Advertencias de este capítulo:
> Deku no será un fantasma, solo será un poblador x de la aldea x (? Un aldeano.
> Habrá TodoDeku (No se si así se escriba xd ) créanme que me duele escribirlo ya que no es mi ship favorito :'v
> Kirishima no aparecerá hasta el siguiente capítulo junto con Bakugō :(

Sin más que decir UwU disfruten <3

...

No lo dudo ni un segundo pues cuando menos se lo espero ya se encontraba afuera del castillo adentrándose al bosque siguiendo el dulce aroma que antes había desprendido Bakugō por su celo.

Sentía la furia recorrer su cuerpo, tenía ganas de gritar o simplemente matar por placer cosa que el no hacía para nada, pero el hecho de que Bakugō se escapara de su vista y el solo pensar que nunca podría verlo de nuevo de verdad lo sacaba de quicio.

No sabía cómo controlar todas las emociones nuevas en el y todo por un estúpido perro.

Ese estúpido rubio al cual estuvo apunto de besar, el cual le provocaban celos, del cual estuvo apunto de declararse pero se había ido.

Por el cansancio se detuvo en la orilla de un barranco observando desde arriba como una pequeña villa se iluminaba en medio del bosque.

Debían vivir unas cuantas familias felices, con padres e hijos, se preocupó al notar como Bakugō influía tanto en sus sentimientos al punto de pensar en su familia y en lo estancado que se encontraba.

Era mitad vampiro, no podía hacer nada de lo que un vampiro pudiese hacer y tampoco era humano como para tener una vida normal en la aldea.

Por un mal movimiento de su parte la rama en la que se encontraba recargado se rompió provocando que cayera del barranco rasgando su ropa y quedando con raspones.

— Ugh... Ese maldito perro me las pagará cuando lo encuentre. — Se quejo cerrando los ojos y recostándose en la tierra.

Lo único que iluminaba era la luz de la luna y a unos metros la pequeña villa que se encontraba por ahí a la cual no pensaba entrar.

Cerró los ojos tratando de tranquilizarse y acomodar sus pensamientos, por un momento creyó haberse olvidado de Bakugō y se relajó en medio del fango, jamás pensó que terminaría así.

— O-Oye... ¿Te encuentras bien? — Escuchó una voz sobre el, abrió los ojos lentamente encontrándose con un chico promedio de pelo oscuro al cual le brillaban los ojos con la luz de la luna.

— Verdes... — Fue lo único que dijo Todoroki al ver al chico que lo miraba de cabeza.

— ¿uh? ¿Quieres un poco de agua? También tengo algo de comida de sobra... — Todoroki lo miró curioso, ese chico era estúpidamente tierno.

Se levanto aún con dolor y tomo al que al parecer era un aldeano del cuello y lo acercó para mirarlo mejor.

— ¡N-No tengo oro conmigo! ¡Y-yo solo estoy en el bosque en busca de leña! — El joven comenzó a llorar mientras tomaba a Todoroki de las manos para que lo soltase.

— ¡Cierra la boca, Bakugō! — Gritó inconscientemente el heterocromatico provocando silencio en ambos.

Poco a poco el mayor fue bajando al chico que se encontraba confundido, las mejillas del chico con pecas se sonrojaron y su cuerpo se tensó al sentir como el mitad albino recargaba su cabeza entre su hombro y su cuello.

— ¡Ah, y-yo creo que- uh... — Empezó a balbucear provocando de Todoroki gruñera. — ¿Estas perdido?

Todoroki se separó y miro al joven delante de él, baja estatura, algunas pecas que relucían en sus mejillas sonrojadas y ojos verdes los cuales irradiaban amabilidad.

— Definitivamente no es lo mismo...— Pasó la mano por su pelo desesperado y retrocedió alejándose del menor.

— Yo... Yo soy Midoriya Izuku, ¿Necesitas ayuda? — Sonrió nervioso.

El mitad albino lo miro de reojo, definitivamente aquel chico era una persona normal.

— Estoy buscando a mi perro... se escapó de mi castillo. — Tomó Midoriya del brazo y lo apretó provocando que chillara. — Tu me ayudarás a buscarlo.

— ¿¡Eh!? ¡Pero no puedo! ¡Pa-Para empezar no debería estar aquí y creo que tú tampoco! ¿¡Que tus padres no te regañan!? — el mitad albino solo atinó a apretar más el brazo del chico y arrastrarlo lejos de la aldea en busca de Bakugō. — ¡Auch! ¡Bien, iré! Ugh... mi mamá me regañara...

— Todoroki. — Mencionó el mayor ganándose una mirada confusa. — Así me llamó.

Midoriya le sonrió adolorido, bajo el agarre del mayor hasta llegar a estar tomados de las manos.

— Yo te sigo, Todoroki-kun. — Por un momento  se preguntó si todas las personas eran así de amables y tiernas y el se lo estaba perdiendo encerrado en su castillo.

Ahora viene el KiriBaku UwU aaaaaaavedaaaaa :v no c

Que dicen ¿Que Deku c enamore del cara de pokebola? O no :0

.....

Resubido.