7: Quién te salva una vez,lo puede hacer dos.
ZANE'S POV
Tuve que hacer más documentos aún,fue toda una fatiga,pero al fin termine.
-Noto un poco de sobrecalentamiento en tú sistema.- dice la chica dentro de mi cabeza.
-¿De nuevo? Creo que debo desestresarme un poco.-
-hace cinco años jamás habías estado con tanto estrés.-
-Las personas cambian,Pixal...-
Cerré el consultorio y me dirigí al estacionamiento.
Sentí un golpe en el hombro,una persona habia chocado contra mi -¡Perdón!- continuó corriendo sin voltearme a ver.
-Dejame hacerte una pregunta- dice Pixal -¿Ése era Jay?-
JAY'S POV
El trabajo no era como me lo imaginaba en realidad. Me tenían en una habitación junto con otros dos chicos durante ocho horas desarmando electrodomésticos defectuosos;para tener que quitarles unas partes especificas para qué puedan reutilizarlo después.
Es increíblemente aburrido,¿quién diría que seria éste un mejor trabajo? Al menos me pagan cien dolares la hora.
-Hasta mañana niño,que descanses.- me dice un chico rubio unos dos años más grande que yo despidiéndose con la mano.
-Si,si...adiós.- digo sin voltiarle a ver y salgo de la empresa atravesando las puertas de cristal.
Me hubiera encantado poder tener una mejor relación amistosa con mis...¿únicos dos compañeros? El del chico rubio no sé su nombre,y el otro castaño...¿creo qué se llama Steve?
No lo sé,soy muy distante con todos. Al menos me llevo bien con mi chofer de la limusina.
-Buenas,Steve- digo entrando por mi cuenta a la mi limusina.
-Es "Stuart"- me corrige serio.
Trague un poco de saliva -Perdon,Stuart- busqué palabras que decir -¿Y cómo ha estado tú día? -fingi una sonrisa por el retrovisor para que me viera.
Pero ni siquiera volteó a verme.
-¿Sabes qué me están pagando por esto verdad?- esta vez hablo más serio sin despegar la vista de la calle.
Sentí un pequeño hueco en el pecho al oír eso -Si...lo suponía...- dije agachando la mirada.
Después de unos minutos revise mi reloj,»8:30 pm« San Francisco es una ciudad grande,llevo media hora aquí.
Tengo hambre,y ya me acabe la comida incluida del Penhouse. Mejor será aprovechar y comprar algo.
-¡Bajame aquí!- le ordeno a Stuart quitándome rápidamente el cinturón.
La limo se detuvo enseguida. Abrí la puerta,me baje y me dirigí a la ventanilla del chofer.
-¿Puedes venir por mí más tarde?- le pregunte.
-Mi turno se acaba a las nueve,niño.- dice igual de serio.
-Bien.- respondí ya un tanto frustrado por su actitud -Yo caminaré al penhouse.- dije y me di la vuelta.
Por suerte había una tienda de comestibles en la misma cuadra en la que me baje.
Cereal,leche,malvaviscos,¿necesito otra cosa? Creo que con esto puedo sobrevivir la noche.
Salí de la tienda con mi bolsa marrón con mis compras.
Ya eran las nueve y media,supongo que no debí perder tanto tiempo viendo los cada cómic detrás de las cajas de cereal.
En fin,el penhouse esta a unas cuantas cuadras. Nada que un "inventor" con un trabajo nada que ver pueda lograr.
-Lala,Ninjachips. Lala,Ninjachips.- tarareaba la canción comercial de mis frituras favoritas - ¡siente el poder! NINJACHIPS...en tú tienda más cercana. -terminé con una carcajada para mí mismo.
Derrepente sentí un cosquilleo en el pecho. No me había dado cuenta qué tome otro camino,un camino solo. Ni siquiera hay autos y tiendas o casas con las luces encendidas.
-Muy bien...supongo qué es un atajo- me dije y continúe caminando,listo para cualquier clase de sonido.
Un ruido afilado me hizo estremeserme. No tome ni un segundo para darme cuenta de que era un vidrio romperse.
La pregunta es,¿quién lo rompió?
Seguí caminando un poco más atento,procurando no hacer ni un sonido al caminar.
Iba justo pasando al lado de un callejón cuando veo a algo,o más bien "alguien" cargando con un saco lleno de cosas salir por la ventana rota.
No le podía ver el rostro,tenia un pasamontañas negro,al igual que toda su ropa.
Tal vez no sabia quién era ó qué quería,pero sé que debe ser algo malo.
-¡Oye tu!- le llame tomando firmeza sin aún adentrarme al callejón.
Me volteó a ver enseguida,pude notar qué sus ojos se abrieron como platos.
-¿Qué hay en el saco?- pregunté.
Sabia qué se traía algo entre manos.
-Nada- respondió con la voz cortada dando un paso para atrás.
Pero incluso ese pequeño movimiento logro hacer que una de las cosas del saco cayera al suelo a través de un agujero.
De solo escuchar el sonido qué hizo al golpear contra el suelo me di cuenta de lo que era. Un teléfono celular. Uno de la mejor calidad.
-¿Robando electrónicos verdad?- pregunte serio -Te llevaré con la policía.- comenze a acercarme.
Creo que vi algo relacionado a esto en las noticias,se han estado robando artefactos electrónicos por toda la ciudad. Ha sido un caso curioso.
-Quiero ver que lo intentes.- dijo y en un movimiento rápido me lanzo una bomba de humo a mis pies.
Me nublo la vista por un segundo,pero no pude evitar toser unas cuantas veces.
Para entonces me alcanze a dar cuenta que el tipo me paso corriendo por un lado para escapar por las calles...aún con el saco.
-¡Eh! ¡vuelve!- comenze a perseguirlo.
Si yo soy muy rápido,debo admitir qué el también.
Dio una vuelta a la derecha,algunas otras a la izquierda,otra vez a la derecha hasta que finalmente siguió derecho hasta llegar a una avenida ya transitada.
Acelere muy notablemente,no iba a perderlo entre toda la gente qué hay a esta hora de la noche en esta avenida.
No sé como no se cansa cargando ese enorme saco lleno de cosas seguramenta también pesadas.
Ahora iba a toda velocidad,¿pero qué creen? Él también.
Iba unos cuatro metros más adelante de mi.
Y comenzó el verdadero problema: gente.
Tener qué esquivar a las personas me quitaba mi velocidad,pues cuando voy en linea recta voy increíblemente rápido.
-¡Perdon!- le grite a un chico con el que había chocado,pero ni siquiera lo volteé a ver.
Ya he dicho muchas veces "perdón,diculpe,compermiso,etc." Pero no me iba a rendir,los ex-ninjas tampoco se dan por vencidos.
¿Cómo es qué ningún policía anda por aquí? Me podría ayudar.
¡Que bien! El tipo se metió a una calle,una no muy transitada EB la noche. Para mi suerte estaba vacía.
Ya estaba por alcanzarlo,la calle sola me dio mucha ventaja.
¡Perfecto! Volvió a entrar otro callejón,para el colmo este estaba al lado de un edificio parentemente no muy habitado y comenzó a subir por las escaleras de servicio hasta el techo.
Obviamente no iba a dejarlo ir y subí hasta allá arriba también.
Para mi sorpresa,cuando llegue arriba él no estaba huyendo más.
Estaba listo para atacarme con su catana que...¿debio sacar de algún lado? Si es que no se la robo.
-Ya vete niño,¿sabes qué te podría matar ó no?- dijo firme.
Pero no tanto como yo.
-¿niño? ¡¿me llamaste niño?!....¿no sabes quién soy,cierto?- se dibujo una sonrisa en mi rostro.
-Un tonto,me supongo. Porque no sabes a que te enfrentas si te metes conmigo.- su voz se hizo más grave.
-Atacame,te reto.- dije alzando los brazos a los costados.
Estaba muy seguro de mi mismo.
Acto seguido se dirigío a mi corriendo dispuesto a atravesarme con la catana.
Pero yo en un abrir y cerrar de ojos me hize a un lado,y aparte de que ni me dio,fue el momento perfecto para darle arrebatarle el arma.
¿en serio fue tan fácil? Yo quería un poco más de acción. Lo extraño.
-¿Hoy no es tú día,cierto?- pregunte arqueando la ceja y tirando la catana al suelo unos metros más lejos.
Me volteó a ver con una mirada asesina. Fue cuando hizo lo que jamás creí que haría:Spinjutzu.
Mi desconcierto al ver el torbellino plateado le dio el tiempo para darme una buena patada con el arte marcial que utilizaba.
Me pateo en el estomago,pero lo peor es que me saco volando hasta justo antes de el borde el edificio.
¿Mencione qué son diez pisos? Una caída de esas y me muero.
Sin darme cuenta llegó y me levanto del cuello,trataba de safarme,incluso patearle,pero no podía hacer nada.
Además de qué ya me estaba cortando la respiración.
-¿Hoy no es tú día,cierto?- pregunto imitandome.
No podía salir nada de mi boca más que no fueran quejidos buscando el aire que me faltaba.
-No te metas en los asuntos privados,Walker. Ahora si me disculpas,tengo que ir a Industrias Machine,gracias.- terminando eso me dejo caer...DEL EDIFICIO.
El poco tiempo que duré cayendo solo pude pensar en dos cosas: primera,el tipo sabe mi nombre,en segunda,¿qué va a ir a hacer a la industria a la que acabo de entrar a trabajar apenas?
Pero se me había acabado el tiempo,esos diez pisos no eran los suficiente para pensar por más de cinco segundos.
Tuve que aceptar lo que me tocaba. Cerré los ojos,pensé una vez más en todo esto...hasta que aterrize en...¿un colchón?
Me incorpore enseguida. Efectivamente:era un colchón.
-Que bueno que había una tienda de colchones aquí a la vuelta,por poco y no llegó- dijo una voz que conocía detrás mio.
-¿Z-Zane?- me giré y lo volteé a ver a los ojos.
Definitivamente era él,digo,¿quién más conozco qué sea de titanio?
-¡ZANE!- corrí a abrazarlo,un abrazo fuerte,no quería soltarlo por nada del mundo.
Había olvidado todo lo que había pasado,había olvidado la pelea,todo para mí ahora estaba en el olvido.
-Creí que no querías ver a nadie nunca más- dijo Zane correspondiendome el abrazo.
-Lo que haya dicho hace cinco años no es cierto...- dije dejando caer una lágrima -odio estar solo Zane...lo odio...-lo abraze aún más fuerte.
No sé ni como es que él llego aquí,lo único qué sé es...me volvió a salvar la vida.
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