Nuevas memorias, mismos sentimientos.

-¡Oh vamos Vero! Por favor. -ruega de nuevo Blue cambiando su posición acostada sobre mis piernas para mirarme y juntar sus manos.

-¿Y qué voy a hacer yo con ambos en un parque? -cuestiono girando mis ojos alejandome de ella.

-Pasar el rato con tus amigos, pasas demasiado tiempo dentro de casa. ¡Necesitas salir, mirar la luz del sol, personas, algo nuevo! -se queja saliendo de mi cama y señala con sus brazos extendidos hacia la ventana.

Formo un mohín con mis labios meditando la propuesta mientras llevo una mano a mi barbilla adoptando una expresión pensativa para alzarme de hombros, acostarme en la cama y volver a poner en curso Run BTS.

-¡Veronica! -chilla mi mejor amiga molesta cuando le doy la espalda.

-Silencio Blue, no hablo coreano. ¿Sabes lo complicado que es leer los subtítulos y mirarlos al mismo tiempo? -gruño retrocediendo una escena.

-Suficiente Vero, saldremos en diez minutos. -ordena y para enfatizar sus palabras se sube a la cama tomando mi computadora en el proceso.

Llevo una mano a mi pecho ofendida por su atrevida acción mientras ella sale sin importarle mi molestia de la habitación. ¿Cómo se atreve? ¿Quién se cree que es? Ah cierto, mi mejor amiga. Gruñendo por perderme Run BTS -tampoco es que sea un nuevo episodio, pero ver a los chicos en ese parque de atracciones me es muy divertido- salgo de la cama para cambiar mi pantalón de pijama por un short decedente para ir al parque con la pareja.

Según Blue paso demasiado tiempo encerrada en mi habitación mirando cualquier cosa sin utilizar mi tiempo de un modo productivo, pero ¿cómo le explico que mirar las presentaciones de BTS y hacer stream es una tarea vital, necesaria, un modo de agradecerles el arte que nos obsequian?

Subo el cierre del short, me doy un rápido vistazo en el espejo de mi habitación y asiento a mi reflejo. Después de todo esta blusa rosa no esta nada mal para ir a dar una vuelta por la zona. Me pongo unas sandalias, tomo mi móvil y salgo para encontrarme con Blue en la sala de estar, sentada con su pierna y brazos cruzados a la espera de su víctima -yo, obviamente-, su rostro serio le da un aspecto a escena de mafiosos.

-¿Saldrán? -indaga mamá pasando justo a mi lado.

-Si señora. -responde mi amiga dándome una mirada rápida para luego sonreír ampliamente a mi madre-. Le encargo esto, cuidelo.

Mi mejor amiga alías la traicionera más grande del mundo le entrega a mi madre mi computadora. Ambas se dan esa clase de miradas cómplices que solo las mujeres somos capaces de entender, por lo tanto también soy capaz de captar el mensaje secreto que ambas se envían, que se puede traducir a "-Le pido que mantenga este aparato lejos de Veronica". Cruzo mi brazos girando mis ojos cuando mamá regresa a su habitación con mi laptop en su poder y Blue tira de mi brazo fuera de la casa.

-¡Nos vemos! -se despide cuando cierra la puerta.

El sol cegador de un sábado por la tarde da con fuerza contra mis pobres ojos acostumbrados a la tenue luz dentro de casa y me obliga a cerrar los ojos mientras Blue tira de mi brazo en dirección al pequeño parque cerca de mi casa y para ser exacta, cuatro cuadras después de casa se encuentra ese lugar. Es pequeño, pero sin duda alguna es bonito, quiénes lo cuidan siempre han velado por el bienestar de las plantas y las aves que llegan son alimentadas.

-Te compraré un helado, pero quita esa mueca de disgusto. -ruega Blue sin soltar mi mano, parece que teme que realmente me regrese a casa a terminar el vídeo.

Y no la culpo, la idea fue tentadora mientras permanecimos en la segunda cuadra, pero en este momento llegando a la cuarta cuadra no luce prometedora, es más, mi vagancia me gana permitiendome tomar la mano de mi amiga y tirando de ella a la heladería al final del recorrido.

-Cumple con tu palabra amiga. -hablo señalando el interior del local.

-¿Me prometes no escapar? -indaga al lado de la puerta tomando mis dos manos.

Asiento y ella forma una amplia sonrisa hermosa, mágica, esa clase de felicidad que te es transmitida por una persona especial generando una expresión similar en tu rostro. Así me sentí al corresponder su felicidad con una sonrisa igual de grande.

-Te voy a esperar justo aquí Blue. -le aseguro señalando mi espacio fuera del local.

-¡No tardo! -dice abriendo la puerta e ingresando.

Me giro para cuidar de ella desde fuera, permanece en una cola pequeña, tan solo dos personas frente a ella. Puedo observar como mira a su alrededor ansiosa con su mirada algo pensativa relamiendo sus labios varias veces. ¿Por qué tan ansiosa Blue? Ella hace el pedido de nuestros helados y yo me giro al frente observando a los autos transitar al igual que muchas personas a mi alrededor. Un sábado realmente transcurrido.

-Tu sabor favorito. -aparece Blue entragandome el helado de vainilla con chispas de chocolate.

-Muchas gracias. -beso su mejilla agradecida y me concentro en devorar mi helado.

Ambas caminamos hasta llegar al parque y justo frente a nosotras el gran capitán del equipo de lacrosse recibe a mi linda rubia con sus brazos abiertos besándose de un modo corto, pero eso no evita que se vean tiernos al hacerlo. Me hago a un lado esperando mi momento para saludar a Cole con un apretón de manos y seguir comiendo el helado, pero ese escenario se ve interrumpido por la presencia de otra persona junto a su perro.

La sonrisa involuntaria se forma en mi rostro cuando nuestros ojos conectan y él también me sonríe, un poco menos amplio, pero genuina. Me acerco pasando de largo de la linda pareja que charla animadamente y al llegar frente a Mateo me coloco de cuclillas acariciando la suave cabeza de Tete.

-¡Tete! Belleza, ¿cómo estás? -el perro responde ladrando extasiado por mis caricias.

Alejo el helado de su alcance cuando trata de comer un poco de él y a cambio lo abrazo un poco disfrutando del suave roce de su cabello contra mi mejilla. ¿Podría raptarlo por una semana? Hasta podría disfrazarlo con la excusa de que se tratarían de vacaciones para Mateo de su mascota.

-Hola a ti también Veronica. -me alejo de Tete cuando escucho la voz de Mateo.

-Hola moni. -lo saludo con mi gran sonrisa intacta, desde mi posición podría lucir intimidante, pero ese pequeño puchero en sus labios le roban toda la seriedad a su pose de brazos cruzados.

Me apresuro a devorar lo poco de mi helado para evitar que Tete come de él. Los ojos de Mateo que se encontraban vagando entre las cosas del parque conectan de inmediato con los míos al escuchar el apodo salir de mis labios y eleva su ceja divertido en mi dirección. Tomo la decisión de ponerme en pie, esa expresión denota peligro y no me creo capaz de sobrevivir de rodillas frente a él.

-Hace una semana me llamaste novio y ahora moni, ¿qué sigue? ¿Esposo? -se queja tratando de mostrarse serio.

-¿Cómo te encuentras esposo? Debes de contarme como te fue con la chica ganadora, no hemos tenido una oportunidad para hablar de eso.

-¿Acaso mi madre te dio la autorización de llamarme esposo? ¿Ya les pediste mi mano a ellos? -suelto fuertes carcajadas al escucharlo y él se une con suaves risas-. Tatiana es una chica agradable.

-¿Así? ¿A dónde fueron? -le pregunto caminando a una banca cerca de nosotros.

Mateo se sienta a mi lado mientras toma a Tete en brazos que mira su alrededor curioso y el cachorro no dura mucho sobre Mateo, ya que salta fuera de su alcance a oler todo lo que esta a su alcance.

-Primero a comer a una cafetería muy agradable, tan solo que es algo extraña al ingresar, te puedo jurar que parece un club nocturno. -abro mi boca asombrada y lo invito a continuar cuando asiente repetidas veces con su cabeza-. No te voy a mentir, temí por mi vida, pero es un lugar realmente maravilloso. Es una especie de cafetería con departamentos.

-¿En serio? ¡Tendré que ir! -chillo asombrada.

¿Cómo es posible que exista un lugar así en Londres que no he visitado?

-Y luego fuimos al parque de la zona a comer unas, fue un momento realmente agradable. -finaliza Mateo conectando sus ojos que permanecían sobre Tete con los míos-. Estoy seguro que te gustará esa cafetería.

-¿Tú crees? Suena fascinante, tienes que pasarme la ubicación para visitarla algún día. -puedo imaginar mis ojos brillar como los de una niña pequeña.

Mateo de pronto acorta un poco nuestra distancia, tomando esa clase de espacios donde los amigos están por contar el secreto más grande hasta el momento entre ambos y por ello no me inclino hacia atrás al contrario, me mantengo bastante cerca de su rostro para escucharlo atenta.

-Lo visitarás, pero necesitas una tarjeta especial para ingresar. -musita cerca, ¿por qué tanto misterio para decir eso?

Estoy por hacerme hacia atrás, pero su mano sosteniendo mi barbilla suavemente me detienen. Mis ojos se abren de golpe cuando observo su mirada juguetona. Tengo miedo, no lo puedo negar, mi corazón acelerado es la prueba de ello junto a mi respiración retenida.

-Soy la única persona que tiene esa llave para llevarte.

-Perfecto, así puedo ir con alguien que conozca el lugar y no perderme. -respondo con una amplia sonrisa mirando como suelta mi rostro.

Mateo niega con su cabeza acompañado de una sonrisa extraña mientras mira su regazo, no puedo identificar si se trata de diversión o una maliciosa, pero puedo percibir el extraño ambiente que nos rodea al momento en que sus ojos un poco cubiertos por su largo cabello negro y mi garganta se seca cuando se acerca de nuevo.

No es un acercamiento para contar secretos, es un acercamiento para crear un secreto entre ambos. Uno que es capaz de disparar aún más el latir de mi corazón y confirmarle al suyo que su cercanía me pone nerviosa, pero a la vez ansiosa.

-Te llevaré -responde y con un movimiento apresurado mío provoca que nuestras narices se rocen. Me quedo quieta en mi sitio-, pero -mis ojos se deslizan un momento a sus labios y rápidamente regreso a sus ojos- podría transformar esa salida en una cita o tal vez no. -musita bajo, tan sigiloso que los vellos de mi cuerpo se erizan y mis labios se entre abren un poco cuando su nariz acaricia por unos segundos la mía.

Suaves roces que puedo asegurar que me han transportado por segundos al cielo, mi corazón salta demasiado alegre contra mi pecho y mis mejillas se sonrojan por ese toque tan íntimo entre los dos. Relamo mis labios cuando lo veo alejarse y recargar su espalda contra la banca como si nada hubiese sucedido segundos atrás.

Salgo de mi burbuja nombrada Efecto Mateo cuando escucho gritos alegres de Blue acompañados de carcajadas fuertes de Cole. Ambos parecen estar celebrando algo especial. Me giro en mi sitio en la banca y los miro abrazarse con fuerza para después besarse extasiados.

-¿Qué pasa? -indago para mí misma.

-Tal parece que el capitán por fin tomó la decisión de formalizar su relación. -responde Mateo asomando su rostro sobre mi hombro.

-¡¿En serio?! -chillo rompiendo su burbuja de enamorados y que Blue corra en mi dirección sonriendo ampliamente.

-¡Somos novios oficialmente! -me levanto de mi sitio y acorto la distancia entre ambas abrazandola con fuerza.

Blue salta enrollando sus piernas en mi cintura y me abraza con fuerza mientras esconde su rostro contra mi cuello, puedo distinguir la humedad de lágrimas en esa zona. La sostengo con fuerza, abrazandola del mismo modo que ella lo hace, demostrando que estoy demasiado feliz por este momento en su vida.

Feliz navidad a todos los que se han pasado a leer este capitulo. Los amo♡

Pasen bellos días con sus seres queridos y amigos =)

¿Les gustó el capítulo? ¡Soy happy porque los no novios ya son novios oficialmente!

Disfruten las fechas con las hermosas canciones que Jiminie y TaeTae nos han regalado con tanto amor♡, no olviden pasarse por la canción de Jinie♡, aunque es mejor que hagan STREAM.

¡Nos leemos el próximo viernes!