer en esos lindos ojos verdes profundos.

—Esta bien—Retiró la mirada, sus labios tienen una pequeña sonrisa. Él se sentía feliz y cálido.

Sin él darse cuenta de a poco está cayendo en los encantos del alfa, y como no hacerlo. Si, Xander es lo que todo ser desea tener, un amor tan puro como el de él dirigido especialmente solo para Klaus, es lo más envidiable y romántico.

Ambos caminan de una manera lenta, como si no quisieran bajar la cuesta.

—Aunque arriba la vista es bonita, bajar y subir es otra cuestión.

—Para mi no es nada, se correr como un kilómetro y medio.

Después de venir del trabajo Xander cena luego de unos minutos él sale a correr a los al rededor.

—Yo ya estoy muy a destiempo para comenzar hacer ejercicio—Con su mano libre toca su estomago.

—Podemos solo salir a caminar todas la mañana y noches, eso no es malo para el pequeño grano de arroz.

—Lo voy a pensar, cuando se trata de hacer un poco de ejercicio, soy perezoso—Frota su nariz con pena—En mi trabajo tampoco es requerido.

—¿Le gusta su trabajo?—Si sus lectores se enteran que estoy sosteniendo la mano de Júpiter, yo seria el objeto de odio y envidia en todo el internet.

Pero ahora mismo solo sostengo la mano de Klaus, de la persona que me gusta.

—Si, me gusta mucho, me encanta escribir. Ivy es mi editora.

—Mi hermana solo esta a cargo de dos escritores, entonces usted es...

—Soy Júpiter—Recalca con algo de timidez.

No hay nada de malo que Xander sepa quien soy, confío en el.

¿Debería decirle que soy su fan? ¿No pensara que soy raro? ¿Y si piensa que me acerque a el sabiendo quién era?

Habían bajado sanos y salvos, Demir los esta esperando con una rica limonada bien fría. Le agradecieron. Los tres tomaron el camino izquierdo que los llevaba al mar, llegarían en unos diez minutos.

Cuando cruzaron a la derecha en ese camino estrecho, el mar está enfrente de ellos, faltan veinte para las cinco.

Los colores reflejados en el cielo eran preciosos, las olas se elevan en el aire, tan salvajes, tan hermosas. Era casualidad o suerte pero no había ni un alma. Solo eran ellos tres en ese bello lugar, Xander tiró a la basura los vasos vacíos de limonada.

—Demir—Extendió su mano, se puso en cuclillas.

—Aquí están—Le paso dos pares de sandalias para caminar en la arena, Demir traía consigo una mochila de mano, con las cosas que su jefe le había ordenado.

—Si vamos a disfrutar hay que hacerlo como es debido—Subió el jeans de Klaus un poco arriba de los tobillos.

Con cuidado le quitó los zapatos para ponerle las sandalias a Klaus. El beta no tuvo tiempo de decir que podía hacerlo por si mismo porque el alfa ya lo había hecho.

—¿No le molestan? Intenté caminar—Klaus obedeció.

—No, está bien. Se siente muy cómodas—Lleva su cabello tras su oreja—Gracias.

—De nada—Xander también se quitó sus zapatos y se puso las sandalias.

Demir aguardo todo en una bolsa y lo puso en su mochila. Saco su celular para comenzar a tomar fotografías desimuladamente.

Los dos caminan por la orilla del mar, aveces el agua alcanza mojar sus pies.

El alfa admira la espalda de Klaus, la que antes parecía solicitaria y un poco decaída, ahora es todo lo contrario. Se veía tan hermosa, tan firmé y sin intensión de caer.

—Klaus—pronuncia su nombre con cariño.

—¿Si?—Me gire para verlo a los ojos. Volví a comodar mi cabello atrás de mi oreja, el viento aquí esta más violentó. De repente me siento nervioso.

—He leído "Un día lluvioso" desde que lo publica en su web—Frota su cuello con nerviosismo—Soy fan de júpiter—Y estoy enamorado de ti, Klaus. También quisiera decir eso, tal vez algún día lo haré.

La mirada del beta se sobré saltó un poco, estaba más que sorprendió por esa repentina confesión.

—Eso si que me sorprendió, ¿Desde cuándo sabe que soy júpiter?

—Cuando lo conocí no lo sabía, me enteré unos días después porqué lo vi con mi hermana—Y por la sortija que aún carga en su dedo, pero no lo mencionaré porque no quiero traer a ese tipo a la conversación.

—¿Es una de las razones por las que me ayuda?—Mira sus pies, no sabía porque pero siento un sabor raro en su boca al preguntar eso.

—No es la única razón—Con sus dedos vulve a comodar el cabello de klaus, tras su oreja—Le estoy brindado mi ayuda a klaus no a Jupiter.

Esas palabras causó que el triste corazón de klaus, se sobre salté un poco con emoción.

—Ahora entiendo el porque mi celular tenía la carcasa con el planeta júpiter.

—¿Esta enojado?—Apreto sus puños.

—No, quién dirá que el vicepresidente Myers, le gusta la lectura de comedia romántica—Sonrie con un toque de burla, pero para Xander todas las sonrisas que provienen del beta, son hermosas.

Los rayos del atardecer deslumbran la mitad del rostro de klaus, en el color Verde puedes ver un bonito sol reflejado en la pupila.

Podía ver con gran claridad mi reflejo en esos ojos dorados. Presiento que ese color se volverá mi favorito...¿que estoy pensando?

Badum, Badum, no se sabía cuál de los dos corazones es el que latía tan emocionado, o quizás eran ambos.

Se ven tan bien juntos, hacen una extraordinaria pareja, de pie ahí frente al mar sus figuras son tan majestuosas. Tengo que poner todo mi empeño para que las fotos salga con la más alta calidad.

Estoy seguro que algún día una de estas fotos estarán en tamaño grande colgada en la villa. Voy alardear que yo fui el fotógrafo.