"...Caer hasta el punto mas profundo...es sumergirse en la oscuridad...solo una luz puede ayudarte a guiar al verdadero camino de la felicidad..."

Minutos antes...

-¡Naruto se que estas ahí! ¡sal!-le grito la peili rosa desde afuera de la casa, Hinata no podía creer el escándalo que estaba haciendo la joven fuera de su propiedad, dándole una gran vergüenza, además estaba Yashamaru ¿Qué pensaría él? ¿Qué estaba en contacto con personas locas?, solo se cubría el rostro y mas aun ni si quiera sabia como ella había llegado allí

-Naruto, necesito una buena explicación para esto-musito molesta la oji perla, con una mirada verdaderamente aterradora que hasta el pacifico de Yashamaru retrocedió un par de pasos

-lo siento Hime- dijo rascándose la nuca nervioso

-Sakura llego a casa de mi papá anoche y la abuela le permitió quedase-dijo el niño en medio de los escándalos de la peli rosa afuera

-por favor Hime tienes que esconderte-le suplico el rubio, mientras que su amiga también asentía

-digo lo mismo-contesto Ino – Kiba te esta buscando

-¿Qué?-se pregunto Hinata-¿Por qué?

-no tengo idea, ahora llega Sakura aquí es de verdad algo sospechoso

-pero...-bajo la mirada para dar un gran respiro -esta bien-suspiro-iré la habitación de Shinki y me esconderé en el armario

-la acompañare señorita-dijo Yashamaru mientras ambos llegaban hasta la habitación

-después tienes que darle una buena explicación sobre esto-dijo Ino molesta

-si...lo se...-contesto el rubio resignado-¿puedes quedarte con Boruto un par de minutos?

-claro-contesto desviando la mirada, al sentir la calidez de su aliento rozando su piel, sintiéndose un tanto incomoda, para luego ir donde el pequeño niño rubio quien estaba sentado en el sofá jugando con el video juego de Shinki, Naruto vio a Ino junto a su pequeño, sacudiendo su cabeza al instante para dirigirse hacia la puerta, sin duda seria una charla muy larga

Lo que no esperaba es que apenas él abrió la puerta la peli rosa ingreso mala educadamente a la casa, viendo la escena cruzándose de brazos

-¿asi que estabas con ella?-le reclamo Sakura

-¿disculpa?-pregunto Ino

-lo que te dije, Naruto ¿Cómo se te ocurre pasar la noche con ella?

-es mi amiga Sakura y a ti no tengo que darte explicaciones, mi madre te dejo pasar la noche en mi casa pero no significa que seas mi novia o algo así- dijo, mientras ella se mostraba mas molesta, solo que a los segundos lanzo una risita

-¿crees que soy una tonta? Se que ella esta aquí

-¿Quién?-ambos se miraron

-Hinata

-¿Qué dices?

-no te hagas, llevas años enamorado de ella y ustedes la ocultan- por otra parte, Hinata y Yashamaru se miraron entre si, la oji perla estaba mas avergonzada que nunca, mientras que el tío de Gaara se mantenía neutro ante el escándalo de la peli rosa

-yo...

-¿Qué?

-nunca estuve novio luego que nació mi hijo...-dijo ella avergonzada- no...no...no me quería que un hombre me fallara como lo hizo mi padre conmigo...

-señorita-pronuncio el hombre en voz baja-no tiene que justificarse, Gaara-sama, no le da importancia a eso, lo único que se lamenta es...

-¿Qué? ¿Qué es lo que se lamenta?

-que no estuvo con usted en esos momentos-ella se ruborizo al comentario de Yashamaru, sintiéndose extraña, su corazón latía con fuerza al pensar en el peli rojo

-Gaara...

(...)

Solo la luz de la luna iluminaba aquella silenciosa habitación, el peli negro había abiertos los ojos después de las horas de placer que vivió previamente sobre la chica que estaba debajo de él, la pudo contemplar completamente dormida, con sus manos arriba de su cabeza y sus muñecas marcadas por culpa de la corbata la cual la había amarrado a la cama, un sollozo lo distrajo al instante, Hanabi lloraba dormida, para luego seguir en su profundo sueño, se separo de ella finalmente para verla liberal un suspiro de alivio, arropándola con las sabanas para que no sintiera frio, vio aquella manchita de sangre debajo de ella, mesclado con la blanquecina semiente que aun se deslizaba por sus piernas, la cubrió de inmediato al ver las marcas de sus manos sobre sus blancas caderas

-no te prometo que no lo repetiré...-le susurro en su oído dormida- pero si que seré mas amable la próxima vez-beso su mejilla, para salir de la cama tomando un cigarrillo-Hiashi me diste lo que mas amabas, y yo tome lo mas importante que ella tenia, eres realmente patético-pensó en voz alta para tomar un pantalón cercano sentándose en el escritorio, abriendo su laptop para iniciar la búsqueda, mirando a la joven dormida en la cama- ahora cumpliré con mi parte, Hanabi...

(...)

-¡tio Yashamaru!-le llamo Kankuro desde afuera de la casa-¡vine por ti y por mi cuñada!-dijo en voz alta, encendiendo un cigarrillo, dejando a ambas personas escondidas pálidas, ya que aun la peli rosa no se había ido de la casa

-¿Quién es él?-pregunto Sakura al escucharlo, mientras Naruto se mordía las manos desesperado al ser descubiertos, mientras que la peli rosa se asomo hacia afuera para ver por la ventana, causándoles casi un ataque cardiaco al trío rubio quien estaba en la sala –vaya...-se pauso un momento- es un idiota que esta llamando a la casa continua , creí que era aquí –todos cayeron al suelo, no se imaginaban que Kankuro era tan despistado que se había equivocado de casa

-no puedo creerlo...-musito Yashamaru con una sonrisa- Kankuro es mas despistado de lo que imagine

-ya lo creo...- en un par de minutos Sakura al no hallar rastros de la oji perla finalmente se marcho, Hinata decidió salir por la ventana hacia el vehículo de Yashamaru para ir a casa del peli rojo para ir a buscar a su hijo, sin antes enviar un mensaje a Ino que se quedaría un par de días afuera hasta que Naruto arreglase bien su asunto con la peli rosa, lo que no hubo objeción alguna por parte de ambos, llegando finalmente a la propiedad, cuando ella desciende del vehículo se abrió la puerta saliendo su pequeño hijo para abrazarla

-¡Mami! ¡mami!-llamo Shinki para correr hacia ella, haciendo que ella le cargara- ¡hada me la pase muy bien con hada! ¡mami! ¡tio Kankuro me cuido mucho! ¡comimos muchas cosas licas!

-¿enserio?

-envié a Kankuro por ti-pronuncio Gaara-y regreso solo, no quise ir yo con el pequeño ya que estaba durmiendo- dijo Gaara, acercándose a ambos, soltando una risita en su tio

-¿Qué?

-lo que pasa es que Kankuro-sama se equivoco de casa-dijo Yashamaru mientras ambos sonreían, sin embargo, el castaño empalideció al escucharlos, mas aun cuando vio que su hermano menor le miraba de una manera verdaderamente aterradora

-¡mami quelo dolmil!-dijo abrazandola

-esta bien cariño, es muy tarde y no has dormido de corrido-contesto ella con dulzura

-le preparare su habitación- se adelanto el peli rojo mientras ingresaban a la casa

-¡quelo dolmil con hada también!-dijo el pequeño -¡los blazos de hada son muy calentitos! ¿podemos mami?-ambos se miraron un con dulce carmesí en sus mejillas -¿podemos?-reitero

-no lo se...yo...-pronunciaba avergonzada

-¿hada podemos?

-solo si tu madre quiere, Shinki-dijo él desviando la mirada

-bueno...yo...esta bien- dijo Hinata saliéndole vapor de su cabeza, su sonrojo era mas de lo normal hasta sus orejas, ambos subieron las escaleras en silencio, mientras Kankuro miraba de manera picaresca la situación, y Yashamaru negaba su cabeza, la pareja ingreso al cuarto de su hijo

-voy..., voy a ponerle el pijama a Shinki

-yo ire por el mío digo...me cambiare y voy a volver –dijo para salir de la habitación, mientras ella ruborizada alistaba al pequeño para irse a dormir, el peli rojo había pensado en todo, dejo una muda de dormir para ella por lo cual se cambio rápidamente de ropa, arropándose con su pequeño en la cama, para que a los minutos después Gaara apareciera en pijamas, generalmente dormía en calzoncillos, sin embargo, la ocasión ameritaba mas ropa y valía la pena sufrir la calurosa noche de verano que vivían en esos momentos, metiéndose entre las mantas con suavidad

-¡mami y hada! ¡bien!- decía el niño cerrando los ojos buscando el calor de ambos-los quelo...-ambos se miraron entre si, en medio de ambos estaba su único vinculo en sus vidas, un hijo tan bello, tierno y dulce, tenia parte de ambos, era su mas hermoso tesoro, el pequeño se durmió en cuestión de instantes, cuando Gaara escogió ese momento para finalmente hablar

-Hime...

-¿Qué?

- ¿me quieres?-le pregunto tomándola por sorpresa, mirando a su pequeño niño, mirándolo a los ojos y contestarle

-si te quiero, Gaara...

-si me quieres, entonces...¿quieres ser mi esposa?-le pregunto tan directo que ella no lo pudo soportar desmayándose al lado de su hijo

-será mejor que mañana lo hablemos-dijo Gaara mientras acariciaba su mejilla y posteriormente la de su hijo-mi familia, mi propia familia...

A la mañana siguiente...

Hanabi abría los ojos, al sentir los rayos del sol sobre su mirada, haciendo gestos extraños para finalmente despertar, encontrándose algo desorientada, había dormido en otra habitación , recordando que lo que había vivido la noche anterior no fue un sueño, mas al sentir su cuerpo adolorido, sin mencionar su intimidad, encontrándose sola en la cama, cubriéndose con las sabanas su desnudez, costándole un poco acomodarse en el respaldo, sintiéndose extraña y perdida ¿a quien decirle lo que había pasado? Se suponía que la primera vez era algo de un sentimiento mutuo de amor y cariño, solo que su experiencia fue diferente, al principio fue algo tortuoso, pero después no podía negar que su cuerpo se acomodo brindándole un placer que no creía, sin embargo, a pesar de todo se sentía sucia, abrazándose así misma

-descansa- ella miro a Madara quien estaba de pie frente a ella con el torso desnudo, mirándole fijamente

-tengo que volver a casa de mi padre

-olvidado-contesto-¿piensas ir así? ¿Cómo estas ahora? Tu rostro muestra que no la pasaste bien anoche-ella se encogió –y quiero que se te pegue bien el semen entre tus piernas así que no quiero que te levantes de esta cama

-no me he cuidado-respondió ella –te...di mi primera vez y estuve toda la noche contigo entre mis piernas-contesto molesta -¡quiero ducharme!-él miro mientras esta le miraba desafiante, haciéndole sacar un suspiro

-esta bien, has lo que quieras-respondió el peli negro – una sirvienta se encargara de ti el dia de hoy, ella te ayudara

-gracias-musito sin mirarlo, para que él le mirara antes de marcharse de la habitación, encontrándose con la sirvienta dándole una leve reverencia

-Madara-sama...

-encárgate de ella

-si señor –contesto, para que ella girara la cerradura

- y si...-ella se detuvo –ella te pide la píldora del dia después, adquiérelas

-si

-pero solo si ella te lo pide y no le digas que yo te autorice ¿de acuerdo?

-si, Madara-sama...

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Holaaa espero que les haya gustado este capitulo, gracias por leer y comentar, mil abrazos!!!

proximamente.......................Capitulo 15 La llamada de Sai