El día después de romper con Tom todos fuimos a la playa a pasar el día. Creí que ahora iba a estar incomoda o tensa con él, pero por suerte fue todo lo contrario. Todos nos lo pasamos en grande. Todos se enteraron de la ruptura, era algo inevitable de ocultar delante de todos, así que decidimos decirlo. No tuve la oportunidad de contárselo a Haz antes, por lo que se enteró junto a los otros. Le costó un poco contenerse (de la alegría) pero, por suerte, solo lo notamos Harry y yo. Por otro lado, él me dedico una gran sonrisa al enterarse de la noticia. Estábamos haciendo lo correcto. En la playa todos jugamos juntos al vóley, a las palas y al futbol. Y obviamente, Justin y yo, en el equipo de España, ganamos a Sam y a Harry, en el equipo de Inglaterra. También bastantes personas reconocieron a Tom, pero no hubo ningún problema grave. Ahora estoy en mi cama tumbada sin hacer nada, pues hoy no hemos planeado nada que hacer en todo el día.

- "¿Qué haces?"- me dice Just entrando en la habitación.

- "Absoluta-mente na-da"- digo entre cortando cada palabra.

- "¿Y te vas a pasar el día haciendo "Absoluta-mente na-da"?"- mi hermano tira de mi manta dejando al descubierto mi pijama.

- ¡Hey! No seas molesto- le digo ya en inglés. Él se ríe y se tira encima de mí- Ayyyyy. Justiiiiiiiiiiin.

- ¡Jjajajajaj!

- Te odio.

- Lo sé.

- ¿Qué querías decirme?- digo mientras vuelvo a cerrar los ojos para volver a dormir.

- ¿Te apetece ir a surfear?- en cuanto Just pronunció estas palabras mis ojos se abrieron como platos.

- ¿Qué dices?- digo incorporándome en la cama.

- He encontrado un sitio donde alquilan material cerca de aquí. ¿Te apetece recordar viejos tiempos?

- Siiiiii- me lanzo y doy un gran abrazo a mi hermano.

*****

Después de ponernos el bañador Justin y yo fuimos a la compañía que nos iba a prestar el neopreno y las tablas. Nos tomaron los datos necesarios y pagamos el alquiler a medias. Nos dijeron que uno de sus monitores de surf iba a ir a la playa para supervisarnos ya que hacia bastante tiempo que no hacíamos surf y para controlar el material. Pero este no iba a impartirnos ninguna lección. Tras esas instrucciones nos pusimos el neopreno y fuimos con las tablas hasta el lugar de la playa donde nos encontraríamos al monitor.

- ¡Qué emoción! Menos mal que viste el anuncio de la compañía.

- Jjajaj. Pues sí- dice Just mientras esperamos al monitor- ¿Quedamos esta noche con el grupo para cenar?

- Claro.

- "¿Katherine? ¿Justin?"- los dos dirigimos la mirada en dirección a la voz que nos habla en español. Y los dos nos quedamos de piedra.

- "¿¡Elías!?"- ante nosotros se encontraba un antiguo amigo nuestro. Solíamos pasar las vacaciones con él cada vez que veníamos a España por lo menos durante cuatro días.

- "Dios mío. ¿Qué hacéis aquí?"- dijo él. Estuvimos contándole a Elías nuestra vida actual. Él ya sabía que Daya es nuestra amiga, incluso la conoce pues un año se vino de vacaciones con nosotros, por lo que no supone ningún problema contarle sobre Tom.

- "Es una locura habernos encontrado después de tantos años"- dice mi hermano.

Después de otros diez minutos hablando decidimos que ya era hora de meternos al agua. Añoraba surfear en estas playas cundo era más joven me podía pasar todo el rato en el agua surfeando, pues aunque no fuera una profesional era una sensación única. Recuerdo cuando Elías, Justin, yo y algunas veces Daya veníamos aquí por las tardes hasta que anochecía y más tarde íbamos a cenar todos juntos. También recuerdo que Elías fue mi primer crush con esos rizos rubios que tiene. Pero pronto recuerdo los rizos de Hazza que me enamoran mil veces más. Jaja.

*****

Nos pasamos toda la mañana surfeando y a la hora de la comida, tras haber dejado el material, vamos con Elías a comer a uno de los locales donde hemos compartido tantas risas. Estuvimos toda la comida riendo y compartiendo viejos recuerdos. Luego volvimos al hotel pues habíamos quedado con todo el grupo en pasar la tarde en la piscina e invitamos a Elías a que se uniera para que se reencontrara con Z también. Mientras que les esperábamos decidimos meternos a la piscina.

Narra Harrison

- ¿Y si les decimos a los gemelos de dar una vuelta por la ciudad?- me dice Jacob. Nos acabamos de levantar y no tenemos ningún plan para hoy. Menos Tom que tiene cosas que hacer para Marvel, aun estando de vacaciones.

- Me parece bien.

Jacob y yo fuimos a la habitación de los gemelos y les obligamos a moverse para ver la ciudad. A regañadientes, estos se levantaron y nos acompañaron a desayunar en una cafetería y más tarde un paseo por la playa. Harry y yo hablamos con total normalidad. Me alegro que no haya ningún tipo de rencor hacia mí por los anteriores acontecimientos. Estamos hablando cuando este me para con la mano y se queda mirando a un punto en concreto.

- ¿Qué pasa tío?

- Mira allí- mi mirada se dirige a donde me indica y veo a Kat y a Justin junto a un chico. Los tres parecen bastante cercanos y están metidos en el mar con tablas de surf divirtiéndose y molestándose entre ellos.

- ¿Pero qué?- de pronto una oleada de celos me recorre el cuerpo sin saber por qué.

- ¿Qué hace ese rubio con J y Kat?

- No lo sé- de pronto Harry se percata de mi confusión.

- Muy bien. Creo que va ser mejor olvidar esto hasta que le preguntes, ¿está bien amigo?- Harry dice todo esto mientras que me agarra de los hombros y me da la vuelta para que deje de mirar.

*****

A la hora de la comida nos unimos con Tom para ir a un restaurante. Y ahora estamos bajando en ascensor para ir a la piscina junto al resto del grupo. Supuestamente todo el grupo ya se encuentra allí. Estoy deseando volver a ver a Kat en bañador en verdad. Ayer en la playa me costó mucho ocultar mi agrado delante de todos. Harry me regaño varias veces pues no paraba de quedarme embobado mientras se me caía la baba. Kat también se dio cuenta de mis miradas y me provoco alguna que otra vez. Pero cuando llegamos a la piscina no esperaba ver lo que estaba viendo. Kat y el mismo rubio de esta mañana estaban jugando a las ahogadillas. De nuevo la misma ola de celos me invadió. ¿Pero que me está pasando?

- Hola. Ya llegamos- dice Jacob a todo el grupo. Kat y el chico dejaron de reír y dirigieron la mirada a nosotros igual que Laura, Daya y Justin.

- "Dios mío, si es Spiderman"- el chico dijo algo que no entendí pero sabía que estaba hablando de Tom.

- "Te lo dije"- Kat le contesto también en español. Los dos salieron de la piscina y se dirigieron a Tom- Tom te presento a Elías es un antiguo amigo de España- Tom le estrecho la mano amablemente.

- Es un placer Elías.

- El placer mío es. Te lo aseguro- Elías le contesto en un inglés con bastante acento. Tom solo le sonrió y asintió.

- Este es Jacob...

- Hola tío- Jacob le saludo de una forma mucho más informal.

- Los hermanos de Tom; Harry y Sam...- continúo presentando Kat.

- Hola, es un placer- los dos sacudieron su mano.

- Y por último Harrison- Kat me presento con una sonrisa tonta en los labios.

- Hola, Harrison- Elías me ofreció la mano con una gran sonrisa. Yo se la cogí de una manera un poco brusca.

- Hola, no es por ser maleducado pero... ¿qué haces aquí?- ante respuesta Kat me dio una mirada desaprobadora mientras Elías se quedo un poco incomodo. Lo que es normal.

- ¿Puedo hablar un momento contigo? Harrison.

- Claro- Kat y yo nos metimos dentro del hotel mientras todos los demás nos miraban extrañados. Tal vez esta sea una mala jugada para nuestra relación oculta. Cuando entramos Kat se cruzó de brazos. Sin poder evitarlo mis ojos de dirigieron a sus pechos tapados solo con su bañador mojado... Harrison céntrate.

- Venga dime que te pasa.

- ¿Qué me pasa?

- Has sido súper borde con Elías.

- No.

- Sí.

- No he sido borde pero si me molesta que este aquí.

- ¿Por qué? ¿Estas celoso?- me pregunta Kat riendo.

- No- mentira- Solo me preocupo por si le dice a la prensa que Tom se encuentra aquí y vienen a acosarnos.

- Eso no pasara. Elías es de confianza. Le conozco desde que tengo 8 años. Además ya conocía a Daya y nunca dijo nada.

- Sigo sin fiarme.

- ¿Por qué?

- Soy el asistente de Tom debo de preocuparme.

- Y yo la de Zendaya.

- Touché.

- Mira Harrison. ¿Qué te parece si te olvidas de él y esta noche después de cenar vamos a dar una vuelta tú y yo, solos?- Kat se fue acercando lentamente a mi provocándome hasta encontrarse a escasos centímetros de mi rostro.

- ¿Cómo lo hacemos sin que lo sepan?- Kat se muerde el labio.

- Tenemos a Harry como aliado, ¿no?- nuestros labios se rozan mientras hablamos. De pronto ella se separa y me toma de la mano.

- Vamos nos están esperando- yo me rio mientras niego con la cabeza. Esta chica me vuelve loco.

Antes de salir a la piscina nos soltamos de la mano y nos pusimos en nuestro modo "solo amigos". Todos se encontraban en la piscina jugando al waterpolo creo. Había dos equipos. El español en el que se encontraban los españoles, Justin y Elías, junto a Zendaya y Laura. Y el equipo inglés que contaba con los ingleses, Tom y los gemelos, y Jacob de infiltrado.

- ¿Os unís al partido?- dijo Justin cuando aparecimos. Yo mire a Kat.

- Claro- dijo ella. Obviamente se fue al equipo de España mientras que yo fui al equipo londinense. Jugamos alrededor de una hora donde todos nos lo pasamos en grande y nos hicimos ahogadillas todo el rato. Decidimos hacer un descanso y fui en donde se encontraban mis cosas para beber agua que no estuviera cargada de cloro.

- Hey- de pronto me di cuenta que Elías estaba sentado en la hamaca de al lado.

- Hey.

- Solo quería decirte que no tienes por qué preocuparte por mí.

- ¿De que estas hablando?- su comentario me pillo de improviso.

- Quiero decir nunca se me ocurriría hacer nada.

- Mira Elías siento haber dicho que podrías llamar a la prensa y...

- ¿Qué? No, no, tío. No estoy hablando de eso. Hablo de Kat- mierda mierda mierda...

- No sé de qué me hablas- dije mientras me reía nerviosamente.

- Venga ya. Noto como me asesinas con la mirada cada vez que estoy con Kat.

- ¿Yo? ¿Por qué haría eso?

- Harrison. Déjalo no soy tonto. Pero al parecer el resto de vuestro grupo lo es o está aparentando- yo mire a nuestro alrededor.

- Vale. Está bien pero habla más bajo alguien podría oírte- yo me acerque para susurrarle. Entonces él también hizo lo mismo.

- Solo te digo que no te preocupes. No voy a entrometerme entre vosotros.

- ¿En serio?

- Claro que no. Además estoy felizmente casado y con una niña de dos años en mi casa- yo me quedé sorprendido mientras él reía.

- Yo... lo siento. No tenía ni idea.

- No pasa nada. La verdad es que venir aquí ha merecido la pena pues Tom va a regalarme dos autógrafos. Uno para mi reina y otro para mi princesa- yo sonreí ante su comentario- Pero prométeme una cosa- asentí mientras los dos pusimos caras serias- Prométeme que no la vas a hacer daño.

- Nunca se me ocurriría.

- Eso espero. Ella ya lo ha pasado suficientemente mal para que otro idiota la haga daño- entonces recordé al tipo que casi la agrede cuando la conocí. Y dirigí mi mirada a Kat que se encontraba con Daya y Laura riendo.

¿Cómo alguien podría querer hacerla daño?