Vigésimo Octavo Capítulo

Estaba ocupando la mitad de mi cama y Caleb la otra mitad.

Me gustaría decir que nos estábamos divirtiendo y besándonos como cualquier otra pareja pero la respuesta era no.

Caleb tenía sus apuntes sobre su regazo y yo tenía una hoja con ejercicios que acababa de completar en el mío.

El me estaba ayudando y explicándome trigonometría porque obviamente no había llegado a terminar el trabajo y lo había entregado por la mitad.

Lamentablemente la nota no me daba como para aprobar el semestre pero el profesor había decidido darnos una oportunidad a mi y a todos los que estaban en la misma situación que yo.

El recuperatorio seria mañana y yo había pasado toda la tarde de ayer y hoy estudiando con Caleb que sorprendentemente le iba muy bien en esta asignatura. Si, es verdad, yo no le tenia mucha fe, pero eso el no tiene por que enterarse.

-Déjame ver- Dijo sacándome mis ejercicios de mi regazo para corregírmelos. Se echo un poco mas sobre la cama casi estando acotado y yo lo imite. Paso un brazo sobre mis hombros y yo me apoye en el para observar como corregía. -Felicitaciones, esta todo perfecto- Dijo una vez termino.

-YES- Pegue un grito y me tire encima de el haciendo que todas las cosas caigan pero ninguno de los dos le tomo mucha importancia. Estaba muy feliz, realmente lo había entendido y estaba segura que me iba a ir muy bien.

Escuche y sentí como su pecho vibraba por reír.

Coloque las manos sobre su pecho para alejarme un poco de el y velo a la cara.

-Muchas gracias- Dije y sonreímos.

-De nada- Le di un corto beso y me volví a separar. El tomo un mecho de pelo que estaba sobre mi cara y lo coloco detrás de mi oreja. Observo mi rostro en silencio y luego me miro fijamente a los ojos –Eres hermosa-.

-Me vas a hacer sonrojar- Le dije haciéndome la niña y me senté. El por su parte se quedo en la misma posición solo que coloco una mano detrás de su cabeza y con la otra comenzó a acariciar mi brazo. Decir que se veía bien es demasiado poco.

-He estado pensando en...- Comenzó hablar sin mirarme.

-¿Caleb pensando? Eso no pasa muy seguido- Lo molesté y el mordió su labio para contener una sonrisa que quería escaparse de sus labios.

-Estoy hablando en serio, Aria- Dijo y se sentó sobre la cama colocándose justo en frente de mi ambos estábamos sentados como indios.

-Vale- Sacudí mi cabeza y lo miré. -Seria- me dije mas a mi misma que a otra cosa.

El me miró y sonrió. Y yo no pude evitar hacerlo también. Antes que pueda evitarlo salio una carcajada de mi boca. Me tape la cara y apoye mi frente en su hombro.

-Dame un minuto- Sentí como negaba con la cabeza mientras yo trataba de calmarme. No se ni porque me reía. Me sentí como una niña.

-He estado pensando...- Dijo antes de que pudiera incorporarme y separarme de el mientras acariciaba mi espalda - En... Nosotros- 

Okey, la cosa era seria enserio.

Me reincorpore, me acerque un poco mas y puse mis rodillas sobre sus rodillas.

-Ajam...- Murmuré y me mordí el labio.

El acaricio mi mejilla.

-Quiero que salgamos enserio- Me congelé. ¿Era una forma de pedirme que sea la novia? Porque si era así no lo estaba comprendiendo. 

-¿No lo estamos haciendo ya?- Yo pensaba que estábamos saliendo, o lo suponía. -¿O te refieres a ser...?-

-No, no- Me interrumpió antes de que diga la palabra Novios. -Es decir si-

-No entiendo...- Fui sincera.

-No a la última pregunta y si a la primera- Respondió algo así como rápido. ¿Acaso Caleb estaba nervioso? Fruncí el ceño. El suspiro -Me refiero a que quiero salir enserio contigo. Es decir, no solo estar así- Toma mi mano y entrelaza nuestros dedos –Cuando estamos solos o con amigos cercanos. Quiero que todos sepan que eres mi chica-

-Eso no tiene importancia alguna, lo sabes- Me encojo de hombros. Es decir, no me interesa lo que piensen los demás.

-Por supuesto que no- Entendía que quería, pero no entendía la diferencia –Lo que quiero es que seas mi chica oficial. Alguien con quien pueda decir que estoy. No soy muy fan de las etiquetas y la verdad no me interesa.-

-Hablas de que no te gusta la palabra con N.- Le dije molestando y el rio.

-No es que no me guste, pero no necesito una etiqueta. Yo solo quería aclarar que eres lo que quiero ahora. Si en algún momento queremos ponerle etiqueta lo hacemos- Se encogió de hombros.

-Me sigue pareciendo lo mismo pero, si esta bien para ti, esta bien para mi- Le acaricie la mejilla y el coloco su mano sobre la mía disfrutando el contacto.

-Hablo de que quiero ir para delante con respecto a lo que somos. Todo a su debido tiempo, pero quiero que estemos juntos- Creo que comprendí un poco mas por donde iba. Asentí y el pareció relajarse -Hacer cosas de pareja, ya tu sabes-. Lo fulminé con la mirada.

-No me voy a acostar contigo solo por que me dijiste que querías ir para adelante- Me pare de la cama negando con la cabeza y él carcajeo.

¿Por que los chicos eran tan básicos?

-No hablaba de eso mal pensada- Se paró y me abrazó.

-¿Entonces de que hablabas?- Pregunte sin separarme de él pero aun enojada.

-De tener citas, ir al cine o a tomar un helado- Lo mire fijo a los ojos para encontrar un trasfondo pero me di cuenta que era sincero -Cosas de pareja-

-Okey- Dije un poco mas relajada pero siguiendo mi papel de ruda. El carcajeo y después me dio un beso el cual continúe.

-Igual si quieres de lo otro que hacen las parejas vas a tener que esperar- Susurro en mi odio y yo le pegue en el pecho tomando distancia -Esto, nena- se señaló con cara de pervertido -No es para cualquiera- 

Evidentemente estaba bromeando.

-Eres un idiota- Y abruptamente me tomo de la cintura haciendo que mis pies dejen de tocar el suelo y me tiro sobre la cama con el sobre mi.

-Igual tu sabes que cuando quieras- Me dijo mientras besaba mi cuello.

-Lo se, te tengo en la palma de mi mano- Dije orgullosa.

-Claro que no, yo te tengo en la mía- Dijo separándose, había pegado justo en su orgullo.

-No hay forma- El rió. No se quién era mas orgulloso de los dos.

-Mas allá de que yo te tengo en la palma de la mano el sábado haremos cosas de pareja- Me hizo cara de pervertido y lo mire mal –Salida de a cuatro, nena. Que sucia tienes la cabeza- Negué con la cabeza y él me beso.

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Esto era muy ridículo, pero debía admitir de que la estaba pasando muy bien.

Claramente no me veía a mi hace unos años, bueno, que digo hace unos años, hace unos meses haciendo esto.

Comenzaba de cierta forma a por decirlo así madurar de una forma positiva. O tal vez a apreciar las cosas pequeñas.

Dejo de a poco de importarme que pensaban los demás sobre mi. Solo importaban los seres que amo y yo.

Estábamos sentados Caleb y yo con Thomas y Jade enfrente nuestro en el suelo sobre una ridícula manta a cuadros. Sobre ella había varias cosas ricas para tomar y comer.

Esta era la salida de a cuatro del sábado organizada por los chicos. Consistía en una especie de picnic en el fondo del gran patio escolar.

Gracias a Dios no había mucha gente, solo un grupo de chicos jugando con una pelota y algún que otro grupo aislado. Así que nadie molestaría.

Estábamos comiendo un pastel delicioso y riéndonos de cualquier cosa, como siempre.

Alejándome de la conversación por unos segundos mire a las tres personas que me acompañaban y podía decir que los apreciaba mucho mas que a gente que antes creía amar. Es decir, a los que llamaba amigos antes, exceptuando a Alexa y los mas cercanos, no eran verdaderos amigos. Solo estaban conmigo por la popularidad, las fiestas o el dinero. Ellos eran amigos enserio. Me querían por lo que soy.

Estaba agradecida a Dios por ellos.

-Hay que conseguirle un chico a Nara- Dice Thomas llamando mi atención y distrayéndome de mis pensamientos.

-Claro- Lo apoya Jade. -Así la cita seria de a 6-

-Tiene que ser alguien buena onda si se va a juntar con nosotros- Agrega Caleb.

-¿Porque? Pobre, déjenla tranquila- Manifiesto mi posición –La soltería es lo mejor-.

-¿Como?- Pregunta Caleb entre risas haciéndose el ofendido.

-Que la soltería es lo mejor- Repito con orgullo. Entonces Caleb se lanza sobre mi haciéndome cosquillas.

-¿Qué dijiste?- Dice mientras yo no puedo parar de reír a carcajadas debido a las cosquillas –Repítelo Fea- Esto era extorsión.

-Que estar en pareja es lo mejor del mundo mundial- Dije entre risas para que me libere. El me dejo y me ayudo a incorporarme.

-Tu opinas lo mismo, me imagino, Jade- Le dice mi chico y mira cómplice a su amigo Thomas.

-Claro- Dice y mira a Thomas -No me hagas cosquillas por favor, me orinaré-

-¿Te orinas cuando te hacen cosquillas?- Le respondí impactada.

-¿Quieres gritarlo un poco mas Aria?- Me pregunto.

Todos reíamos.

-Lo siento- Le respondí a mi amiga.

Ojala esto siempre se mantuviera así. Creo que nunca me sentí tan viva.