Takemichi, aburrido: Chifuyu ¿Sabes qué hora es? Mi teléfono se quedó sin pila

Chifuyu, con un helado en las manos: No, pero quizá en un par de minutos lo sepa

Takemichi, curioso: ¿a qué te refieres?

Chifuyu, sonriendo: Baji viene hacia nosotros

Takemichi, confundido: ¿Eso que tiene que ver?

Baji llega sonriendo salvaje mientras: ¡Escóndanse!

Takemichi, siendo arrastrado por Chifuyu: ¿Por qué?

Baji, relajándose un poco: el fuego tardo en encender, pero lo logre

Takemichi, preocupado: ¿De qué está hablando Baji-kun?

Se escucha una maldición a lo lejos seguido de una explosión, Takemichi alcanza a ver un auto en llamas

Takemichi, conmocionado: ¿pero por qué... ?

Baji, emocionado mientras come una barrita robada de las cosas de Takemichi: Son las 4 de la tarde y aún no he comido, ese estúpido auto estaba en mi camino y merecía arder en el infierno

Chifuyu, sonriendo a Takemichi: Son las cuatro de la tarde compañero, ahora ya sabes la hora

Takemichi, viendo incrédulo al par que se comía sus golosinas: ¿Por qué no me pueden dar la hora como la gente normal? ¿Por qué tiene que haber una explosión para saber qué hora es? ¿Por qué no puedo estar con personas menos problemáticas?

Chifuyu, con las mejillas llenas de dulces: Bueno, tú tampoco eres normal...

Baji, feliz porque ya comió algo: Nadie te obligo a estar con nosotros así que déjame comer tranquilo, Kisaki ya se encargara de arreglar todo

Takemichi, a punto de llorar: todos están locos, debí quedarme en casa en donde hay un reloj que no incendia autos