Enya se limpiaba la sangre de su labio mientras no podía dejar de pensar en la abrumadora cantidad de sensaciones que había tenido recientemente, pero lo peor para ella, era que no lograba identificar esas sensaciones como negativas. Ella sabía que lo normal sería sentirse mal por lo que ha pasado, sentir que es algo traumático y doloroso, arrepentirse incluso del daño desmedido que había propiciado, y sin embargo, sentía algo de placer al recordarlo.

-¿Enya?- su hermano quien la notaba bastante ida irrumpió sus pensamientos al llamarla.

-Perdón, me siento algo espesa

-Es normal- puso su mano en el hombro de su hermana mostrando su apoyo- tiene que haber sido muy difícil pero todo estará bien.

No sé si difícil sea la palabra adecuada.

Enya soltó una leve risa irónica.

-¿Si quiera puedes estar seguro de ello? Lo más probable es que me expulsen de la UA.

Aunque la verdad ni siquiera sé si me importa.

-Eso aún no lo sabemos- Yoshio intentaba animarla y darle esperanzas- al fin y al cabo, ¿Qué mejor sitio para aprender a controlar tus poderes que la UA?

-Eres demasiado positivo a veces.

Enya miró hacia la ventana, por primera vez en su vida se sentía saturada por la presencia de su hermano.

¿Qué ocurre si no quiero controlarlo? ¿Y si esta es mi verdadera yo? ¿Por qué debo reprimirme?

La cabeza de Enya estaba llena de preguntas, mientras que a Yoshio tan solo le preocupaba que su hermanita pueda ser aceptada por los demás para algún día ser una heroína querida por los demás, lo único que Yoshio deseaba es que las demás personas quisieran a su hermana así como él siempre lo ha hecho.

-Pase lo que pase- dijo Yoshio mientras tomaba su mano- sabes que siempre nos tendrás, ¿verdad? Nuestra familia siempre va a estar unida.

Enya sintió un leve pinchazo en el pecho. ¿Culpa quizá? Sabía lo mucho que su familia le amaba y lo mucho que la apoyarían, sin embargo, ¿Sería justo pedirles que la apoyen en un camino de oscuridad?

En sólo unas horas le dieron el alta, el cuerpo de Enya apenas había sufrido daños y pese al agotamiento que debería sentir se había recuperado con una velocidad bastante superior a lo esperado. Los médicos determinaron que posiblemente el quirk ángel aunque no se ha manifestado físicamente en Enya sí que ha podido influir en su capacidad de regeneración.

El viaje en coche del hospital hacia la casa Todoroki fue bastante tenso, la prensa intentó interceptarlos a la salida del hospital, aun así, el interior del coche se mantuvo en silencio. En todo el camino ninguno de los cuatro sabía qué decir. Nozomi y Todoroki estaban muy preocupados, y en cierta parte se sentían culpables de haber permitido que su hija llegara a tal punto, y en especial Nozomi se sentía muy mal de haber tenido que llegar a golpearla. Yoshio estaba también muy preocupado pensando en que podría hacer para levantar los ánimos en su familia. Respecto a Enya... ella se encontraba inmersa en sus pensamientos, recordando las sensaciones que, a su pesar, había disfrutado.

Cuando llegaron a la casa el primero en hablar fue Shoto.

-Ya es algo tarde, deberíamos ir todos a descansar.

Los demás asintieron y entraron a la casa en silencio. Nozomi y Shoto se quedaron hablando en el piso de abajo, mientras que los niños fueron cada uno a su cuarto. Tras unos veinte minutos, Enya quien había estado en su cuarto dándole vueltas a la situación decidió bajar a hablar con su madre, ya que pensó que quizá es quien más la pueda ayudar a entender lo que siente ya que comparten el quirk demonio. Sin embargo, al llegar a las escaleras y notar las voz de preocupación de sus padres no se sintió capaz de avanzar, se agachó y se quedó observándolos...

-Lo has hecho bien, vamos a salir de esta todos juntos, se resolverá- la voz de Shoto temblaba un poco, como si no estuviera del todo convencido de sus propias palabras, sin embargo hacía lo posible por calmar a Nozomi.

-No, no lo entiendes- la voz de Nozomi parecía quebrarse de dolor- yo he sido la que me he quedado en casa para criarla y guiarla y he fallado.

-No has fallado, lo has hecho lo mejor que has podido Nozomi, quizá yo debí intentar estar más tiempo en casa.

-No, tú has sido un padre maravilloso para los dos niños, pese al trabajo siempre has estado para ellos, esta no es una cuestión de tiempo... Desde que Enya era pequeña el quirk demonio ha sido muy fuerte en ella y jamás noté nada del quirk ángel, a parte de al parecer su regeneración no ha heredado nada... su personalidad, sus impulsos... es mucho más peligrosa que Akuma-chan

¿Akuma chan?

La pequeña seguía agazapada escuchando toda la conversación.

-Tú misma viste que Akuma-chan no era tan malvada como parecía- respondió Shoto.

-Lo sé, y precisamente por eso he intentado criarla de forma que no reprima su ser, que no niegue quien es como me pasó a mí con Akuma-chan. Pero ahora...- A Nozomi parecía faltarle el aire de la ansiedad y preocupación- He tratado todo este tiempo de mostrarle mi lado demoníaco a Enya, para que supiera que sus impulsos no la definen, que más que eso, que se puede ser buena persona y vivir en sociedad con ellos, pero... ¿y si me equivocado?

-¿A qué te refieres?

-Mi lado demoníaco, Akuma-chan, era mi parte más impulsiva, mi ira, mi rencor, mis ganas de lucha estaban ahí, pero mi lado angelical me hacía amar. Al juntarlos, me convertí en una personaba que luchaba por quien ama, mi ira servía para proteger. Pero en Enya no veo nada de eso, desde que muy niña he tenido que ir a mil charlas con sus profesores por meterse en peleas sin sentido y reírse de las personas que estaban en problemas. He hecho todo lo posible por evitar que se meta en problemas demasiados gordos, sabes perfectamente que en más de una ocasión incluso he tenido que ir a hablar con la policía para sacarla de los problemas en los que se mete... y si...- Nozomi se calló como si tuviera miedo de decirlo en voz alta

-Nozomi...- Shoto la abrazó sin saber qué decir.

-¿Y si la leyenda de la que habló mi padre era verdad? ¿Y si Enya es ese demonio nacido para reinar sobre el caos? ¿Y si mi niña no puede vivir en este mundo de paz sin destruirlo?- Nozomi se apoyó sobre el pecho de Shoto llorando- tengo miedo de no poder seguir protegiéndola.

Curiosidad:

Originalmente tenía pensado que Nozomi llorara y tuviera este tipo de conversación con Shoto cuando se confirmase que Enya había matado al chico que dañó a su abuelo y fuese expulsada de la UA por ello (pero como sabéis he decido que no lo mate... respecto a la UA ya veréis en el próximo capítulo lo que ocurre).

HOLA! HE VUELTO GENTE YAY! Como anuncié habrán dos capítulos semanales, solo durante Julio que sino me muero jeje. Tendréis los capítulos Lunes y Viernes, luego pasarán a ser solo los Lunes.

Quería pediros por favor que comentéis todo lo que podáis, me hace muchísima ilusión leeros y hablar con vosotros sobre los capítulos, el feedback me motiva muchísimo a seguir escribiendo.

Por último quiero avisar por aquí (también lo haré en la primera parte) que en Agosto (aun no decido día) voy a publicar un final alternativo de la primera parte del libro en el que Nozomi no logra salvar a Shoto (Sep, se pone la cosa oscura). El final alternativo saldrá en mi obra "Cruzando dimensiones" libro que planeé para extras y preguntas a mis OCs pero que tengo bastante abandonado y me parece un buen lugar para este final alternativo (si queréis aprovechar y dejar preguntas en los comentarios aprovechad que respondo a todo... si wattpad no me la lía claro).

PD: me encanta hacer finales alternativos, de mi saga de one piece hice una obra para poner escenas extras y aproveché en poner el final alternativo, amo crear bad endings y llorar con ellos jjajaja, como no tengo una obra aparte para escenas extra de mi saga de bnha pues me aprovecho de "Cruzando dimensiones" jejeje.
PD2: la canción la he puesto porque en cuanto la escuché (hace años, lo que he tardado en escribir esta libro en serio lmao) me recordó a la angustia que siente Nozomi tratando de proteger a su hija de sí misma.