Capitulo 3: Verdades

Previamente en Ninjago

-Morro, el discípulo de mi hermano-

-No puedo creer que cambiarán mí traje-

-Tendremos que dar las malas noticias a mi padre-

-¿Por qué lo hiciste?-

Lloyd y Harumi hablaban cada vez más abiertamente, se la pasaron hablando un par de hora. Tuvieron que apagar la luces del cuarto para no llamar la atención de los guardias, pero incluso estaban hablando con solo una pequeña lámpara en mano.

-*Vaya, no sabía que Lloyd era tan interesante. ¿Me pregunto si el mío es como él? Tal vez debi haber hablado mas con los ninjas antes de...*- Harumi dejo de sonreír al recordar las cosas que había hecho.

-Oye, ¿Estás bien?- dijo Lloyd al ver su cambio repentino.

-Si, solo recordé algo-

-¿Qué cosa?-

-Yo....... quisiera no hablar de eso-

Lloyd la dejó y salió de la habitación por el balcón. Harumi estaba aún triste pero dió un suspiro y simplemente se fue a dormir.

Por la mañana siguiente

Harumi se despertó por el sonido de movimiento de metal y varios gritos como si fuera una pelea.

Ella se vistió y comenzó a recorrer el palacio en busca de Lloyd o de Garmadon. Después de unos cuantos minutos, los encontró a ambos en una habitación medio cerrada junto con los que parecían ser los otros generales de Garmadon, entre ellos estaban Killow y Ultra Violet.

En una pared podía ver un mapa entero de toda Ninjago, incluso de una gigantesca isla de color oscuro que Harumi no reconocía.

En distintas partes del mapa se podían ver figuras y nombres de lo que parecían ser enemigos.

"Nadakhan", "Crox y Acronix", "Granborg", "Chen", "La preminente", "Los serpentine" y "La resistencia" eran aquellos nombres que sobresalían entre todos los demás.

-Aun sigo sin entenderlo. Tenemos todas las de ganar, no necesitamos atacarlos.- decía Lloyd a su padre.

-Si pero no será eterno- un general se levantó y apuntó a otra pared que mostraba fotografías de todos los grupos. -Según nuestras fuentes, todos han comenzado a moverse y no tenemos forma de saber que es lo que están haciendo-

-Si mencionar el reciente robo de Morro a la bóveda- mencionó una general mujer.

-¿Y qué me dicen de la nueva? ¿Cómo se llamaba?- preguntaba un tipo con una apariencia desagradable. -Harumi. Por lo que sabemos, podría ser una espía y está fingiendo muy bien para engañarnos-

-Ella no es una espía, ya lo verifiqué- defendió Lloyd.

-¿Cómo pudiste verificarlo?- hablo Ultra Violet -Por lo que pude ver podrías estar solo diciéndolo porque te gusta- y todos los generales empezaron a reírse.

Pero todos dejaron de hacerlo en un instante, sobre todo Ultra Violet que ahora tenía el filo de una espada en el cuello.

-Vuelve a decir eso y serán las últimas palabras que salgan de tu maldita boca- decía en voz baja pero aún lo suficiente para que todos lo oyeran.

-JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA- Garmadon reía tan fuerte que parecía estarse quedando sin aire. -Oh, Violet, debiste ver tu cara. Vaya, en verdad que me sacas una sonrisa.-

Lloyd alejó la espada del cuello de UV (Ultra Violet), empezaba a volver a su silla pero a su espalda y en cámara lenta se acercaba UV para darle una patada en la nuca.

Lloyd se giro y bloqueó su pierna con sus espadas. De empujón, UV se alejó con una voltereta hacia atrás y aterrizó en una mesa, donde tomó un cuchillo que se encontraba ahí.

Ambos salieron disparados contra el otro, causando chispas al chocar sus armas.

-Todos aquí sabemos que solo eres el primer general porque Lord Garmadon es tu padre. Pero cuando cometas un error, él te dejará atrás y alguien más tomará tu lugar.-

Esas palabras hicieron enojar a Lloyd, le dio una patada en su estómago y dio un salto para atacarla cuando estaba en el suelo.

UV dio un giro a la derecha y se levantó para clavarle la navaja en el hombro. Lloyd se dió cuenta y esquivo el ataque, empezando otro choque de armas.

Todos los generales empezaron a gritar de emoción y algunos soldados presentes iban a apostar. Lord Garmadon solo los veía con una sonrisa.

La batalla se estaba prolongando y Lloyd empezaba a sudar. Volteó a ver a su padre y solo lo vió ahí con una sonrisa.

En su mente, el rubio recordaba una frase que le dijo su padre "Hacer lo necesario para ganar", él inhaló unos cuantos segundos, se calmó y luego exhaló.

Tenía sus ojos cerrados pero se puso en POS de combate. No sabía porque pero eso hizo enojar a UV que corría contra él.

El mundo parecía empezar a ir en cámara lenta para él, podía escuchar incluso las manecillas del reloj y las risas de los otros generales.

También podía oír los sonidos que hacía UV acercándose, e incluso pudo detectar a Harumi viéndolos. Lloyd abrió sus ojos y estos dejaron de ser de dos colores para ser del verde esmeralda que eran originalmente.

Pero su brillo era muy intenso, Lloyd dio un giro y con sus espadas le quitó el cuchillo a UV, en una segunda vuelta la pateo en la espalda para empujarla pero con el filo de su espada, atoró un pedazo de su ropa y la acercó a él nuevamente.

Empezo a girar más y más rápido con otros movimientos, dándole una gran golpiza a la chica de piel gris. Todos estaban sorprendidos al ver esos movimientos tan rápidos.

Pero se les cayó la boca al ver qué empezó a girar tan rápido que hizo un tornado de color verde brillante que absorbió a Ultra Violet.

Solo dos no parecían tan sorprendidos como todos los demás, estos eran Lord Garmadon y Harumi.

Ultra Violet salió disparada al otro lado de la habitación, haciendo que varios objetos le cayeran encima y terminará enterrada en libros y otras cosas.

-¿Qué...... qué fue eso?- dijo uno de los soldados.

-Eso, mis queridos generales, es el arte que creo nuestro querido Ninjago. El arte del spinjitzu.- hablaba Garmadon hasta tomar del hombro a su hijo, que ha se había detenido.

-No muchos en este mundo saben hacerlo. Antes solo éramos yo y mi hermano, yo le enseñe a mi hijo. Pero estoy muy seguro de que Morro también sabe usarlo.-

-Nosotros tenemos dos que saben hacer swingtutsu o como sea que se llame. No tenemos que preocuparnos por perder.-

-No estén tan seguros. Morro tiene más entrenamiento y conocimientos en spinjitzu que mi hijo. Y es probable que haya robado la bóveda para buscar más sobre este. Por eso debemos empezar a movernos-

-Pero señor oscuro, no sabemos que traman. Sería como atacar a ciegas.-

-Necesitamos a un espía en la resistencia-

Todos empezaron a hablar, diciendo que era imposible ya que reconocerían a cualquier soldado por sus tatuajes o cicatrices.

-Yo podría infiltrarme- Harumi entro en la habitación y llamo su atención. -Como ya le había dicho, soy muy discreta. Además, siento que no confían en mi aún. Quiero probarle que soy de confianza, déjeme ir.-

Todos estaban callados y no decían nada., Eso ponía nerviosa a Harumi pero Lloyd le susurró algo a Lord Garmadon.

-Esta bien, irás. Pero Lloyd irá contigo.- dijo Lord Garmadon ante la sorpresa de todos.

-Pero, ¿No lo reconocerán?- dijo otro general.

-Mi hijo siempre ha cubierto su cara, es una de las cosas que le enseñé-

Todos discutieron un poco y estuvieron de acuerdo en que ambos fueran.

Un par de horas después

Ambos chicos estaban saliendo con ropa de civil, algo desgastada y un par de mochilas con suministros para el viaje.

Ellos comenzaron su viaje por un camino que conectaba con otras carreteras que conectaban con el lado de la montaña que había sido bloqueado.

Estos camino eran más largos y solo podían accederse escalando.

-¿Por qué pediste venir conmigo? Creí que confiabas en mi-

-Confio en ti, pero algo sentir de mi no me deja. Sobre todo cuando anoche no quisiste contarme lo que te tenía tan triste.-

-Ya te dije que no quería hablar de eso-

-Y por eso vine. Entiendo que tengas una carga en tus hombros, pero no eres la única y tienes que entender eso.-

-Es que no comprenderías mi carga-

-Como voy a entenderla si no me dices lo que es. Solo puedes saber el peso de otra persona cuando tú lo llevas encima.-

Harumi estaba muy callada después de ese comentario, pero solo pudo decir que aún no estaba lista para decirle.

Lloyd no esperaba esa respuesta pero prefería eso a que se lo negara.

Ambos habían llegado hasta la parte donde terminaba el derrumbe del puente. Estaban muy cansados pero les faltaba un poco más.

Lloyd llegó y solo le faltaba subir una mano a Harumi. Pero la roca en la que tenía su mano se soltó y empezaba a caer.

-*Voy a morir........ ¿Otra vez?*- su mente empezaba a desesperarse y empezó a soltar lágrimas al recordarlo todo por segunda vez.

Pero había algo en sus memorias que era distinto, después de que cayó del edificio pudo ver memorias que no recordaba estando con otra persona en lo que parecía ser un campamento y luego un brillo multicolor que explotó en su cara.

Cuando volvió a la realidad, vio que estaba siendo sostenida por Lloyd del brazo. -Eres más pesada de lo que....... creía- A Lloyd- le costaba mucho cargarla porque estaba siendo peso muerto, pero cuando volvió en si, Harumi escalo nuevamente y ambos llegaron a la cima.

-Eso........ estuvo....... cerca- decía votado viendo al cielo.

-Y que lo......... digas......... Pensé que iba a morir-

-Por suerte no fue así........... ¿O no Harumi?-

-Rumi-

-¿Eh?-

-Por favor............ Llámame Rumi- dijo mirando a otro lado que no fuera la cara del rubio.

Lloyd dio una pequeña sonrisa -Muy bien, Rumi- aunque no lo mostraba, la peliblanca estaba feliz de oir eso otra vez.

Cuando recuperaron ambos el aliento, caminaron un rato hasta toparse con otro campamento pero más grande que la vez anterior.

Aquí había incluso tiendas más grandes y equipo demostrando que ya llevaban tiempo escondiéndose ahí.

Discretamente, ambos chicos veían dentro de las tiendas si había algo de información, sin resultado alguno.

-¿Encontraste algo?- pregunto Lloyd.

-No, ¿Y tú?-

-No. Debemos...- no pudo seguir porque alguien le tomó del hombro. Iba a sacar un kunai pero al voltear pudo ver que solo era una mujer de lentes con el cabello gris. -¿Puedo ayudarle en algo?-

-Oh, lo siento. Es que me recordabas a alguien. Soy Misako, ¿Son nuevos aquí?-

-Ah- Lloyd- fue interrumpido por Harumi que decidió hablar -Si, llegamos apenas tratando de huir de los soldados de Garmadon-

-Pobres, lamento que hayan tenido que pasar por algo difícil. Espero que sus familias también estén bien-

-En realidad, solo nos tenemos a nosotros- dijo la peliblanca tomando el besos de Lloyd.

-¿Son hermanos u otra cosa?-

-Solo somos amigos- dijo Lloyd- para evitar que la señora entienda otra cosa.

Harumi soltó su brazo y se puso con los brazos a los costados.

-Bueno, pronto podrán comer algo. Y espero que puedan al menos quitarse esa preocupación de correr de Garmadon y sus soldados.-

-Muchas gracias señora- Misako se alejó y Lloyd- empezó a hablar con Harumi -¿Por qué no me dejaste hablar?-

-No creo que deban tener mucha información sobre nosotros. Debíamos inventar algo-

-Ya lo sé pero no era necesario que hicieras eso-

-Si lo era *Perdón Lloyd, pero no creo que ninguno de los dos esté listo para eso*-

La noche llegó y una gran fogata y unas cuantas linternas eran lo único que alumbraba el lugar.

Todos los refugiados comían con algo de tranquilidad. Harumi también tomo algo de comida pero nota a un pequeño niño que estaba solo buscando a sus alrededores y aprecia que iba a llorar.

Ella se le estaba acercando para ayudarle pero Lloyd se le adelantó. -Hola amigo, ¿Que sucede?-

-No encuentro a mis papás-

-No te preocupes. Te ayudaré a buscarlos ¿Ok?- extendió su mano

-Ok- el niño la tomó y ambos comenzaron a buscar por el campamento a sus padres.

Harumi los seguía con cierta distancia, ella veía como trataba al pequeño de una forma muy linda. Una forma que veía recordar pero no de la forma que ella creía.

-*Cielos. Lo culpe de tanto que me cegó de lo que en realidad estaba haciendo él para ayudar a la gente. En verdad que soy una tonta*-

Lloyd y el pequeño llegaron hasta un vieja cabaña con una luz de linterna dentro, significando que había alguien. Al entrar, se veían a varias personas ahí que se quedaron calladas al ver la rubio.

-Lo siento, buscaba a los padres de este pequeño.-

En eso uns pareja se levantó y fueron con el niño. -¿Que haces aquí? Te dijimos que comieras algo?- dijo el padre.

-Queria comer con ustedes- respondió el niño.

Los padres decidieron retirarse y se disculparon por las molestias. Lloyd iba a retirarse pero alguien lo detuvo.

Al ver quién era se sorprendió de ver al mismo chico de cabello negro de antes.

-¿Tu eres........ Morro?- pregunto el rubio.

-Así es. ¿Y tú?-

-Yo soy........ Floyd-

-¿Eres nuevo aquí Floyd?- Morro recibió un si como respuesta. -Bien, se que es pronto pero ¿Podrías ayudarnos con unas cosas? Nos serviría una mano extra-

Lloyd no pudo negarse y, tanto el como Morro, se fueron a otro lado.

Harumi, escondida, se quedó por la cabaña para escuchar, también para descubrir que pasó mientras ella estaba "muerta". Ella sabía que muchas cosas eran distintas y quería descubrir por qué muchas cosas eran distintas.

Por la ventana pudo ver a muchas personas ahí, incluyendo a Misako. No podía escuchar bien que era de lo que hablaban pero pudo escuchar varias palabras.

-"Maestro Yang", "Fantasma", "Tierra", "Alianza", "Ninjago"- Harumi se veía muy confundida, no entendía nada de lo que estaban hablando.

-¡Oye! ¿Qué haces aquí?- dijo una voz femenina. Cuando pasó por una lámpara de la cabaña, Harumi pudo ver qué se trataba de alguien que ya conocía.

-*¿Nya?*- Harumi estaba sorprendida por ver a la chica que ,aunque no quisiera admitir, pudo hablar abiertamente.

Nya no podía ver a Harumi por estar en la oscuridad. La peliblanca solo se cubrió la cara con su brazo y salió corriendo de ahí, siendo perseguida por la chica de azul.

Harumi pudo perderla cuando al dar una vuelta se mezcló con un grupo de refugiados.

-Esto no es buena señal- dijo Nya y se dirigió a la cabaña.

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