Décimo cuarto capítulo.

Relata Aria.

Nos besábamos como si no hubiese mañana y nadie podría negar la química que teníamos.

Él bajo sus manos que estaban en mi cintura a mi trasero, lo apretó y yo gemí.

Pareciera como si supiera exactamente que hace, como moverse y como actuar para volverme loca.

Yo, por otro lado, desabroche el primer botón de su camisa y metí mis manos por el cuello de la misma tocando sus hombros, lo note tensarse solo un poco con mi movimiento, pude sentir así los fuertes músculos de su espalda.

El beso era cada vez mas caliente y nuestras respiraciones lo demostraban. Nada nos podía detener o eso parecía hasta que el ruido de la puerta nos sobresalto y separamos nuestros labios, yo estire mis brazos intentando encontrar algo de distancia entre nuestros cuerpos, aunque no lo logre del todo por que al parecer Caleb no tenia la menor intención de que nos separáramos.

-¡SALGAN EN ESTE INSTANTE DEL BAÑO!- Se escucho un grito del otro lado de la puerta, y no sabia si alegrarme o ponerme pelos de punta, por que él que nos exigía que salgamos no era el director sino el consejero, Jason.

Caleb se acerco a mi y escondió su cabeza en mi cuello permitiéndome escucharlo gruñir en él, este gesto simplemente me hizo estremecerme.

No sabia porque lo hacia, si por frustración de que nos hallan cortado el momento o por el odio privado que tenían estos dos, un odio que ignoraba la razón.

-¡EN ESTE MOMENTO!- Tomamos distancia.

Me acomode la ropa, respire profundamente, abri la puerta y salí como pude del baño, Caleb le pego a la puerta con su puño y me imito.

Si yo hubiese sido la que le pego a la puerta, o hasta incluso la puerta misma, probablemente estaría llorando del dolor.

-A clases Harrison- dijo Jason firmemente, sin siquiera mirarme, su mirada estaba fija en Caleb, quien lo miraba con mas odio aun que el primero. Dude en que era peor, si no hacerle caso y quedarme afrontando con Caleb las consecuencias o irme y dejarlo solo.

-Pero yo...- quise protestar pero me interrumpió.

-A clases, ahora- no me grito pero me hablo con una voz que si yo no fuera una inconsciente me haría temblar.

Mire a Caleb apenada y él me hizo un intento de sonrisa para que me quedara mas tranquila, lo cual no funciono porque, a mi parecer, era totalmente injusto que el se llevara solo las consecuencias de lo que habíamos hecho los dos.

Igualmente me retire dejándolos solos, cuando entre al salón de clases todas las miradas se pusieron en mi, pero las ignore y camine hacia mi silla.

Después de mi dramática entrada la profesora continuo dando su clase de historia y ahora todo el mundo parecía prestarle atención y aunque pareciera poco creíble, la profesora de historia nos contaba con tanta pasión los hechos ocurridos a lo largo de la humanidad que de alguna forma u otra te atrapaba lo que te contaba, pero ese no era mi caso en el día de hoy, no podía dejar de pensar en Caleb y en Jasón

¿Cual seria la razón de su odio tan personal?

Por que por mas que intentaban disimularlo era evidente de que había algo mas allá que un simple consejero que tenia que supervisar a un simple estudiante.

Y debo admitir que el beso que nos habíamos dado también ocupaba gran parte de mis pensamientos, aunque nunca lo haría en voz alta.

-Aria, llamando desde el planeta tierra- Me dijo Jade mientras pasaba una mano por enfrente de mi cara para llamar mi atención -¿En que estas pensando?¿Y por que llegaste tan tarde?

Yo la mire, levante una ceja y mire hacia el frente, vi que la profesora ya no explicaba más y que copiaba en la pizarra 'Trabajo Practico Evaluativo' -¿Hay que hacer un trabajo practico?-

-Si, en parejas- Me contesto Jade entre risas –De enserio me preocupa tu nivel de abstracción- dijo esta vez tratando de parecer preocupada mientras colocaba una mano en el pecho dramatizando aun mas.

Iba contestarle sarcásticamente hasta que veo a Caleb entrar por la puerta del salón furioso tratando de no romper todo lo que tenia a su paso, si yo creía que mi entrada fue dramática definitivamente en comparación lo mío no fue nada, el se lleva definitivamente es Oscar de la entrada mas dramática de este ciclo electivo.

-¿Alguien más quiere llegar tarde?- Pregunto la profesora de manera simpática tratando de cortar la tensión que se había producido en el ambiente.

Miré a Caleb y por unos segundos el también lo hizo, pero luego empezó a hablar con Thomas sobre lo que le había sucedido o eso creía yo.

-Ah, ya veo en quien estabas pensado tanto- dio Jade mirando en dirección a quien yo miraba -¿Sucedió algo que yo no sepa?

Suspire -En el almuerzo te cuento- Ahora no tenia ganas de hablar de eso así que preferí que nos pongamos a adelantar el trabajo que era para la semana que viene y cuanto menos trabajo tenga para fuera de clases mejor.

Terminamos de copiar el trabajo practico y comenzamos a hacerlo.

Las demas horas pasaron volando sorprendiéndome cuando sonó la campana indicando que era la hora del almuerzo, entre que guarde todos mis libros, hojas, lapiceras y lápices dispersos por todo el banco ya nadie quedaba en el salón, solo Jade que como muy buena amiga me estaba esperando e insultándome con amor, diciendo que era muy desordenada y que tardaba mucho.

Nos sentamos en nuestra mesa y le conté desde mi mini pelea con Giovanna hasta cuando Jasón nos interrumpió a mi y a Caleb.

-Yo sabia que ustedes dos iban a terminar así- Jade estaba hablando del beso que le había dado a Caleb. Yo gire mis ojos y di el ultimo bocado a mi comida, si que esa tarta estaba deliciosa. La verdad no tenia ganas de hablar de lo sucedido, solo tenia ganas de saciar mi hambre en silencio, pero silencio probablemente no era una palabra en el vocabulario de Jade.

-¡Deja de mirarlo, Idiota!- dije dándole una suave bofetada en la cara de mi amiga ya que ella no paraba de mirar en dirección a Caleb- Va a pensar que estamos hablando de él-

-Es que de hecho si estamos hablado de él... Bueno de ti y de el besándose apasionadamente en el baño de chicas- Gire mis ojos nuevamente aunque no pude evitar reírme de la forma en que se había expresado la idiota con la que estaba compartiendo el almuerzo.

-¿Apasionadamente?- Pregunte y reí a carcajadas. -Deja de mirar novelas-

-Si, apasionadamente- Respondió y reímos de nuevo.

-De todas formas no lo mires- Simulando estar seria y apuntándola con mi tenedor.

-¿Qué sucede? ¿Estas celosa de que mire a tu enamorado?- Esto si ameritaba una carcajada.

¿Celosa yo?¿Enamorado él?, déjame reír mas fuerte, eso jamás sucedería.

-Sabes a que me refiero- Respondí y ella solo rio -Ahora que lo pienso, me estoy olvidando de algo muy importante- Dije cambiando de tema.

Jade me miro -¿Que?- pregunto intrigada, si que podía ser cotilla en algunos momentos.

-No me voy a quedar de brazos cruzados con lo que me hizo Giovanna hoy a la mañana- Jade me mío y sonrió de la misma manera que yo lo había echo, no era una sonrisa inocente sino mas una de maldad.

Entonces me pare, deje mi bandeja y camine hacia la mesa de la Barbi falsa, quien todavía estaba comiendo tranquilamente, alias Geovanna.

-Ups, lo siento- dije imitando su voz y su falsa cara de inocente de hoy a la mañana mientras chocaba con mi mano el vaso de jugo de naranja que estaba tomando justo en ese instante haciendo que todo el liquido caiga en su uniforme. -Te recomiendo que no vuelvas a meterte conmigo zorra por que esto no es nada en comparación de lo que te voy a hacer si lo haces-

Ella chillo, y su hermano que estaba comiendo con ella me miro y se rio levemente mientras negaba con la cabeza. Me fui de ahí dejando a Giovanna que haga un escena sola.

Jade se acerco a mi, chocamos puños y juntas nos fuimos a nuestra habitación.

Cuando llegamos seguimos haciendo el trabajo en parejas, nos quedaban solo dos puntos para terminar y eran los de analizar y generar una conclusión lo cual nos llevo mas tiempo de lo que debería, no se si era por que Jade y yo nos distraíamos con cualquier cosa o por que nos reíamos de cualquier cosa.

Después de terminar, me dolía la cabeza de tanto pensar y reírme.

Me tire en mi cama, me relaje, cerré los ojos y antes de que pudiera haberme dado cuenta ya había caído en los brazos de Morfeo.

Cuando los volví a abrir toda la habitación estaba en oscuridad anunciando que era de noche y mi estomago rugía por comida. Encendí la luz de mi mesa de luz, mire mi reloj y eran las 23:36, la cena ya había pasado hace dos horas y media y habíamos dormido 5 horas.

Mire a Jade quien dormía como un angelito, si no la conociera creería que lo era, no la desperté supuse que estaría cansada por que se había quedado hasta las 4 de la madrugada de ayer haciendo un trabajo para literatura, no me daba lastima ella se lo busco, yo le dije que lo haga con anticipación como yo lo había hecho pero ella no me hizo caso alguno.

Baje las escaleras de dos en dos como un león hambriento en busca de comida y cuando llegue a el gran comedor ya no quedaba nadie excepto un chico comiendo en la mesada donde se hacían los pedidos de la comida, corrí hacia el.

-Dime que tienes algo de comida para mí- Dije mientras me paraba delante de el chico del otro lado de la mesada apoyando mis manos en esta.

El levanto la vista de su comida y me miro con unos lindos ojos verdes, tenia el pelo castaño claro y no pasaba de los 25 años. Estaba segura de que no lo había visto antes por que sino me hubiese percatado de que era muy lindo y se parecía mucho a un ex novio mío de mi antiguo instituto pero no lo era.

Saco su celular del bolsillo y miro la hora.

-¿No te parece un poco tarde? Ya terminé de limpiar todo y en cuanto termine mi comida me voy- Me observo con una ceja arriba.

-Por favor, no seas malo. ¿Acaso vas a dejar a una inocente niña con hambre?- Puse mi mejor cara de niña buena.

-¿Inocente niña?- Preguntó y se acerco un poco a mi para susurrar -No creo que halla inocentes en este instituto-

-Estas en lo cierto- Deje una pausa para continuar -No los hay- El rio y se metió un pedazo de carne en su boca– Pero si me das comida prometo lavar mi plato y el tuyo. ¿Trato?- Extendí mi mano hacia él.

-Trato hecho- respondió y extendió su mano hacia la mía. Se dio la vuelta y fue a buscarme un pedazo de carne asada con papas fritas y me los calentó. Aproveche el momento para robar una papa frita de su plato pero justo me vio –Sabia que no debía confiar en ti- Dijo entre risas y yo también me reí.

-Ya te lo dije, no hay inocentes aquí- Respondí encogiéndome de hombros. Él dejo mi pato enfrente del suyo y yo fui a buscar una silla para sentarme con él a comer- Mmm, delicioso- Dije probando la carne, el solo rio –No te había visto por aquí ¿Eres nuevo?- Pregunte tratando de sonar casual.

-Si, soy nuevo y apuesto a que si me ven comiendo contigo será mi ultimo y primer día- dijo sin desviar los ojos de su plato.

-No exageres- respondí entre risas.

-No lo hago- Dijo –Tengo prohibido hablar con estudiantes- Después de eso comimos unos minutos en silencio, pero el silencio no es lo mío precisamente.

-No somos tan malos como parece, solo somos chicos normales, por lo menos la mayoría- me encogí de hombros nuevamente, él no respondió y no me apetecía comer en silencio- Yo solo soy Aria Harrison y tengo 17 años, no hay por que tenerme miedo.

-No te tengo miedo, niña- Respondió serio mirándome a los ojos.

-Entonces ¿Por que no me quieres decir ni tu nombre?- pregunte frunciendo un poco el ceño.

-Por que no te importa, niña- Volvió sus ojos a su comida.

-Que humor, ¿Podrías dejar de llamarme niña? Yo he sido educada y te he dicho mi nombre como para que me digas de esa forma- Volvió a mirarme.

-Soy Ashton, niña- Remarco la ultimas palabras –Un gusto- Mientras levantaba nuestros platos, cubiertos y vasos –Hora de lavar-

Cruce la mesada que nos dividía para ir a la cocina y cumplir con el trato, hasta ese momento no me había dado cuenta que tan alto era el nuevo... ¿Cocinero?.

-¿Tu cocinas o solo sirves?- Pregunte mientras lavaba los platos, era incomodo que solo yo lave y el me mirará haciéndolo.

-Sirvo y limpio- Contesto seco.

-Wow, hombre de muchas palabras- Y otra vez ese incomodo silencio. -¿Podrías guardarme algo de comida para que le lleve a mi amiga? Por que en cuanto se entere que no la desperté para comer se enojara conmigo- No me respondió pero por lo menos ahora no me estaba solo mirando sino que estaba guardando en una bandeja un pedazo de carne asada y papas.

Termine de lavar lo que habíamos utilizado casi a el mismo tiempo en el que él termino de hacer lo que le pedí y volví a cruzar por arriba la mesada. -Gracias-

-De nada- respondió pasándome la comida para mi amiga.

-Talvez vuelva a venir a comer contigo algún día- dije para ver que cara ponía.

-Ni se te ocurra, no quiero volver a verte por aquí, niña- Respondió algo amargado lo que me hizo reír.

-Nos vemos Ashton- dije ignorando su comentario anterior, lo salude con mi mano y me fui, solo lo escuche dar un pequeño gruñido de queja lo que me hizo reír.

Cuando llegue a la habitación Jade se despertó al escuchar la puerta abrirse.

-¿Qué hora es?- Pregunto con voz adormilada.

-Las 12 y 10- Respondí después de mirar la hora –Te traje comida- Y lo siguiente fue dejarle arriba de su cama la bandeja.

-¿Y los cubiertos?- Pregunto mientras me ponía mi pijama y se sentaba en la cama.

-Te he traído comida, no puedes quejarte- Conteste.

-Buen punto- Jade comenzó a comer con las manos.

Mientras Jade terminaba de comer charlamos de cosas triviales y yo reía de ver a Jade devorar la carne con sus manos. Después de eso nos fuimos a seguir durmiendo, como ángeles que somos de Dios.

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HOY NO LAS DEJE CON TANTA INTRIGA EH! NO SE PUEDEN QUEJAR.

DE LO QUE SI SE PUEDEN QUEJAR ES QUE NO SUBO CAP HACE MUCHO! :(

PERDÓN, IBA A SUBIR EL VIERNES PERO SE ME COMPLICO Y TUVE UN FINDE MEDIO CARGADO.

PERO NADA ESPERO QUE LES GUSTE EL CAP. 

GRACIAS A LOS QUE ME ESTÁN APOYANDO, DE ENSERIO MUCHAS GRACIAS!

Como siempre...

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Gracias por leer!

Melody