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La familia, las amistades, las parejas, los hijos, todos ellos no dejan una marca y enseñanza en nuestras vidas, algunos para bien y otros para mal, con algunos formamos lazos y otros son tan solo pasajeros, que pasan y se van sin afectarnos mucho, hasta a veces los olvidamos, como aquellos compañeros de primaria, que ni sus nombres recordamos, pero otros nos marcan, que con tan sólo pensarlos pueden sacarnos una sonrisa o una lagrima, recordarlos nos llena de nostalgia, y a veces anhelamos tanto poder volver a verlos, tocarlos, sentirlos, tan solo por unos segundos.

🌟🌟🌟

-Nana, por qué hay tantas estrellas en el cielo?.
-preguntó el pequeño Tae de siete años, recostado en el pasto, bajo una noche de verano estrellada.

- Dicen que nuestras almas, se vuelven estrellas, y nuestros lobos van a la luna, cuando abandonamos la tierra, mi cachorro.

-¿Nana, tú serás una estrella?.

- Si mi cachorro, y cuando me necesites, mira al cielo yo estaré ahí, viéndote, cuidándote, cuando te sientas perdido levanta tu mirada a las estrellas, y nana bajara abrazarte, pero para eso falta mucho mi osito.

- ¿Como sabré cual eres nana?, son muchas.

- La que más brille, cachorro, porque estaré brillando para ti.

Iban camino al hospital cuando el peli gris comenzó a despertar.

-¿Dónde estamos?.- Preguntó confundido.

-¡Cachorro! Vamos al hospital a que te atiendan. ¿Cómo te sientes?. - mientras intensificaba su aroma para su omega.

- Me siento, tal y como me veo. - bromeó con una leve sonrisa.

- ¿Qué pasó después de que te llevo Felix? - preguntó el rubio.

Mientras el lobo del alfa gruñó al escuchar aquel nombre.

- Me tiré de su auto en movimiento. - dijo mientras tapaba su rostro con sus manos que comenzaban a temblar, al recordar aquellas palabras que le había dicho aquel alfa.

Jimin al ver la reacción de su amigo, soltó su cinturón de seguridad y se pasó a la parte trasera del vehículo, mientras Jungkook observaba a el peli gris por el espejo retrovisor, quería detener el auto y abrazarlo, pero el rubio se le adelanto.

- Lo siento es mi culpa, yo debí detenerlo. - mientras lo abraza despacio, para no tocar sus heridas y golpes.

- Esto no es tú culpa Jimin, es mía, siempre lo es.- sollozo bajos sus delicadas manos.

En ese momento el alfa no se contuvo más, detuvo el auto, y salió de el, Tae se alejo de Jimin, algo asustado por el actuar del alfa.
Abrió la puerta de lado de Tae y extendió su mano para ayudarlo a bajar.
Este dudoso tomó la mano del azabache, estaba confundido de lo que pasaba, sin dejarlo de ver a los ojos y con una leve pero tierna sonrisa el alfa estaba invitando a bajar del vehículo.
Cuando salió por completo, lo rodeo con sus brazos.

- Nada es tú culpa mi cachorro, a partir de ahora te cuidare.

Tae no aguanto más sus lágrimas y lloro en el pecho del alfa, necesita tanto ese abrazo, aunque él no lo supiera, su aroma, el latir de su corazón, sus suaves toques, todo aquello era igual a aquel día, cuando tenía cuatro años y un niño extraño hizo que no doliera. Ese mismo niño, pero en ese momento todo un hombre, volvía hacer que el dolor sea menos intenso.

Jungkook con una de sus manos comenzó acariciar su pelo, y a pesar del lodo, aún se sentía ese aroma tan delicioso a fresa, ese aroma que su lobo pidió tantas veces volver a sentir.

Una vez que dejó salir todas esas lágrimas acumuladas, se alejo un poco, aún algo timido, no quería verlo a los ojos. En parte se sentía sucio no por el lodo en su cuerpo, por todo aquello que le había dicho aquel mal alfa, y por lo que el mismo hizo para librarse de aquel.
Jungkook tomó su barbilla y muy suave la levantó para que lo viera a los ojos.

- Todo estará bien. - dándole un suave beso en su mejilla.
El omega al sentir los cálidos labios, cerró los ojos disfrutando el momento, dejando todo pensamiento de lado.
Sus lobos saltaban de alegría, al fin Tae estaba dejándose amar, o eso parecía.

Volvieron a subir al vehículo, pero esta vez Tae se sentó a lado del azabache.

-¿Jungkook que diremos en el hospital?. - preguntó el rubio preocupado.

- El padre de Felix es policía. - explicó el alfa. -
No podremos denunciarlo porque su padre lo cubrirá.

Tae escuchaba atento a las palabras del alfa.

- Diremos que el que te secuestro, tenía la cara tapada, y luego lo que realmente pasó,que saliste del auto en movimiento.

Tae apretó sus manos contra sus rodillas, ahora no podía decir la verdad y seguía en peligro, el alfa noto aquello, a través de su aroma, aquella flor se hizo presente.

- No tengas miedo, yo me encargaré de que no vuelva ni a mirarte. - tomo una de las manos del peli gris, que al escuchar aquello, relajo sus manos.

llegaron al hospital y el omega fue llevado a urgencias, para poder revisarlo, sus heridas no eran profundas, no necesito soltura, pero si necesitaban ser desinfectadas, muchos eran los golpes en sus brazos, piernas, espalda y parte de su hermoso rostro, estaban llena de aquellas manchas moradas algunas más oscuras y otras más claras, también habían varios raspones, por suerte los golpes de su cabeza fueron leves, ninguna de las heridas habían sido realmente grave.
Tae contó a los médicos lo que había pasado, según lo planeado, la policía también llegó al lugar, y repitió la misma historia.
No le dieron mucha importancia, era otra historia más de un omega siendo dominado o abusado por un alfa, la sociedad estaba destinada a que así fuera, los omegas fueron y serán el eslabón más débil.
Eran muchos los alfas que aún pensaban de esa manera, que aquellos lindos y delicados omegas, solo habían nacido para satisfacerlos a ellos,como si ser omega fuera una maldición.
Y después estaban los verdaderos Alfas, lo que amaban y respetaban a los omegas por el simple hecho de ser los seres más puro del mundo.

- ¿Familiares de Kim Taehyung?. - llamó un doctor.

- Acá, soy su novio, su único familiar. - respondió el alfa, que durante todo el tiempo que Tae fue revisado, él permaneció en la sala de espera junto a Jimin.

- El chico está estable, aún que el agotamiento físico y el estrés que paso no son buenos para su corazón y mucho menos para sus pulmones.

El alfa miró a Jimin, se había olvidado aquel detalle.

- Pueden pasar a verlo.

- Gracias. - dijeron a unísono, mientras el doctor se retiraba.

-¿Novio? - interrogó el rubio.

- Necesito saber que pasa con Tae. - cambiandole de tema. - mientras su lobo daba vueltas, estaba ansioso.

- Prometo contarte todo, ahora vamos con él. - sonaba como una suplica.

- Está bien. - mientras caminaban a la habitación.

- ¡TaeTae! - grito el rubio de emoción al volver a ver a su amigo ya sin lodo aunque, la mayor parte de su cuerpo estaba morado, por los golpes.

- Jungkook, Jimin ¿aún están acá? -su lobo daba saltos de alegría al ver a su alfa.

- No podría volver a dejarte Cachorro. - la desesperación y rabia se hicieron presente, al ver a su omega de esa manera, aquel maldito de Felix debía sufrir el triple, esa sería su segunda misión.

Al peli gris, su nuevo apodo lo confundía por qué lo llamaba ahora así, y a la vez le recordada a su nana.

- Nana ya estoy grande ¿porque aún me dices cachorro?. - preguntaba un adolescente Tae de quince años.

- Te contaré una historia mi cachorro.

~~Recuerdos de nana.~~

-¿Un omega?, me diste un maldito omega y enfermo.. - le gritaba Kim Seon-ho a su esposa.

- Yo soy una omega, no lo olvides, ¿tan desagradable somos para ti?. - preguntaba la castaña que hacía horas había dado a luz a su cachorro.

- Si tan solo, hubiera sido sanó, pero ni eso puedes darme mujer,los omegas son inútiles.

Nana permanecía en silencio, viendo aquel pequeño cachorro en una encubadora, conectado a un respirador artificial, mientras el pecho del niño se hundía y volvía a levantarse, con movimiento bruscos.

El alfa salió dando un fuerte golpe a la puerta al salir.

Nana metió su mano por uno de los hoyos que tenía el costado de la encubadora y comenzó a acariciar aquel débil bebé.

- Le prometo a la diosa luna, que yo cuidare de ti Mi cachorro. - la omega intensificó su olor para su niño, ella olía a durazno y pino.

~~fin del recuerdo de nana~~

- El día que naciste, le prometí a la diosa luna que cuidaría de ti, haciendo un lazo de amor, y aunque tengas treinta años seguirás siéndo mi cachorro. - sonrió la dulce omega, mientras Tae negaba con su cabeza y reía con su nana.

El alfa acarició la mejilla de su omega, mientras lo miraba con ojos de amor, no había nadie en ese mundo después de nana que lo allá mirado así.
Esa caricias se sentían tan bien, cerró sus ojos para disfrutar las manos cálidas de su alfa.

- ¿Te duele algo?.-preguntó susurrando.

- No kookie. - abriendo sus ojos para ver al azabache, haciendo que salga de su burbuja. - En cuanto estén los análisis, puedo retirarme.

- Quiero que vengas conmigo... - garraspeo al darse cuenta de sus palabras. - Para cuidarte.

Tae no sabía que responder, quedarse solo con un alfa, bueno con su alfa.
Al ver la cara de susto del peli gris Jimin decidió interrumpir.

- Sería mejor que se quede conmigo, mi departamento es grande, y Kookie puedes venir cuando gustes.

La primer idea no le desagradaba al peli gris, pero la segunda era más apropiada, no mentiría, sentía miedo, y Jungkook le daba una seguridad que Jimin no podía darle.

- Iré con Jimin. - rápidamente tomo la mano del alfa. - pero quiero verte. - su lobo había sido más rápido que él y era el lobo el que hablaba en ese momento.

- No te dejaré, te lo prometí a ti y a la diosa luna.
Esas palabras solo le recordó a algo "un lazo de amor".

De pronto una enfermera entró con unos papeles en sus manos, aquella mujer, enseguida llevo sus ojos en el peli negro, algo que el omega noto.

- Aquí están los resultados, esta todo bien. - y le dio una sonrisa al alfa.

- Escuchaste mi amor, ya podemos irnos a casa. - y beso la mejilla del peli gris.

A lo que dejo petrificado al omega, le había dicho mi amor, una parte de él estaba feliz y su corazón palpitaba mucho más rápido, pero por otro lado, no entendía lo que pasaba.

La enfermera frunció su ceño, dejó los papeles en una mesa y se retiro ofendida.

Jimin comenzó a reír, toda la escena le había causado gracia.

- Lo siento,tuve que decir que era tu novio para poder entrar. - trato de excusarse el alfa.

- Mi novio... - susurro, a su lobo la idea le encantaba, pero su humano, no sabía cómo reaccionar.

En ese momento Jungkook tuvo una gran idea.
- Podríamos fingir ser novios, hasta que Felix deje de molestar.

- Lo pensaré. - dijo con una sonrisa.

Se cambió, junto sus pertenencias, luego pasaron por el departamento de Tae para llevar algunas cosas esenciales, como ropa, cepillo de dientes etc.. Al departamento de Jimin, cuando ya obtuvo todo, siguieron camino hacia lo del rubio.

Tae iba en el asiento de acompañante, y no podía dejar de pensar en la propuesta del alfa, sabía que eso podía salir muy mal.
Al llegar bajaron las cosas y las acomodaron en la nueva habitación del peli gris. Jimin se retiro, dando espacio a sus amigos para que hablen, obvio iba a escuchar detrás de la puerta, quería el chisme.

- No quiero, que hagas nada que no te sientas cómodo,no te besaré ni nada que tú no me pidas.
~que acepte, que acepte~rogaba su lobo.

- Es... que... ¿Tengo miedo?.-
¿Miedo?, si miedo a enamorarse aún más.
~Así estaremos seguro tete, di que si~. Suplicó su lobo.

-¿A qué le tienes miedos cachorro?. - tomo suavemente la mano del omega.

- A olvidar lo que se siente estar solo...

✨✨

Tae.
No quiero que estés a mi lado, pero tampoco quiero alejarte, mi mente y corazón pelean, no se que hacer..

Jungkook.
No permitiré que me alejes, buscaré una y mil formas para estar a tú lado mi cachorro..

🌸Hola dulces obsesiónadas.

🌸 Espero que les guste el capitulo.. Y los momentos KookV que estamos teniendo, y como el muro invisible de Tae cae de a poco...

🌸 Qué personaje aman más?
Las leo ----->

🌸 Y a cual odian más?

🌸Al padre?
A Felix?
O a Nam?.

✨ Se me cuidan mucho..
✨Los quiere.

🌸Nikki🌸

💜