Jin's pov

- Seguro que no queréis que llame a Yoongi para que os lleve??

- Tranquilo Kookie, no pasa nada, iremos caminando, de todos modos no es tan lejos.- Hice un gesto con la mano para restarle importancia.

-Seguro??

- Que sí tonto.- Rodé los ojos, sonriendo ligeramente por lo adorable que lucía mi menor cuando estaba preocupado.

- Pero es muy tarde. - Hizo un puchero, sin estar aún convencido del todo.

- Descuida Jungkook, que yo no voy a dejar que a mi chico le pase nada.- ChanYeol intervino con aires de súper héroe, pansándome  un brazo por los hombros, guiñándole un ojo al más pequeño de los tres e intentado demostrar que lo tenía todo controlado. Sin embargo, las cosas no eran para nada como él las pintaba, y yo se lo hice saber perfectamente.

- Pero qué dices? Si yo pego más fuerte que tú!!! En todo caso soy yo el que no va a dejar que te pase nada a ti.

- De verdad que contigo no se puede Jin... - Entrecerró los ojos y comenzó a mirarme rencoroso, negando suavemente con la cabeza - Yo haciéndome el novio brillante frente a tu hermano y tú vas y sueltas esa. - Reprimí una carcajada debido a lo ofendido que se mostraba.

- Bueno ya, dejaos de tonterías los dos, y vámonos, que mientras más esperemos más tarde se hará.

- Tienes razón Hyung... Tened cuidado por ahí, y llámame en cuanto lleguéis.

- Sí mamá - respondí sarcástico, haciendo que bufara con molestia, y tras darnos un pequeño abrazo de despedida, mi novio y yo nos dispusimos a comenzar a caminar hacia su morada.

Después de la reunión en casa de Jimin, habíamos ido a la de mis padres a cenar, para que finalmente estos conocieran a Chan.

Y para ser francos, todo salió relativamente bien.

Mi madre se mostró igual de agradable y desquiciada que siempre, vistiéndose como si fuera la reina de Inglaterra, mostrando su encantadora sonrisa y presentando un banquete digno de la realeza.

No obstante, quien realmente me tomó totalmente desprevenido fue mi padre.

Seguramente estéis pensando que hizo alguna de las suyas como era costumbre, intentando intimidar al peliblanco con alguno de sus descoordinados actos, preguntándole hasta qué tipo de detergente para ropa usaba, pero nada más lejos de la realidad.

Se mostró increíblemente civilizado, y le dio la bienvenida en casa como una persona normal.

No sabía si asustarme por ello, ya que evidentemente era una conducta inaudita viniendo de él, o sentirme aliviado de que por fin apareciera un individuo que lograra convencerle como mi pareja.

En cualquier caso, gran parte de este mérito decidí atribuírselo al propio ChanYeol por ser tan malditamente encantador.

Y es que los dos años que llevaba de conocerle, me habían bastado para darme cuenta de que muy poca gente era capaz de resistirse a sus dotes.

Era tan educado, tan amable, con tanto sentido del humor... Que simplemente terminaba cayéndole bien a todos.

Incluso mis amigos se habían quedado babeando por él.

Y hablando de amigos...

¿Qué mierda hacía Namjoon en casa de Jimin?

A ver, no me malinterpreteis, pero definitivamente mi idea de plan ideal no era estar con los dos a la vez en el mismo lugar, por lo menos no justamente el día en que fuese a presentar al más alto al grupo.

Sin embargo, no mostré oposición, porque entre su cara de "no sé que mierda hago aquí" y la horripilante excusa que me ofreció ( ya que evidentemente yo sabía que no le había dejado ninguna prenda a Jimin, pues básicamente este era demasiado chico para usarlas), llegué a la conclusión de que probablemente los propios idiotas le hubieran forzado a quedarse, aunque no llegaba a entender la razón.

Y si os soy sincero, este no fue el único motivo para dejar que se quedara.

Como ya sabéis, estos últimos días, en los que había compartido con él, diferentes emociones pasadas habían llegado a despertar en mí, así que decidí aprovechar la situación para probarme a mí mismo que ya había pasado página y que ChanYeol era la única persona que acaparaba mi atención.

¿Y sabéis que nota hubiera sacado si es que esto hubiese llegado a ser un examen?

Cero patatero.

Bueno, un cero es un poco drástico, pero un treinta si estaría bien.

En fin, que hubiese suspendido estrepitosamente.

¡¡¡Pero es que me era imposible apartar la mirada de el moreno!!!

Todos estábamos bien, interactuando como criaturas comunes, charlando, gastándonos bromas y diciendo alguna que otra gilipollez, mientras que el simio, se encontraba desplomado en una esquina con cara de quien prefiere suicidarse antes que quedarse un minuto más allí.

Y como comprenderéis, me preocupaba muchísimo más el motivo de su incomodidad que la vida inmobiliaria de la que tanto se enorgullecía mi novio.

Igual era algo cruel que yo pensara de esa forma, pero no podía evitarlo.

Así que básicamente me pasé toda la tarde observándole de reojo, muy disimuladamente claro está, intentando leer su mente, y utilizar algún tipo de súper poder ( el cual obviamente no tenía) para que su semblante cambiara y se viera feliz.

Por supuesto, esto trajo consigo que no me enterara de una mierda de lo que hablaban los demás, así que mi participación en la interacción grupal se resumía a contrastar "Sí" o "No", de vez en cuando y sonreír todo el tiempo como si estuviese drogado.

Bueno, eso hasta que cierto castaño que podía pasar fácilmente por la estrella del sistema solar, soltó la pregunta más idiota del siglo.

Ni siquiera Namjoon pudo distraerme tanto como para que no escuchara semejante sandez.

Cuando finalmente nos marchamos de la vivienda del bajito, todo el aire que no sabía que estaban reteniendo mis pulmones, salió, haciendo que sintiera que por lo menos tenía una carga menos sobre mis hombros.

Ahora mismo, después de la cena, el alto y yo estábamos camino a su residencia, pues tras miles de insistencias de su parte, había terminado por acceder a quedarme nuevamente a dormir con él. De todas formas no me pesaba, pues me la pasaba muy bien a su lado.

Era como un buen amigo con el que podías disfrutar de un gran sexo.

- Tus amigos me han parecido geniales. Sobre todo Hoseok, es un tío guay. - Comentó cuando ya llevábamos un buen tramo avanzado desde mi casa.

- Ya te había dicho yo que te iban a caer bien. - Respondí orgulloso.

- Él único con el que no tallé mucho fue con el moreno este... Namjoon era??? 

Ay madre!!! Qué le digo ahora??

- Sí, bueno, es un poco tímido... Ja ja- Solté una risita nerviosa, intentando invocar a algún espíritu que apareciera y le lavara el cerebro, haciendo que dejara de lado su charla acerca del peligris.

- Tímido? A mí me pareció más como si estuviera molesto... - Y como ya veis, fallé en mi ritual de invocación.

- He quedado con los propietarios del local para resolver todo el martes de la semana que viene. - Cambié abruptamente de tema, sabiendo que esto le distraería lo suficiente.

- Oh, vale. - Tardó un pelín en reaccionar debido al distinto rumbo que había tomado la charla - Pero por qué el martes? Si es por mí no hay problema eh, yo estoy disponible cuando quieras.

- Lo sé, lo que pasa es que el sitio es bastante lejos, así que pensé en esperar a que mis padres recuperaran el coche.

- Cuándo dices que era?

- El lunes.

- Ohh, ok. Todo perfecto - Me ofreció una de sus sonrisas de revista, y apretó suavemente mi mano. Yo también sonreí, pero no tan grande.

- Y otra cosa... - Hablé ligeramente avergonzado.

- El qué??- Su voz denotaba curiosidad.

- Perdón por molestarte tanto - Me disculpé incluso antes de dejarle caer la bomba, porque me daba pena abusar de su amabilidad tan seguido.

- Anda Jin, dispara. Qué pasa?

- Nada que... También necesito encontrar piso.

- Eh?

- Pues eso, que si voy a poner el restaurante, tendré que mudarme a un apartamento cercano... Así que estaba pensando en que tal vez tú podrías ayudarme con eso. - En esta última parte, mi voz salió como un susurro, y aparté la vista con mis mejillas teñidas de un tenue carmín. Ya sabéis que a mí no me gustaba mucho tener que estarle ocasionando problemas a los demás con los míos propios, aún si la persona que podría resolverlos era mi novio.

- Por qué te sonrojas tonto?? - Me miró con ternura, y soltó mi mano para posteriormente, rodearme por los hombros y seguir caminando así, terminando por enfocar su vista al frente. Para lograr mayor comodidad, yo extendí uno de mis antebrazos y lo posicioné en su cintura. - No te preocupes, tú déjamelo a mí.

- Gracias.

- Pero Jin... - Su tono dejó de ser cariñoso, y pasó a volverse más grave, como si fuese a decir algo de mayor envergadura - No crees que es mejor que te mudes conmigo??

Mierda.

Sabía que tarde o temprano este tema saldría a flote.

Yo no quería irme a vivir con ChanYeol, quería ser independiente, no estar atado a nadie, ni sentirme como un intruso en un lugar que no me pertenecía.

Igual era un pensamiento un poco drástico, pero específicamente una experiencia pasada me hizo hacerle rechazo a eso de vivir con parejas... Creo que vosotros entendéis de qué hablo.

Si algún día llegaba a separarme de él, era yo quien iba a tener que hacer las maletas e irse a la mierda, justo como había pasado antes.

Y ChanYeol lo sabía.

Bueno, él no era consciente de toooodoooo lo sucedido, pero si estaba al tanto de que yo llegué a Francia en busca de despejar mi mente de una ruptura tormentosa.

Le expliqué un por ciento de lo que me había pasado, sin decirle obviamente el nombre del causante de mi dolor en el pecho, y también le hice saber, que a pesar de todo, no sabía si podría encontrar a alguien que pudiera llegar a querer tanto como a Namjoon.

Y me aceptó aún sabiendo que yo no estaba enamorado de él, sabiendo que le quería, que me caía bien, que me atraía, pero que no le amaba.

Y llevaba los dos últimos años siendo consciente de ello, pues desgraciadamente, eso no había cambiado en lo absoluto.

Lo creáis o no, a mí también me dolía que las cosas fuesen así. Os juro que yo intentaba sentir mariposas en el estómago, extrañar sus besos, querer tener su calor en las noches, pero solo conseguía un leve cosquilleo en mi panza, pensar que "un beso suyo estaría bien" y bueno... Realmente me daba igual dormir o no a su lado.

Querer no es lo mismo que amar.

Él me amaba, y yo le quería, por eso mismo no podía darle todo lo que él me daba a mí, y aún siendo consciente de ello, Chan prefirió quedarse a mi lado.

Definitivamente era demasiado bueno para cualquiera, y por tanto merecía a un hombre que le correspondiera de igual forma.

Pero yo en ese entonces era lo suficientemente egoísta como para mantenerle con el objetivo de solucionar mis problemas.

- Chan yo... - No terminé la frase y le miré con ojos de cachorrito, intentando transmitirle que lo sentía, pero que no podía aceptar su propuesta.

Luego de unos segundos así, terminó suspirando y esbozó una pequeña sonrisa tranquilizadora.

- Descuida, no pasa nada. Igual tenía que intentarlo - Se encogió de hombros, como si no fuese la gran cosa, pero a pesar de lo resolutivo que se mostrara, yo sabía que le había dolido.

- Lo siento... - Murmuré, apretando su costado con la mano que yacía sobre su cuerpo.

- No seas tonto anda, de todas formas yo ya sabía que dirías eso.

- Es que-

- No tienes que darme explicaciones de nada cielo. - Me interrumpió - Yo sé como son las cosas, sé como funciona todo. Tú siempre has sido sincero conmigo, sé que quieres tu espacio.

- De todos modos me puedo quedar en tu casa de vez en cuando - añadí, intentando aligerar el ambiente.

- Como hoy. - Sonrió.

- Como hoy - Yo también lo hice.

- Deberíamos pasar por una farmacia? Ayer lo gastamos todo - inquirió alzando una ceja.

- No me subestime joven Park. Siempre estoy preparado - Contesté con aires de grandeza, dando un par de golpecitos sobre mi bolso, donde guardaba un pequeño bote de lubricante y condones que había tomado de la habitación de mi hermano.

Menudo guarro, todos pensando que Jungkookie era un ángel de dios, y en su cuarto podría grabarse una nueva parte de "50 sombras de Grey"... Y quedaría incluso más fuerte que la primera película.

Pero se lo dejaría pasar porque su guarrería me había sido útil esta vez.

- Cielo, menudo pervertido estás hecho.

Y por suerte y gracias a dios, el resto del camino transcurrió tranquilo, sin tener que volver a sacar temas incómodos para los dos.

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Holiiii
Cómo estáis?
Capítulo medio " ñiiiaa" pero es que yo había escrito uno que me quedó súper largo, y tuve que partirlo en dos. Así que esta es la primera parte, ahora mismito subo la otra.
Espero que os haya gustado.
Un besazo 😘😘😘😘
Pd: Tened muy presente al padre de Jin, va a ser un personaje importante más adelante.