"sí homo"
Al día siguiente, en la noche, TaeHyung y JiMin invitaron a NamJoon a la casa del segundo mayor.
Cuando fue, estuvo como por 3 horas apenas, jugando en la consola. Todo estaba como si nada.
NamJoon no preguntó nada de lo suyo, por alguna razón. Tal vez no quería molestarlos o simplemente pensó en que fue un error aquello que sucedió.
JiMin estaba en la cocina tomando agua, y TaeHyung se había quedado en la habitación, jugando.
En cuanto acabó lo que hacía, se dirigió hacia su habitación otra vez.
—¿Ganaste? —inquirió el menor, mirando la pantalla.
—No, el juego está muy difícil —respondió, parando para mirar al pelinegro.
—Bien, ¿quieres hacer algo más? —caminó para llegar al frente de su amigo.
El castaño miró arriba y sonrió, luego, tomó la mano del otro, para poder empujarlo hacia él.
JiMin rió.
—¿Qué?
—Hagamos otra cosa —propuso, haciéndolo sentarse a su lado.
JiMin subió una ceja a la vez que TaeHyung se ponía de pie y frenaba delante suyo.
—¿Qué quieres, Kim?
—Nada... ¿No puedo demostrarte cariño? —le preguntó, colocando sus manos sobre los hombros ajenos antes de acercarse de más y terminar subiéndose encima de él, de forma literal.
JiMin lo sostuvo por las piernas, y también, subió la cabeza para poder verlo al rostro.
—Esa es una rara forma de demostrar cariño —musitó, viendo sus labios.
—¿Por qué? —sonrió, bajando para dejarle un pequeño beso en los labios—. ¿Sabes? Ya quería que Nam se fuera —susurró antes de rodear el cuello de JiMin con sus brazos y abalanzarse de nuevo a besarlo, pero de una forma más intensa.
JiMin se inclinó un poco hacia atrás, pero luego tomó fuerzas y se enderezó, colocando sus manos en la cintura de su mejor amigo. Sólo era cuestión de tiempo para que terminaran de besarse para que uno hablara otra vez.
—Repito, ¿qué quieres? —lo miró a los ojos, aún sosteniéndolo él mismo.
—Nada, quería recordar como besabas, es todo.
—Sí, claro. ¿Quieres que follemos? —le cuestionó.
TaeHyung fingió que se lo pensaba, pero no parecía muy convincente.
—Pues... No estaría mal. ¿No quieres follarme hoy?
—Oh, Kim —suspiró y metió sus manos bajo la camisa contraria, subiendo ambas hasta que llegó a su pecho—. No puedo seguir follando contigo a menos de que seamos novios.
—¿Eh? —soltó una risa—. Creí que solías decir que no necesitabas estar en una relación para follar.
—¿Lo hice? Como sea, esta es una excepción.
—Mmh, no estoy seguro de eso, Park. Además, no creo que no quieras volver a tener sexo conmigo —lo miró, incriminante.
—No digo eso, digo que tienes que ser mi novio si quieres que te penetre otra vez.
TaeHyung rió de nuevo ante la forma de hablar del pelinegro.
—Te dije que follar dañaría nuestra amistad, ahora quieres casarte conmigo —dijo TaeHyung, rodando los ojos.
—Que gracioso, eh. Puede que me gustes, es todo.
—Bien... Puede que tú también me gustes.
—Me parece bien —habló JiMin—. Olvídalo, no te presionaré a nada, puede que se dé después.
—Claro... Después de tres folladas.
—¿Por qué tres? —preguntó, apretando la cintura de TaeHyung—. Yo digo que después de esta ya quedas enganchado.
—Apostemos —murmuró, acercando su rostro al del otro.
—Bien, si yo gano, me quedo con las cartas de jugadores que compraste esta mañana.
—Hey, ¡eso no!
—Es que sabes que perderás, ¿no?
—Nunca se sabe —dijo TaeHyung por última vez antes de besar a JiMin en los labios de nuevo, pero esta vez, de forma lenta.
Lo quería tener más y más cerca, por lo que sus cuerpos estaban rozando constantemente.
Tal vez ese era un nuevo pasatiempo, diferente a jugar FIFA toda la tarde.
Un par de horas después, ambos se encontraban en la cama, arropados. TaeHyung estaba usando su teléfono, mientras que JiMin se había quedado dormido a un lado de él.
Se veía tan tierno, que le tomó una foto (no sin antes cubrirlo lo más posible).
Viendo su teléfono, se dió cuenta de que NamJoon le había mandado unos mensajes hace una hora, así que los abrió para ver qué era.
<Joonie>
• Hola, JiMin, olvidé decirles que hoy en la noche vienen unos amigos.
• También va Mina, por si te interesa.
• Aunque ya no sé bien lo que pasa entre TaeHyung y tú, pero si no es nada, sería una buena oportunidad que vinieran.
TaeHyung se lo pensó bien, y llegó a la conclusión de que era una buena idea hacer lo que se le había ocurrido.
Igualmente, no pensó que JiMin fuera a enojarse.
[Foto/s] •
Que lindo se ve, terminó un poco cansado •
• Huh...
Nam, ¿puedes comprarme un paquete de cartas? (de los jugadores nuevos) •
Acabo de perder una apuesta :( •
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top