El sol de la mañana iluminaba la costa de Marbella, tiñendo el cielo de tonos rosados y dorados. Desde mi ventana, podía ver el mar resplandeciendo bajo la luz del amanecer. Marbella era mi hogar desde que tenía memoria. Había crecido entre sus playas de arena dorada y sus lujosos clubes nocturnos, conociendo cada rincón y cada secreto que la ciudad escondía.

Me llamo Bárbara, aunque todos me llaman Barbie. Tengo 22 años y, a pesar de lo que pueda parecer, no todo en mi vida es glamour y fiestas. Mis padres, propietarios de varios negocios en la ciudad, me dieron una vida cómoda pero también me enseñaron a trabajar duro. Siempre he tenido que demostrar que no soy solo una "niña rica".

A pesar de la comodidad económica, la vida en Marbella no siempre es sencilla. El brillo de la ciudad oculta sombras y secretos que pueden cambiar la vida de cualquiera en un instante. Como la historia que estoy a punto de contarles, una historia que involucra a mis amigas y un peligro inesperado.

Mis días solían estar llenos de estudios y trabajos ocasionales en los negocios familiares. Me encanta la fotografía y a menudo paso horas capturando la belleza de mi ciudad a través del lente de mi cámara. Mis amigas y yo también disfrutamos de la vida nocturna, bailando y riendo hasta el amanecer. Era una forma de escapar de la rutina y de cualquier preocupación.

En cuanto al amor, estoy soltera, aunque hay un chico en mi vida. Se llama Alex. Nos conocemos desde hace años; él también ha crecido en Marbella. Es el segurata en una de las discotecas que frecuentamos, y fue ahí donde empezamos a tener algo. No somos novios oficiales, pero hay una atracción física innegable entre nosotros.

Alex es diferente a cualquier otro chico que haya conocido. Es inteligente, divertido y siempre sabe cómo hacerme reír. Pero también es misterioso, y esa parte de él me intriga y me frustra a partes iguales. A veces desaparece por días sin explicación, y luego regresa como si nada hubiera pasado. Nuestro "rollo" es complicado, pero por ahora, estoy bien con eso.

A pesar de todo, sé que Alex no es lo que realmente busco en una pareja. La conexión entre nosotros es mayormente física, y aunque me divierto con él, sé que quiero algo más profundo. Pero por ahora, Alex es una distracción bienvenida en mi vida.

Esa mañana, mientras me preparaba para el día, no podía dejar de pensar en mis amigas. Paola, Martina y Clara son como hermanas para mí. Hemos pasado por todo juntas, y sé que puedo contar con ellas para cualquier cosa. Pero había algo en el aire últimamente, una sensación de que algo grande estaba a punto de suceder.

Me vestí rápidamente, eligiendo un conjunto casual pero elegante. Era hora de reunirme con las chicas en mi terraza, como solíamos hacer. Había algo en Paola que me preocupaba, una tensión en sus ojos que no podía ignorar. Sentía que el día de hoy iba a ser diferente, que nuestra rutina se iba a romper de una manera inesperada.

Mientras caminaba hacia la terraza, sentí una mezcla de anticipación y nerviosismo. Marbella era mi hogar, pero también era un lugar lleno de secretos y peligros. Y sentía que estábamos a punto de descubrir uno de ellos.

Nos encontrábamos en mi terraza, con el sol ya alto en el cielo. Las amigas habían llegado puntuales, y la conversación fluía fácilmente como siempre. Pero hoy, había una tensión subyacente que todas podían sentir.

—Paola, ¿qué te pasa? —pregunté finalmente, rompiendo el hielo—. Nos tienes en ascuas.

Y así comenzó la historia que cambiaría nuestras vidas. Una historia de secretos, peligro y la fuerza de una amistad inquebrantable. Pero antes de adentrarnos en ese capítulo oscuro, era importante entender quiénes éramos y de dónde veníamos. Porque al final, la fuerza de nuestra amistad sería lo que nos mantendría unidas y nos permitiría enfrentar cualquier desafío que Marbella nos lanzara.

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Comentario de la autora: Agradezco todo el apoyo que me dais con vuestros votos y comentarios, son muy importantes para mí porque me ayudan a mejorar, ¡gracias! 🩵