Recibiendo un disparo
Se suponía que era una misión sencilla, solo era detener a una pequeña pandilla de hombres que causaban problemas en las calles por cuestiones de vandalismo.
La policía les dio la ubicación y todo de aquella pandilla, sin saber del peligro que se enfrentarían los ninjas prosiguieron a ir a detenerlos. Encontraron a la pandilla en pleno robo de autos en una de las calles sencillas de la ciudad. No hubo tiempo de razonar con ellos, ya que solamente recurrieron a las peleas, poder frenarlos era sencillo para los ninjas ya que tenían el poder de sus elementos a su favor más el spinjitzu.
No tardaron en acabar con algunos ya que algunos miembros se escaparon para no ser detenidos por la policía que ya venía en camino.
- Bien, parece que ya son todos los que pudimos capturar – menciono Lloyd al estar vigilando algunos pandilleros atados e inconscientes en el suelo.
- Pero algunos lograron escapar – dijo Cole al cruzarse de brazos.
- Eso ya no importa, con su grupo reducido ya no serán una mayor amenaza –
Sin embargo, no contaron que un desesperado miembro de aquella pandilla se mantuvo escondido en una de las esquinas de un callejón, sin pensar en lo que podría pasar después, sacó su pistola personal y apunto a cierta ninja del agua distraída.
Pero el criminal no supo que cierto Ninja del Fuego se daría cuenta de su acción. Kai tenía lo que otros llamarían "Instintos de Hermano mayor", esos instintos le advertían cuando algo iba a estar mal con alguien de su familia que se encontrara a su alrededor.
Él no rechazo esos instintos. Algo estaba mal aquí, podía sentirlo. Confió en sus instintos. Kai entrecerró los ojos. Una silueta apareció en una de las esquinas de un callejón muy cercano a ellos. Y después apareció un destello de metal en las manos de aquel hombre, ese brillo no era de una cuchilla o espada...era de una... "Oh no..." pensó al ver que lo que tenía en las manos era un arma de fuego pequeña... y lo peor es que estaba apuntando a Nya.
- ¡Nya, cuidado! – grito al momento de correr hacia con ella y quitarla del camino.
Y luego un fuerte trueno lleno el silencio de las calles a su alrededor.
Y todos palidecieron al ver lo que paso en realidad.
Lo que sucedió después fue un borrón para Kai.
Sabía que saltó sobre Nya, eso tenía mucho sentido. Hubo un estrépito y un traqueteo, y sintió como si le hubieran dado una patada tremenda y dolorosa en el estómago.
Entonces oyó varios gritos provenientes de su hermana y sus amigos gritos.
Le ardía la espalda y su estómago como el fuego mismo.
Alguien lo puso de lado.
- ¡Kai! ¡Kai! Tranquilo, tranquilo, vas a estar bien, vas a estar bien ¿de acuerdo...? –
Kai dejó escapar un gruñido de dolor y se arqueó ante la repentina presión sobre su estómago.
- Lo sé, Kai, sé que duele pero tenemos que detener la hemorragia. ¡Zane, por favor ayúdame! – oyó la voz de su hermana muy aturdidamente, ya que el shock por el que estaba pasando Kai no lo dejaba saber lo que estaba pasando a su alrededor. Su dolor aumento aún más al sentir manos frías presionando más fuerte su herida de bala, el cual no dejaba de sangrar.
- Está perdiendo mucha sangre...ya llamamos a una ambulancia, no tardará en llegar junto con la policía –
- ¿Pero qué hay del atacante...? –
- Jay y Cole ya se encargaron de el... -
La voces de Zane y Nya se oían tan lejanas de la mente de Kai, todo le dolía, le dolía tanto que se sentía muy cansado, ahora solo quería dormir y esperar a que todo esto acabe, se reconforto con las suaves caricias de su hermana hacía con el mientras lo mantenía consolándolo sobre su regazo.
- Kai...mantente despierto...por favor... - la vista de Nya y su voz se fueron desvaneciendo de la vista y oído de Kai. Ya toda su visión se vio envuelta casi por completo por la oscuridad.
- ...Está entrando en shock...necesitamos llevarlo rápido a urgencias... - fue ahí que Kai oyó la voz de un hombre desconocido y sintió como si lo alzaran sobre algo.
¿Qué es lo que estaba pasando? ¿Dónde estaba Nya...? ¿Estaba ella aun bien...? ¿Dónde estaban sus hermanos...?
- Vas a estar bien Kai...vas estar bien... - al menos alcanzo a oír la voz de Zane cercas de él.
Pero aún se preguntaba a donde lo estaban llevando.
Dejó que su mundo se desvaneciera en negro.
Ya no supo lo que paso después.
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Si ver el rojo en sus manos era escalofriante, ver los ojos de Kai rodar y cerrarse la congelaron en el acto.
Ni siquiera podía procesar lo que había sucedido.
Nunca imagino que un miembro de aquella pandilla portara armas, tampoco imagino que le dispararían ella. Y tampoco conto que ella seria apartada del camino de la bala por su hermano mayor, para después verlo aturdido por un momento y caer al suelo y comenzar verlo a sangrar por su herida.
Odiaba cuando él hacia este tipo de imprudencias con alguien más.
Odiaba verlo apoyado en su regazo mientras Zane trataba de detener la hemorragia de su herida.
Odiaba lo pálido que se veía su hermano.
Lloyd también se había acercado ellos para poder ayudar a Kai, mientras que Jay y Cole iban tras el tipo que le había disparado a Kai, no tardaron en capturarlo y dejarlo inconsciente como a sus demás compañeros.
La policía, como la ambulancia no tardaron tampoco en llegar, los médicos prepararon una camilla y Zane y Lloyd ayudaron a levantar a Kai y colocarlo en la camilla. Los médicos dijeron que solo uno de ellos podía acompañarlos en la ambulancia, Nya había querido ser esa voluntaria para poder estar al lado de su hermano, pero mejor decidió que Zane sería una mejor opción para que pudiera ayudar a los médicos con Kai. Fue así que Zane acompaño a Kai en la ambulancia para poder dirigirse hacia el hospital.
Los demás tampoco tardaron en llegar al hospital, Zane les había informado que Kai ya había sido llevado a cirugía. Y los médicos les dijeron que solo quedaba esperar.
Toso se habían dirigido a la sala de espera.
Se dejó caer en una de las sillas y se apoyó en Jay, quien la estaba abrazando desde los hombros.
Algo cálido fue empujado en su mano. Bajó la vista y vio que se trataba de una pequeña taza de café.
Levantó la vista hacia la mirada algo preocupada de Lloyd. Él le ofreció una sonrisa forzada - Nada más que hacer excepto esperar, ¿no? - él dijo.
"Nada más que hacer excepto esperar". Era algo que Nya siempre le decía a Lloyd cuando él era más pequeño, y ella no estaba entrenada. Los chicos correrían hacia el peligro, y estarían acurrucados en la sala central esperando ansiosamente noticias sobre os chicos. Estaría inquieto, siempre a medio camino de la puerta y a medio camino de un arma demasiado grande para sus manos pequeñas.
Ella extrañaba aquellos buenos días en los que Lloyd solo era un niño que pasó de ser un intento de malvado villano a querer ser un héroe que pueda ayudar a todos.
Pero parecía que el "esperar" ya parecía ser una palabra que le comenzaba afectar a Nya si no sabía pronto noticias de su hermano.
Esto parecía ser difícil incluso para todos. Cuando el reloj de la pared marcó que ya era una hora muy tarde, comenzaron a pensar lo peor. Ella ya se había terminado su taza de café hace mucho tiempo. Jay estaba apoyado en ella ahora, mientras se encontraba dormido sobre su hombro. Al igual que Cole y Lloyd quienes también se quedaron dormidos. Zane fue a ver que estaba pasando con Kai.
Miró fijamente dónde estaban sus manos en su regazo.
Había sangre en sus manos, la sangre de Kai aún se encontraba visible en sus manos, a pesar de que Jay las limpio con un trapo, una que otra mancha visible se notaba en la piel de sus manos.
El aliento se le quedó atascado en la garganta. Y decidió ya no mirar más sus manos para no comenzar a alterarse aún más.
Kai había perdido mucha sangre. Solo y esperaba de que no haya sido tarde para él.
Además, se sentía enojada con él. Sabía que Kai era el más herido de todos, pero recibir una bala por ella ya era algo extremo. Si no se hubiera confundido por el grito de Kai antes del disparo, tal vez hubiera visto al pandillero apuntándola a ella y así poder evitar mejor la bala y Kai no estaría herido.
En eso sintió como alguien tocaba suavemente su hombro. Era Zane.
- He hablado con los médicos - dijo Zane en voz baja - Saben lo que hay que hacer y tienen suministros a mano para poder ayudarlo - la tomó por los hombros, sus manos mecánicas eran tan gentiles.
Nya se encontró con los ojos de Zane en silencio - ¿Dijeron algo sobre su estado? ¿Cómo está el? –
Zane suspiró y se sentó en una silla frente a ella - No lo sé todavía - el admitió - Tenían mucho trabajo por hacer; No podía tomar más de su tiempo, así que mejor los deje haciendo su trabajando con Kai –
Ella asintió lentamente en comprensión - Nada más que hacer excepto esperar ¿no? - ella murmuró.
Zane asintió y le ofreció la mano. Ella lo tomó en silencio - Nada más que hacer excepto esperar, si - estuvo de acuerdo - Y dejar que la suerte hagan su trabajo –
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Solo paso una semana y Kai aún no despertaba. Los médicos le habían dicho a los ninjas que Kai estaría bien, pero no sabían cuando despertaría. Eso fue debido a su pérdida de sangre.
Desde ese entonces todos en el monasterio se sentían un tanto deprimidos sin Kai. Sobre todo Nya, al arecer no lo tomaba muy bien, ya que lo único que quería era a su hermano mayor junto con ella.
Todos los días no ha dejado de visitar a Kai en el hospital, al igual que los otros, pero aun debían de vigilar las calles para poder encontrar a los otros pandilleros que se escaparon.
Cada vez que Nya iba al hospital, siempre veía a su hermano recostado en esa cama conectado a un monitor cardiaco y con sueros conectados a su brazo para poder sanarlo al mismo tiempo que sedarlo para que el dolor no le afectara, además tenía también un suero con su tipo de sangre, Nya había querido donar algo de su sangre para poder ayudar a Kai, pero el personal del hospital le había confirmado de que albergaban el tipo de sangre de Kai, así que no habría problema en poder ayudarlo.
Al entrar en la habitación de Kai, Nya siempre se sentaba a su lado y le tomaría la mano, como un modo de hacerle creer a Kai de que ella aún seguía a su lado.
Los demás igual la acompañaban, pero tomaban turnos, hubo veces en que todos se quedaban casi todo el día en la habitación de Kai solo para poder estar vigilando y cuidando de su compañero.
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Su cabeza se sentía como algodón.
Le dolía la garganta.
Se sentía frío y pesado.
Él retumbó un gemido desde el fondo de su garganta y abrió los ojos un poco.
Las luces estaban apagadas; parpadeó hacia un tenue techo gris. Había una presión extraña en su brazo, bajó la cabeza para ver un IV conectado a él, al igual que un monitor cardiaco.
Sus párpados estaban pesados.
Los dejó cerrarse de nuevo, contento de flotar en el sentimiento adormecedor.
Se sentía como si acabara de quedarse dormido, pero las luces brillantes y los ruidos sonoros eran una gran diferencia para su entorno anterior. Cerró los ojos contra la luz intensa y emitió un sonido de interrogación cuando una manta fue reemplazada sobre su pecho.
- Así que finalmente despiertas, ¿eh? –
De mala gana abrió los ojos ante la pregunta que fue dicha por un médico que estaba al lado de su cama mientras revisaba algunos papeles de estudio.
- ¿Qué...? –
La persona se rio entre dientes – Y pensar que tardarías un buen tiempo en despertar- bromeo el medico un poco – Pero eres un ninja, tus posibilidades de salir vivo eran algo seguras después de todo - Kai observó en silencio mientras veía al médico revisando algunos papeles en su tabla de trabajo.
Pero su cabeza aún se sentía algo confundida y adolorida.
- ¿Dónde estoy...? ¿Qué paso...? – pregunto algo cansado al mirar un poco a su alrededor.
- Estas en el hospital general de Ninjago, tuviste mucha suerte de llegar a tiempo para que te atendieran, hubieras perdido más sangre y habría sido tu fin, realmente eres muy fuerte, ninja del fuego –
Se echó hacia atrás con un suspiro – Gracias por el cumplido... - murmuró. Ahora su cabeza se estaba despejando poco a poco.
- Muy bien – comenzó el medico sacando su bolígrafo - Solo tengo que hacerte algunas preguntas rápidas contigo y luego te dejaremos descansar – dijo al comenzar escribir instrucciones y preguntas en su tabla.
Kai asintió y se preparó, comenzó diciéndole algunos de sus datos personales y algunos problemas simples.
Pero fue ahí donde su memoria se aclaró, las circunstancias de la noche en que derrotaron y detuvieron aquella pandilla volvieron – Espere... ¿Dónde está mi hermana...? ¿Se encuentra ella bien...? –
- ¿Hm? – el medico parecía confundido, pero de inmediato comprendió a lo que se refería Kai - ¡Oh! Hablas de la ninja del agua ¿no? Si ella está bien, está afuera esperando con los demás ninjas, no han dejado de visitarte ¿sabes? –
El ninja rojo esbozó una sonrisa - ¿En serio...? –
El medico asintió con la cabeza – Todos no dejaban de venir al hospital para verte y preguntar por ti. En cuanto termine con esto les pediré algunos de mis compañeros que los traigan contigo para que te vean. Pero por ahora descansa –
Kai le agradeció al médico cuando salió de su habitación.
Por ahora se relajó y dejo que el sueño lo consumiera un poco antes de recibir las visitas de sus amigos y hermana, que muy probablemente estarán muy preocupados una vez que entren en su cuarto.
Un estrépito y un ruido retumbaron desde el pasillo. Eso hizo que Kai abriera sus ojos de nuevo, pero aún se sentía cansado y débil.
Ignoró el ruido que se encontraba afuera, después de todo; los hospitales estaban llenos de actividad.
Pero luego oyó voces fuertes. Eso era raro para Kai.
- ¡No me importa! ¡Voy a entrar a esa habitación para hablar seriamente con mi hermano! – esa voz era de Nya. Ahora Kai recibiría todo un escarmiento por parte de su hermana menor.
- Señorita, aún se está recuperando, no puede irrumpir y... –
Se compadeció del pobre tipo que intentaba hacer razonar a Nya.
- ¡Nya, espera! – ahora era Lloyd tratando de razonar con ella. Kai sabía que Lloyd ya debería de tener en cuenta que con Nya no se razona. Ya que era algo que Nya y el compartían como hermanos.
Algo golpeó ruidosamente contra la puerta de su habitación.
- ¡Salgan de mi camino antes de que los obligue! –
Kai gimió en la calma de su habitación y se preparó. Esto va hacer duro y largo para él.
Ella irrumpió como un huracán.
- Kai Smith, idiota imprudente ¡Estaba muy preocupado por ti! – apareció como si toda la ira y preocupación se apoderaran de ella.
- Uh... Hola, Nya - Kai sonrió tímidamente - ¿Cómo estas...? –
- ¡¿Qué "como estoy"?! ¡¿Acaso bromeas?! ¡Estaba muy preocupada por ti! –
Podía ver a los demás reunirse detrás de ella, seguidos por algunos enfermeros visiblemente furiosos y un Zane pidiendo disculpas. Trató de llamar la atención de Jay o de Lloyd, al menos; por lo general, podrían calmarla si al menos hablaran con ella. Jay levantó las manos en señal de rendición, y Lloyd solo sacudió la cabeza con una mirada impresionada.
Estaba por su cuenta. Genial.
- Por poco mueres, Kai, ¿en qué estabas pensando? –
Se retorció incómodo en su cama - Yo, eh... -
- ¡Te diré lo que estabas pensando! - ella lo detuvo – Siempre es lo mismo contigo - sus puños temblaron a su lado – Siempre pones la vida de los demás antes que la tuya en primer lugar...claro, es noble, pero también arriesgado tanto para ti como para aquellos a los que les preocupas... - ella contuvo el aliento y ... ¿eran esas lágrimas?
Las cejas de Kai se arquearon cuando la ira se derritió de su hermana.
- Estuve muy asustada, Kai. Tenía miedo de perderte... - su voz se quebró, y Kai sintió una oleada familiar de protección en su pecho.
Se miraron el uno al otro durante un largo momento de silencio.
Kai agachó la cabeza y tragó.
- Yo... – tartamudeó – Yo no podía evitarlo...estabas en peligro y no podía permitir que te hicieran daño - se mordió el labio. Sus manos se cerraron en puños sobre su regazo – Cuando vi aquel hombre tratando de dispararte con su arma, yo...solamente salte para bloquear su puntería para que no te hiriera... - su voz tembló – Supongo que también no fui muy ágil como para también caer al suelo contigo para que la bala no me golpeara... - sacudió su cabeza para tratar de evitar aquel recuerdo, ya que el "hubiera" ya no existe para Kai en aquel momento – Pero aun si, me alegra de que estés bien, hermanita - volvió a mirar a su hermana pequeña – Yo no iba permitir que te hicieran daño. No si estoy yo cercas para poder protegerte –
Las lágrimas cayeron sobre el rostro de Nya - ¿Por qué siempre eres así? - dejó que la pregunta muriera en su lengua al momento de envolver un abrazo cauteloso alrededor de Kai. Él suavemente le devolvió el abrazo, alisando una mano sobre su espalda.
- Eres un tonto - ella raspó en su oído - Nunca vuelvas a hacer eso, ¿de acuerdo? -
Kai cerró los ojos con fuerza y apretó su agarre con Nya – Si, descuida. Tendré más cuidado para la próxima. Además, no pretendo dejar que me hirieran de nuevo en un futuro, esto de recibir un disparo realmente duele... - se rio mientras resoplaba un débil gemido al momento de sentir como Nya hacia algo de presión sobre su herida de bala.
Ella se quedó allí por un momento, y él la mantuvo hasta que ella se apartó. Dio un paso atrás con un sollozo, y Jay puso una mano reconfortante en su hombro. Lloyd dio un paso adelante con una sonrisa amable. Le dio unas palmaditas a Nya en la espalda antes de mirar a Kai.
- Así que, ¿cómo te sientes? –
Kai resopló y le lanzó una mirada al ninja más joven - ¿Ahora me lo preguntas? –
Lloyd se encogió de hombros con una sonrisa cómplice - No tienes nada con lo que sobornar que valga la pena interponerse en el camino de Nya –
Kai puso los ojos en blanco – Vaya...gracias "hermanito" - captó la mirada de Cole desde donde él y Zane estaban hablando en la puerta – Por cierto ¿atraparon al sujeto? - preguntó.
Cole se volvió hacia él con una sonrisa - Sí, Jay y yo logramos noquearlo cuando trato de escapar de nosotros. De todas forma no tuvo oportunidad - el ninja negro se movió para acercarse a la cama de Kai
Zane se unió a él, luciendo un poco molesto - De todos modos, la policía decido que era mejor enviarlo a Kryptarium, sus demás compañeros fueron trasladados a prisión de la ciudad –
Kai levantó una ceja al ver la expresión casi molesta y preocupada de Zane – Oye ¿por qué la cara amargada? Si es por mi estado, voy a estar bien. Solo convenzan a los doctores de que me den de alta mañana para poder volver al monasterio y descansar mejor –
Zane negó con su cabeza, mientras aún mantenía esa expresión casi enojada – Desgraciadamente no podremos hacer eso ya que decidimos que es mejor que te quedes aquí para asegurarnos de que estarás del todo bien de tu herida. Puede que estés aquí un buen tiempo –
Kai se disgustó al oír eso – Aww~, ¿es en serio? Vamos, chicos, saben que odio los hospitales – trato de convencerlos, pero parecía no funcionar.
- Es por tu bien, hermano – menciono seriamente Nya hacía con él al cruzarse de brazos. Parecía que estaba en su modo "mamá" ahora.
Cole se echó a reír y le dio una palmada en el hombro a Zane – Y lo más gracioso fue que Zane no pudo convencer a los doctores de ser tu médico personal, planeaba quedarse aquí todos los días hasta que te dieran de alta –
- Eso me pareció algo injusto, soy mejor que ellos para cuidar de las personas, dijeron que no tenía un certificado médico y esas cosas - gruño Zane mientras Cole se reía – Además de que los ayude bastante cuando te llevábamos al hospital en la ambulancia. Ya que fui mejor que ellos al ayudar a calmarte –
Kai no pudo evitar que una sonrisa se extendiera por su rostro – Que mal... - parecía que estaba también apunto de dormirse de nuevo ya que se sintió nuevamente cansado. ¿Será por los medicamentos o la falta de sangre? – Me hubiera gustado que fueras mi médico personal –
- Incluso yo me ofrecí también para poder cuidarte, pero a los médicos les parecí demasiado joven para poder quedarme en un hospital – menciono Lloyd mientras se sentaba al lado de Kai en su cama.
Kai rio ante la expresión de la cara de Lloyd mientras hacia un puchero – Técnicamente...sigues siendo un niño, maquina verde. El té del mañana puede que haya cambiado tu crecimiento físico pero aun sigues siendo menor de edad –
- ¡Pero soy el Ninja Verde! –
- Eso no justifica tu edad, enano... - se rio Kai ganándose otro puchero por parte de Lloyd, quien se cruzó de brazos y miro hacia otro lado.
- Aunque seamos Ninjas me sorprende que este hospital se tome sus reglas en serio. Los primeros días casi no nos dejaban verte ya que solo dejaban entrar a uno de nosotros para vigilarte – comento Cole algo frustrado mientras se reclinaba en la cama de Kai.
- Nya fue la que te cuidaba más, ya que los médicos se lo concedieron debido a que era tu única pariente – menciono rápidamente Zane.
En eso Kai le sonrió débilmente a su hermana, quien le devolvió la sonrisa, pero Nya noto como su hermano mostraba una expresión cansada y somnolienta, parecía que Kai iba a desmayarse en cualquier momento.
- ¿Estas bien? – al preguntar eso hacía con su hermano los demás comenzaron a mirar atentamente a Kai.
- S-Si...solo...algo cansado, es todo... - respiro profundamente mientras se acomodaba sobre sus almohadas de su cama.
Pero en eso entra el medico que atendió a Kai – Muy bien, el tiempo de visitas se acabó, Ninjas. Sera mejor que salgan antes de que mis compañeros me convenzan de que llame a seguridad y los saque de la habitación de su amigo –
Los demás se rieron nerviosamente por ese comentario mientras que Nya solamente apartaba la mirada algo avergonzada, Kai simplemente resoplo al oír eso.
- Te veremos después – dijo Nya al mirar a Kai, y darle un rápido beso en la frente. Fue un punto a favor para Nya, ya que Kai no tenía las fuerzas suficientes como para quejarse – Descansa, ¿de acuerdo? –
- Comprendido... - sonrió Kai al verlos irse por la puerta mientras todos se despedían de él.
Después de que su familia saliera por la puerta, Kai vio cómo su médico le cambiaba los sueros, al igual que su suero con sangre y los remplazaba por nuevos sueros. Al mismo tiempo que inyectarle un medicamente que lo ayudaría con el dolor. Kai sabía que estos días retenido en el hospital serian largos, pero valía la pena sabiendo que su única hermana menor estaría bien.
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