Capitulo 7
El camino a través del bosque los condujo a una carretera poco transitada que cortaba a través del paisaje. A medida que Taehyung y Jungkook se preparaban para cruzarla, el sonido de motores rugientes llamó su atención. Dos vehículos militares aparecieron a lo lejos, deteniéndose bruscamente al ver a la extraña pareja en medio de la carretera.
Desde los altavoces de los vehículos, una voz autoritaria resonó, exigiendo que Jungkook liberara a su rehén, identificado como Taehyung. La mirada de Jungkook se endureció, la furia volviendo a encenderse en sus ojos.
Bajando a Taehyung de su espalda con cuidado, Jungkook se preparó para lo que vendría a continuación. Sabía que no podían permitir que los militares los detuvieran, que no podían arriesgar ser capturados y volver a las garras de aquellos que los habían torturado.
Los soldados, viendo que sus demandas no eran cumplidas, comenzaron a disparar. Las balas rebotaban en la piel de Jungkook, dejando solo marcas superficiales mientras su cuerpo se regeneraba al instante. Con un rugido, Jungkook se abalanzó sobre los vehículos, sus garras destrozando la armadura metálica como si fuera papel.
Los soldados salieron disparados de los vehículos, armas en mano, pero eran incapaces de contener a la bestia furiosa que tenían frente a ellos. Con movimientos rápidos y precisos, Jungkook los abatió uno por uno, sus ataques letales y eficientes.
Taehyung observaba atónito la escena, sintiendo una mezcla de terror y asombro ante la fuerza desatada de Jungkook. Cada golpe, cada movimiento letal, lo acercaba más a la verdad detrás de la bestia que tenía a su lado.
Finalmente, el último soldado cayó al suelo, derrotado. Jungkook se detuvo, su pecho subiendo y bajando con fuerza, sus ojos brillando con una intensidad salvaje. Se giró hacia Taehyung, sus facciones tensas pero aún llenas de determinación.
-Tenemos que seguir adelante,-dijo Jungkook, su voz ronca pero firme. -No podemos detenernos aquí.
Taehyung asintió, sintiendo una mezcla de miedo y admiración por la criatura que tenía ante él. Se acercó a Jungkook, colocando una mano en su brazo en un gesto de apoyo y solidaridad.
-Estamos juntos en esto,-dijo Taehyung con seguridad. -No importa lo que nos depare el futuro, lo enfrentaremos juntos.
Con un último vistazo a los restos destrozados de los vehículos militares y los soldados caídos, Taehyung y Jungkook continuaron
Después de que Jungkook, haya acabado con los soldados, carga nuevamente a Taehyung en su espalda y continúan su camino a través del denso bosque. Taehyung, aún en shock por lo que acaba de presenciar, se aferra a Jungkook mientras intenta procesar lo ocurrido.
Caminan durante horas, hasta que finalmente llegan a un pequeño pueblo en el bosque. Jungkook baja a Taehyung con cuidado y le asegura que están a salvo por el momento. Sin embargo, un hambre voraz comienza a consumir a Jungkook, un hambre que solo puede calmar con la carne de los cazados.
Decidiendo actuar con cuidado para no alertar a ningún otro habitante del pueblo, Jungkook se adentra en las sombras de la noche y elimina silenciosamente a los cazadores. Con destreza, traslada los cuerpos a un rincón apartado, lejos de las miradas curiosas.
Una vez que la tarea está completa, Jungkook regresa con Taehyung, quien lo observa con una mezcla de sorpresa y miedo en sus ojos. Jungkook, con una expresión sombría, comienza a preparar la carne de los cazadores para satisfacer su hambre insaciable.
-¿Quieres comer, Taehyung?, -pregunta Jungkook con voz ronca, extendiéndole un trozo de carne asada. Taehyung, horrorizado por la idea de consumir la carne de otros seres humanos, sacude la cabeza con firmeza y se niega.
A pesar de la negativa de Taehyung, Jungkook come vorazmente, alimentando su bestialidad con cada bocado. Mientras la oscuridad de la noche envuelve al pueblo, los dos permanecen en silencio, con el peso de lo que han presenciado colgando sobre sus cabezas.
Taehyung, sintiendo un hambre creciente después de presenciar los eventos impactantes del día, no puede evitar que su estómago gruña ruidosamente. Jungkook, con su mirada intensa y salvaje, observa a Taehyung con atención y un rugido gutural escapa de su garganta.
-Debes comer, Taehyung, -declara Jungkook con voz grave y autoritaria, extendiéndole nuevamente un trozo de carne. Taehyung, sintiendo el miedo palpable en el aire, acepta a regañadientes y come en silencio, dejando que el sabor metálico de la carne invada su boca con cada mordisco.
Una vez saciados, Taehyung se siente un poco más reconfortado y fortalecido. Mientras Jungkook permanece vigilante, Taehyung decide buscar algo de ropa limpia en el pueblo abandonado. Encuentra una camisa y unos pantalones en una casa cercana y se dirige hacia un pequeño río que corre cerca del pueblo para limpiarse y refrescarse.
Mientras Taehyung se sumerge con ropa en las aguas cristalinas del río, disfrutando de la sensación de limpieza y renovación, Jungkook lo observa desde la orilla con una intensidad que no pasa desapercibida. Un deseo salvaje y primitivo se enciende en lo más profundo de Jungkook, nublando su juicio y despertando instintos oscuros en su interior.
Sin poder resistirse a la atracción magnética que siente hacia Taehyung, Jungkook se acerca sigilosamente y lo acorrala contra una pared rocosa. Con sus cuatro brazos poderosos, Jungkook sujeta a Taehyung, inmovilizándolo sin esfuerzo, mientras su mirada ardiente se clava en la de Taehyung.
Taehyung, sintiendo una mezcla de miedo y excitación, trata de liberarse sin éxito, consciente de la fuerza abrumadora de Jungkook. Antes de que pueda decir una palabra, Jungkook comienza a desgarrar con cuidado la ropa de tela que Taehyung llevaba puesto, revelando la piel suave y pálida debajo de la prenda desgarrada.
En ese momento tenso y cargado de tensión, el ruido de una rama quebrándose en la distancia rompe la intensidad del momento, haciendo que Jungkook se detenga en seco. Ambos se quedan inmóviles, respirando agitadamente, mientras el mundo a su alrededor parece detenerse en un instante suspendido en el tiempo.
Liberándose de la distracción momentánea, Jungkook vuelve a centrar su mirada en Taehyung, cuya respiración se ha vuelto irregular y acelerada por la intensidad del momento. Con movimientos precisos y decididos, Jungkook continúa despojando a Taehyung de sus ropas rasgadas, dejando al descubierto su piel temblorosa ante el contacto frío de la noche.
Taehyung, con una mezcla de temor y deseo ardiendo en sus ojos, se siente atrapado en la órbita magnética de Jungkook, incapaz de apartar su mirada de la figura imponente y salvaje que tiene frente a él. A pesar de la incertidumbre y la confusión que lo embargan, una chispa de excitación se enciende en lo más profundo de su ser.
Con una lentitud calculada, Jungkook acerca su rostro al de Taehyung, dejando que sus alientos se mezclen en el aire cargado de tensión. Los latidos acelerados de sus corazones resuenan en la quietud de la noche, marcando el ritmo frenético de una danza peligrosa y prohibida.
En medio de la oscuridad y el silencio, los dos se encuentran en un abismo de deseos prohibidos y emociones encontradas. Jungkook, con una intensidad animal ardiendo en sus ojos, se inclina hacia Taehyung, a punto de cruzar un límite del que no hay retorno.
¿Jungkook se dejará dominar por su instinto?
Les dejo un nuevo capítulo
Mis lectores 🥰😘
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top