Despertó en un cuarto diferente al que recordaba, estaba solo, la cabeza le dolía y tenía nuevos vendajes, los miró por un largo rato, pasó sus dedos por ellos y con sus uñas se los intentó quitar, pero estaban bien ajustado, desistió de aquello y se paró de la cama, tenía los ojos cansados, su cuerpo estaba tenso y encorvado, no tenía ganas de seguir caminando, pero no se sentía bien de estar solo, intentó abrir la puerta pero estaba cerrada, no tenía fuerzas para gritar por ayuda ni siquiera para rogar para que le abrieran.

Se sentó a lado de la puerta abrazando su cuerpo, esperando a que alguien entrara, no sabía si era un sueño, esperaba que lo fuera, quería despertar y estar acostado, con Todoroki a lado en un sillón, sonrió llorando.

La puerta se abrió después de unos minutos que parecieron horas a sus ojos, pero no encontró con la mirada a quien esperaba, quien había entrado a aquella habitación era su tutor legal, que lo veía con una cara preocupada.

No hablo solo se paró de su lugar, algo le decía que había hecho algo malo, Aizawa solo lo llegaba a ver cuando se portaba mal, odiaba verlo, eso solo significa que lo volverían a encerrar, miró el pasillo que parecía tan largo y atorméntate, cada paso que daban sus pies, eran como si le clavaran unas espinas, su cabeza dolía más, escuchó un ruido que aturdió su oídos y cayó al piso.

— ¡Para! — se agarró la cabeza gritando, Aizawa ya estaba a lado suyo, miró al frente y lo vio parado en medio del pasillo, Shigaraki lo estaba viendo y sonriendo, con miedo empezó a arrastrarse hacia atrás, Aizawa intentaba despertarlo pero no podía — ¡Aléjate! — veía como aquella persona se acercaba a su lugar — lárgate, lárgate,

— Midoriya — Aizawa sostenía sus manos intentando calmarlo — no hay nadie ahí — Empezó a gritar más fuerte — mírame

— está aquí — decía desesperado — no lo ves, está aquí — se veía enojado — ¡Sal de mi cabeza!

De pronto todo regresó a la normalidad, miró a Aizawa y se tumbó en su hombro, queriendo un abrazo, el cual no llegó. Porque Aizawa no era esa clase de personas, intentó hacer que entrara en razón o que se parara pero ya no tenía fuerzas para nada, se aferró a la camisa del más grande y no lo soltó, él seguía ahí, lo puede sentir, aquella mirada que lo veía fijamente, aquella sonrisa que no lo dejaba tranquilo, no lo dejaba vivir, no lo dejaba respirar, quería que se fuera, que lo dejara, quería desaparecer.

De pronto todo desapareció, cuando lo vio pasar por aquel pasillo, cuando aquellos ojos se cruzaron con los suyos, ya no tenía miedo, corrió hacia él y con sus manos rodeó su cuerpo, no quería que lo dejara, se sentía tan perdido.

— todo va a estar bien — le susurro como una pequeña caricia a su alma, como si aquellas palabras pegaran los pedazos rotos de su mente — no mires — con su mano cubrió sus ojos — confía en mi solo por esta vez permíteme dejarte solo — le seguía susurrando sin que nadie más lo escuchara — pienso regresarte a mi lado — Izuku asintió con miedo aferrándose a sus ropas, Todoroki sonrió y se despegó de su oído — Uraraka, pásame una venda— la muchacha le pasó un venda y él se la puso en los ojos — así no lo veras, si tienes mucho miedo quítatela — suspiro

— regresa por mi, no me dejes, — se aferró a su ropa — por favor, tengo miedo Shoto

Lo cargo y miró a su maestro, quien solo lo veía con desconfianza, definitivamente aquellas miradas eran preocupantes, había algo en la mayoría de miradas de esos niños, irá, estaban molestos, miradas que decían que podían llegar asesinar por aquel niño.

Bajaron a la planta principal, escuchaba voces de distintos tonos y tipos, algunas las reconocía otras se le hacían confusas y algunas definitivamente no sabia de quienes eran, se aferró de la ropa de Todoroki, buscando calmar su miedo, no distingue de qué hablan escucha su nombre entre otras cosas pero nada es claro, quería quitarse la venda pero a la vez no, porque sabe que lo verá entre las personas, acercándose a su cuerpo, hay veces que susurra en su oído, en las noches o en los días cuando está solo, desea que lo deje de atormentar pero se le hace tan complicado dejar su mente en blanco y pensar de que en realidad no hay nada a donde él está mirando. quería llorar, de la frustración de no sentirse él.

le quitaron el vendaje, estaban los maestros más cerca de él, no le gustaba, el agarre de Todoroki era fuerte, como si lo quisieran arrancar de sus brazos, se aferró más fuerte a sus brazos, los maestros se veían enojados le daban miedo, porque lo miraban de esa forma, él no había hecho nada malo o eso cree él.

Sero y Kaminari estaban a los costados de Todoroki, amenazando con la mirada, Uraraka con Iida estaban juntos mirando todo enojados, por lo que estaban haciendo los maestros, sobre todo Uraraka, debido a que se habían llevado a su novio una hora antes para que él no armara un desastre cuando vinieran todos los maestros, también se llevaron a Kirishima, no le gustaba para nada esa situación.

— Todoroki Shoto, no hagas esto más largo, Izuku Midoriya ya no es un problema estable — al escuchar eso miró a Shoto bien, notando los vendajes en su cabeza y en su cuello, se espantó y se bajó de Todoroki espantado

— "eso lo hice yo" "porque me sigue cuidando" "le hice daño a Shoto" "cuando" "donde" "porque no puedo acordarme" "Shoto" — lo miró él tenía una cara preocupada se alejó tanto que chocó con los maestros y ellos lo tomaron del hombro — ¿yo lo lastime? — le pregunto a ellos con miedo a lo que Aizawa le contestó

— si, lo hiciste mientras gritabas que ya lo habías matado — lo miró con miedo

— no, yo no maté a nadie, no recuerdo, que recuerdo, Tomura, Toga, Eri, basta — se agarro la cabeza alejándose de todos — yo no hice nada, no quiero recordar, no quiero recordar, basta salgan de mi cabeza — miró a los maestros con miedo — mamá... — estaba llorando — ¿Donde estoy? — miró a Todoroki — Shoto vamos a jugar hoy también — sonrió y se tocó las lágrimas — qué pasó

— no es nada — se acercó y lo tomó de las manos — te llevarán lejos por unos días, prometo que no será por mucho tiempo, — Izuku asintió — verás a mucha gente y te querrán tocar, pero solo te quieren revisar a ver si no tienes heridas — las manos de Izuku estaban temblando — lo siento

— hice algo malo — bajó la cabeza

— si — le contestó distante — pero nadie te culpa, nada de esto es tu culpa — Izuku asintió

Todoroki miró a los maestros enojado, les dio a Izuku, quien dejó de temblar al ver a Aizawa, se acercó a él abrazándolo, no se quería alejar, Aizawa lo subió a su espalda, de todas maneras Izuku no pesaba nada, casi estaba en los huesos, un niño de 10 años pesa más que Izuku, empezaron a salir del edificio ante la mirada de los alumnos disgustadas.

Todoroki se metió enojado a la casa, Uraraka lo siguió agarró su hombro, para mirarlo a la cara, los ojos de Todoroki estaban brillando, su lado de hielo se estaba descontrolando, la muchacha agarró y le dio un cachetada.

— tu decidiste dárselos, nosotros nos negamos, katsuki te pidió que no lo hicieras, no sabemos qué le harán, lo que está pasando y pase es tu culpa, no te pongas ahora sentimental - lo agarraba de la chaqueta enojada kirishima la intentaba alejar pero ella quería que Todoroki la mirara a la cara - él tenía miedo, que haria sin ti, no podemos dejarlo solo - estaba llorando

-ya lo sé - los dos estaban enojados con el otro 

hola bebes 

lamento que el otro mes los deje sin capitulo, pero fue por problemas de Wattpad, 

espero que disfruten sus vacaciones 

Que personaje quieren que aparezca en el otro capitulo.

los estaré leyendo me voy gracias por leer.