¿Qué cosas debería de comprar? ¿Ropa? No, ya que no sé la edad que tiene la tía de Klaus, tampoco puedo pregúntarle a Tamara, porque ya le di el permiso para que se fuera a su casa.

Xander, camina de aquí para haya en su espaciosa oficina, ha estado así por casi veinte minutos.

—Vicepresidente.

—¿Si? Demir.

—¿Qué lo perturba?—Esta por abrir un hueco en el piso.

—No sé que comprarle a la familia materna de Klaus.

—¿Por qué no pregúntarle a la joven señorita Myers? Ella debe de saber más sobre la familia del señor Fletcher.

—Cierto—Desde que descubrí que Klaus me gusta, me estoy volviendo estupido.

Xander, le envío un mensaje a su hermana de que la vería en el centro comercial, puso las cosas en su maletín de negocios, salió de la oficina. Demir lo seguía de cerca, ambos subieron al ascensor.

Termine todo mis pendientes, tengo tiempo libré hasta el martes, después de todo mi padre se hace cargo de los negocios más importantes, a mi solo me lleva como observador, cuando fallezca tendré el doble de trabajo.

Solo espero que viva por un buen largo tiempo, no quiero lidiar con zorros todos los días, sería un fastidio. Con este puesto estoy más que satisfecho.

Bajaron del ascensor, salieron por las puertas que te llevan al estacionamiento subterráneo, Subieron al auto. Demir conduce al lugar acordado. Solo queda a 10 minutos de distancia de la empresa Myres.

Xander, mira el celular en su mano, la carcasa es idéntica a la de Klaus, es como si fueran de pareja. El alfa lo desbloquea, el fondo de pantalla es un Klaus durmiente con un poco de migajas de fruta en las esquinas de sus labios.

Había tomado esa foto el día de la mudanza, el beta se quedó dormido en el sofá de la sala, esperar que todos terminaran de subir las cosas a sus respectivos lugares, lo había aburrido por lo que no se dió cuenta cuando se quedó dormido.

—Llegamos—Demir, se estacionó en el estacionamiento del centro comercial.

Xander, baja del auto para volver a subir a otro ascensor que lo llevará al quinto piso, donde solo hay productos de la mejor calidad y más caros.

Ni bien había bajado del ascensor cuando Xander vio a su hermana, con una expresión de preocupación. Y a su guardespaldas junto a ella.

—¿Por qué querías verme con urgencia? ¿Le sucedió algo a Klaus?

—No es nada de eso.

—¿Entonces porqué dijites que era urgente?—Fruncio el ceño—Yo también trabajo ¿Sabes?—Estaba Leyendo el manuscrito de klaus, su nuevo libró será interesante e emocionante.

—Porque es urgente por eso te escribí—Caminan por los alrededores, al quitó piso suben pocas personas__Ire con Klaus a visitar ha su familia materna, y no se que llevar como presente.

—¡Oh! ¿Desde cuándo te interesa esas cosas?—Preguntá con un tono de curiosidad y asombro.

—Eso no tienes porque saberlo.

—A la tía Lina no le gustan las cosas extravagantes, prefiere la sencillez, la abuela Sandra es aún más sencilla, ella se pondría feliz con el objeto más simple que le obsequien.

Eso quiere decir que se pondrán incómodas si llevos cosas caras ¿Hay personas que se molestan por eso?....

Xander, está hipnotizado viendo lo que hay enfrete de el, sus gemas doradas ven unas adorables pijamas y calcetines con orejitas de animalitos para niños recién nacidos.

—Me estoy imaginado lo tierno que se verá mi sobrino o sobrina vistiendo eso—¿Me preguntó aquíen se parecerá? Esperó que sea una mini copia de klaus—¿Lo comprarás?

—¿Puedo?—¿Tengo tal derecho?

—Claro que puedes, entremos—Jalo del brazo a su hermano.

—Bienvenidos, ¿Buscan algo en especial?

—Quiero que empaque ambos en una bolsa de regalo—Xander, apuntó las dos pijamas y los dos pares de calcetines.

—Enseguida—La señora de mediana edad, empacó todo.

Mientras espera su pedido, Xander sigue mirando a los alrededores, Ivy solo observa los movimientos de su hermano, llegado a una conclusión.

A Xander le gusta Klaus, ¿Cuando empezaría esos sentimientos? Hermano mayor lo tendrás difícil. ¿Podrás ser capaz de esperar a que klaus sane por completo?

—Aqui está—Entrego la bolsa.

El alfa la sostuvo en su mano, entregó su tarjeta para que cobren la compra que acaba de hacer.

—Gracias, que tenga una feliz tarde—volvio a entregar la tarjeta.

—¿A dónde iremos ahora?—Salimos de ese lugar.

—Yo, a la villa. Ya decidí que llevarles a la familia de klaus, mandaré por esas compras a Fer.

—¿Cuando se irán?—Suben a a las escaleras eléctricas que te lleva a los pisos de bajo.

—Mañana, volveremos el lunes nomás tardar.

—Cuida bien de mis amigos, en especial de Klaus.

—No tienes que decírmelo, ya lo sé.

Ya quiero ver a Klaus, ver esa mirada verde que me hipnotiza o esa preciosa sonrisa que por más debil que sea, sigue teniendo la hermosa esencia de klaus. Estoy perdiendo la razón, Klaus se está apoderado de mi menté por completo.

Ambos hermanos y sus guardespaldas salieron por la puerta que te lleva al estacionamiento.

—¡Ivy!—Yael, casi la tomaba del brazo.

Lo que faltaba, teníamos que encontrarnos con esta desagradable persona.

—¿Podemos hablar? Por favor—Se nota lo desesperado que esta.

—No tenemos nada de que hablar.

—Por favor, házlo por nuestros largos años de amistad—¿Ropa de bebé? Entonces si es cierto que será padre.

—Habla, que está sea la última que vez que utilizas eso a tu favor.—Yael, está sacado un lado que no conocíamos, esto puede tornarse peligroso.

—¿Puede ser en privado?—Miro a Xander.

—¡Solo habla malditasea! No estás para ser exigente.

—¿Dónde está klaus?—Apretó sus puños—Quiero hablar con él.

Las venas resaltan en la frente y cuello de Xander, está más que furioso por el descaro de Yael.

—Yael, deja de hacer el Maldito ridículo. No tienes el derecho de saber a donde va Klaus, ni que es lo que hace con su vida. Entre ustedes dos ya se dijo todo lo que tenía que decirse, ni le llames porque ese número ya no existe.

—Lo se, pero solo quiero hablar con él, necesitó decirle algo.

Xander, soportó todo lo que tenía que soportar, el explotó con furia.

—¿Ya se canso de su destino? Ahora que la emoción de estár con Jobim, se apagó. Quieres volver a estar con su ex esposo, que descaro. Eres una maldita vergüenza para nuestra especie.

—¡Esto no le incube, no sé meta donde no le llaman! Todo lo que tengan que ver con klaus, no es asunto Suyo. Alejarse de mí klaus—Sus ojos se volvieron oscuros, como si fuera un perro, dejo a fuera sus colmillos.

__¡Tuyo! ¿Qué te sucede Maldito imbécil?—Ivy, lo empujó—Klaus no es tuyo ni de nadie—Tambien se pueden ver sus blancos colmillos.

Los dos guardaespaldas iba a detener a Yael, pero Xander le hizo una mueca de que no hagan nada.

—¡El me ama y siempre será así, no creas que tú dinero podrá comprar su amor!—Se que soy un bastador pero no puedo dejar que un niño rico se encapriche con Klaus.

—No me pongas en tu mismo nivel—Xander, le metió un puñetazo en el rostro—No necesito mi dieron para demostrar cuan importante es para mí—Antes de que Yael reaccione, Xander le metió otro puñetazo.

—Voy a borrar todas esas desagradables huellas que dejastes en su alma, las cambiaré por unas más hermosas, unas que nunca podrán ser borradas ¡te advierto que te alejes de él!

—Tú me adviertes nada—Se lanzó sobre Xander.

Este podía esquivar ese puñetazo pero por alguna razón dejó que Yael, lo golpeara.

—Klaus, no merece estar con alguien que tendrá un hijo fuera del matrimonio. Él se merece algo mejor.

—Quién me lo vino a decir, un maldito adúltero sinvergüenza, que se dejó llevar por la calentura del momento.

—¡Tú!..

—¡Ya basta!—Ivy se interpuso entre los dos—Yael, deja de buscar a Klaus.

—¿Y si no lo hago?—Limpio la sangre de su nariz.

Ivy sonríe como una loca, enrolla las mangas de su camisa. Le haría a entender a puros golpes.

—¡Yael!

Al escuchar una dulce voz, Ivy detuvo todo movimiento para llevar a su mirada a esa dirección.

—Izan, ¿Qué haces aquí?—Preguntó su hermano.

—Solo vine de compras...¿quien te dejo así?

—Ese tipo de ahí—Apunto a Xander, este solo tenía un leve rasguño en su mejilla izquierda.

¿No viene con Lars? Dudo que ande el solo, ¿Dónde se quedaría ese tipo?

—Mantente alejado de Klaus—Con esa última advertencia, Xander subió a su auto.

De pie frente a la ventanilla, Ivy se despidió de su hermano, le dijo que cuando llegara a la casa le enviara un mensaje. Xander solo asintió.

Ivy también subió a su auto, ambos hermanos dejaron el estacionamiento al mismo tiempo.

—Yael, ¿Te pasas de estúpido o qué? ¿Por qué buscas a Klaus? En primer lugar tu eres el causante de toda esta mierda, entonces compórtate.

—¿Por qué te pones de lado de ellos? Yo soy el que más conoce a Klaus.

—¡¿Qué con eso?! También eres el bastardo que lo convirtió en nada, el que destruyó todo, ¡eres un maldito solo aceptarlo!

—¡Ya lo sé, estoy tan confundido! Ya ni se que es lo que quiero o si mi elección fue la correcta. De algo estoy seguro, solo quiero ver a Klaus y pedirle perdón, ya sea de rodillas pero quiero verlo.

—No hagas eso Yael, no intentes volver a destrozar la poca tranquilidad que Klaus tiene donde quiera que esté—Tamara me dijo que se había ido a un retiro espiritual lejos de la ciudad.

Klaus necesita estar lejos de todo lo que le hace daño para que su corazón pueda comenzar a sanar.

—Tu mismo elegiste esto entonces se un hombre y vive con el arrepentimiento por el resto de tu vida, ya casi no te reconozco—Camino hacia las puertas que conducen hacía dentro de centro comercial.

Yael, se desquitó su frustración con su auto. Lo golpeó a más no poder para después dejarse caer al suelo. Abrazó sus rodillas.

¿Qué le diré a Jobim? ¿Como explicaré estos golpes en mi rostro? No quiero ver su expresión de preocupación o reclamó. Incluso puede pensar que fue culpa de Klaus.

Me quedaré con mis padres, necesito pensar, he perdido mi enfoque de lo que esta bien y de lo que no esta bien. Me he convertido en un completo bastardo.

Yael, metió su mano en el bolsillo de su pantalón, tomo su celular para llamarle a Jobim.

—¿Yael, ya vienes? ¿Por qué tardas?

—No podré llevarte lo que querías, ya sé terminaron, llamo para decirte que me quedaré unos días donde mis padres.

—¡Qué! ¿Por qué? ¡Me dejarás solo con los preparativos de la boda!

—Solo enviarme mensajes cuando necesites mi opinión.

—Yael__Se quejó.

—Nos vemos después—Finalizo la llamada.

Dejo de estar sentado en el suelo, sacudió el polvo en su trasero, subió al auto. Conduce a una rápida velocidad.

—¿Con que no había?—Frnció su rostro—Mentiro, ¿por qué quieres saber sobre Klaus?

¿Acaso debo deshacerme de él? Como lo estoy haciendo con ese otro estúpido. ¿Por qué no puedo tener lo que quiero? Siempre me los ha arrebatado.

Jobim, había escuchado la conversación de principio a fin.

                                  {☆☆☆☆}

—¿Qué le dirá al señor Fletcher?—Demir, señaló su mejilla para darle a entender ha Xander, sobre que estaba hablando.

—No se nota, solo es un rasguño. Ni se dará cuenta—Es como un pequeño arañó de gato.—Él le envío un mensaje a Ivy, diciendo que ya estaba en la villa.

Las puertas de la Villa se abrieron, dándole paso al auto, Demir condujo hasta que llegó al centro y se estacionó. Xander acomodó su ropa, sujeta con un poco de fuerza la bolsa con las compras. Baja del auto.

Desconsolado camina hacia la puerta, el deseaba ver a Klaus, esperando por su llegada pero no fue así.

—Bienvenido—Fue recibido por un Klaus que lleva delantal de animales y con sus mejillas llenas de harina.

—Estoy en casa.

Tan feliz estaba que el alfa no logró contenerse y dejó salir sus feromonas, klaus es en vuelto por ese olor a pino con un toque de mar.

Xander, levanto sus manos para poder limpiar con delicadeza las mejillas del beta.

—Le dije que me esperara para poderle ayudar—Con mis dedos pulgar limpie su rostro.

Sentí que mi piel es quemada por lo grandioso que se siente tocar su fina piel.

—Queria hacer unos aperitivos—Con sus manos cubrió las de Xander, ninguno rompe el contacto visual—para desgustar mientras preparamos la cena.

Su mano pequeña cubriendo las mías es algo que anteriormente creí imposible, si me dicen que moriré mañana, no tendría nigun arrepentimiento, este momento siento tan cerca a Klaus, con esto estoy más que feliz.

Los últimos colores del atardecer se reflejan en ese color dorado, es tan deslumbrante ver como esos colores se mezclan con el dorado convirtiéndose en un color jamás visto, simplemente hermoso.

Klaus, volvió a sentir esa sensación de tener mariposas revoloteando de una manera extraña en su estómago.

—¡Huh! ¿Qué le sucedió a su rostro?_Klaus, retiro las manos de Xander, de su rostro.

Esta vez fue el quién se puso de puntillas para poder sostener el rotro del alfa, alfa que esta más que nervioso por esa acción, lo habían tomado con la guardia baja, sus orejas están pintadas de un color rojizo.

—Estoy bien, solo es un rasguño nada más—¡Dios, puedo sentir su respiración. Crei que no lo notaria, esto es peligroso!

Klaus, frunció el ceño al oler otras feromonas que no pertenecen al alfa, ahora que lo tiene así de cerca, las olfateo mucho más bien.

—Entremos, vamos a desinfectar esa herida.

Demir como un buen guardespaldas, había capturado ese momento con fotos, fotos que envío a su joven maestro.

Xander llevo su mano al pecho, podía sentir cuan agitado esta su corazón. Cuando klaus se alejó de él, Xander suspiró aliviado.

Ese momento de burbujas rosas entre ellos, fue visto por todos los que viven ahí, la seguridad de la Villa, la pareja beta.

Klaus, me hizo que me sentará en la silla junto a la isla de la cocina, cerré mis ojos porque si lo veía mientras desinfecta el rasguño, mi corazón podría explotar de la emoción.

—¿Me dirá lo que sucedió?

Veo que no puedo ocultar lo que pasó, de seguro ya olió las feromonas que se encuentran en mi ropa, por más que deje salir las mías, esos rastros no se fueron amenos que lave la ropa o me bañe.

—No quiero agregarle más estrés—Abrio sus ojos, mira fijamente a Klaus.

—Estare bien, si no lo estoy se lo haré saber.

—Lo promete—Esta vez Xander cubrió con su mano la de Klaus.

—Si, lo prometo—¿Un adulto se puede ver asi adorable con esa expresión de animalito herido?

Xander, le contó todo de principio a fin ocultando ciertas cosas, solo mencionar el nombre de Yael, basto para enfurecer a Klaus, era como si todo ese dolor que siente de apoco se esta convirtiendo en enojó, odió.

—No se disculpe.

—Yo no he dicho nada aún.

—Pero iba hacerlo, no quiero que se disculpe por algo que no es su culpa. ¿De acuerdo?

—De acuerdo—Esto es cálido, puedo sentir calidez en mi alma.

—Desde que las vi me gustaron—Entregue la bolsa de regalo—No se si será niña o niño por lo que compré ambas.

Klaus, metió su mano en la bolsa para poder ver que era, cuando vio las bonitas pijamas con patrón de animalitos y la otra de flores, así mismo eran los calcetines.

—¿Le gustan? He estado tomándome ciertas libertades, me disculpo de antemano.

—Me gustan—Sonrio con sinceridad—Me gustan—Volvio a repetirlo, el estaba feliz.

—Eso me alegra—Su sonrisa es la más hermosa que haya visto, tiene una pureza que nadie que conozca tanga—Ire a bañarme, regresaré rápido para empezar a preparar la cena.

—Esta bien—Aguardo las pijamas—Tamarse su tiempo.

Xander salió casi corriendo del lugar, no quería que klaus, viera su expresión o el color rojo de su cuello.

—Señor Fletcher—Aparecio Fer, antes no había querido interrumpir esa bonita escena—La tarta de manzana ya está lista.

—Veamos como quedó—Klaus, dejo la bolsa en la isla de la mesa, fue a sacar la tarta del horno.

La rica fragancia penetró sus fosas nasales, ellos dos inhalan con entusiasmo ese delicioso olor. Klaus, partió la tarta en porcinos considerables, las puso en los platos desechables, eran 10 en total.

—¿Puedo probarlo?

—Si, adelante.

—Mmm~—Levanto su pulgar—Sabe delicioso, mucho mejor que la que yo preparo—Dio otro pequeño mordisco.

—¿Es asi?

—Si, no estoy mintiendo. ¡Esposo, ven aquí!—Llama a su pareja.

—¿Si?

—Prueva—Le paso un plato.

—Provecho—Comento Klaus.

Favio, degusta con suavidad el bocado en su boca, se toma su tiempo para saborear la textura y los sabores, poniendo nervioso a Klaus.

—¿Quién la hizo?—Fer, apunto a Klaus.

—¿Sabe mal?

—No, si la de mi esposa es rica, está es deliciosa—Volvio a morder la rebanada de tarta.

—Por un momento creí que sabía mal—Suspiro aliviado__Puede repararle una porción a los demás, por favor.

—Si, como diga—Ponen en una bandeja seis porciones.

Justo cuando ellos se fueron, Xander venía con el ceño fruncido, alguien más había comido lo que klaus preparado, mucho antes de que el lo probará. Xander quería ser el primero.

—Esta es para usted—Puso el plato en la isla de la cocina—Comenzare a preparar a cena, si necesito ayuda se lo haré saber.

—Compredo.

Xander, no es fan de las cosas dulces pero era algo preparado por la persona que le gusta, por lo que se deleitará con felicidad.

Daba la casualidad que no era dulce, tenía poca azúcar. La mirada de Xander se fue a un concentrado Klaus, su corazón pálpita de felicidad, sus sentimientos por el beta se volvió más intenso.