~14~Un Milagro.

Dicen que cada historia tiene un principio y un final, pero pocos cuentan lo que pasa en medio.
Es más fácil decir acá empecé, y acá terminé, salteando las partes buenos o malas de la historia, y yo Kim Taehyung, no estoy en el final de mi historias, solo es una caída en el medio de ella.

Un zumbido se instalo en los oídos de jungkook, de pronto no podía escuchar nada a su alrededor, miraba a Jimin lo veía hablar y mover sus manos, pero no lo entendía, todo se veía en cámara lenta y borroso, el aire se sentía pesado, le costaba respirar,aún así comenzó a caminar hacia el salón de su osito.
Unos paramédicos, pasaron a delante de él con una camilla.

-Abran pasó por favor, necesita ser llevado a emergencias. - se escucho en el lugar.

Entre lo abrumador de la gente, lo vió pasar inconsciente en una camilla, con una mascarilla,y su rostro con sangre, si era él, su novio, su osito.

-Tae. - trató de acerce a él.

-Joven, necesito llevarlo a la ambulancia. - lo corrió un paramedico.

-Soy su novio. - logró decir.

-En el hospital le explicaran todo.

Las puertas traseras de la ambulancia se cerraron, las sirenas comenzaron a sonar y el vehículo se retiro del lugar.

Jungkook corrió en busca de su automóvil.

-Kookie, voy con vos. - exclamó el peli rosa.
Este asintió con la cabeza, y puso en movimiento el vehículo .
-¿Estas bien?. - preguntó sollozondo por lo bajo.

-¿No entiendo, qué paso?.

-No lo se, Tae entro al salón con los ojos rojos, parecía que había estado llorado, de pronto solo se desplomó al suelo, su... su.. Cabeza golpeó contra una de las mesas.

-¿Qué? Yo no... - comenzó a llorar, pasó su mano por su rostro con desesperación.

-Tranquilo Kookie, no es tú culpa, él va estar bien. -le aseguró intentando calmarlo.

-No lo sentí mimi, ¿por qué?.

-Cuando al fin tengan un lazo, podrás sentirlo mejor, creo que su lobo no quiso llamarte esta vez.

-¿Su lobo me esta rechazando? - su voz sonaba a dolorida.

-No Kookie, creo que el lobo de Tae no quiere que sufras, o tal vez sea él, quien quiere protegerte del dolor.

Las paredes blancas y pulcras, el olor a cloro se sentía en cada rincón de aquel lugar tan silencióso.

-Vengo a ver a mi novio. - le dijo rápido a la mujer de la recepción , había entrado a la guardia casi corriendo, trataba de sonar tranquilo y disimular sus nervios, pero por más que lo intentaba el azabache no lograba calmarse.

-¿Nombre del paciente? - la mujer hablaba fria, claro porque no era un familiar, o el ser amado de ella, para la recepciónista el chico era un número más de tantos que ingresaban por día a ese lugar.

-Kim Taehyung. - respondió rápido el peli rosa.

El ruido de las teclas sonabas en ese lugar, como un martirio en la cabeza del azabache.

-Mm Kim Taehyung, aún sigue en emergencia, a guarden en la sala de espera por favor. - señalando con su mano uno de los largos pasillos.

-Gracias.-dijeron a unísono.

Los minutos parecían horas, nadie se acercaba a ellos para darle alguna noticia de su osito.

-Voy a llamar a mi papá, tal vez podría ayudarnos. -pensó en voz alta el peli rosa.

-Familiar de Kim Taehyung. - llamó un doctor, interrumpiendo a Jimin.

-Acá, soy su novio.

-Su pareja se desmayo, por falta de oxígeno en el cerebro, el está bien, solo que el golpe prolongó el desmayo, debimos soturar el corte en su frente , él ahora esta con oxígeno, en unas horas podrá irse a casa.

-¿Puedo verlo? - preguntó intranquilo el alfa.

-Si puede pasar a verlo. -le respondió el hombre.

Jimin se quedó unos minutos más con el médico.

-Doctor, ¿cómo esta su corazón?.

-Débil, sus pulmones no están funcionando bien, y eso esta empeorando todo.

El peli rosa comenzó a llorar.
-¿Sabe el tiempo que le queda de vida?. - preguntó con su voz rota.

-No joven, pueden ser meses, años o solo algunos días.
Todo depende de las ganas de que él tenga de vivir, y que sus pulmones logren mejorar o tal vez depende de un milagro.

-Gracias doctor.

~Tae y Jungkook~.

El Omega abrió despacio sus ojos, parpadeó varias veces intentando adaptarse a la luz.

-¿Cómo estás mi cachorro?. - susurró el alfa, tomándolo de la mano, no quería mostrarle miedo o tristeza, quería verse fuerte para su osito.

-No quiero que me veas así. - giró su rostro apenado.

-¿Cómo mi amor?, así de hermoso. - con su dedo índice giró despacio el rostro del menor.

-Kookie, perdón...

-No lo digas. - interrumpió el azabache.
-Te amo, solo eso importa.

-No me ames Kookie.

-Eso es imposible cachorro.

-¿Por qué?. - preguntó con sus ojos llenos de lágrimas.

-Porque tú haces, que lo sienta aquí. - señalando su pecho.
Sus ojos se cristalizaron, Jungkook siempre tuvo la certeza, que el día que volviera a ver a su osito no lo dejaría solo nunca más.

Una enfermera, junto a jimin, interrumpió aquella burbuja, lleno del aroma del alfa, este había soltado sus feromonas solo para su Omega.

-Joven, medio hospital huele a usted. - regaño la mujer.

-Perdón. - dijo avergonzado.

-Necesito hacer un control, podrían salir un momento.

El peli rosa saludaba de lejos con su pequeña manito a su amigo.

Jungkook comenzó alejarse, de pronto una de las máquinas cambió el ritmo del movimiento. El azabache salió por completo. La mujer observaba el aparato.

- Vuelva joven. - pidió

Jungkook confundido volvió a la habitación.

-Más cerca del paciente, por favor.

El alfa obedeció, con su ceño fruncido, estaba desconcertado.

-Ahora vuelva a salir. - ordenó sin mirarlo.

-¿Pero que...

-Por favor, en un momento le explico.

Jungkook se cruzo de brazos, y volvió a salir.

-No lo puedo creer. - dijo sorprendida.

-¿Qué sucede?. - preguntó asustado Tae.

La mujer no respondió salió corriendo del lugar.

Jimin y Jungkook se miraban confundido.

La enfermera volvió con el médico.

-Mire doctor. - señaló a la máquina conectada a Tae.
-Joven, por favor entre y salga, como hace un momento. - le habló al azabache.

Jungkook repitió la acción.

-Esto es increíble. - el médico tocaba el frente.

-¿Qué pasa, es algo malo?. - sonaba asustado el peli azul.

El azabache volvió a entrar.
-¿Qué sucede?, podrían explicarnos.

-Joven, usted es su cura, su salvación. - señalando al alfa.

-¿Qué, Cómo no entiendo?.

-Mire, esta máquina marca el oxígeno, y las pulsaciones.
Cada vez que usted se aleja, el ritmo se altera, pero cuando vuelve, se regulariza, mejora. - explicó emocionado.

-Es como un milagro. - soltó llorando el peli rosa.

-Exacto, o mejor dicho el destino, la diosa luna no se equivoca, ustedes deben estar juntos. - el médico se sentía muy emociónado, era la primera vez en veinte años de carrera que veía algo así.

-Destinados.-susurró el peli azul, mientras una lagrima recorría su mejilla.

Jungkook sonrió de felicidad, eran destinados de una forma diferente, él era la salvación de su osito.
Sus lobos saltaban de alegría, ellos siempre lo supieron,y al fin estarían unidos.

Pasó un poco más de una hora, y Tae fue dado de alta, bajo las reglas de volver a chequearse en una semana, y no hacer mucho esfuerzo.
Los tres regresaron al departamento de Jimin.

-¿Qué quieres comer TaeTae?, hoy serás el niño consentido. - preguntó el peli rosa.

-Eso me gusta. - bromeo con una sonrisa. - Mmm pasta, amo las pasta.

-Jimin tú pide la comida. - ordenó el azabache.

-Aja si, y tú que harás.

-Mimar a mi hermoso osito. - tomando el rostro del peli azul para darle un suave beso en la punta de la nariz.-Voy a besar cada lunar de tu cuerpo.

Tae se sonrojó y le dio una tierna sonrisa.

-Eso no es justo, yo iré a besar un chocolate. - bromeó el peli rosa.

-Mmm si quieres puedo llamar a un lindo gatito.

-No jodas Jungkook, no invoques al diablo. - los tres largaron unas carcajadas.

Jimin fue al comedor y llamó al local de comida, pidiendo pasta y helado de postre, ya era una tradición de los tres comer helado.

Luego de unos minutos bajo a buscar el pedido.

El alfa estaba recostado en el sillón, mientras el peli azul estaba recostado en su lugar favorito, el pecho fornido del azabache.

-Kookie. - susurró tímido.

-Si cachorro.

-Yo... También te amo.
- escondió su rostro.

-¡Ya llegó la comida!. - gritó el peli rosa entrando al departamento.

-Mimi tú te llevas el premio al inoportuno del año.

-Yo, ¿que hice ahora?.

-Qué rico huele, vamos a comer. - interrumpió Tae, intentando cambiar de conversació.

Unos minutos más tarde.

-Pronto serán las vacaciones de invierno,
y...si ustedes no tienen planes me gustaría que me acompañen a mi casa.

-¿Cual, el departamento?. - pregunto el peli rosa, en tanto llevaba un gran bocado de tallarines a su boca manchada de salsa.

-No, a la del pueblo, en la que vivía con nana.

-Sera lindo conocer el lugar donde estuvo todo este tiempo mi cachorro.

-Si, después de que nos volviste locos a todos con tú búsqueda. - dijo en tono sarcástico el peli rosa.

-¿Tú me buscaste?.

-Si, mi osito, siempre te busque, era muy chico y no sabía como hacerlo, un día llegué a la casa que nos conocimos, pero no estabas ahí, luego busqué en las redes sociales, pero no sabía ni tú nombre.

-Debo confesarte algo Kookie.

-¿Si,Qué?.

-Yo si te encontré en las redes.

-¿Sabías de mi?.

-Si, y te seguía. - sus mejillas se tornaron rojas.

-¿Cómo es posible?.

-Es que mi nombre era Señora Choi, y tenia una foto de una señora.

Jungkook comenzó a reir
recordando.

La señora Choi le dio me gusta a tu foto.

La señora Choi añadió tú foto a favorito.

La señora Choi dio me encanta a tú video.

-Me asustaste osito, creía que tenía una acosadora de la tercera edad. - todos comenzaron a reír.

-Lo siento, luego borre las redes intentando olvidarte.

-Ya no más mi cachorro, mmm pero ahora se me antojaron muchos besos de la señora Choi.

🌸Hola mis dulces obsesiónadas.

Espero que estén bien.
Se que es corto el capitulo.
Pero quería entregarlo.
🥰
🌸Se me cuidan mucho.
Las quiero.

🌸 Nikki🌸

🌸