De Ensueño

Parte dos

Kibum está nervioso aún puede escuchar claramente los latidos desenfrenados de su corazón, es una locura sin lugar a dudas, quien le diría a él que un día estaría en el auto de su idol favorito, aún más quién le diría que estaría con él en una cita. Era una total locura. Y aun así estaba de lo más feliz, nada, absolutamente nada, podría arruinar ese momento.

Jonghyun tenía la mirada fija en el camino, hace un rato que habían salido de la ciudad, y ahora solo estaban rodeados de árboles, era una vista maravillosa, e incluso el clima lluvioso le daba un sentimiento tan etéreo.

— No me has preguntado a dónde nos dirigimos, Kibum.

Él solo sonrió con su mirada fija en el perfil del cantante y se preguntó si sonaría muy ridículo si contestaba lo que tenía en la cabeza.

— Cualquier lugar es perfecto si estoy a tu lado...

Su cara se tornó de un completo color carmín e incluso pudo ver las mejillas del cantante ponerse de un tono similar al suyo, y se sintió pleno por haber siquiera logrado aquello, tenía que parar.

Su corazón ya estaba demasiado involucrado, pero solo por ese día dejaría que sus ilusiones lo dominaran, porque quizás nunca más tendría una oportunidad como esa.

— Aún tenemos un largo camino, cuéntame sobre ti, porque de mí ya lo sabes todo.

Kibum sonrió, estaba tan feliz de que Jonghyun quisiera saber de él puesto como el cantante había dicho él ya sabía todo o eso pensaba, porque justo ahora estaba conociendo un lado de Jonghyun que nunca había podido ver.

— ¿Qué es lo que quieres saber?

— Simplemente cuéntamelo todo, Kibum.

Kibum sonríe hacia la ventana antes de tomar un profundo suspiro, realmente va a contarle todo sobre él a Jonghyun. Con un brillo en sus ojos y apretando con fuerza su celular Kibum observa con ilusión a Jonghyun y le cuenta todo.

Desde el día en que nació, su primer día de escuela, como diseñó su primer conjunto e incluso le mostró la foto mientras se detenían en un semáforo. Kibum simplemente se deja llevar, la emoción le envuelve el cuerpo por completo, simplemente no puede parar y Jonghyun solo puede sonreír enormemente porque ese chico realmente está haciendo estragos en su corazón y es demasiado débil para no sucumbir a todos los encantos de ese encantador chico.

— Mi hermano Heechul trabaja como asistente de Siwon y son todo un caso.

Jonghyun deja de reír después de escuchar aquello y su mirada se desvía momentáneamente de la carretera para fijar sus ojos sorprendidos en Kibum.

— Espera, tu hermano es Heechul y encima conoces al señor Choi.

— Sip, después de todo tú sabes que ellos están en una relación.

— ¡EL SEÑOR CHOI Y HEECHUL SALEN!

El auto se ve inundado de las fuertes carcajadas de Kibum quien se ríe del inesperado grito de Jonghyun, el cantante solo puede sonrojarse y seguir manejando aun cuando quiere esconder su rostro entre sus manos.

— Pensé que lo sabías, ellos no son muy reservados que digamos.

— Bueno, no estoy muy pendiente de los asuntos de mi jefe. Además cómo podría cuando mi atención está enfocada en otra cosa.

Después de esa pequeña conversación el silencio se vuelve a apoderar del auto pero está bien, porque Jonghyun puede escuchar los acompasados respiros de Kibum mientras duerme, el viaje está siendo demasiado largo y algo le dice que tampoco Kibum tomo el desayuno esa mañana. Si su memoria no le falla están cerca de una parada de descanso, tomar una comida estará bien ya que aún hay un camino muy largo a Busan.

Con sumo cuidado Jonghyun mueve un poco a Kibum tratando de despertarlo de aquel sueño en el que se había sumergido, y lo logra. Kibum se estira un poco, bostezando y refregando una de sus manos en sus ojos, a los ojos de Jonghyun parece un pequeño gatito. Uno al que le encantaría poder cuidar.

— ¿Ya hemos llegado?

— Aún no, lo siento. Solo pensé que te gustaría comer algo.

Kibum se sonroja, porque una de sus primeras fantasías se está cumpliendo "compartir una comida con Jonghyun"

Y no sabe que aún le espera un largo día.

El restaurante es un lugar muy pequeño pero acogedor, Jonghyun disfruta de ese lugar, hace mucho tiempo que no había estado en un lugar así, su vida se había vuelto demasiado mecánica para su gusto, de ir a desayunos, comidas y cenas de trabajo a ensayos, grabaciones y firmas. Era muy raro que él tuviera algún descanso y pese a todo ahora que por fin la empresa le había dado un día, él decidió que quería compartirlo con ese chico de bonitos ojos.

Por eso está decidido a protegerlo por ese día y por los próximos que vengan.

No hay mucho que decir mientras degustan la comida, solo una plática trivial sobre que les gusta y que no en cuanto a platillos, solo hay risas y miradas fortuitas.

Solo hay dos corazones acelerándose con cada minuto que pasa.

— Bien, después de esto ya solo nos queda nuestro destino Kibum, espero que estes listo. —Jonghyun le sonríe a Kibum mientras ambos se colocan el cinturón de seguridad.

— Estoy listo, Jonghyun.

A ambos comparten una sonrisa cómplice y con el sonido del motor del auto emprenden de nuevo ese viaje de ensueño.

El atardecer comienza a hacer de las suyas, bañando al cielo en colores anaranjados, es magnífico y Kibum lo sabe ha tomado tantas fotos para rememorar ese día, no quiere perder nada porque no sabe si de pronto va a despertar y darse cuenta de que todo es un sueño. Después de todo aun no sabe con seguridad si Jonghyun es gay o mínimamente si siente algo por él más que un cariño de idol a fan. Porque sus esperanzas están en lo más alto y no quiere caer súbitamente.

— Hemos llegado, Kibum.

Kibum levanta la mirada confundido, tanto tiempo estuvo sumido en sus pensamientos. El atardecer casi desaparece, la vista frente a sus ojos parece tan irreal justo como si fuera sacada de una de sus fantasías.

Un chillido de incredulidad escapa de su boca y solo atina a cubrirse con sus manos, hay una hermosa feria frente a él que se ve aún más enigmática bañada con los colores del atardecer que casi desaparecen.

La puerta de su lado se abre dejando ver a Jonghyun quien le sonríe de una forma tan radiante mientras le extiende la mano.

"Realmente está pasando"

Kibum está fascinado, ¿de verdad Jonghyun manejo todo el camino solo para traerlo a un lugar así? ¿porqué?

Su mente se llena de todas esas preguntas, solo el hecho de estar ahí es un sueño, uno verdaderamente hermoso.

Jonghyun y él caminan a lo largo de la feria con sus hombros rozándose en cada paso.

— ¿Te gusta?

— Es maravilloso

— Me alegra, realmente quería venir con alguien a este lugar y me alegra que seas tú.

Las charlas son cortas pero no importan, porque las acciones dicen más que las palabras.

Ahí en esa playa de Busan, en esa feria, donde las personas son ajenas a ellos. No está Jonghyun el cantante y Kibum el fanboy.

Solo son dos jóvenes.

Solo son Jonghyun y Kibum.

Solo son ellos, riéndose porque perdieron un juego, persiguiéndose por ver quién mancha de helado al otro, inmortalizando momentos en fotos, y guardando recuerdos en su corazón.

Son ellos dos enamorándose sin siquiera darse cuenta.

El reloj en la muñeca de Jonghyun marca las diez de la noche, y por más que le gustaría quedarse más tiempo no puede, el viaje de regreso es largo y su agenda no tiene piedad con él. Aunque aún hay tiempo suficiente para subir a un último juego.

La vista es impresionante desde lo alto de la rueda de la fortuna, el mar se ve esplendoroso y las luces neón que adornan la feria aún más, es tan perfecto piensa Kibum.

— Todo es tan hermoso, Jonghyun. Realmente no puedo creer que me hayas traído.

Las luces se reflejan en los oscuros ojos de Kibum, que hacen que tenga un aura tan etérea, Jonghyun no puede evitar suspirar mientras ve al chico.

— Ha sido realmente todo un placer compartir este día contigo, Kibum.

Y así ha sido, nunca había disfrutado tanto una salida antes, nunca su corazón se había sentido tan emocionado solo por compartir el mismo espacio con alguien, más bien su corazón estaba tan feliz de que ese alguien fuera Kibum.

— Kibum, tú...

Sus palabras son cortadas cuando el mencionado se voltea, sus rostros están a escasos centímetros de distancia, Jonghyun puede escuchar a su corazón martillado con fuerza, sus ojos están atrapados en los de Kibum que brillan con anhelo. Quizá por eso siente que una fuerza misteriosa lo impulsa, cierra sus ojos y se deja llevar.

Hay una explosión.

Un sabor a fresas.

Un par de labios reconociéndose mutuamente, en un beso otorgado por el destino.

En un beso que dice...

Vamos a intentarlo.

Hello, después de mil años regresé 😅 de seguro muchas me odian. Yo las amo uwu ❤

¡POR FIN TENEMOS LA CITA!

me quedo corta, lo sé :c

Pon 🍒 si te gusto

Pon 🍍 si esperabas más

Pon 🍓 si ya quieres verlos como novios

Pon 💗 awws me muero de amor

Después de esto volvemos con los capítulos de IG normales uwu

Los adoro ❤