--5 meses después--

Era de noche, la luna estaba en uno de sus puntos máximos y las estrellas decoraban como diamantina el cielo oscuro. Las ocho de la noche si no me equivoco... caminaba con la cabeza baja, con una chamarra que me llegaba á la cintura y unas mayas negras, con botines negros y una bufanda roja. Hacía frío y nevaba, éso empeora la situación.
Seguí caminando cuando miré hasta la ventana donde vendían panes recién hechos, el aroma caliente y dulce salió cuando una familia abrió la puerta con sus hijos ya contentos, los miré y tragué saliva pare volver a voltear a la panadería. No tenía dinero para estas cosas, toqué la ventana y mi estomago rugió, tragué saliva, el dueño se dio cuenta y me sonrió invitándome a entrar desde adentro, él solo veía mi bonita cara, la chamarra tapaba mi cuerpo sucio y flaco, negué con la cabeza y seguí caminando.
A Jackson le encantaba la nieve desde qué recuerdo, hacía "arte" con esta, y cada vez qué nevaba, sus ojos le brillaban y empezaba a juguetear, parecía un cachorro cuando vé a su dueño...

Ya casi llegaba, iba normal hasta qué un niño como de 7 años me entregó el periódico dé hace 5 meses, volví a mirar al infante que estaba flaco y sucio, así que agarré una moneda que tenía y se la dí, iba a tirar el periódico pero me dí cuenta de que hablaba sobre Jackson, era ése maldito periódico qué decía sobre su muerte, y lo peor fue que creían qué yo lo maté. Tal vez fue instinto, o el destino, no tengo idea pero guardé él periódico.
Al fin llegué a mi lugar preferido desde... la despedida de mi mejor amigo, la taberna.

—Te demoraste un poco. —Me dijo el tabernero, un hombre moreno, calvo y con muchos músculos, Carnellie era su nombre, era de los pocos hombres a los cuales les tenía algo de afecto.

—Me distraje. —dije seca caminando hacia la barra, dejé mi chamarra y la bolsa en el suelo, puse mi mano en mi frente y mordía mi labio, mi fleco tapaba mis ojos pero Carnellie sabía que no tenía ganas de nada.

El tabernero sólo suspiró y sirvió un Devi's spring en un vaso pequeño, lo tomé rápidamente y empecé a tragarlo todo aunque me raspara la garganta, golpeé la barra con el vaso.

—¿Hasta cuánto tiempo vas a seguir así? — suspiró Carnellie, solté un chasquido y mordí mi labio, pero decidí dejarme llevar por los sentimientos de furia que tenía.

—¡Hasta qué despierte de ésta pesadilla! —grité con mis manos encajándose en mi cuero cabelludo y mis ojos cerrados mientras los apretaba para que las lágrimas no salieran, me dejé tirar en la barra.

Sentí como un hombre se me acercaba por detrás, no sé cómo, pero era como si me dijera que estaba borra hoy, lo podía sentir. Me dió unas palmadas en la espalda y se me acercó demasiado, eran claras sus intenciones.

—Oye nena tranqui--

—Largo de mi vista...—susurré alzando mi cabeza sin aún voltear a verlo, Carnellie miró al hombre y empezó a temblar un poco pero no era de miedo.

-¡Lo está haciendo! ¡Usa su Akuma no mi*! -gritó una chica y todos salieron de la taberna apresurados.

-A-A -ayu-yu-ayuda...-susurraba el señor con mis vectores apretando su cuello cada vez más fuerte,
de un momento a otro, el señor cayó al suelo sin respirar.

-¡A-Akane! ¡¿Qué hiciste?! -me gritó él tabernero, mientras corría contra el señor.

Me quedé callada, y me paré con la cabeza baja, y antes de salir de la taberna me detuve.

-Gracias por las bebidas, nunca volveré. - dije sin voltear a verlo y abrí la puerta.

Frío. Tan frío cómo siempre, y nevaba. Me acomodé mi bufanda para que tapara mi boca y nariz.

Seguí caminando mí rumbo, eran cómo las ocho diez de la tarde y de repente un señor de esmoquin y sombrero me dió una invitación para no sé dónde.

-Esperó qué vaya señorita, faltan 2 semanas nada más. - me sonrió.

-¿Qué es esto? -pregunté aún viendo la invitación, lo cuál solo era un pedazo de papel.

-En 2 semanas, se hará una fiesta para celebrar un año más en nuestra empresa, "Joyas marinas" ¿Ha oído sobre nuestra marca?

-Claro. ¿Cualquiera puede ir? -dije mientras di una pequeña sonrisa.

-Pues tiene qué llamar á nuestro "Den den mushi"* para ganar un boleto dé entrada gratis.

-Mmm... ¿sabéis algo? Si llamaré. Espero que mañana temprano aún haya boletos. -le sonreí- Á propósito... ¿estos días no son propensos á ataques piratas?

-Le aseguro qué no pasará nada. - me da una gran sonrisa.

A lo lejos podía ver a unos cuantos marinos correr hacía la taberna.

"Seguro que ya sé corrió la voz de qué maté a alguien" pensé y me cubrí más la cara.

-Bueno, lo veo luego. - le dije al señor y pasé justo por al lado de uno de los marinos.

"Esto será divertido, robar unas joyas marinas, qué emoción"

--2 semanas después --

¡Wow! ¡Es un gran bote!

Tenía frente a mí el futuro bote al qué tendrá honor ser saqueado por mí. Tengo puestas un vestido que me llega a las rodillas de color azul, zapatos de tacón celestes y me había planchado el pelo.

Rato después, pidieron que todos los invitados pasaran.

--30 min. Después--

Él licor de aquí sabe tan bien. Y hay muchos chicos lindos. Salgo un rato para tomar aire son cómo las tres de la tarde pues el sol estaba en lo alto. Veo 2 hombres con un barril súper gordo.

-¿Qué hay allí?- pregunté en tono de voz dulce.

-No lo sabemos. ¡Debe ser mucho vino!- exclamaron emocionados.

Sonreí y volví adentro.

No pasaron ni cinco minutos cuándo atacaron al barco bruscamente.

-¿¡Qué pasa!? -gritó el capitán.

-¡Nos atacan los piratas! -alcance á escuchar.

Rápido miré la ventana y eran los piratas dé Alvida.

-Genial. - susurré para mí misma.

Hace tiempo, Jackson y yo le robamos a Alvida unos $700,000 berries* Fue un poco duro luchar contra ella y su mazo gigante, pero Jackson logró despistarle y salimos corriendo.

Fui a un baño y me cambié, me quité los tacones y me puse botas, una chaqueta de cuero café y un mini-short azul.

"Vamos a robar algunas joyas marinas y unos tesoros" pensé.

Fui al sótano del barco y... ¡No había nada!

-¿¡Él dueño cogió todo antes dé escapar!? ¡Mierda! - exclamé.

Salí corriendo y en un rato llegué al barco de Alvida. Fui al cuarto dónde se encontraban los tesoros. Había un chico tirado en la puerta.

-¿Ok? -susurré para mí misma.

Abrí la puerta y ¡había una chica robándose todo!

Nos quedamos observándonos por segundos interminables...

-¿¡Qué haces tú aquí!? - gritamos las dos al mismo tiempo.

La chica era preciosa, hermosos ojos cafés claro, piel blanca, cabello corto naranja como la puesta del sol, labios rosas, y bonito cuerpo.

-¡Nunca te había visto en el barco dé Alvida! -le grité algo confundida.

-¡Es porqué no trabajo con sucios piratas! Yo soy Keith. -dijo sacando un bastón grande para peleas.

Sólo con decir "Keith" supe qué era falso ése nombre.

-¡Ha! ¿Quieres luchar contra mí? -sonreí maliciosamente. -Yo soy Minori Akane. La chica qué comió la "Hando Hando no mi"* - sonreí.

-¿Hando Hando? - preguntó extrañada.

-Tengo mas de 20 manos invisibles detrás dé mí. Con sólo mover una vena en mí cerebro...- hice una pausa.

-¿Q-Qué? -preguntó algo asustada.

-Te haré mil pedazos - dije mientras sonreía. (Obvio que no la iba matar solo por unos tesoros)

-¡Aún así no me derrotarás! -dijo decidida.

Corrió hacía mí, y me trató de golpear en la izquierda de mí cabeza, pero lo esquive yendo hacía la derecha y así sucesivamente, cuándo se agachó y me dio una patada en la pierna y caí de lado. Cuándo levanté la vista me puso él bastón en él cuello.

-Hake*. - me dijo y me sonrió con cara victoriosa.

Le sonrío.

-¡Oshimasu!* - dije y luego mis manos invisibles la empujaron hacía el suelo y luego yo me senté arriba de ella.

-Hake Mate. - Sonreí.

-No, ¡Sólo Hake! -me dijo eso y me empujó con una patada en el estomago y agarró una cadena y me la enredó. - Bien fue divertido, eres muy fuerte. -me sonrió.

De repente me sentí muy débil y cansada.

-¿Qué me hiciste? -dije agarrando aliento.

-¿Yo? Yo no hice nada, ¿Será la roca dé mar qué tiene ésa cadena? Si eres lista sabrás qué los usuarios dé frutas del diablo son débiles ante esto.

-Maldita.- dije mientras recobraba él aliento.

-Oye te haré una propuesta, tengo qué conseguir cierta cantidad dé dinero, pero para una joven indefensa cómo yo, surcar sola contra enemigos fuertes sería un total desastre. ¿Qué tal si tú me acompañas hasta conseguir la cantidad qué necesito, tú me proteges y yo te doy un 10% dé berries qué sobren. ¿Qué dices?

-Qué sea un 70% y trato. -respondí

-Un 15%

-Un 60%

-Qué sea un 30% y té doy una gema, la qué tú quieras.

-mmm... Hecho.- Sonreí.

-¡Bien! ¡Bien! - saltó dé alegría.- Ahora sólo deja guardo estos tesoros y voy por un bote.

-Claro, ¿oye me liberarás?

-Obvio no. Hasta qué cierre el trato.

-¡¿Qué?! ¿¡Y cómo té protegeré sí me estoy debilitando!?

-No creas qué soy estúpida, ví qué sabes usar patadas. Con éso será suficiente.

-¿Esto va enserio?- dije algo asustada.

-Deberías ver tú cara. - sé carcajeó un poco.

-Por Oda esto si es enserio...

-¡Vamos sera divertido! - dijo y cargó una bolsa llena dé tesoros. - Bien levantate.

-Ya voy. - me paré y caminé atada de cintura a hombros hacía las orillas del barco.

-¡Bien yo primero!

Justo cuándo saltó, otro bote sé estrelló al agua. Venía un chico peli-rosa, anteojos súper grandes y chaparro y un chico cómo dé 17 años, chaleco rojo, shorts azules y un sombrero dé paja. "Keith" y el sé quedaron viéndose y luego desaparecieron.

-¡Keith! ¿Estás bien? -pregunté viendo á Keith

-¿Eh? ¡Ah! Sí, sí estoy bien. Ahora salta tú Akane.

Salté y me tropecé un poco.

-Bien. ¿Adónde vamos ahora Keith?

-Tengo qué robar un mapa,en una base marina.

- ¿Dé qué va á ser él mapa?

-Del Grand Line.- me miró sonriente.

-¡Wow! Siempre quise ir allí. Bien ¿qué esperamos? ¡Vamos!

-¡Hahaha! Akane ya es tarde son como las 5:00 pronto anochecerá. No muy lejos dé aquí hay un pueblo.

-Bien... -dije con las ilusiones bajas.

-Tranquila, mañana temprano iremos por ése mapa. - me sonrió.

--Pueblo Narushi [East Blue] 5:57 pm. --

Me recosté agotada en la cama.

-Keith, estoy cansada...

-Igual yo. - bostezó - Bien me iré a bañar.

-¡Espera! Yo también me quiero bañar.

-¡Apenas nos conocemos, no me bañare con una extraña!

-¡Á éso no me refiero! ¡Me refería á qué me quitarás las cadenas!

-Disculpa, tienes una fruta qué me podría matar en cualquier segundo. - dijo cansada.

-No lo haré... -dije casi rogando.

-Bien cuándo termine dé bañarme té las quitare, pero me tendrás que dar $300 más.

-Sí lo qué sea. Tú quitame la cadena . -dije agotada.

-Bien, ahora vuelvo. Tardo unos 30 min. En volver.

-¿¡Qué!? ¡Espera, Keith, no puedes tardar tanto!

-Chao~.- dijo y cerró la puerta del baño.

-¡Ahg! - exclamé furiosa. Esos 30 min. Me parecieron interminables...

-- 3 días después --

-¡Mira cuantos tesoros ganamos! - exclamó alegré " Keith"

-¿Éso té servirá? -pregunté.

-¡Tesoros, tesoros, tesoros! - dijo sin darse cuenta dé qué le hablaba.

-Oye Keith, tengo hambre, vamos a comer.

-Sí, tal vez tengamos qué ir a comer. Mmm. Mira vamos allá parece un buen lugar para comer. -Dijo para luego agarrarme dé un pedazo dé la cadena y me jaló para ella.

Dé repente veo unos gyojin* caminando por las calles.

-Wow... Keith mira... Nunca había visto unos gyojin en carne y hueso en mi vida. ¿Y tú?

-Vámonos, no les hagas caso. Sigue caminando.- Me dijo en un tono de voz serio y hasta molesto.

De repente sé nos atraviesan en frente.

-Miren lo qué nos encontramos, 2 gatitas, ¿Qué hacen por aquí solas? -dijo él primer gyojin.

-¿Mmm? ¿Y ése costal tan grande? - Dijo el segundo qué sé encontraba mirando él costal dé tesoros.

-¡No es nada!- dijo Keith enojada.

-¿Keith? -susurré.

-¿Con qué no es nada? Bien, investigáremos un poco.

Al decir esto le arrebató él costal á Keith. Me enoje y quise golpearlos pero aún tenía la cadena dé roca dé mar.

-¡¡Denmelos!! ¡¡Son míos!! -Gritó Keith con tanto enojo y sus ojos mostraban desesperación.

-¡Wow! ¡Son muchos tesoros! Disculpen, señoritas pero tendré qué quitarles su costal. -dijo el primer gyojin.

Entonces, Keith.... agarró su Bo y le pegó á la cabeza al gyojin.

-¡¡Keith!! ¡¿Qué hiciste!? ¡¡Los gyojin tienen una fuerza sobrehumana!! ¡¡Corre!!

Al principio nadie reaccionó pero Keith fue la primera en darse cuenta dé lo qué hizo, y empezó á temblar. Después él primer gyojin agarró á Keith del cuello de la blusa y la miro.

-¿Sabes lo qué hiciste, humana? ... ¿Oye tú no eres una amiga dé Arlong?

"¿Arlong y Keith? ¿Acaso tienen una conexión?"

-¡Cállate y sueltame! -gritó Keith.

-Cómo digas....-dijo el gyojin.

Lanzó a Keith al piso con tremenda fuerza. Él gyojin la iba pisar. Fue allí cuándo mí pierna hizo qué la patada del gyojin sé detuviera.

-¿Quién eres? - dijo para luego poner mas fuerza en la patada, haciéndome batallar para qué el no pise á Keith.

-Soy Minori Akane, la chica qué té arrancará la cabeza sí pisas á la niña qué está en el suelo. - dije refiriéndome á Keith.

-¡Cállate, sólo eres una simple humana! - dijo y me pateo.

-¡Akane!- gritó Keith.

Caí en el suelo y me sentí más débil. Era obvio traté dé usar mí fruta del diablo, pero la cadena no me dejó. El gyojin me agarró del cabello y me levantó y me empezó a lanzar unos golpes.

-Keith... por favor... quítame... la cadena... - dije mientras escupía sangre.

Keith parecía estar en shock.

-¡¡Keith por favor quítame la cadena!!

Ahora sí, Keith reaccionó y me lanzó la llave. Las agarré con dificultad pero al fín pude quitarme la cadena.

Estaba sangrando, entonces recuerdo la pelea qué tuve con... ya ni quiero decir su nombre, pero él dolor qué sentí ésa noche era imposible dé igualar.

-Keith, corre á la casa yo me encargo... tranquila agarraré los tesoros.. - le susurré.

-Akane, yo...

-¡Corre!- al fín grité.

--30 minutos después--

-Quiero descansar...

Todos sé me quedaban viendo.

"¿Qué haría una chica ensangrentada cargando con un costal enorme?"

Seguro pensaban éso.

Al final del camino, estaba mí peli-naranja favorita. Le sonreí.

-Mira Keith, te dije qué té traería tú bolsa dé tesoros. - Me sentía feliz, dé alguna manera.

Me abrazo y me susurró:

-Nami, mí nombre es Nami.

-¿Nami? ¡Entonces eres dé la aldea Cocoyashi! ¿¡Conoces á Jackson!?

-¿Jackson? No, no lo recuerdo. Tampoco soy dé la aldea Cocoyashi.

-Oh... perdón creí qué eras otra persona...

-¡Éso no importa tienes qué ir al hospital!

--Hospital--

-Por cierto Nami... tengo qué quedarme por 2 semanas más, creo qué no voy a poder acompañarte á robar él mapa del Grand Line, lo siento.

-Ya, tranquila, estaré bien. - sé paró - Volveré por ti en 2 semanas. Recuerda qué aún me debes dinero.

-Claro.

-Bien, me tengo qué ir. El tiempo es oro. ¡Nos vemos en 2 semanas!

-Bye~

Ok. Ahora estoy sola,

Otra vez.

Akuma no mi: Fruta del diablo; Los qué posean esta fruta tendran habilidades especiales.

Den den mushi: Un aparato parecido a un caracol ( es un caracol) qué permite comunicarse con otras personas, al igual qué un teléfono.

Berries: Forma de decir "dinero" en ésa epoca.

Hando Hando no mi: Fruta Mano Mano, permite crear manos de mas de 2 metros dé largo. Inspirado en los vectores dé Lucy de Elfen lied.

Hake: Forma de decir en ajedrez cuándo vas a ganar.

Oshimasu: Ataque dé Akane cuando 2 dé sus brazos invisibles empujan á alguien; empujar.

Gyojin: Humano-Pez con gran fuerza y habilidades.