POV CAMERON

"Sabes que tanto tu hermana como Eli están no muy lejos de nosotros ¿verdad?" pregunté viendo como mi mejor amiga y cuñada estaban sentadas a una distancia prudente de nosotros "Lo sé. Me siguieron a pesar de que les dije que no hacía falta" respondió rodando los ojos "Solo se preocupan por ti, cariño" apunté y Lara bufó "Si vinieron es porque no se fían de ti. Temían que estuvieses todavía enfadado y me mandases a la mierda" rebatió y solté una pequeña risa, porque entendía de donde venían esas dos "No iba a hacerlo. Puede ser que estuviese enfadado cuando salí de casa, pero necesitaba despejar un poco la cabeza, nada más. No tenían que preocuparse por nada

"¿Y si decidimos ahora los nombres para los niños?" pregunté a mi mujer la cual estaba sonriendo "Me gustan todos los nombres que tenemos Cameron, y la verdad no sé cómo podemos decidirnos" respondió esta y asentí, porque desde hace tiempo que teníamos los nombres para ambos sexos, pero no nos habíamos decidido por ninguno aún. "¿Y si los escribimos en papeles pequeños y sacamos uno para cada sexo?" pregunté, incorporándome y mirando para ella.

"Eso sí que es una buena idea" musitó y rápidamente me levanté para ir a por un papel a casa "¿A dónde se supone que vas ahora Edwards?" preguntó mi mujer en tono molesto "No te preocupes cariño, solo voy a por un papel a casa. No tardaré más de dos minutos" aseguré y esta asintió, pasando a centrar su mirada en el mar.

Creo que desde que tengo la prótesis no había corrido tan rápido y a pesar de que estaba contento por haber al menos logrado eso, creo que en parte era porque temía la reacción de Lara en caso de que tardase algo más de los dos minutos que le había dicho. Sé que es algo que le molesta, cuando reacciona mal por cusas estúpidas como le dice ella, pero sé que son las hormonas que recorren todo su cuerpo que la hacen reaccionar exageradamente, por lo que no se lo tomo a mal.

Cuando llegué a junto a ella de nuevo, pude ver que todos sus músculos estaban en tensión, y que tenía la mandíbula apretada, por lo que rápidamente me acerqué a ella y me puse delante de ella, cogiendo una de sus manos para que pasase a centrar su atención en mí "¿Te pasa algo, amor?" pregunté preocupado. Lara tomó una respiración y empezó a destensar sus músculos "No me pasa nada, solo un calambre en la rodilla" dijo, llevándose la mano a la rodilla que le habían operado hace años. "¿Segura que es solo eso?" pregunté y esta asintió "Solo es eso, de verdad. Ahora mejor decidamos los nombres de los niños, porque la verdad me gustaría tenerlos antes de que naciesen"

Me senté a su lado y empecé a escribir los nombres que habíamos seleccionado. Una vez terminé, los recorté, doblé por la mitad y mezclé, dejando mis manos al alcance de Lara para que cogiese un papel. "Coge uno y yo cojo luego" digo con una gran sonrisa en mi rostro. Lara se quedó mirando los papeles en mis manos por unos segundos y luego cogió uno "¿Y qué? ¿Qué nombre tenemos?" pregunté nervioso y muriéndome de ganas de saber que nombre había salido "Jax, el niño se llamará Jax" dijo mi mujer con una gran sonrisa en el rostro. "Ahora me toca" dije con una gran sonrisa y pasándole los papeles a Lara, la cual los mezcló y me quedé mirando para los papeles como lo había hecho ella. Cuando saqué uno de los papeles, lo abro y una gran sonrisa aparece en mi rostro "Dime que al menos es nombre de chica" pidió Lara con una sonrisa en su rostro "Lo es. Se llamará Lúa" dije con una gran sonrisa en el rostro y es en ese momento que se me cae otro papel, el cual, ambos nos quedamos mirando por unos segundos "Y como no, tenías que coger dos papeles" apuntó Lara, rodando los ojos.

"Esa no fue mi intención" dije y Lara acabó cogiendo el papel para ver que estaba escrito "Violeta. Al menos es nombre de niña" respondió y me quedé mirando para ella "¿Eso quiere decir que Lúa tendrá dos nombres?" pregunté con curiosidad y Lara se encogió de hombros "Es el método que escogimos para saber los nombres de los niños, y a pesar de que no pegan que digamos, es lo que hay, siempre te echaré la culpa cuando la niña se queje de que los nombres no pegan ni con cola" respondió seriamente y no pude evitar soltar una carcajada "No era mi intención" protesté y Lara se encogió de hombros "Pero fuiste tú el que sacó dos nombres, no yo" respondió con una gran sonrisa en el rostro.

"Está bien, me culparemos" asentí y la sonrisa en el rostro de Lara se ensanchó "Lo iba a hacer igualmente, estuvieses o no de acuerdo" aseguró y solté una carcajada de nuevo "Mejor vayamos a casa para que estés cómoda. Puedo ver que no paras de moverte" apunté y esta asintió "La verdad es que sí. Ayúdame a levantarme, porfa" pidió y rápidamente me levanté para ayudarle, pero en el momento que se levanta, se para en seco y mira hacia abajo "Mierda" musitó y fruncí el ceño, mirando en su misma dirección y no viendo nada "¿Qué pasa? ¿Te encuentras bien?" pregunté tensándome "Diles que vayan a por un coche" murmuró y apretó mi mano "Se lo diré, pero ¿por qué?" pregunté, buscando con la mirada a las chicas que ahora mismo no las veía "Ya vienen" dijo, aflojando el agarre en mi mano y me quedé mirando para ella durante unos segundos intentando entender lo que acababa de decir.

"¡BIANCA! Cam cariño, este no es el momento para que te quedes quieto" dijo mi mujer, poniéndome la mano en la mejilla para que me centrase en ella y sacudí la cabeza, porque tenía razón, no era el momento para eso "Lo sé, lo sé. Lo siento" Con eso, pasé uno de mis brazos por su espalda y el otro por debajo de sus rodillas y la cogí en brazos haciendo que esta soltara un chillido de sorpresa.

"¿Qué pasa? ¿Acaso me llamas para que vea lo feliz que estás? Porque te puedo asegurar que lo podía ver desde donde estaba" dijo mi cuñada y tanto Lara como yo negamos "Ve a casa de tu madre y ve a por su coche. Que sea rápido" dije, empezando a caminar hacia nuestra casa "¿Para que necesitas el coche de mi madre?" preguntó la chica, confundida "Los niños ya vienen y no puedo conducir si quiero estar con Lara" respondí y pude ver como el tamaño de los ojos de mi cuñada aumentaron "Está bien, está bien. Ya vamos" dijo Eli con una sonrisa en su rostro y tirando del brazo de su mujer para que empezase a caminar.

No mucho más tarde, llegamos a casa y dejé a Lara en el sofá mientras yo empezaba a buscar las cosas que habíamos preparado para llevar al hospital "¿Qué es lo que buscas?" preguntó mi madre, de la cual me había olvidado completamente que estaba en nuestra casa "Buscando las cosas para irnos al hospital" dije sin mirar en su dirección "¿Ya vienen?" preguntó mi madre en tono emocionado y asentí, cogiendo el bolso con las cosas de los niños "Ya vienen. ¿Podrías ir con Lara para si necesita algo?" pregunté, girándome en su dirección y esta asintió, saliendo de la habitación y dejándome buscar lo que me faltaba por coger.

Una vez terminé, bajé corriendo las escaleras, dejé las cosas al lado de Lara y me puse delante de ella de rodillas y cogí su mano entre las mías "¿Tuviste alguna contracción más?" pregunté y ella negó con una pequeña sonrisa en el rostro "Creo que tenemos algo más de tiempo del que tú estás temiendo" respondió soltando una pequeña risa, pero acabó apretando mi mano con más fuerza que antes. Miré el reloj y vi que había pasado una media hora, por lo que Bianca y Eli debían estar llegando a casa.

"Todo está bien." dije, intentando no sé muy bien el que, pero en el momento que me lanza una mirada asesina, sé que no le ha gustado mucho que digamos "Sé que todo estará bien, no necesito que me lo digas" respondió en tono molesto y pude ver como mi madre apareció en el salón negando y dándole un vaso a Lara, la cual aceptó. "Te recomiendo no decir cosas así. No es algo que nos guste escuchar cuando estamos pasando probablemente por el dolor más grande de nuestras vidas" susurró mi madre en mi oído a lo cual asentí.

Unos minutos más tarde, Bianca entra en casa, con Carmela, su madre y Eli detrás, las tres últimas acercándose a donde estábamos nosotros "Estás segura de que está vez veñen de verdade? (¿Estás segura de que esta vez vienen de verdad?)" preguntó Carmela y no pude evitar fruncir el ceño "Lo mismo pensé esta mañana, pero sigo teniendo contracciones y rompí aguas" respondió mi mujer y de no ser porque en este momento tenía más prisa por llegar al hospital que otra cosa, me hubiese molestado que no me dijese que estaba con contracciones desde está mañana.

"¿A que estamos esperando?" preguntó Bianca, acercándose a donde estábamos y poniéndose a mi lado "¿Necesitas que te ayude con mi hermana?" preguntó Bianca, y pude ver la mirada asesina que le envió Lara "No, no hace falta. Espero que conduzcas lo más rápido que hayas conducido nunca. Las contracciones son cada veinticinco minutos" Apunté y ella asintió "Vámonos entonces, porque te aseguro que lo último que quiero es que mis sobrinos nazcan en el coche"

Con eso, todas se apartaron de donde estaban y yo ayudé a mi mujer a ponerse en pie, e iba a cogerla de no ser porque me dijo en tono molesto que podía andar, lo cual hizo que tanto su madre como abuela soltasen una carcajada. También de no ser por Eli, me olvidaría de coger los bolsos de los niños. No más de media hora, llegamos al hospital, y de no ser por los agentes de policía que habían parado a Bianca por exceso de velocidad nos ayudasen a llegar antes al hospital, no habríamos llegado en tan poco tiempo.

Eli fue la primera que salió del coche para pedir al personal médico que viese que nos ayudase, ya que las contracciones habían bajado a veinte minutos. No tardan mucho en enviarnos a una habitación y la obstetra de Lara aparece por la puerta con una sonrisa en su rostro "Parece que estos pequeños quieren salir ya. Déjame echarte un vistazo" pidió amablemente y mi mujer lo único que hizo fue asentir.

Los minutos iban pasando, y la doctora no se fue en ningún momento ya que dijo que pronto nacerían, y al parecer no tenía nada que hacer que no fuesen informes. También se reía cuando Lara me gritaba por cualquier cosa que dijese y me culpaba de que pasaba por ese dolor por mí culpa, lo cual acepté porque sé que realmente no piensa eso y que no está enfadada conmigo, lo cual ayudaba a mantener la calma.

Una vez la doctora dijo que Lara debía empezar a empujar, me senté detrás de ella y agarré las manos para que apretase con todas sus fuerzas. Primero nació la niña, nuestra pequeña Lúa, y no más de diez minutos más tarde, nació Jax. La sonrisa cansada de Lara lo decía todo, y la verdad es que no podía hacer nada más que no fuese sonreír como un maniático. Todavía no me podía creer que fuese padre y ame tanto a mi mujer como la amo en este momento.

Mientras las enfermeras limpiaban a mi mujer y la doctora se aseguraba que todo estaba bien con nuestros hijos, le di un beso en la sien a Lara y en el momento que giró la cabeza, le di un beso en los labios "Te amo, Lara. Más que a nadie en este mundo" murmuré con una sonrisa en mi rostro "Te amo Cam" dijo con los ojos medio cerrados, probablemente cansada ya que llevaba un par de noches que no estaba durmiendo bien "Descansa, te lo mereces" murmuré y pude ver como negó "No hasta que vea a los niños"

"Bueno, pues aquí los tienes" dijo la doctora con una gran sonrisa en su rostro y dejando a los niños sobre el pecho de Lara, la cual mira hacia ellos y una gran sonrisa aparece en su rostro, con toda su atención en ellos. No pude evitar sacar el móvil y sacarles una foto. Me quedé mirando para ellos hasta que Lara mira para mí, con lágrimas acumulándosele en los ojos, por lo que me acerco, y le doy un beso en la sien "¿Por qué no cojes a tus hijos?" preguntó y mi sonrisa se ensanchó "¿Segura que quieres que los coja?" pregunté y esta asintió.

"Será mejor que te sientes para poder coger a ambos" apuntó la doctora la cual me había olvidado completamente que estaba allí. Asentí, y me senté en la silla que estaba al lado de Lara. La doctora cogió a uno de los niños y me lo puso a un lado del pecho y luego cogió al otro, dejándolo al lado del otro. No pude evitar quedar mirando para ellos como un estúpido. No hace más de una hora que habían nacido y ya los quería más que a nada en este mundo. Ni cinco minutos habían pasado desde que había cogido a los niños, cuando me giro para mirar a mi mujer veo que se había quedado dormida mirando en nuestra dirección con una sonrisa en su rostro.

Casi una hora más tarde, nos llevan a una habitación y las chicas no tardan nada en entrar en la habitación, viniendo en mi dirección y la primera que coge a uno de ellos es Carmela, la cual le acaba apareciendo una gran sonrisa en su rostro, y Bianca coge al otro. "Chicas, os presento a Lúa Violeta y Jax Gallego Edwards" dije en tono orgulloso "¿Gallego Edwards?" preguntó Eli con una gran sonrisa en su rostro y acariciando la cabeza de Jax "La verdad es que nos daba igual, y digamos que nos gusta hacer totalmente lo contrario que al resto, por lo que decidimos poner el apellido de Lara primero" respondí y mi madre soltó una carcajada "Me encaja" dijo.

"¿Me vas a decir que le pusisteis Lúa Violeta a la pobre niña? Si no pegan para nada" dije Bianca seriamente, pero con una sonrisa en su rostro "Eso mismo piensa Lara" apunté, sabiendo que todos acabarían por saber la historia del nombre de Lúa "¿Entonces para que se lo poneis?" preguntó confundida "Dejemos que tu hermana os cuente esa historia. Pero te puedo asegurar que no fue nuestra intención ponerle el segundo nombre" apunté y Bianca frunció el ceño. "Te prometo que valdrá la pena que esperes la historia" aseguré y esta asintió.

Mi madre no tarda nada en aparecer a mi lado mientras Bianca le pasaba Jax a Rita y Carmela le pasaba a Lúa a Eli. "Lara no te contó nada porque le pedí que no te contase nada" dijo mi madre luego de unos minutos mirando en la dirección de las chicas "Ya me lo dijo, pero sé que no me lo diría de todas maneras. No hasta que se asegurase de lo que decían" dije completamente convencido de que lo haría "Puede ser, pero de todas maneras quería decirte que no había sido su idea. Es más, ella se enteró de repente y se ofreció a ayudarme"

Una pequeña sonrisa apareció en mi rostro, porque sabía que en el momento que se enterase de lo que molestaba a mi madre, iba a ofrecerse a ayudarla, y ahora que lo pienso, podría cuadrar con algunos días que estaba más estresada "Solo quiero que no te enfades con ella al menos por lo que ha hecho" pidió y negué "No estoy enfadado con ella, te lo prometo. ¿Pero entonces nos fiamos?" pregunté ya que era algo que no le había preguntado a Lara "Lara se dice que nos podemos fiar" informó y asentí "¿Te parece si le vamos a verlos dentro de unos días?" cuestioné y pude ver la sorpresa en el rostro de mi madre "¿Estás seguro de que quieres hacerlo? Puedo ir yo sola" aseguró y negué, porque a pesar de que no me gustaría tanto separarme de Lara y los niños, también quería apoyar a mi madre en esto. "Claro que quiero hacerlo, no te preocupes por eso" pedí y esta asintió, ambos pasando a centrar nuestra mirada en las chicas y mis hijos.