Vigésimo sexto capítulo.

Respiro hondo. Era martes por la tarde después de clases.

Las ganas de correr de nuevo a mi habitación comenzaban a hacer cosquillas en las puntas de mis dedos.

Correr como corrí para llegar hasta aquí.

Pero esto es algo que estuve pensando toda la noche anterior y fue la causa de mi insomnio. Había tomado valor.

Ya no quiero huir más.

El ruido de la puerta se hizo escuchar gracias a mi puño cuando la choco. Bajé mi mano y moví mis piernas. Miré para ambos lados ansiosa.

-Aria- Me miró Thomas cuando abrió la puerta, luego se giró y miró hacia adentro de la habitación- Pasa-.

El me dejo pasar y yo lo hice mirando el suelo. Escuche la puerta cerrarse detrás de mi y fue el momento en el que tome el valor de mirarlo.

Nuestros ojos se cruzaron y él me miro expectante desde su cama.

-¿Quieres sentarte?- Preguntó mientras se paraba y se sentaba en una silla giratoria que tenía en frente de su escritorio y la colocaba frente a la cama, a unos cuantos centímetros, pero de todas formas creo que me había desacostumbrado a su cercanía, se sentía como si quemara. Ahora que lo pienso bien, creo que nadie jamas se podría acostumbrar a estar cerca de Caleb, el siempre generaba esto en mi, siempre quemaba, no importaba como estábamos nosotros para esto.

-Claro- dije y me senté donde me había indicado el, en su cama donde él estaba antes. Otra vez el silencio se hizo presente.

Esta situación de estar solos en la habitación después todo lo que había sucedido entre nosotros dos no era para nada cómoda. Sobre todo después de los últimos encuentros tan intensos que tuvimos.

-Estoy jodida- Mi voz se escucha como un susurro, era como si hablar me costara, no se si por lo que debía decir o por el silencio de la habitación.

-¿Sucedió algo malo?- Se acerco sin levantarse con su silla y quedamos frente a frente sentado. Sus ojos mostraban preocupación y eso me hacía sentir culpable. Por que el tenía que ser tan atento conmigo, yo no lo merecía para nada.

-No- respondí inmediatamente- O si- Dije confundida y miré hacia otro lado, su mirada fija en mis ojos no ayudaba mucho. -Depende del lado en que lo mires- Lo volví a mirar juntando mis cejas apenada.

-¿Eres consiente de que no estoy entendiendo nada, verdad?- Pregunto.

Suspire, lleve ambas manos a mi cara y las deje caer lentamente mientras pasaban por mi rostro. Decir que estaba frustrada era poco.

-En que momento las cosas entre nosotros dos se volvieron tan...- No sabía que palabra utilizar para describirlo.

-Tan...- Repitió para animarme a continuar.

-No lo se. Tan intensas- La última palabra probablemente sonó más a una pregunta que a una afirmación.

-¿Intensas?- Claramente el seguía sin entender absolutamente nada.

-Si, intensas- Dije esta vez mas segura y comencé a hablar rápido sin siquiera darme cuenta -No se, todo parecía normal, tu me molestabas y yo también lo hacía, teníamos amigos en común, nos insinuábamos y provocábamos, no nos tomábamos en serio, y antes de que siquiera pudiera darme cuenta ya estaba enamorada de tí, entonces todo sucedió tan rápido, tuve miedo y te ignore, hablamos, te enojaste me enoje, luego me ignoraste y me dolió. Además...- Todo lo que decía lo gesticulaba con mis manos histérica. 

-Espera, espera un momento- Dijo interrumpiéndome, tomándome de las muñecas haciendo que pare el movimiento, las coloco sobre mi regazo y las soltó. Yo mire mis manos y si, otra vez sentí cosquilleo donde el me había tocado. 

Me tomé un poco de tiempo para respirar, había hablado tan rápido.

-¿Que?- Le dije igual de acelerada que antes.

-¿Dijiste que estabas enamorada de mi?- En ese momento pude parar mi aceleración, es más, creo que dejé de respirar por un segundo. Sentí mis mejillas arder. Obviamente no eran las palabras que me hubiese gustado utilizar para describir lo que siento, era demasiado chocante para mi la palabra con E.

-Eh... no- Desvié mi mirada –Yo no dije la palabra con E- Claro que lo había dicho pero era muy incómoda la posición en la cual me estaba poniendo.

-Claro que si- Dijo como si todavía no pudiera creerlo el echándose hacia atrás colocando sus manos detrás de la cabeza.

Si, idiota, estoy enamorada de ti. Mentalmente choque mi palma contra mi frente. Mi mente traicionándome, señores y señoras.

-¿Entonces para que preguntas?- Si ya me había escuchado claro, porque preguntaba, era estúpido. Ya empezaba a recordar por que este chico me hacía poner los pelos de punta.

-Es que...- Se puso derecho para continuar -Wow, eso si que no me lo esperaba- coloco sus manos sobre sus rodillas.

-¿Que quieres decir con que no te lo esperabas?- Para mí era obvio. ¿Que obvio? Mas que obvio. Que no lo quisiera admitir ni siquiera mentalmente era otra cosa.

-Claramente no- Dejo un espacio -Claramente no, Aria- Hablo serio. Ok, tal vez no era tan obvio. Me fulmino con la mirada y otra vez venia venir una pelea. -Me estuviste ignorando estas últimas 2 semanas y quieres que suponga que es por que estás enamorada de mi, no se si no te das cuenta, pero no tiene mucha lógica- Había subido bastante el tono de voz.

-Si, lo se- Baje la mirada -Lo siento-. Es que de verdad lo sentía y no tenía ganas de pelear ahora.

Suspira. Y después de eso lo sentí inclinarse hacia mi.

-Lo lamento- Tomo con su mano mi barbilla e hizo que subiera la mirada -No quise gritar, pero realmente no entiendo cuál es el maldito problema Aria- Coloco el pelo que tenia sobre mi cara detrás de mi oreja.

-Que estoy comprometida, maldición- Hable fuerte y claro, golpee mi regazo con mis puños y el se alejo. Claramente no era así como yo quería decírselo en realidad, pero así me había salido en ese momento y aunque no creo que gritar así sea lo mejor manera de dar una noticia como era está ya no podía volver atrás y decirlo de otra manera.

-¿Que?¿Me estas tomando por estúpido?- Evidentemente Caleb no me creyó.

-No- Cubrí mi cara con mis manos por ¿Vergüenza?¿Pena?¿Tristeza?¿Ocultar la risa por la reacción de Caleb? Pueden ser algunas de las causas.

-¿Quieres decir que tienes novio? Si el no te deja dejarlo déjame decirte que voy a romperle la cara- El evidentemente no comprendía absolutamente nada, pero yo no quería explicarle por que me daba pena.

¿No hay alguna forma de pasarle mentalmente la información? ¿Como por ejemplo juntar frentes y entrar en una especie de trance?

Desgraciadamente, no.

-No, no Caleb- Suspiré, si estaba aquí en estos momento era para explicarle -Realmente estoy comprometida pero no es algo en lo que yo ni el estemos de acuerdo-

-¿De que hablas? ¿Quién es él?- No es un buen momento para tus estúpidos e inadmitidos en voz alta celos, maldito Caleb.

-No importa quién es él- Revolee mis ojos- La cuestión es que ninguno de los dos quiere casarse- Aclaré.

-¿Casarse?¿Estas loca?- Se puso bien recto con los ojos desorbitados y llevo sus manos a su cabeza. Tal vez la palabra "Casarse" sonaba fuerte y chocante para él, pero era una palabra clave para entender la situación -Aria explícate por favor- Me señalo.

-Mi padre y su padre tienen un acuerdo económico que se va a llevar a cabo en nuestra boda.-Golpeé su mano que me señalaba lejos de mi cara- Es un asunto por el dinero de dos grandes estúpidos empresarios- Decirlo me dolía muchísimo, pero era la verdad. Mire hacia un costado pero aun sentía la mirada de Caleb fija en mi.

-Pero tu no puedes casarte- Dijo negando con su cabeza y empujando con sus pies el suelo para alejarse un poco con su silla con rueditas.

-Yo lo se, pero debo- Lo observé desde el rabillo de mis ojos.

-No, lo que debes decirles es que tu no quieres, no pueden obligarte a casarte con alguien- Subió el tono de su voz y volvió a inclinarse hacia mi. Esta vez me giré y lo mire de frente también.

Ojalá fuera así de fácil. Decir que no me quiero casa y que se cancele todo, pero no era tan fácil mi amigo.

-¿Crees que no se lo he dicho a mi padre?- Yo también subí el tono de voz -El cree que es lo mejor para mi y lo mejor para todos- 

Y aunque me cueste admitirlo, tal vez tenga razón.

-Déjame decirte que tu padre es un gilipollas- Dijo sin más.

-Déjame decirte que estas en lo cierto- Me tire hacia atrás recostándome en su cama y tapándome la cara.

Y si, lo apoye en su pensamiento porque más allá de que es mi padre. Tiene razón Caleb, es totalmente injusto lo que está haciendo, yo no tenía la culpa de que él quiera hacer negocios.

El silencio reino en la habitación.

Los dos parecíamos debatir y procesar internamente lo que estábamos hablando.

-Solo era explicarte porque lo nuestro no puede funcionar y porque he tomado distancia- Dije aun con la cara tapada. Decir en voz alta todo lo del compromiso parece haberme acomodado las ideas, tenía razón mi padre, probablemente eso era lo mejor para mí, y enamorarme y estar con alguien con el cual tengo sentimientos no me iba ayudar en nada, yo ya sabía bien cual era el final de esta historia, la diferencia estaba en como yo quería pasar el desarrollo, si sufriendo por estar con una persona que se que después voy a tener que dejar o llevándolo lo mejor que puedo evitando el amor. Me senté nuevamente -No quiero que ninguno de los dos salgamos heridos- Nos miramos fijo a los ojos. Él no decía nada –Creo que va a ser mejor que me vaya-

-Ni se te ocurra huir- Dijo sin mirarme cuando me levanté.

-No estoy huyendo- Respondí enojada -Vine hasta aquí para afrontarlas cosas ¿Y me dices que estoy huyendo? Eres un idiota- Tal vez ahora si tenía ganas de pelear. Me estaba diciendo que estoy huyendo cuando estoy acá enfrente suyo explicándole toda la puta realidad en la cara. Diciendo y admitiendo lo que siento de frente y exclusivamente a el. Y déjame decirte cariño que esto no pasa muy seguido.

Simplemente, estaba cansada que me dijera que huyo constantemente.

-Escucha Aria- intentó tranquilizarme mientras se paraba el también y tomaba mis hombros -Cuando dos personas se quieren de verdad no tendría que haber nadie ni nada que pueda separarlos- Deje de respirar por un momento

-¿Quieres decir que me quieres de verdad?- Creo volverme loca o desmayarme. Pero no creo que sea una buena idea.

-Mira Aria, yo no soy muy bueno con esto de expresar sentimientos, pero tu me gustas muchísimo, no solo estoy hablando de tu físico sino también tu personalidad. Mentiría si diría que no siento nada por ti pero también metería si dijera que estoy enamorado de ti- Ouch, eso dolió. Me acaba de decir que el no estaba enamorado de mi en mi propia cara -Pero creo que podría llegar a estarlo- Ahora si que estaba confundida.

-De todas formas, lamentablemente, aunque dos personas se quieran de verdad hay millones de cosas que pueden llegar a separarlas- Volví a lo anterior por que indagar profundamente en sus sentimientos no se si sería algo de lo que mi corazón saliera bien.

-Pero si de verdad te arriesgas puede que no y si no lo haces puede que te pierdas la oportunidad de tu vida- Se acerco mas a mi, una distancia normal, pero hace tiempo que no lo tenía así de cerca -El que no arriesga no gana, Aria- Susurró.

-No se si sería correcto arriesgarme por alguien que no siente lo mismo que yo- También susurré. Esta vez era sincera, nunca había sido tan sincera en mi vida. No estaba segura de que hacer ahora.

El había dejado muy claro que él no estaba enamorado de mi y eso me hacía replantear muchas cosas.

-Tal vez yo necesite que te arriesgues para que mi corazón se ablande- Y ahí estaba el asunto ¿Aquello valía la pena? -Además ¿Que importa si es correcto o no?¿Desde cuando Aria Harrison hace lo correcto?- Continuó.-Lo prohibido no es solamente tentador, también es lo que nos hace sentir vivos- Se acerco un poco mas.

-No se si estoy de acuerdo, no todo es un juego de niños Caleb- Me aleje del él dando un paso hacia atrás. Quería poder pensar las cosas con claridad y evidentemente si lo tenía así de cerca eso no era posible.

-¿Estas segura que no estás de acuerdo?- Se volvió a acercar.

-Si- Respondí firme en mi convicción. O eso quería hacer parecer.

-Entonces tendré que cambiar tu opinión- Dijo, tomo mi cara entre sus dos manos, acorto la distancia que había entre nosotros dos y me besó.

No solo estaba poniendo mis hormonas en juego con su última acción, sino también mi corazón.

Mentiría si dijera que no me deje llevar por el beso y que no lleve mis manos a sus hombros.

-¿Entonces te arriesgas o no nena?- Susurró sobre mis labios después de que nos separamos. Ese beso fue el que termino por darme el valor para hacer lo que hoy vine a hacer.

-No me digas nena, idiota- Dije entre risas mientras paraba mis manos hacia su nuca.

-Tomo eso como un si- Entonces me volvió a besar. Y en este momento me di cuenta de cuanto extrañaba sus besos. El si que sabía lo que hacía.

Bajo sus manos a mi cintura y formamos un abrazo mientras el beso se volvía más intenso.

Antes de que pudiera darme cuenta el camino unos pasos hacia atrás. Me encontraba arriba del él, el con su espalda apoyada en el colchón de su cama.

Sentí sus manos meterse por debajo de mi pollera tocando mi trasero y me vi tentada de meter mi mano por debajo de su camisa para tocar sus abdominales.

Bajo sus manos a la parte trasera de mis muslos, giro y me dejo debajo con él entre mis piernas, podía sentir su parte masculina.

-Alguna vez te dijeron que esta pollera te queda jodidamente sexy- Bajando los besos desde mi boca hasta mi cuello pasando por mi mejilla.

En ese momento sentí como una alarma en mi cerebro y lo empujé un poco para poder mirarlo a los ojos.

Se que esta parte se coincidiera lo mejor de las reconciliaciones, lo siento.

-Espera- Dije y lo miré a los ojos. -Si vamos a empezar las cosas, vamos a empezarlas bien- El levantó una ceja y sentí derretirme. Por que tenía que ser tan malditamente sexy –Me refiero a sin esto por un tiempo. Por las dudas de que no funcionen bien las cosas- Él se rió y se dejó caer hundiendo su cabeza en mi hombro.

-Vale, lo respeto- Me abrazo y dejo car todo su peso sobre mi, evidentemente no me podía mover -Lo cual no quiere decir que no voy a intentar hacerte cambiar de opinión -

Se bajo de encima de mi y se colocó de lado, nos tapó con sus sabanas y me abrazo.

Lo siguiente que me acuerdo fue despertarme por la entrada de Thomas a la habitación. Nos habíamos quedado dormidos. Claro, como no si me había pasado toda la noche despierta pensando en la persona que ahora tenia a mi lado. 

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SE RECONCILIAROOOOOOON  BEBES

Como siempre, gracias por el apoyo y si hay alguien nuevo por ahí BIENVENIDOA

Voten, compartan, comenten, agregenlo a sus bibliotecas, recomienden que soy nueva y cuesta un poco! :/

Muchos besos y espero que anden bien.

Melody ♥