De repente, Kazuma se encontró sentado en una habitación familiar sin paredes. Sus ojos se abrieron de par en par y se puso de pie de un salto.

"¡¿Qué demonios?! ¡¿Morí de nuevo?! ¡¿Cómo?! ¡¿Cómo morí?! ¡Gané el duelo!"

"Eh, ¿Kazuma?"

Se dio la vuelta y vio a una chica muy bonita sentada en una silla de respaldo alto.

"Chris, ¿tú también moriste?"

"¡¿Q... qué?!" La mujer se puso nerviosa de repente y agitó las manos. "¡No! ¡No, me has confundido, no soy Chris!"

Kazuma hizo una pausa y la miró más de cerca. Se parecía mucho a Chris, incluso su cabello era del mismo tono plateado. Pero era mucho más largo que el de Chris. La mujer también llevaba un vestido morado y blanco que era mucho más elegante que los pantalones cortos y la camisa que prefería su senpai.

Además, esta mujer tenía una copa B, por lo que no podía ser Chris.

"Uh, lo siento" respiró profundamente un par de veces para calmarse. "Pero para que quede claro, esto es el más allá, ¿no? ¿Qué pasó? ¿Cómo morí esta vez?"

"Esto es el más allá, más o menos" dijo la chica. "Pero no estás muerto, Kazuma. Simplemente estás inconsciente, así que invoqué tu espíritu aquí para que pudiéramos hablar."

"¡Vaya, qué alivio! Estuve muy preocupado por un momento." Después de calmarse, le ofreció una sonrisa amistosa. "Sabes quién soy, pero ¿podrías decirme tu nombre, por favor?"

"¿No me reconoces? Eso hiere mis sentimientos, Kazuma" hizo pucheros.

"¿Eh?"

Ella sonrió y le hizo un guiño juguetón. "Soy tu diosa, Kazuma. Soy Eris".

"¡Oh! Eh, soy tu seguidor, así que ¿debería arrodillarme o inclinarme o algo así?"

"Eso no es necesario, sólo quiero tener una conversación normal contigo antes de que despiertes".

"Escucha, muchas gracias por salvarme de esas ratas topo desnudas. No tienes idea de lo bueno que es tener una diosa confiable a tu lado".

"Me lo puedo imaginar."

"Entonces, ¿de qué querías hablar?"

"Kazuma, quiero hacerte una petición."

"¡Claro, lo que sea!" respondió Kazuma inmediatamente. "Te debo una y haré todo lo que me pidas."

"Me alegra oír eso", dijo alegremente. "Por favor, ayuda a Chris, ella también es una de mis seguidoras y le he asignado una tarea importante. Ah, y si alguna vez te pide ayuda en el futuro, ¿podrías echarle una mano? Y sin pedirle una cita ni nada a cambio. Cuando la ayudes, puedes pensar que estás actuando a mi servicio".

Al oír esto, se sintió un poco triste. "Oh, bueno, está bien".

"¿Pasa algo, Kazuma? ¿No quieres ayudar a Chris?"

"No, claro que sí. Sólo esperaba que algún día tuviéramos una cita".

"Kazuma" Eris le hizo un gesto con el dedo. "No creo que sea apropiado que un hombre que está comprometido tenga citas con otras mujeres. Estoy segura de que Darkness está muy feliz por eso. Por favor, no hagas nada con otra mujer que pueda lastimarla."

"Oh, espera, verás, lo del compromiso en realidad es algo muy grande..."

Antes de que pudiera continuar, Eris levantó una mano y esta brilló. Kazuma sintió que el calor inundaba su cuerpo.

"Dado que ambos son mis fieles seguidores, les doy mi bendición a su unión" Eris lo miró con una mirada que se sintió un poco intensa e incluso un poco amenazante. "Es muy raro que una diosa otorgue una bendición a una pareja. Sería muy, muy malo si hicieras algo para destruir esta unión. Muy malo, Kazuma."

Ella continuó sonriendo todo el tiempo que dijo eso, pero Kazuma podía sentir la sangre drenándose de su rostro.

"Oh..."

Empezó a sentirse mareado y vio que sus brazos y su cuerpo empezaban a desvanecerse y volverse translúcidos.

"Estás despertando ahora, por favor ten en cuenta lo que te dije. Seguiré cuidándote, así que por favor no me decepciones".

Mientras desaparecía, pensó en algo importante que quería decirle a su diosa.

"¡Señorita Eris!"

"¿Sí?"

"¡Sobre todas las cosas que Aqua y el estúpido Culto de Axis dicen sobre ti! ¡Quiero que sepas que no me importa si te rellenas el pecho! ¡Estoy totalmente de acuerdo con eso!"

"¡Urk!" Tenía una mirada extraña en el rostro y se cubrió las copas B con ambos brazos.

Él quería asegurarle que realmente estaba bien con eso, pero ya no estaba.

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Kazuma abrió los ojos. Estaba mirando hacia el cielo despejado y su cabeza descansaba sobre algo suave. "Maldita sea", murmuró. No solo nunca iba a conseguir esa cita con Chris, sino que ahora incluso Eris lo estaba intimidando para que se casara con Darkness. "¿Cómo podría empeorar esto?"

"¿C... C... cariño?" El rostro de Darkness apareció de repente sobre el suyo y miró hacia abajo. Se dio cuenta de que estaba tumbado en el jardín y que su cabeza descansaba sobre el regazo de ella. Miró a su alrededor y vio que la multitud que había visto el duelo lo estaba fulminando con la mirada. Walter seguía tumbado allí gimiendo con Lord Alderp y Claire arrodillados a su lado y mirándolo con furia.

"Está... bien, cariño." Darkness le acarició la cabeza con suavidad. "No tiene por qué ser una boda con temática de mazmorra."

"Y la pesadilla continúa", gimió.