Cuando abrí la puerta estaba Gumball de pie frente a la ventana, con una apariencia que sólo habia visto una vez, pero la reconocía: Carrie había tomado su cuerpo.

Entré a la habitación, habia un vaso de agua junto a la cama de Gumball, por el momento solo se me ocurrio beberlo, luego volvi a la puerta de entrada

- ¿Carrie? ¿Que estás haciendo? - lo dije normal pero mi voz sonó asustada... Muy asustada.

Empezó a reir con una voz atractiva y baja, luego aumentó el volumen, eso si me asustó

- Darwin - suspiró ella - no tengas miedo

De alguna manera Carrie hacía que su voz sonara cómo la de Gumball y además le había incluido una especie de ronroneo, sonaba como cuando conocí a Gumball, pero esta vez si provenía de él... O ella

- No tengo miedo - me escuchaba ridículo, mi voz demostraba que no lograría engañar a nadie.

Gumball dio vuelta de golpe y la puerta se cerró a mis espaldas, él lucía muy bien, definitivamente Carrie lo habia hecho, era parte de su plan...

- Darwin, yo creí que te gustaba, tu lo decias, no directamente pero de alguna manera - se acercaba con la mirada baja - creí que no podia sentir nada, pero tu me demostraste lo contrario

- Carrie - suspire, debia decirlo, pero tenia miedo de que Gumball pudiera escucharme - yo... Gumball me gusta desde que lo conocí, jamás me gusto ninguna chica... Tampoco creo que lo haga algun dia, yo finji que me gustabas porque sabia que Gumball no iba a corresponderme y si fingía que estaba enamorado de ti no iba a ser necesario salir contigo porque... Eres un... Fantasma... Y, lo siento, pero... Te besé para continuar con la farza, tenía que hacerlo.

Gumball ya estaba frente a mi, muy cerca, podía sentir su aliento, levanté la mirada con miedo, esperando encontrar al Gumball que Carrie habia creado, pero en vez de eso vi al de siempre, sonriendo

- ¿Gumball?

- ¿En serio sientes eso por mi?

- Yo... No... - suspire, bajé la vista y me sonroje - Sí... Es lo que siento por ti

- Debiste decirmelo

Yo me quedé callado, el tomó mi rostro con ambas manos y se acercó lentamente

- Espera - susurré

- ¿Pasa algo malo?

Lo miré a los ojos, al parecer sí era Gumball, entonces, ¿Donde estaba Carrie?

- No - cerré los ojos - estoy bien

Unió sus labios a los mios, con cuidado, al parecer lo hacía para que yo no me enfadara o lo rechazara, cómo no lo hice continuó con un beso mas romántico, pero no intentó convertirlo en francés, yo me convencí completamente, así que ahora yo fui quien dio el primer paso para ese beso, simplemente me dejé llevar porque yo no sabía hacerlo

- Lo haces bien - dijo Gumball, yo me sonroje

Continuando con el beso Gumball me quitó la sudadera con decisión, yo quite sus suéter tímidamente, con una mano sostuvo mi espalda por debajo de mi playera y con la otra tomó mi mano.

- Te amo, Darwin

Al escucharlo abrí los ojos e interrumpí el beso.