Tal vez era hora de parar pero no podía hacerlo, quería lucir bello para todos.

Pero lo único que podía escuchar en sus comentarios que lanzaban eran cosas horribles.

«Te ves muy bien Kirishima»

Luces igual a un cerdo.

«Te notó algo diferente, ¿Haz bajado de peso?»

A mí vista sigues siendo un cerdo.

«Si sigues así tendrás a todas las chicas tras de ti»

¿Pero quién querría a un maldito gordo como tú?.

Todo lo estaba consumiendo dolorosamente y lentamente, ¿Porque le dolía?. Llevaba dos meses con eso y estaba notando la diferencia pero aún así se sentía triste.

Porque los hombres también sufren.

Sufren por su peso, sufren un rechazo diferente y lo peor es que nadie lo nota.

Nota: Ya dos capítulos más y entramos a lo bueno creó, gracias por votar y leer.
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