Capítulo 16: Lo correcto

Narra Harrison

Kat y yo nos encontrábamos los dos en mi cuarto. Estábamos sentados en la cama besándonos. El primer beso que le di fue muy suave. Pero este... era un beso con necesidad. Como si lo hubiéramos estado deseando desde que nos conocimos. Y así era.

Desde que conocí a Kat no deje de pensar en ella. No me pasaba desde que corte con Olivia. Cada vez que estaba con ella me sentía feliz.
Siempre he sentido algo por ella y ver que ella también sentía algo por mí, me hacía imposible estar lejos de ella, de sus labios.

Las manos de Kat subieron hasta mi nuca y profundizando aún más nuestro beso. Yo pase mis brazos por detrás de su espalda abrazándola para acercarla lo máximo posible. Ella abrió más la boca y yo imite el movimiento de esta. Solo nos separamos para tomar aire un par de veces. Ella subió aún más las manos y sus dedos se metieron entre mi pelo para agarrarlos delicadamente.

Estábamos totalmente absortos hasta que oímos un ruido. Nos separamos y vimos mi mesilla de noche. Mi teléfono sonaba con el nombre de Zendaya en la pantalla. Nos miramos preocupados.

- Debería cogerlo, ¿no?

- Creo que si- dijo Kat mordiéndose el labio. Me levante y conteste la llamada. Puse el altavoz.

- ¿Si?

- Hazziaaaa- dijo Daya torpemente, se la notaba borracha.- ¿Dóndeee estiaaas?

- En mi casa, ¿po-por qué?

- No encontraaamos a Kat- ella abrió los ojos como platos. Me empezó a hacer señas pero yo no las entendía.

- E-está aquí, en mi casa- Kat se dio un manotazo en la cara.

- ¿Queee hacie en tu casa?

- Eeem, está dormida. Me la encontré borracha en la barra y decidí que mejor se fuera a dormir y como mi casa es la más cercana la lleve- Kat abrió mucho los ojos y asintió.

- Vaaalie nos habimos preocupado. Pero ya veo quie esta ben. Adioooooos.

- Adiós, Daya. Tened cuidado- cuando colgué los dos suspiramos- Parece que te quedas a dormir.

- No hace falta. Me voy a mi casa- dijo levantándose.

- ¿Por qué?

- Me encantaría pasar la noche aquí pero... estoy... como decirlo... confusa- dijo suspirando.

- ¿Confusa?

- Mira. Llevaste a Olivia a la fiesta entonces supongo que querías volver con ella o... por lo menos intentarlo... No quiero que te arrepientas más por lo que hemos hecho...

- ¿Q-que? No. Solo quería pasar tiempo con ella como amigos- Haz se acercó a mí y me tomo de la mano- Pero ahora yo solo quiero pasar tiempo contigo y no me arrepiento de nada. Solo hay un problema... tu relación con Tom- baje mi mirada a sus labios.

Narra Kat

- Ahora mismo, no estoy pensando mucho en Tom- dije en un susurro. De un impulso uní nuestros labios.

Sus manos se posaron en mis caderas mientras mis manos estaban en su pecho. Mi cabeza daba vueltas por la intensidad de nuestro beso, tal vez tuviera algo que ver el efecto del alcohol que había bebido hace una hora. Pero todo me daba igual, lo único que quería era estar con Harrison, entre sus brazos.

Nuestro beso se volvió más desesperado, nuestras bocas se unían y separaban para respirar con rapidez. Yo le empuje poco a poco hasta la cama y los dos caímos en ella.
Yo no podía parar de besarle. Siento que si paraba no sería capaz de vivir.

Yo estaba encima de él, sentada en su regazo. Entonces su boca empezó a bajar la velocidad pero la mía seguía queriendo más.

- ¿No crees que vamos muy rápido?- me pregunto mientras yo seguía besando sus labios. Yo pare y le mire a los ojos.

- T-tienes razón...- yo me aparte de él y se levantó en dirección al armario.

- Toma puedes dormir con esta camiseta y estos pantalones para estar más cómoda- Harrison me lanzo una camiseta sencilla y unos pantalones de chándal- Yo dormiré en el sofá tu puedes dormir aquí- abrí la boca para quejarme pero este me interrumpió- Insisto, puede que mañana me despierte antes que tú y no quiero despertarte. Buenas noches- yo le sonreí.

- Buenas noches- Harrison me devolvió la sonrisa y salió del cuarto.

Me deje caer en la cama. Estaba realmente feliz, pensar que Harrison sentía lo mismo que yo... pero él tenía razón había un problema... Tom.

Decidí ignorar mis pensamientos y fui al baño a prepararme para dormir. Después de cambiarme me metí en la cama y me dormí a los segundos de cerrar los ojos.

*****

Estaba metida en la cama, mi cuerpo estaba totalmente relajado. Notaba la luz que entraba en la habitación con los ojos cerrados.

Abrí mis ojos con dificultad hasta abrirlos por completo. Observe mí alrededor y me asuste al notar que no era mi habitación.

Pero entonces como si fuera un vaso de agua fría recordé todos los acontecimientos del día anterior.

¡Harrison y yo nos enrollamos! Mi cabeza daba vueltas, seguro debido a la resaca.

Rápidamente me levante de la cama, me puse mi ropa y salí al pasillo. No había rastro de Harrison en todo el apartamento.

Entonces vi una nota en la encimera. "He ido a por el desayuno, espero que hayas dormido bien".

Mi corazón me decía que me quedara para pasar todo el día con él pero mi cabeza decía que me fuera antes de que las cosas se complicaran aún más.
Entonces cogí mi bolso y salí decidida por la puerta.

*****

Narra Harrison

Estaba andando de vuelta ya a mi apartamento cuando vi a Katherine salir del edificio. Iba a pedir un taxi cuando fui corriendo a por ella.

- ¿Katherine?- ella me miro con los ojos un poco húmedos.

- Ha-harrison, yo... no puedo hacerlo- note como algo dentro de mí se rompía.

Iba a decir algo pero ella me interrumpió.

- De verdad ame todo lo que paso ayer pero... no creo que fuera lo correcto. Se supone que yo estoy con Tom y... No quiero que sea demasiado tarde, antes de que cortemos lo que sea que podríamos tener. Eso me rompería el corazón- las lágrimas de Kat no paraban de salir- Y-yo tampoco quiero herirte, ni a Tom... Espero que lo comprendas- ella me dio un dulce beso en la mejilla y se subió al taxi que llego mientras hablaba.

Yo me encontraba allí de pie en medio de la calle. Roto. Pero entonces reaccione todo lo que había dicho Kat tenía sentido.

No podíamos, no debíamos tener nada, eso rompería el corazón de Tom. Y si alguna vez llegábamos a tener algo pero más tarde lo acabábamos, nos romperíamos el corazón. Aunque a mí me hubiera gustado intentarlo, entiendo su decisión.

*****

Narra Kat (una semana más tarde)

- Kat, ¿puedo hablar contigo un momento?- me dijo Kyle mientras los demás recogían y se iban.

- ¿He hecho algo mal?

- No, no. Todo lo contrario- yo le mire extrañada- Veras Kat. Estas muy avanzada y encajas a la perfección en esta clase pero he pensado en algo más para ti- yo le mire intrigada.

- Soy toda oídos- dije sonriéndole, el rió.

- Estamos pensando en abrir dos clases para principiantes. Tenemos todo pensado lo único que nos falta es un profesor- yo abrí los ojos como platos.

- ¿Estabas pensando en mí?

- Sí, pero vamos a hacer una especie de prueba para elegir el mejor profesor dentro de dos meses. Y a la vuelta de las vacaciones de verano se abrirán esas clases.

- Kyle. No sé qué decir- yo reí- Gracias por pensar en mí para esto.

- No hay de qué. En la prueba deberás presentar una coreografía propia. Esto es lo único que se te pedirá. Y si traes alguna referencia sería ideal.

- Vale. Muchas gracias- le di un abrazo y volví a mi casa emocionada.

Al día siguiente Tom volvería de su viaje.

Harrison y yo no habíamos vuelto a vernos desde lo que paso. Claramente tengo sentimientos hacia él pero no quiero que mi relación y su amistad con Tom se arruine.

Así que voy a optar por ignorar mis sentimientos y continuar la relación con Tom. Aunque creo que eso le dolerá a Hazza.

*****

Me encontraba en la puerta del piso de Tom. Había decidido ir a darle una sorpresa por la tarde después de que llegara de su viaje. Por suerte no tuve que llamar al timbre desde abajo pues un señor estaba saliendo y me dejo pasar.

Subí en ascensor hasta su piso, ya había estado en su casa una vez para recoger las llaves de su coche. Llegue a la puerta y la toque. Entonces se abrió la puerta y vi la cara de Tom.
Su cara se ilumino y salto a abrazarme. Yo solo le respondí el abrazo. Cuando nos separamos Tom estampo sus labios en los míos con una intensidad que me hizo curvar mi espalda.

Entonces oí un carraspeo de garganta dentro del piso. Tom se separó y los dos vimos en esa dirección. No me había percatado hasta ese momento que dos chicos pelirrojos se encontraban allí de pie junto a Harrison que tenía la mirada perdida y apenada en el suelo. Mierda. Me arrepiento de haber venido.

- ¿Habéis acabado?- dijo uno de los chicos.

- S-sí, lo siento- dijo Tom sonrojado, yo miraba al suelo. Los dos entramos y Tom cerró la puerta. Tierra trágame- Chicos, esta es Kat. Kat estos son mis hermanos Harry y Sam- dijo señalándoles, yo les sonreí tímidamente.

- Hola.

- Así que tú eres la novia de nuestro hermano- yo me quede petrificada, ¿novia? ¿Desde cuando éramos NOVIOS?

- Eeemm- dije nerviosa.

- ¡Sam!- grito Tom. Yo no me atrevía a mirar a Harrison a los ojos en estos momentos- No les hagas ni caso solo quieren molestar.

- Pero si yo no he hecho nada- dijo Harry.

- Mucho estas tardando.

- Eso es verdad- dijo Sam riendo, Harry también rió.

- ¿Y qué hacen ustedes aquí?- dije a los gemelos un poco nerviosa.

- Hemos venido a pasar el finde con nuestro querido hermanito.

- Ellos han terminado el curso ya, así que mis padres les han permitido venir.

- Pero Paddy no fue capaz de convencerles ya que el sigue teniendo colegio- dijo Harry.

- Íbamos a dar una vuelta por la ciudad te apetece acompañarnos- propuso Sam. Yo mire a Tom sorprendida.

- Eeee no querría molestar. Puedo volver a casa- dije mi mirada se cruzó con Harrison por primera vez. Claramente estaba igual de incomodo que yo.

- No eres ninguna molestia, ¿verdad chicos?- dijo Tom, los gemelos contestaron que no rápidamente y Harrison solo negó con la cabeza con una media sonrisa falsa. Yo suspire.

- Está bien.

Los 5 dimos vueltas y fuimos a algunos sitios importantes de LA. Yo aún no había tenido la oportunidad de hacer mucho turismo así que Tom nos explicaba algunas cosas a los gemelos y a mí.

Me lo pase bastante bien e hice buena miga con los gemelos. Eran muy divertidos y bromistas, a mí me encantan las personas con buen humor. Lo único malo de toda la tarde fue mi tensión con Harrison.

No cruzamos ninguna palabra y cuando nuestras miradas se cruzaban los dos teníamos caras largas. Sabíamos perfectamente lo que pensaba el otro en todo momento. Pero debíamos ignorar nuestros sentimientos por Tom.

Mientras Tom y yo quedamos en vernos al día siguiente a ver unas películas en su casa.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top