Era una noche tranquila, Peridot estaba durmiendo, Pearl también dormía y Lapis y Sin estaban en el balcón.

Lapis: Nunca... Nunca me hablaste de tu otro hermano... ¿Por que no lo hiciste?
Sin: En Algunas ocasiones es mejor olvidar el pasado... Mi hermano sólo tenía 5 años cuando murió.
Lapis: No es por urgar pero como... ¿Como murió?
Sin: Bueno...

Era una gelida mañana de hinvierno, mi hermano y yo estábamos esperando el tren para ir al trabajo de nuestro padre... Él era científico, buscaba cura a una enfermedad realmente extraña. Un día mientras mi hermano jugaba con su pelota unas niña gemelas llegaron, venían solas todo muy misterioso, mi hermano entabló rápida conversación con una de ellas, una niña pequeña de suéter azul con rayas moradas. Si hicieron buenos amigos.

Sin: Hey niña ¿por que no vas con tu hermana? Parece que Papiro y ella se lo están pasando en grande.

Escuché como el tren iba viniendo...

Sin: Hermano, ya viene el tren.
Lil.Bro: ¡SI!

Cuando mí hermano se levantó la otra niña, la de suéter verde con una franja amarilla en medio le miro y...

Lapis: ¿Y que?... Sin... ¿Hermano? ¿Sin estas bien?
Sin: Le empujó.

El tren arrolló a mi hermano y lo único que podía escuchar era esa risa. La risa de esa niña, más aguda, más alegre, más fuerte... Esa risa que se empezaba a volver más grave y diabólica.

Sin: ¡HERMANOOOOO!

Cuando pude reaccionar, las niñas ya se habían ido...

Lapis: Sin... Yo... Lo siento mucho.

Sin comenzó a llorar a gota tendida.

Sin: No tienes nada de que disculparte... *se levanta y se va*

El viento comenzó a soplar fuertemente... La lluvia empezó a caer.

Fin de la historia...

Si bueno lo será en un par de páginas más.