LLOYD'S POV

El frío metal sujeto me lastimaba las muñecas. Ya era oficial, no importaba cuantas veces lo intentara, jamás iba a lograr zafarme de estas pinzas.

»¿Dónde estaban los demás?« Me pregunté. Jay había accionado la trampa, y a consecuencia los cuatro habíamos quedado suspendidos en el aire por las pinzas.

Entonces, ¿por qué estaba solo? ¿Por qué en la cueva no había nadie más aparte de mí?

Una figura apareció unos metros adelante de mí. Había salido completamente de la oscuridad y arrastraba un cuerpo con él. Un cuerpo moribundo, golpeado, torturado y con el cabello completamente alborotado.

Una vez más, intenté zafarme de las cadenas.

Inútil.

Dylan colocó a Kai de rodillas frente a mí. La cabeza del castaño rebotó poco por el movimiento brusco; pero ahí estaba, suspendida en el aire sin ningunas ganas de levantar la vista.

-¿Algo que le quieras decir a tu amigo, Lloyd?- me preguntó Dylan metiendo la mano en su bolsillo -Ya sabes, antes de que...- sacó una plateada pistola y se la puso a Kai contra la nuca -le vuele los sesos.

-¡No! ¡Dejalo!- grité lo más fuerte que podía, una y otra vez.

Mi voz, sonaba como atrapada dentro de un túnel. Era como si yo no estuviera ahí...

Tuve el desagradable presentimiento de que nadie podía orime.

Dylan le quitó el seguro a la pistola.

-¡Kai! ¡Tienes que correr!- grité desgarrandome la garganta

Pero el no me escuchaba.

Kai se limitó a levantar la cabeza ligeramente, su mirada de desconsuelo y las lágrimas goteando por sus mejillas me dijeron que él ya había aceptado su destino. Volvió a bajar la cabeza y cerró los ojos con fuerza preparándose para el disparo.

Él no va a morir.

Él no va a morir.

No. Yo ya había estado aquí antes. Kai no va a morir. Yo ya había visto esto. Kai no va a morir. En cualquier momento, llegará Oliver a salvarlo de su muerte. Kai no va a morir. Lo sabía.

Kai abrió los ojos lentamente y levantó la vista hacia mí. Estaba llorando, y de algún modo se veía en un terrible conflicto con su interior.

-Lo siento- dijo con la voz quebrada -Lo siento. Yo no puedo hacerlo.

Dylan jaló con satisfacción el gatillo. El disparo retumbó tantas veces en mi mente que ya no estaba seguro cuantas veces lo había escuchado.

El pecho de Kai comenzó a mancharse de un líquido carmesí. Kai agachó la vista para ver su propia ropa tornada en otro color, y después me vio a mí, esbozando una sonrisa con la más profunda pena. Sus ojos fueron perdiendo su brillo, y Kai cayó muerto contra el suelo.

-¡AHHHHHHH!- grité sentándome de un sobre salto.

Había despertado. Todo había sido un simple sueño. Una pesadilla, más bien.

La habitación casi estaba en total oscuridad, debía ser la media noche por lo menos.

Miré a los costados, encontrándome con Zane dormido en la cama de la esquina, Cole en una litera de abajo y Jay un poco más allá en la de arriba.

Me alegró saber que no tendría que dar ninguna explicación por mi grito madrugador.

Aún sentado, miré hacia arriba y golpeé tres veces con los nudillos y dos con el puño la litera de arriba.

Escuché un muy conocido bostezo y el crujir del colchón arriba de mí. Dos segundos después, una cabeza boca abajo salió desde arriba para verme.

El cabello del castaño parecía una total selva desordenada (más que de costumbre); lo cierto, es que cuando aún no se peina el cabello se le ve como una bola de estambre enredada.

-¿Qué tienes?- preguntó en un bostezo entre cerrando los ojos.

No me encontraba explicación de por qué lo había despertado si en realidad no tenía nada planeado para decirle, pero creo que si en un sueño ves a alguien muerto, lo primero que quieres hacer al despertar es ver que sigue bien vivo y bailando.

-Yo...me preguntaba si sabes la hora- Sonreí inocentemente.

Kai arqueó una ceja (aún sin abrir completamente los ojos).

-¿Tuviste una pesadilla?

-Em, sí, muy fea- dije -Tú estabas ahí.

Kai cambió la expresión a una ofendida.

-Oh, ¿en serio? Fíjate que yo también tuve una pesadilla. Fue horrible- dijo con sarcasmo (creo).

-Y...¿qué pasó? -pregunté con curiosidad.

No podía ser coincidencia que los dos hubiéramos tenido pesadillas.

-Bueno...- comenzó -yo estaba a punto de besar a Emma Watson, cuando de repente, un enanito me despierta a la mitad de la noche porque el míster ninja mostacho verde quiere saber la hora, ¿cómo la vez?- dijo lleno de sarcasmo y su cabeza desapareció.

Kai se había ido a dormir. Y yo estaba ahí, sin poder conciliar el sueño.

Estaba a punto de hacer un intento por cerrar los ojos y dormir, cuando un ruido parecido a hule chocando me llamó la atención. Sonaba como si alguien hubiera abierto el refrigerador.

Me levanté con cuidado y me dirigí a la puerta, asegurándome de no despertar a nadie más.

Salí al pasillo y fui directo a la cocina, la cual estaba apenas alumbrada por la débil luz azul del refrigerador abierto. Alguien (y creo saber quien) rebuscaba entre la camida y dejaba algunas cosas afuera. Sobre la barra, había un pedazo de pastel de chocolate, el bote de crema batida y una gelatina de leche casi terminada.

La figura sacó la cabeza del refrigerador y (dejándolo abierto) comenzó a servirse leche en un vaso de vidrio.

No tardó ni dos segundos en advertir mi presencia.

-Oh, hola Míster Ninja Mostacho Verde- dijo sonriente imitando el tono de Kai.

Pensé en mi pesadilla, y luego pensé en él.

-¿Fuiste tú, cierto?- pregunté fulminándolo con la mirada.

-Sí, fui yo- Oliver asintió satisfecho dejando la jarra de leche sobre la barra -Descuida, sólo quería saber si aún tenía el toque- se llevó el vaso a la boca -¿Y funcionó?

No dejé de fulminarlo con la mirada. Estaba muy molesto.

-Bueno, supongo que como no viniste rápido a golpearme...eso quiere decir que no- dijo indiferente y luego guiñó el ojo -No te preocupes, te prometo que la próxima vez que despiertes así, lo harás súper molesto conmigo y hasta sudarás leche. ¿Qué te parece?

Me crucé de brazos y seguí fulminándolo.

-¿Te alimentas del sufrimiento de los demás, no es así?

Oliver pareció extrañado y apuntó a su vaso.

-No sé si mi pesadilla te haya dejado ciego, pero esto, es leche- le dio tres tragos al vaso -Bueno, técnicamente podría ser sufrimiento de vaquita, pero eso depende del tipo que la ordeñó, ¿no?

No podía soportar su actitud.

-¿Por qué te encanta ver a la gente tan mal?

-Aquí entre nos, tú no te ves tan mal- dijo sin dejar de sonreír y tomó el pedazo del pastel de chocolate.

-Eso es de Cole, se enojará si no está por la mañana.

Oliver me miró divertido, y sin un poco de moral, le dio una buena mordida al pastel.

-Traquilo verdoso, no creo que el gordito se entere- dijo sonriendo.

Traté de controlar mi ira y pensé en otra cosa.

-¿Qué hora es? ¿Por qué no duermes?- pregunté viéndolo con curiosidad.

-Las tres de la madrugada, hora de los demonios, ¿tú qué crees?- rió divertido.

¿Yo le parecía divertido? Seguro me tomaba sólo como una broma.

-Bueno, pues ahora por tu culpa, ya no puedo conciliar el sueño.- dije fingiendo más molestia.

-¡Oh, lo lamento tanto!- exclamó Oliver fingiendo arrepentimiento. Sonrió -Pero yo en eso, te puedo ayudar.

Y sin ninguna advertencia, me arrojó el resto de la leche de su vaso a la cara, haciéndome dar un paso en falso hacia atrás y caer de espaldas contra el suelo.

Ahora sí. Estaba furioso. ¡¿Cómo se atreve a tratarnos de esa manera?! Y pensar que fui yo el de la idea de su libertad. Cuando le ponga las manos encima, me las pagará.

Con ambas manos me quité el exceso de leche en los ojos y me senté rápidamente, profundamente molesto.

-¡Oliver! ¡Te voy a....

Abrí los ojos, y no pude creer lo que veía.

Kai, Zane, Cole y Jay estaban al rededor de mí con rostros de extrañeza, y por más raro que pareciera, todo el departamento parecía estar iluminado por la luz del sol.

Volví a secarme más leche de la cara para asegurarme de no estar teniendo alucinaciones, pero estaba completamente seguro de que esto era real.

-¿Dónde...- comencé a decir sin alcanzar a formular palabra -¿Qué hora es?

-Es mediodía, ¿estás bien?- dijo Zane con algo de preocupación.

-Lloyd, parece que estás sudando leche- dijo Jay alarmado.

Me levanté del suelo duro y miré más allá de las cabezas de los demás para ver la cocina, pero en todos mis intentos de encontrar a Oliver, me di cuenta de que no había nada que probara que él había pasado por ahí.

-Fue Oliver- dije con rabia.

Me sentía asqueroso con la leche podrida encima.

-¿Oliver?- repitió Kai -A mí más bien me parece que te quedaste dormido asaltando la alacena en la noche.

-¿Qué? ¡No, se los juro! ¡Fue él!

-Ya Lloyd- Jay se cruzó de brazos -, que Oliver viva aquí ahora no significa que podamos culparlo de todo. En especial de nuestra hambre.

-Él tiene razón- concuerda Zane -. Si queremos aprender a llevar una buena relación con él, lo mejor será tratarlo como si fuera uno de nosotros.

Un enojo recorrió todas mis venas. Ése Oliver, ¿de verdad le parecía muy gracioso esto? ¿Pero qué podía hacer yo al respecto? Si había alguien que podía ayudarnos, era él, el único que hasta hora ha esperado más de mil años para utilizar el poder de un artefacto multidimensional. ¿Quién más que él podría saber lo que haría Dylan? Necesitábamos su ayuda, y él lo sabía.

Me calme para no darle a Oliver el gusto de haberme hecho enojar. Entonces, me cuestioné de su paradero.

-¿Y dónde está? ¿Oliver?- les pregunté.

-Justo aquí -dijo saliendo de la habitación de invitados -Espero que no te importe, pero alguien se acabó la leche y gelatina anoche.

-¡Mi pastel!- Cole entró en pánico y corrió hasta el refrigerador.

Para mi sorpresa, se vio muy aliviado al sacar un plato con la rebanada de pastel completa.

-Uff, aún en una pieza -dijo Cole apunto de darle un bocado.

-¿Qué hiciste?- pregunté a Oliver lo más calmado que pude.

El sonrió satisfecho y caminó hacia Cole.

-Espero que no te importe: le puse un ingrediente extra.

Cole paró el bocado y vio con miedo el pastel. Inmediatamente, lo volvió a dejar dentro del refri.

Alguien tocó apresuradamente la puerta y sin importarle que aún no le diéramos paso, entró apresuradamente con un montón de papeles y pergaminos cargando en los brazos.

William depositó toda la información sobre la mesa del comedor.

-Perdonen si llego tan de prisa- se disculpa Will -, pero si mis teorías son correctas (y casi siempre lo son), debemos partir a la búsqueda de los...

-¡Wow wow wow wow! ¡Espera Willy! ¡Espera!- exclama Jay deteniendólo- Oliver dijo que nos explicaría lo que sabe cuando todos estuviéramos aquí, así que, ¿por qué esperar?

-Tiene razón -dice Cole cruzándose de brazos y volteando a ver a Oliver -Lo prometiste.

Oliver rodó los ojos y fue hasta la mesa del comedor junto con Will, todos lo seguimos.

-A ver Nerd, dame una imagen del amuleto -le exigió Oliver a William.

Will rebuscó apresuradamente entre su información y le alcanzó a Oliver una hoja con una imagen impresa.

La imagen se trataba de un objeto circular, dividido en seis con un círculo más pequeño en el centro y símbolos extraños en cada pieza.

-¿Ven esto?- dijo Oliver mostrando la imagen -Es el amuleto multidimensional. El amuleto de los dioses creadores del multiverso. Dividido en seis, para que al final se coloquen los dos más poderosos en el centro. ¿Ven?

-Aún quiero saber qué tiene que ver con el Fangbatium- comenta Jay llevándose la mano a la barbilla.

Oliver baja la imagen y le da un codazo a William.

-Nerd. Explicales la leyenda de nuevo. Vamos.

Will palideció un poco.

-Oh, eh... bueno: La leyenda dice, que antes de que el...

-¡Sólo cuando habla del paradero de los amuletos!

-Ah..."Los cuatro hermanos menores escondieron sus amuletos en uno de los mundos que cada uno había creado; los dos gemelos de en medio, se aseguraron de que sus amuletos viajaran entre dimensión y dimensión, para que así fuera más difícil encontrarlos, y los hermanos mayores, pasaron sus amuletos de generación en generación."- dice William.

Oliver se cruzó de brazos y nos miró a todos.

-Bien, ¿ya lo entendieron?

Todos nos quedamos extrañados, y Jay con la boca abierta.

-¡Sólo nos dijiste lo que ya sabíamos!- exclamó.

-Me perdiste...- dice Cole.

-Aún estoy buscando una relación aparente -dijo Zane.

Kai se puso a silbar.

Odiaba incluso pensarlo, pero Oliver era más listo que nosotros cinco juntos. Pero no iba a admitir eso, no enfrente de él. Me calme, y hablé:

-¿Podrías explicarnos un poco mejor?

-Ustedes ya saben como funciona el Fangbatium Celestial. Ahora, sólo imaginen una versión de la historia en la que haya dos Fangbatiums, ambos viajan de dimensión en dimensión cada dos mil años, con mil de diferencia, por lo tanto nunca se pueden encontrar.- explica Oliver rápidamente a la vez que rodaba los ojos por aburrimiento -Ahora, piensen en que los dos amuletos de Creación y Destrucción viajan entre dimensiones. ¿Listo? ¿Ya conectaron todo?

Todos nos quedamos boquiabiertos por la rapidez de Oliver. Y terriblemente, me di cuenta que no pude pensar y escuchar tan rápido como para haber entendido una palabra.

Jay ahogó un grito.

-¡¿Q...

-¡No Pequitas!- lo interrumpió Oliver antes de que pudiera formular palabra -Los Fangbatiums no son los amuletos. Pero en sí, son impulsados por ellos.

-Ya no entendí -admitió Cole avergonzado.

-Hay dos Fangbatiums. Con dos amuletos dentro- Zane le explica.

-Miren, antes de que pregunten: Ningún amuleto funcionará hasta que todos sean juntados formado el Amuleto Multidimensional. Después de eso, los amuletos podrán servir por separado. Pero, ninguno es inútil por sí solo: te guían al siguiente amuleto. ¿Entendido?

-Quieres decir, que consiguiendo un amuleto, ¿todo se vuelve más facíl?- pregunta Kai.

-Exacto -Oliver se alegró de que entendiéramos.

-¿Y de casualidad no habrás sacado el amuleto del Fangbatium el año pasado?- le pregunté.

-Es muy complicado abrirlo. Además, ¿para qué?- sonrió divertido -¿Te lo imaginas? Teniendo los amuletos llave, hubiera sido tan fácil ir por los demás, matar a quien se interpusiera en mi camino y apoderarme de todo- se echó a reír -¿Dónde habría estado lo divertido en eso? ¿Creen que alguien se hubiera dado cuenta? ¡Por supuesto que no! En cambio, con ustedes....¡Wow! Sí que fue divertido usarlos como mis muñecos de cuerda tantos años, ¡JA! Ustedes y sus sentimientos...

Sentí el impulso de golpearlo en la cara.

Golpeé la mesa con el puño, dirigiéndole a Oliver una mirada de odio puro.

Oliver se quedó callado, observándome, y por primera vez supe que realmemte se había quedado serio.

-Entonces hay que encontrar a Dylan y detenerlo antes de que saque el amuleto del Fangbatium- dije mirándolos a todos.

-¿Pero cómo averiguar dónde está?- Jay alzó las manos.

-Oliver - volteé a verlo -¿Cómo averiguaste que el Fangbatium Celestial había caído aquí?

-Fui de dimensión en dimensión buscando su paradero anterior. Con la ecuación correcta, el polvo de estrella multidimensional te transporta hasta la ubicación nueva del Fangbatium- dijo cruzando los brazos.

-Bien, tenemos que averiguar dónde está Dylan -dije.

-Es una perdida de tiempo -bufo Oliver -. Dylan sabe la ecuación, no me sorprendería que tuviera el Fangbatium ya en sus manos.

-Entonces, ¿cómo sugieres que comencemos? -preguntó Jay.

Oliver rodó los ojos, tomó una hoja al azar, le quitó a William un bolígrafo de su bolsillo y comenzó a trazar sobre la parte trasera de la hoja.

Trazó una línea vertical en la hoja, para después trazar tres horizontales sobre esta causando que la hoja quedara dividida en ocho. Por cuadros comenzó a escribir: Fuego, Viento, Agua, Tierra, FC1 (Creación), FC2 (Destrucción), Vida y Muerte.

-Entienden esto, ¿no?- preguntó.

-Claro, son los poderes de los amuletos. FC1 y FC2 son los Fangbatiums Celestiales -dice Zane.

-Bien. Lo difícil no es saber en qué dimensión están, sino en qué parte -dice Oliver -, todos los dioses dejaron su amuleto en su reino favorito. En el caso del Viento, el amuleto se encontraba en el Reino Maldito.

-Y como el Reino Maldito fue derrotado en el mar de Stiix, eso quiere decir que el amuleto debe estar en el fondo del océano, ¿no? -concluyó Jay.

-Después de que lo vencieron, sí -confirmó Oliver poniendo las manos en las caderas.

-No me gusta la idea de nadar, sobretodo cuando es en una fosa en el fondo del mar -dice Kai escéptico.

-Pero es el más cerca y seguro. Debemos ir ahí -le dije.

-¿Se nota que les gusta perder tiempo, verdad? Dylan no es un idiota como tú, Lloyd -dice Oliver -Dylan es listo, y si se preguntan qué habrá estado haciendo todo el año pasado, les aseguro que entre varias cosas está conseguir el amuleto del Viento. Él sabe que en Ninjago es blanco fácil, por eso antes de subir sospechas robando el Fangbatium seguro que tomó el amuleto del Viento sin que nadie se diera cuenta.

-Tiene sentido -lo apoya Zane.

-No sé si te diste cuenta, Oliver -dice Cole dirigiéndose a él -Pero necesitamos ir por los amuletos en cuanto antes, no tenemos tiempo para que midas la cantidad de veces en las que no pensamos en algo.

Me alegró tanto que Cole lo dijera y no yo.

-¡Ok, ok! Iré al grano.

Oliver se agachó a la hoja en la que había trazado hace unos momentos.

-El Fangbatium dos ya lo tiene Dylan asegurado, por lo tanto no nos preocuparemos de él -dice tachando la casilla FC2 -, el Viento tampoco, por lo tanto lo tachamos -tacha Viento.

Volvió a tomar la imagen en la que se mostraba el objeto circular y nos la mostró señalando los símbolos. Me di cuenta que cada pieza tenía tres símbolos diferentes arriba y otro diferente abajo, pero el que estaba en medio del grupo de tres, era igualen todos los pedazos.

-¿Ven ése? ¿El de en medio? Todos lo tienen, y es sólo porque simboliza el Ying y el Yang. -dice Oliver -Ahora, en el símbolo de abajo se muestra de qué poder es cada amuleto -señaló uno con el símbolo del viento -Y los que están al lado del de el Ying y el Yang, muestran los amuletos que deben ir al lado de éste. Lo que significa, que Dylan ahora puede ir por el amuleto del Fuego, ya que del otro lado se encuentra el de la Destrucción y ese ya lo tiene -pone un triángulo en Fuego -Y claro: Tierra está a un lado de Destrucción, por lo tanto, Dylan ahora mismo está yendo en busca del amuleto de Fuego o Tierra - pone un triángulo en Tierra.

-¿Por qué triángulos y no tachas? -pregunta Jay.

-Porque son opciones. Mientras Dylan toma una de ellas nosotros podemos estar tomando la otra y obtener un amuleto sin complicaciones, el problema es que no sabemos con cuál va a empezar.

-¿Y qué hay de la Vida y Muerte? -preguntó Cole.

-Ese va a ser nuestro problema más grande. Averiguar quiénes la tienen será muy difícil -puso un signo de interrogación en Vida y Muerte. Tal vez podríamos...

-Espera un momento -lo interrumpí -Si tú estuviste buscando el paradero anterior del Fangbatium que había caído aquí, eso quiere decir que sabes la ubicación del Fangbatium uno, ¿no es así?

-Sí, por supuesto que sí -afirmó escéptico.

-¡Genial! -exclamó Jay aliviado -¿Dónde está?

Los ojos se fijaron en Oliver.

-¿Y por qué habría de decirles?

-¡Dijiste que nos dirías todo lo que...

-¡Calmate! -me interrumpió -Yo sé lo que dije, pero tampoco soy un idiota, Lloyd. Se los diré cuando hayamos conseguido los otros amuletos posibles. No hay forma que Dylan sepa donde está el otro Fangbatium, y él lo sabe, si vamos por él ahora sólo nos estaríamos arriesgando a que nos lo robe.

Todos nos quedamos callados.

-Tiene su punto -concordó Cole.

-Estoy deacuerdo -dice Zane.

-Bien por mí -Kai.

-Yo no entendí -Jay.

-Deacuerdo -acepté a regañadientes.

-Bien, entonces el segundo Fangbatium lo dejaremos hasta el final asegurado -Oliver puso un círculo en FC1.

-Eso sólo nos fija al amuleto del Agua -señala William.

-El nerd tiene razón -sonrió Oliver y me dio un mal presentimiento -, iremos por el amuleto del Agua, ahora.

-¿Y cómo saber en cuál de los reinos del agua está? -pregunta Jay -ni siquiera conocemos ninguno.

-Pero yo sí -Oliver me saca el Cristal del Reino del bolsillo.

-¡Ten cuidado! -le advirtió William -Mi padre sólo aceptó dejarlo con nosotros porque ayer lo hubieran robad si no fuera porque nosotros lo teníamos. El gobierno lo dejó a cargo de Lloyd.

-Pero Lloyd no sabe a dónde ir, ¿cierto? -dijo viéndome con su sonrisa y el cristal en alto.

Estaba a punto de poner objeción, pero él estaba en todo su punto.

-Cierto -concordé.

-¿Están listos? -preguntó Oliver antes de usar el Cristal.

Todos se agruparon lo más cerca de él.

-No me agrada la idea de ir a un mundo de agua, pero deacuerdo -dice Kai vagante.

-¿Pero a qué reino vamos a ir? -pregunta el pelirrojo.

-A mi favorito -Oliver sonrió -Cristallium.