CAPITULO 9. POV Familia O'Pherer . ¡QUE PASO AYER? (tercera parte)


—¿Tan golpeados así?—preguntó Hayden.

Iba camino al aeropuerto a buscar a los abuelos de Amelia y hablaba en conferencia con Hayden y Mike por altavoz.

—Te digo que si, coño, que si. Espera—aproveché el semáforo en rojo para mandar la foto que les tomé, al grupo—. Y no importa con que los amenacé, no dijeron que pasó.

—¡Malparida sea! ¿Cómo coño terminaron así?.

—¡El coñisimo de la madre! ¡Los volvieron mierda!—Hayden gritó al mismo tiempo que Mike.

—Me dijeron que no habría policía interviniendo, que no esperara a los familiares ni amigos de quienes los pusieron así, y estoy asumiendo que si ellos lucen así es porque sus contrincantes quedaron peor, ya saben como se ponen; y que no esperara ni venganzas ni represalias de parte de nadie.

—¡Santa madre de Dios! ¡Los mataron! Mierda, mierda, mierda y Eric está por casarse y se irá de luna de miel.

—Como siempre exagerado... pero me dijeron que no mataron a nadie ni que lo dejaron físicamente incapacitado de reclamar, así que deja que Eric se case tranquilo, se ha ganado su boda y su luna de miel a pulso con estos chicos.

—Coño, no me recuerdes eso que todavía me duele el cheque que tuve que darle cuando el problema de Bogotá. ¡Estoy pagándole la luna de miel prácticamente!.

—Tendría que hacerles unas radiografías para confirmar que no tienen un traumatismo de impacto en el tabique, por las fotos no puedo determinar que no se les haya desviado. Tienes que estar atento de ahora en adelante por si roncan o si comienzan a sufrir de resfríos más frecuente de lo usual. Y por supuesto mantente atento por hemorragias nasales o dolor facial incluso cuando ya no se les vea el golpe. A veces los dolores de cabeza son producto de la obstrucción de vías respiratorias y lo pasamos por alto. Ahora... con las manos... espera que ampliaré las fotos.

—No entiendo la pelea en que se metieron, porque dudo mucho que ellos hayan salido perdiendo, por lo mínimo quedaron igualados, ¿y no habrá represalias ni venganza?. ¿Descartaste a Stuart y todo lo referente a Amelia?.

—Descarté a Stuart, pero Amelia... estaba nerviosa, angustiada y hasta culpable. Ella no tenía ni un rasguño por lo que puedo creer que: uno: no estaba presente durante la pelea, dos: no la dejaron intervenir durante la pela, o tres: no pudo separarlos durante la pelea.

—Si no los pudo separar puede ser que le dio miedo intervenir, dado el estado en que están tuvo que ser muy violento. También es posible que estuviese en shock y no haya podido.

—Me dices que pueden mover sus manos ¿no?, si las pueden mover con solo una molestia quizás sea una fractura menor, si no desaparece la molestia en la medida en que se desinflame tendré que viajar a revisarlos. No veo moretones y eso es bueno porque cuando está roto el nudillo la sangre se precipita a la lesión, tampoco veo alguno hundido comparándolo con los demás. ¿Le hiciste la prueba de movilidad?

—Coño Hayden el doctor eres tú, yo estaba tratando de meterme en sus cabezas maquiavélicas. Llámalos y examínalos por teléfono, no sería la primera vez.

—Háblame de Amelia...—insistió Mike.

—Te digo que no tenía ni un rasguño, que estaba asustada, preocupada, que cuando vio los golpes en el cuerpo de los chicos casi se infarta.

—Ajá si, ¿pero lucía molesta con ellos? Porque toda novia estaría molesta con su novio por una pelea de esa magnitud.

—No lo estaba, es posible que la pelea comenzara por defenderla a ella de alguien.

—Puede ser... pero en ese caso hubiesen confesado ¿no lo crees?.

—Te enviaré unas recetas para algunos antihistamínicos, desinflamatorios y analgésicos, esas heridas deben doler una barbaridad. Te estoy transfiriendo dinero.

Ni me molesté en negarme, Hayden se encargaba de toda la parte medica, incluso de comprar las medicinas por más que me negaba. El dinero no era problema, pero sabía que él quería sentirse tan cerca como le fuese posible.

—Igual llamaré a Eric, después de ese pago debería trabajar conmigo las 24 horas del día antes de irse de viaje.

—Déjalo Mike, te dije que se ganó muy bien su pago.

—¡Coño porque no le pagaste tú!

—Pero fue tu idea pedir ese regalo de cumpleaños—intervino Hayden.

—Es cierto, si no hubieses pedido una pipa desde Uruguay, ellos no hubiesen viajado con la pipa y la marihuana.

—Claro, cúlpenme a mí. Yo solo pedí la pipa.

—Debes saber que ellos siempre son proactivos papi—dos días estuvimos en el aeropuerto de El Dorado gracias al regalo de Mike.

—Y da gracias de que no te cobré mis honorarios; parir un récipe medico para marihuana medicinal en tan poco tiempo me costó demasiado.

—Mike, Eric se ganó su dinero, supéralo, evitamos el conflicto internacional y la cárcel por posesión ilícita.

—La culpable fue Amelia—dijo Mike.

—¿Amelia? ¿Te fumaste la marihuana acaso? Amelia no existía en nuestras vidas en esos momentos.

—No, mi amorcito. La culpable de la pelea fue Amelia.

—Ah, bueno si, es posible que haya sido en defensa.

—¡Que no, chico!. Amelia... ellos se pelearon por Amelia, se pelearon entre ellos.

Analicé sus palabras y los dejé hablando sus propias conclusiones mientras recordaba todo lo conversado. Amelia en verdad lucía culpable, pero ellos le evitaban la mirada, pensé que era vergüenza por lo que habían hecho, pero si fuese así Amelia debería estar es molesta, si ella estaba sintiéndose culpable y ellos actuaron para defenderla, ellos debían estar confiados de que hicieron lo correcto... Y la manera como evitaron mirarse entre sí, pensé que era una forma de evitar que los descubriera, pero no...

—¡Me cago en la putísima madre que los recontra parió!—grité y mirando al cielo me lamenté—, lo lamento Karen. Se pelearon por Amelia. Se hicieron eso el uno al otro.

—Papis, tenemos un problema muy grave en las manos—Mike habló con seriedad y Hayden lo secundó—. ¿Qué haremos al respecto?.

—Divide y vencerás...—contesté al cabo de un rato—. Separarlos para que aprendan a valorarse mutuamente.

***

Pov Gabriel.

—Hayden puede ponerse tan pesado cuando nos pasa algo. Me obligó a hacerle un video de todos los golpes... sentí que era un especie de porno bizarro.

Rámses se quejó cuando entró a mi cuarto y se tumbó a mi lado. Ahora que llegaban los abuelos de Amelia tendríamos que dormir juntos. Ella había salido con ellos a comer y mi papá seguía bastante enojado con nosotros.

—No creo que Hayden tenga un fetiche con eso con tantas enfermeras y doctoras sexys a su alrededor. Y yo también tuve que hacerle un video, como si fuese un niño o mi primer golpe. Nos estamos cuidando los golpes desde primaria.

—Mike fue otro que se puso intenso. Me mandó a prostituirme para que le pagase los honorarios a Eric—dijo Rámses entre risas y me uní a él

—A mi me dijo lo mismo, pero intentó perdonarme la deuda si le contaba por qué estábamos así de golpeados y luego ofreció pagarme para que le contase.

—Hoy juega Athetic de Bilbao con el Real Madrid, ¿Quieres verlo?.

Asentí y nos paramos de la cama.

—¿De verdad estás bien conmigo?—la cara de Rámses se contrajo, estaba realmente haciendo un esfuerzo muy grande en superar todo esto.

—Si. Lo que más me cuesta es pensar en lo que ella podría sentir ahora por ti. Sé lo que me dices, pero esas cosas... tú sabes que pueden confundir la cabeza de cualquiera.

—Pero no a Amelia, estoy seguro.

—Quisiera tener esa confianza tuya—Rámses se lamentaba mientras colocaba el canal—. Necesito pedirte algo...

—Dime—algo me decía que no me gustaría lo que me iba a decir.

—Amelia querrá saber lo que pasó esa noche. No se lo cuentes.

—¿Qué? ¿Por qué? Es mejor que ella lo sepa.

—Pero yo no estoy listo para que ella lo sepa. Me da miedo que si se entera y recuerda lo que pasó entre ustedes, que a ella se le despierten sentimientos hacía ti, cuando todavía nosotros no estamos bien. Si ella no lo recuerda sola, tú se lo dirás, pero después de que nosotros nos arreglemos...

—No me parece correcto hermano, no tengo que decirte el por qué. No es justo que la mantengas así, en esa zozobra y angustia.

—No lo haré, quiero hablar con ella esta noche y asegurarme de que las razones por las que quiere saber lo que pasó es para arreglar lo nuestro, si presiento que tiene alguna duda... no estoy listo para eso Gabriel. Por favor, me lo debes.

Dudé en aceptar, no era correcto y por más que pudiera entender sus miedos y sus intenciones, Amelia merecía saber lo que había ocurrido, era parte de su vida y el que él quisiera evitar que ella se enterase...

—Solo te pido tiempo. No le cuentes todavía.

—Entonces ¿Cuándo? ¿Cuánto tiempo?..

—Un mes.

—Estás loco Rámses, no puedes controlar la vida de Amelia de esa forma, si se entera...

—Si ella quiere saber lo que pasó necesito que sea por mera curiosidad, no porque esté confundida por ti y menos que sea por eso cuando nuestra relación está tan inestable. Déjame que arreglemos las cosas, que estemos firmes otra vez y allí le cuentas.

—¿Y que le digo si me pregunta?

—Dile que no quieres decirle, que... que no quieres que ella te vea de otra forma. Así si ella tiene alguna duda sobre sus sentimientos, sabrá que tú no quieres que cambien.

—Ósea, le insinúo que la quiero dejar en la friendzone.

Él asintió sin poder mirarme. Sabía que lo que me estaba pidiendo no era correcto. Su mandíbula estaba tensa al igual que los músculos de sus brazos. Suspiré resignado...

—Bien. Lo haré, pero si se llega a enterar tú tendrás que asumir toda la culpa que te corresponda.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top